Quito. 09.01.95. ¿Vive usted en el valle? ¿O, como buen quiteño,
después de un largo feriado, decidió pegarse un hornadito en el
Tingo o Sangolqu� Entonces seguro que usted como muchos aún
sigue preguntándose "cómo mismo es que funcionará la autopista
General Rumiñahui, con eso de su ampliación".
Pues no se rasque más la cabeza y preste mucha atención porque
hasta aquà llegaron sus dudas. Adrián Ribadeneria, funcionario de
COLISA, la empresa constructora, explicó a HOY -en exclusiva- el
significado de tanta movilización de tierra, cortes de montaña y
modificaciones en la vÃa.
Por primera vez, Quito contará con una superautopista de esas que
vemos en las pelÃculas "con todas los servicios, seguridad y
calidad internacional" -indicó-.
Al momento, dos carriles fueron habilitados adicionalmente al
lado izquierdo de la carretera. (Total hoy: 6 carriles)
Varios rumores corrieron al respecto. "Yo digo que tres van a
ser para livianos y tres para pesados". "No que va, te aseguro
que los nuevos carriles son únicamente para autos pesados y
listo". "¿Cuánto apostamos que por el medio circulan livianos y
por los lados pesados?". Y asà versiones como éstas continúan
circulando entre la gente.
¿Pero... cuál es la versión correcta? Pues ninguna. En la vÃa no
circularán ni "tres-tres" ni "únicamente pesados", ni "solo
livianos".
Ocho carriles
La cuestión es que se aumentarán dos vÃas más. ¿Que por dónde?
Ribadeneira explica que sustituido el parterre central de la
autopista por pequeños bordillos y con una ampliación adicional
sobre las cunetas, será suficiente.
Entonces, ocho serán las alternativas para circular del peaje a
San Rafael. Ocho vÃas distribuidas de una forma similar a la
antigua Av.10 de Agosto, antes de las obras del "trole".
Esto es, por los 4 carriles centrales transitarán únicamente
autos livianos. Y por los dos carriles laterales (dos en cada
lado) lo harán vehÃculos pesados y en general todos los que
tengan alguna diligencia al borde de la pista: para coger
gasolina, para los buses que necesitan recoger gente o para
quienes viven en la Armenia, Conocoto y aledaños a la pista.
Subirá el peaje
Cuando el Consejo Provincial decidió entregar en concesión la
autopista General Rumiñahui a Colisa varias dudas surgieron al
respecto: el problema de la reinstauración de los comprobantes de
pago, la vigencia de las "tarjetas de descuento" para quienes
viven en el valle y el aumento del peaje.
Sobre los comprobantes de pago la gente se quejó porque a pesar
de denominarse "peaje automático", otra vez "les entregaban
recibitos de papel". Y nuevamente la autopista se ensuciaba con
estas basuritas.
Sin embargo, el resurgimiento de estos comprobantes tiene su
justificación. Y es que constituye una especie de "seguro" que
será inaugurado al terminar la ampliación de la vÃa. Si alguien
sufre algún accidente el recibo será la única forma de comprobar
que utilizó la vÃa y que, por lo tanto, puede beneficiarse del
seguro.
En cuanto a las "tarjetas", cuando caduquen las que
fueron compradas anteriormente al Consejo Provincial, el sistema
dejará momentáneamente de funcionar. Pero luego reaperecerá con
una modalidad más moderna, en estudio.
Por fin, sobre el costo del peaje, aunque no está estipulado el
monto exacto, una cosa sà es segura: el precio subirá.
Ribadeneira informó que la cantidad girará en torno a la calidad
y servicio de esta nueva carretera y los niveles de inflación de
ese momento.
Y próximamente hasta Aloag
Por lo pronto se aproxima un desvÃo. El problema de los 6
carriles habilitados recientemente es que a la altura del acceso
a Conocoto todavÃa quedan dos vÃas de 4 carriles. De ahà que
habrá que realizar un desvÃo para corchar la carretera en este
punto y hacer la respectiva ampliación.
Igual sucede a la entrada de San Rafael. En este caso se buscará
vÃas alternativas para desviar a los vehÃculos por un lado de la
pista.
El proyecto también comprende la habilitación de 8 vÃas hasta el
sector de Aloag, pasando el ColibrÃ. Estudios de Colisa analizan
la posibilidad real de esta nueva ampliación que pronto será
anunciada. Espérela...
¿Quién responde ahora por la autopista?
Eso de que "han privatizado la autopista General Rumiñahui" es
otro de los dilemas del dÃa. El 18 de diciembre la autopista pasó
a cargo de la empresa COLISA (Constructora del Litoral, con 40
años en esta experiencia). ¿Pero qué implica este contrato
establecido con el antiguo dueño, el Consejo Provincial? ¿Quién
responde ahora por la autopista? ¿El Estado o la Empresa
Privada?
Adrián Ribadeneira, funcionario de COLISA, al tanto de todo lo
que sucede con la construcción y administración de la vÃa al
Valle de los Chillos, responde a éstas y otras inquietudes.
¿Fue o no vendida la autopista?
Bueno, fue un contrato público. La Ley de Modernización le
permite al Estado transferir los bienes o en este caso las
carreteras en concesión. Y en base a esta ley el Consejo
transfirió al sector privado (COLISA) la administración y
mantenimiento de la pista.
¿Qué le pertenece entonces a COLISA?
Hay que aclarar que nosotros no somos los propietarios. Todas las
inversiones que hagamos en la carretera son del Estado, en este
caso el Consejo. Lo que sucede es que COLISA recupera esas
inversiones cobrando el peaje. En vez de que el Estado haga la
inversión, como no le alcanza, la hacemos nosotros. Y luego ellos
nos cancelan con el cobro del peaje.
¿Por cuánto tiempo?
COLISA administrará, mantendrá y cuidará la autopista por 15
años. Entonces se la devolverá al Estado (al Consejo).
¿Una nueva modalidad que se instaura en el campo constructivo?
SÃ. Es un cambio en la mentalidad del sistema constructivo.
Anteriormente por los presupuestos muy escasos que existÃan las
construcciones eran de mala calidad. Pero en nuestro caso se
trata de carreteras que no se van a dañar. Pues mientras menos
costos tengamos en mantenimiento, mejor para la CompañÃa y mejor
para el Estado.
NO MAS DESGRACIAS
Sin embargo, como se conoce, el sábado como -a unos tres
kilómetros del peaje de la autopista Rumiñahui-, sucedió un
terrible accidente en un puente que se estaba ampliando.
Una máquina fue colocada en medio de la vÃa por quienes
realizaban las obras del puente en este sector. Los trabajadores
no colocaron más que una valla de madera con un letrero "media
vÃa"... pero detrás de la máquina. Entonces, en el mismo lugar,
un bus -Marco Polo, según varios testigos- se paró a recoger
gente justo al filo de esta peligrosa curva. En ese momento una
buseta interprovincial bajaba con exceso de velocidad -nada
raro-. No alcanzó a ver el letrero y para evitar la colisión con
uno de los dos vehÃculos estacionados tuvo que desviarse. Colgado
del puente en ampliación terminó.
Por milagro esta vez no hubo muertos. ¿Pero acaso eso es lo que
se espera para que alguien ponga orden en esta pista? ¿Para que
los responsables de la ampliación del puente coloquen una
señalización adecuada. ¿Para que los policÃas dejen de acudir
después de los accidentes, en lugar de alertar antes sobre la
peligrosidad de tal tramo?
Los mismos moradores de la zona y usuarios de la vÃa se quejan.
"¿Cuándo dejará de circular tanto vehÃculo pesado por la vÃa?",
dicen. ¿Cuándo se sancionará la imprudencia de los choferes de
buses y busetas, que paran donde se les ocurre y a los "hijos
de papi" e interprovinciales que bajan a velocidades de estudio?
Que la desgracia que por suerte no ocurrió el sábado sea el
momento preciso para tomar cartas en el asunto. No más
accidentes. (12B)
en
Explored
Ciudad N/D
Publicado el 01/Septiembre/1995 | 00:00