Confianza De Autoridades En El Programa Economico

Quito (Ecuador). 06 oct 95. Augusto de la Torre, doctor en
Economía por la universidad de Notre Dame, ex funcionario del
Fondo Monetario Internacional, actual Gerente General del
Banco Central, y uno de actores más importantes de la gestión
económica, al referirse a la situación que atraviesa el país
ha manifestado que, hasta ahora, es difícil medir los impactos
sobre la economía. Las evidencias demuestran que hay
nerviosismo en el mercado monetario y que las tasas de interés
están presionadas al alza lo que tiene un impacto directo
sobre el costo de fondos para la inversión que se traduce en
un menor crecimiento en los siguientes años.

Ha existido una cierta presión sobre el dólar que, por suerte,
no ha sido muy fuerte. El dólar no ha estado forzándole al
Banco Central a intervenir en el techo de la banda, excepto el
día martes en el que se vendió un poco más de cinco millones
de dólares y el miércoles alrededor de un millón de dólares.
Esto quiere decir que el mercado cambiario no ha tendido a
absorber la incertidumbre, que más bien se ha concentrado en
la tasa de interés y se ha centrado también en el nivel de las
expectativas.

No hay fugas de capitales

Lo que sí ha sucedido -ha señalado de la Torre- es que el
ingreso de capitales es menor que antes. No se ha sentido, sin
embargo, que haya fuga de capitales lo que quiere decir que
los inversionistas están apostando a la continuidad del
programa económico. Esto sugiere que los inversionistas le
toman al tema político como un "grano de sal", o no ven que
sea una situación que amenace el desmoronamiento del programa
económico.

Seguir con las reformas.

Sobre lo que podría pasar en la economía sin la presencia del
vicepresidente, el Gerente del Banco Central señala, que es
difícil predecir lo que podría pasar. Obviamente -dice- el
vicepresidente le ha dado una visión y un liderazgo al
programa, pero si éste sale, y es de esperar que ello no
suceda no se perdería la decisión de proseguir adelante con el
plan económico. El mismo presidente de la República ha
confirmado su deseo de mantener el plan macroeconómico y en lo
posible avanzar con algunas reformas que todavía están en la
agenda.

Mantener y profundizar reformas

En otro orden de cosas, Augusto de la Torre, señala que en lo
que resta del período se van a mantener las reformas
económicas: estabilidad en los mercados cambiarios y
monetario, bajar lentamente la inflación, controlar el gasto
público. En el caso del Banco Central se seguirán con las
reformas institucionales. El CONAM continuará con los
trabajos asociados con preparar el sector de
telecomunicaciones para una eventual privatización. Además,
tiene una agenda importante de concesiones que seguirán. Lo
que no se podrán observar serán grandes nuevos temas de
reforma, a excepción del tema de la seguridad social y de la
reforma del sector eléctrico. En síntesis, seguridad social,
telecomunicaciones, concesiones seguirá el trabajo.

Estabilidad en la transición es lo más importante

Ana Lucía Armijos, economista de la Universidad Católica, con
estudios en la Sorbona de París y master en la universidad de
Illinois, es el personaje económico más importante del actual
régimen. Gestora y mentalizadora del plan de reformas ha sido
la mano férrea que ha permitido llevarla a la práctica.

Personaje sobre el que la opinión pública reconoce su
capacidad intelectual y política, señala que el país debe
procurar que la transición política que se avecina sea lo
menos traumática posible. Al respecto, señala, que se deben
crear consensos sobre los indicadores macroeconómicos.
Especialmente, en lo que se refiere a la disciplina fiscal,
manejo monetario y cambiario, control de la inflación y gasto
público, privatizaciones.

No privatizar por privatizar

Entre los aspectos sobre los que llama la atención es que la
desinversión pública a la que está asociada las
privatizaciones, no debe servir para privatizar por
privatizar. No se trata de pasar del monopolio estatal al
monopolio privado. Se trata de lograr que la competencia sea
posible entre los agentes privados, porque ello va a permitir
elevar la eficiencia en cada una de las esferas.

Reforma del IESS

A su modo de ver, las reformas que el país debe insistir en el
futuro son: reforma al sistema de seguridad social (entre la
que se debe considerar la reforma al IESS) y reestructuración
del Estado. La discusión sobre la seguridad social exige
apertura para debatir el tema. Insiste que no es lo mismo
buscar la desinversión estatal que privatizar. El hecho de que
se busque una reforma al IESS no significa que se va a atentar
contra el principio de solidaridad. Por el contrario, se trata
de la condición que va a permitir alcanzar la solidaridad.
Además, va a permitir parar el "desangre" al pueblo
ecuatoriano que paga el costo del sistema actual. El sistema
de seguridad social debe incluir salud, educación, apoyo a los
más necesitados. Debe centrarse en la reforma a la educación.

Reforma del Estado

Es una reforma en la que se ha avanzado poco. Insiste que la
institucional es necesaria, especialmente, porque existe
consenso sobre el tema. Sin embargo, reconoce, que no ha
habido la decisión política para llevarla adelante. Insiste
que el sistema político y el de partidos a topado fondo en
esta crisis. Es imperativo, por tanto, reestructurar el
sistema político, reconociendo la separación de poderes y
apuntando a la reforma al régimen de partidos.

Lograr consenso en torno a las reformas

¿El vicepresidente Dahik ha sido un amortiguador del presiones
económicas, en caso de que tuviera que salir, está el frente
económico dispuesto a asumir esas presiones?.

No nos queda más que enfrentarlas, tendremos que hacer un
esfuerzo adicional para imperfectamente reemplazar el trabajo
de vicepresidente de la república.

¿A todos nos preocupa la transición, qué se van hacer la
autoridades monetarias en función de la transición?.

Hay dos tareas importantes. La una, cuando disminuya la
tensión política, es recorrer los foros del país y explicar
con sinceridad y objetividad lo que se ha hecho, cuáles son
los resultados, cuál es el esfuerzo que hay detrás y el
peligro que estos resultados se erosionen por el mal manejo
económico futuro, incluso, en la perspectiva de aceptar
sugerencias de cómo corregir ciertas cosas que se consideran
que se pueden mejorar. Esto debe ser un trabajo pedagógico
porque se trata de temas técnicos, que hay que hacerlos
alcanzables al público en general.

La otra, es que las autoridades monetarias inicien diálogos
con los distintos binomios en los que abiertamente se pidan
explicaciones y puedan escuchar sugerencias. Esto sería muy
útil para el país, pues, permitiría que los candidatos se
pronuncien sobre este tema que a ellos, más que a nadie, les
interesa.

¿Es útil un diálogo abierto sobre estos temas?

Un diálogo abierto y franco sobre estos temas es útil. En
temas puntuales económicos, tales como, bajar la inflación,
disciplina fiscal, estabilidad financiera, es más fácil llegar
a un consenso. Sin embargo, hay discrepancias todavía sobre
temas más complicados: seguridad social, distribución del
ingreso, pobreza, educación, salud, que son temas que aún se
debaten.

¿Establecer consensos supone una visión de mediano plazo?.

Supone tener una visión de país sobre su mediano plazo, supone
tener grandes aspiraciones como país, respecto de cómo
levantar el ahorro nacional, el manejo de la deuda, la
estructura del gasto fiscal, el tamaño del estado, los
problemas relacionados con su capacidad de recaudación, la
evasión tributaria, la estructuras de impuestos. Supone hablar
de estos temas para darle al país una columna vertebral en
torno a los que se puedan organizar los otros temas del
desarrollo, pues, aunque los temas macroeconómicos son
absolutamente insuficientes para hablar del desarrollo son
absolutamente necesarios. Ello permitirá madurar como país.

¿Qué nos deja la crisis?.

Ojalá nos deje un espacio para meditar, reflexionar, y ser
constructivos. Pocas sociedades hay como la ecuatoriana que
tenga una tendencia a la fragmentación, a la oposición, a ver
lo malo. Ojalá que la crisis nos enseñe que el modo de salir
de ella es con un elemento crítico, pero constructivo. Esto
requiere una profunda reforma política que supone: una
redefinición del rol de los políticos, del congreso, de los
partidos, en el sentido de que la esfera política no se la vea
como descontectada de lo económico, pero sin que exista una
excesiva politización de los temas económicos porque
generalmente se trata de temas técnicos. (Economía)(Diario
Hoy)(6A)