Quito (Ecuador). 18 nov 95. El Valle de los Chillos es un
importantísimo centro de agrupación humana donde más que nada
hace falta incentivar a la población con educación, arte,
ciencia y en definitiva cultura, lo que permitirá mantener la
identidad de nuestro pueblo y nos enrumbará hacia el verdadero
desarrollo.

Con este afán y en este espíritu se creó el Instituto Telmo
Hidalgo de la ciudad de Sangolquí, cuyo director actual es el
Sr. José Díaz Cárdenas.

¿Qué es este centro?

En 1986 un grupo de ciudadanos preocupados por la importancia
que debe tener la cultura y sus manifestaciones en la gente,
organizan y crean el Instituto de Educación Popular Telmo
Hidalgo Díaz en honor a un conocido dirigente sindical
originario de este Cantón.

El Centro empezó únicamente con el servicio de biblioteca
apoyado por la colaboración de la Casa de la Cultura
Ecuatoriana y el Ministerio de Educación y Cultura.

Con el paso del tiempo se ve la necesidad de crear nuevos
campos en los que se puede desarrollar actividades culturales
y se instalan áreas como videoteca, sonoteca, ludoteca.

Como es parte del Instituto Telmo Hidalgo, el Ballet presenta
la misma mística de servicio y "culturización" por lo que
están elaborando un plan maestro para incentivar las
inquietudes de los niños de la escuela del cantón hacia la
organización de grupos de expresión artística, el primer
proyecto fue enviado a la escuela Carlos Larco y se está
esperando la respuesta para iniciar los trabajos.

Desde su inicio el Ballet ha contado con el apoyo del
Municipio de Rumiñahui que ha facilitado el Salón de la Ciudad
para los ensayos y las presentaciones, aparte de esto siempre
solicita los servicios del grupo para cualquier presentación
municipal.

Otros Campos

Pero el trabajo del Centro no termina allí, se tienen
realizados muchos proyectos como por ejemplo la realización de
talleres y cursos de capacitación, con la coordinación del
SECAP, en las ramas técnicas y artesanales de carpintería,
corte y confección, lectura e interpretación en planos para
los obreros de la construcción, electrónica y contabilidad
básica, a los que han asistido masivamente las personas en
vista de las facilidades y posibilidades que presentan los
talleres, según pudimos conocer, desde el próximo año se darán
inicio nuevamente a este tipo de cursos.

Para los estudiantes, en las vacaciones, se han realizado
cursos de matemáticas, química y gramática, a manera de
nivelación.

En los próximos días se realizará el lanzamiento del primer
tomo de la serie "Conozcamos Nuestra Tierra", este volumen
tratará sobre datos generales del cantón Rumiñahui desde temas
como Economía, Cultura, Historia, Salud, Geografía, etc.

La serie contará con 8 tomos en la que se profundizará sobre
diversos temas referentes a nuestro Cantón. Es una serie
orientada fundamentalmente hacia los estudiantes por lo que se
ha tomado como fuentes: las bibliográficas, las documentales,
los aportes personales y el análisis del penúltimo censo.

La primera edición tendrá una tirada de 3.000 ejemplares que
serán impresos en el mismo centro, aunque por la falta de
capacidad de la maquinaria con que se cuenta se va a proponer
que al ESPE (Escuela Superior Politécnica del Ejército) apoye
la publicación a través la impresión.

El Centro está empeñado en que la Casa de la Cultura
Ecuatoriana autorice la creación del Núcleo de la CCE del
Valle de los Chillos en Sangolquí, con el propósito de que
toda la producción artística del Valle se la realice
institucionalizadamente, es decir se puedan realizar
exposiciones de pintura, editar libros, y en definitiva abrir
la puerta a la cultura de nuestra propia raíz, este núcleo
tendría un apoyo lógico de la CCE y se buscaría financiamiento
a través de la empresa privada y la autogestión.

Se han realizado convenios con diversas instituciones para
apoyo al Instituto, como por ejemplo con el Municipio de
Rumiñahui que facilitó, en comodato por 20 años el local donde
funciona el Centro o con el Centro de Desarrollo Social para
obtener libros más baratos y ampliar la biblioteca que
actualmente cuenta con 4.500 tomos, a más de poder vender
libros a precios cómodos.

A este centro vienen muchos jóvenes del Valle de los Chillos
para hacerce beneficiarios de todo lo que este lugar les puede
brindar.

La danza consolida su espacio

En 1991 surge el Ballet Folclórico Tierra y Maíz, como parte
integrante del Instituto Temo Hidalgo, en su origen funcionó
con 48 personas pero con el tiempo y las circunstancias hoy
fijos trabajan 36 integrantes.

Según Mario Molina, Promotor Cultural del Centro y responsable
directo del Ballet, el mismo fue creado como un espacio donde
los jóvenes puedan expresar su vocación artística y al mismo
tiempo donde puedan ocupar provechosamente su tiempo.

Respecto a la formación de los bailarines, en un principio
tuvieron el apoyo y el aporte de Rafael Camino (director del
ballet Jacchigua), pero luego se han ido auto-formando a
través de una investigación de carácter técnico-práctico.

El Ballet ensaya tres veces por semana y para su
financiamiento no cuentan con un apoyo directo por lo que sus
ingresos los obtienen de las presentaciones periódicas que
realizan y de diferentes proyectos como el que piensan
emprender desde diciembre próximo, que consiste en la
elaboración de artesanías fundamentalmente en madera y
cerámica cuyo producto servirá de medio de autogestión para el
Ballet.

"Por fin les di rienda suelta a mis deseos

Sus ojos reflejan todo lo que puede expresar a través de su
arte. Hablamos con Mario Molina, promotor cultural del
Instituto "Telmo Hidalgo" y co-fundador del ballet Folclórico
"Tierra y Maíz".

A este hombre de contextura delgada, apta para la danza y de
expresivos ojos oscuros, se le ilumina el rostro al hablar del
tema que más le apasiona: el baile autóctono. Y es que él,
según nos cuenta, creció entre bailes de yumbos, tejidos de
cintas y un sinfín de tradiciones.

Don Mario, originario de Sangolquí, vio su primera luz ala
sombra de la cultura, el ancestro y la tradición, puesto que
su abuela estaba vinculada muy directamente con los sectores
periféricos del Valle de los Chillos en los que están muy
enraizadas las fiestas religiosas, las costumbres y las
tradiciones autóctonas con matices mestizos.

Desde muy niño participaba de toda algarabia fiestera, siempre
con su atuendo típico. En su escuela, la Carlos Larco,
destacaba en la danza y el teatro. En la secundario siguió
practicando estas actividades pero, ya a nivel superior,
cuando debía decidir de qué iba a subsistir, la realidad se
impuso al arte y optó por seguir leyes en la Facultad de
Derecho de la Universidad Central, de la que es egresado.

Siempre tuvo e su mente y en su corazón al arte, por lo que
colaboró en la formación del Instituto "Telmo Hidalgo", y
luego fundó el Ballet "Tierra y Maíz", grupo en el que por fin
pudo dar rienda suelta a ese gran deseo de dedicar su vida
entera al arte.

En 1992 trabajó como concejal de Rumiñahui, justamente como
presidente de la Comisión de Educación y Cultura, y tuvo la
oportunidad de aportar para la culminación de la Plaza
Rumiñahui. "Era una verdadera aspiración del pueblo de
Rumiñahui rendir un homenaje a este gran héroe aborigen"
afirma don Mario.

Actualmente está embarcado en una gran empresa: pretende
montar en julio de 1996 una obra que represente la quema de la
ciudad por parte de Rumiñahui. Para ello se valdrá, además de
la danza, de juegos artificiales y una escenografía especial
que reeditará los acontecimientos que ocurrieron durante la
conquista española (la muerte de Atahualpa, la derrota de los
incas, la muerte masiva de las vírgenes del sol...)

Don Mario Molina es un autodidacto y en su afán desmedido por
propagar el arte en su tierra natal hoy lo vemos colaborando
arduamente para conseguir este objetivo. (Cultura) (Diario
HOY) (8B)
EXPLORED
en Ciudad Quito (Ecuador)

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