Quito. 11.03.95. Cristina tiene miedo, sus 16 años le duelen.
No es bonita pero inspira ternura: pelo castaño, piel canela y
ojos tristes (sobre todo ojos tristes). Camina despacio hacia
ninguna parte, hoy no irá al colegio, ni mañana, ni pasado;
tal vez nunca. Está sola, se le acabaron las lágrimas, ahora
queda una confusión enorme: su cuerpo que cambia y un corazón
pequeñito que late. Está embarazada de 28 semanas, no sabe
cómo sucedió.
Muchas Cristinas caminan por las calles de Quito, cada una con
su propia historia y un elemento en común: embarazo precoz y
deserción escolar.
ALTA ESCOLARIDAD, BAJA INSTRUCCION
Un reciente estudio llevado a cabo por el "Consultorio de
Atención Integral a la Adolescente Embarazada" de la
Maternidad Isidro Ayora de la ciudad de Quito, señala que "la
primera causa de deserción escolar en la adolescente
constituye el embarazo precoz (31.6%), los problemas
socioeconómicos ocupan el segundo lugar (27.2%), luego
aparecen las crisis familiares (cambio de residencia,
separaciones o muerte de los progenitores, etc.) con un 11%".
Otras causas como bajo rendimiento, escasa motivación para el
estudio, conflictos de pareja, etc., ocupan lugares
secundarios.
Contrariamente a lo que se puede pensar, el nivel de
escolaridad de la adolescente embarazada (13 a 17 años) es
relativamente alto; según el informe, de 237 casos estudiados,
el 60.3% tuvo instrucción secundaria (tercer curso como
promedio) y, el 38% instrucción primaria (quinto grado como
promedio). "El 18% siguió cursos especiales (belleza o corte)
que con frecuencia fueron interrumpidos antes de culminarlos.
Apenas el 0.4% de las pacientes fueron analfabetas".
Sin embargo, el alto nivel de escolaridad no se ve reflejado
ni en el contenido ni en la calidad de la instrucción;
"encontramos un desconocimiento grave del cuerpo y de los
genitales, en ocasiones (las adolescentes) no entienden por
qué se embarazaron". "El poco acceso a la educación sexual no
satisface las necesidades de niños y adolescentes".
RELACIONES SEXUALES: ¿UN JUEGO?
Varias investigaciones realizadas en adolescentes (Diane
Papalia, 1992), concluyen que la principal causa de embarazos
no deseados es el rechazo de muchos jóvenes, especialmente
mujeres, a admitir que son sexualmente activas. "Prefieren
pensar que se dejaron llevar por un momento de pasión
("perdonable") más que por haberse comprometido a tener
relaciones sexuales ("inmoral", "pecado"). No están preparados
para pensar en ellos como individuos sexualmente maduros y
responsables, y por tanto no planifican evitar el embarazo".
Algunas adolescentes no utilizan métodos anticonceptivos
porque los desconocen, no saben dónde conseguirlos, temen que
sus padres puedan descubrir que tienen relaciones sexuales o
creen que no pueden quedar embarazadas. Cuando intentan
prevenir la anticoncepción , la mayorÃa recurre a métodos de
control para el varón (especialmente preservativos).
Por otra parte, es sumamente alto el número de adolescentes
que recurren al aborto como el mejor camino para superar sus
conflictos presentes y futuros.
¿QUE HACER?
El informe de la investigación realizada por el "Consultorio
de Atención Integral a la Adolescente Embarazada", presenta
algunas recomendaciones para hacer frente al embarazo precoz,
entre estos destacan los siguientes:
* Creación de servicios de atención especializada e integral
que promuevan el autocuidado y sean fácilmente replicables.
* Fortalecer las acciones preventivas de educación,
información oportuna y control de la desinformación por parte
de los medios de difusión masiva.
* Una vez que el conflicto se presenta, es importante promover
la reinserción social, escolar y familiar. El desafÃo
fundamental es que cada adolescente logre continuar o formular
un proyecto de vida que le permita desarrollar sus
potencialidades.
Lo que no enseña la escuela (tercer curso como promedio) y, el
38% instrucción primaria (quinto grado como promedio). "El 18%
siguió cursos especiales (belleza o corte) que con frecuencia
fueron interrumpidos antes de culminarlos. Apenas el 0.4% de
las pacientes fueron analfabetas".
CORTOS
El estudio realizado por el Consultorio de Atención Integral a
la Adolescente Embarazada involucró a 237 menores de 17, entre
los resultados obtenidos destacan los siguientes:
* La edad promedio de la primera menstruación fue 12 años y
medio. La edad más temprana de embarazo fue 13, la de inicio
de relaciones sexuales 6 años, y la edad promedio del primer
coito 14.9.
* El 46% de las pacientes fueron migrantes, de ellas el 16%
llegaron a la ciudad en un tiempo menor a 2 años.
* La joven embarazada depende en primer lugar de sus padres
(38%) y en segundo lugar de su pareja (33%).
* El 54% de pacientes son solteras, de ellas 23% se encuentran
en unión libre y 31% están solas. De las pacientes casadas
(46%) el 4% están separadas.
* El 86% iniciaron relaciones sexuales con consentimiento, el
15% fue abuso sexual. Un 22% de adolescentes que iniciaron sus
relaciones sexuales con consentimiento lo hicieron con parejas
que apenas conocÃan.
* El 61% de las adolescentes se embarazaron sin desearlo. El
90% no usó ningún anticonceptivo. Un 10% usó métodos
anticonceptivos inadecuados.
* El 69% de las madres de las pacientes fueron también madres
adolescentes. El 56% trabaja fuera del hogar, y de ellas 43%
trabaja más de 8 horas diarias.
* Las adolescentes que suelen beber, fumar, tener un
comportamiento escolar que requiere acciones disciplinarias y
otras actitudes rebeldes, están altamente correlacionadas con
la actividad sexual temprana.
* El mejor rendimiento escolar es un factor protector de
comportamientos de riesgo como el embarazo inoportuno. Las
pruebas de inteligencia señalan coeficientes intelectuales
bajos en ciertas adolescentes embarazadas.
* Las madres adolescentes tienen menos oportunidades de
capacitación, tendrán más bajos ingresos a largo plazo, menor
rendimiento laboral, insatisfacción de sus logros vocacionales
y frustración.
Antes fueron migrantes, de ellas se embarazaron en un tiempo
menor a dos años de haber llegado a la ciudad. (6B)
No es bonita pero inspira ternura: pelo castaño, piel canela y
ojos tristes (sobre todo ojos tristes). Camina despacio hacia
ninguna parte, hoy no irá al colegio, ni mañana, ni pasado;
tal vez nunca. Está sola, se le acabaron las lágrimas, ahora
queda una confusión enorme: su cuerpo que cambia y un corazón
pequeñito que late. Está embarazada de 28 semanas, no sabe
cómo sucedió.
Muchas Cristinas caminan por las calles de Quito, cada una con
su propia historia y un elemento en común: embarazo precoz y
deserción escolar.
ALTA ESCOLARIDAD, BAJA INSTRUCCION
Un reciente estudio llevado a cabo por el "Consultorio de
Atención Integral a la Adolescente Embarazada" de la
Maternidad Isidro Ayora de la ciudad de Quito, señala que "la
primera causa de deserción escolar en la adolescente
constituye el embarazo precoz (31.6%), los problemas
socioeconómicos ocupan el segundo lugar (27.2%), luego
aparecen las crisis familiares (cambio de residencia,
separaciones o muerte de los progenitores, etc.) con un 11%".
Otras causas como bajo rendimiento, escasa motivación para el
estudio, conflictos de pareja, etc., ocupan lugares
secundarios.
Contrariamente a lo que se puede pensar, el nivel de
escolaridad de la adolescente embarazada (13 a 17 años) es
relativamente alto; según el informe, de 237 casos estudiados,
el 60.3% tuvo instrucción secundaria (tercer curso como
promedio) y, el 38% instrucción primaria (quinto grado como
promedio). "El 18% siguió cursos especiales (belleza o corte)
que con frecuencia fueron interrumpidos antes de culminarlos.
Apenas el 0.4% de las pacientes fueron analfabetas".
Sin embargo, el alto nivel de escolaridad no se ve reflejado
ni en el contenido ni en la calidad de la instrucción;
"encontramos un desconocimiento grave del cuerpo y de los
genitales, en ocasiones (las adolescentes) no entienden por
qué se embarazaron". "El poco acceso a la educación sexual no
satisface las necesidades de niños y adolescentes".
RELACIONES SEXUALES: ¿UN JUEGO?
Varias investigaciones realizadas en adolescentes (Diane
Papalia, 1992), concluyen que la principal causa de embarazos
no deseados es el rechazo de muchos jóvenes, especialmente
mujeres, a admitir que son sexualmente activas. "Prefieren
pensar que se dejaron llevar por un momento de pasión
("perdonable") más que por haberse comprometido a tener
relaciones sexuales ("inmoral", "pecado"). No están preparados
para pensar en ellos como individuos sexualmente maduros y
responsables, y por tanto no planifican evitar el embarazo".
Algunas adolescentes no utilizan métodos anticonceptivos
porque los desconocen, no saben dónde conseguirlos, temen que
sus padres puedan descubrir que tienen relaciones sexuales o
creen que no pueden quedar embarazadas. Cuando intentan
prevenir la anticoncepción , la mayorÃa recurre a métodos de
control para el varón (especialmente preservativos).
Por otra parte, es sumamente alto el número de adolescentes
que recurren al aborto como el mejor camino para superar sus
conflictos presentes y futuros.
¿QUE HACER?
El informe de la investigación realizada por el "Consultorio
de Atención Integral a la Adolescente Embarazada", presenta
algunas recomendaciones para hacer frente al embarazo precoz,
entre estos destacan los siguientes:
* Creación de servicios de atención especializada e integral
que promuevan el autocuidado y sean fácilmente replicables.
* Fortalecer las acciones preventivas de educación,
información oportuna y control de la desinformación por parte
de los medios de difusión masiva.
* Una vez que el conflicto se presenta, es importante promover
la reinserción social, escolar y familiar. El desafÃo
fundamental es que cada adolescente logre continuar o formular
un proyecto de vida que le permita desarrollar sus
potencialidades.
Lo que no enseña la escuela (tercer curso como promedio) y, el
38% instrucción primaria (quinto grado como promedio). "El 18%
siguió cursos especiales (belleza o corte) que con frecuencia
fueron interrumpidos antes de culminarlos. Apenas el 0.4% de
las pacientes fueron analfabetas".
CORTOS
El estudio realizado por el Consultorio de Atención Integral a
la Adolescente Embarazada involucró a 237 menores de 17, entre
los resultados obtenidos destacan los siguientes:
* La edad promedio de la primera menstruación fue 12 años y
medio. La edad más temprana de embarazo fue 13, la de inicio
de relaciones sexuales 6 años, y la edad promedio del primer
coito 14.9.
* El 46% de las pacientes fueron migrantes, de ellas el 16%
llegaron a la ciudad en un tiempo menor a 2 años.
* La joven embarazada depende en primer lugar de sus padres
(38%) y en segundo lugar de su pareja (33%).
* El 54% de pacientes son solteras, de ellas 23% se encuentran
en unión libre y 31% están solas. De las pacientes casadas
(46%) el 4% están separadas.
* El 86% iniciaron relaciones sexuales con consentimiento, el
15% fue abuso sexual. Un 22% de adolescentes que iniciaron sus
relaciones sexuales con consentimiento lo hicieron con parejas
que apenas conocÃan.
* El 61% de las adolescentes se embarazaron sin desearlo. El
90% no usó ningún anticonceptivo. Un 10% usó métodos
anticonceptivos inadecuados.
* El 69% de las madres de las pacientes fueron también madres
adolescentes. El 56% trabaja fuera del hogar, y de ellas 43%
trabaja más de 8 horas diarias.
* Las adolescentes que suelen beber, fumar, tener un
comportamiento escolar que requiere acciones disciplinarias y
otras actitudes rebeldes, están altamente correlacionadas con
la actividad sexual temprana.
* El mejor rendimiento escolar es un factor protector de
comportamientos de riesgo como el embarazo inoportuno. Las
pruebas de inteligencia señalan coeficientes intelectuales
bajos en ciertas adolescentes embarazadas.
* Las madres adolescentes tienen menos oportunidades de
capacitación, tendrán más bajos ingresos a largo plazo, menor
rendimiento laboral, insatisfacción de sus logros vocacionales
y frustración.
Antes fueron migrantes, de ellas se embarazaron en un tiempo
menor a dos años de haber llegado a la ciudad. (6B)
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