Quito. 02. 10. 90. Las quebradas que atraviesan Quito son las
responsables naturales de que la ciudad esté sujeta a sufrir
aluviones como los ocurridos en 1975 y 1983.
Estas quebradas "forman parte del sistema de drenaje natural,
pero el desarrollo de la ciudad las ha ido poco a poco
bloqueando. Al ser bloqueados los cursos naturales de agua se
han producido ciertos problemas que afloran sobretodo en las
épocas de lluvia", dijo al ser entrevistado por HOY Gonzalo
Bustamante, subdirector de Planificación.
Según informó este arquitecto, "las medidas tomadas después de
las catástrofes del 75 y del 83 estuvieron orientadas a
mejorar el comportamiento del sistema de evacuación de agua
por un lado y por otro a impedir que llegaran todos los flujos
de agua a esos canales".
Los cauces de las quebradas "tienen pendientes muy fuertes asÃ
que los flujos de agua son violentos. El suelo volcánico no
es muy compacto y es susceptible de correrse muy fácilmente",
precisó el funcionario.
-¿Además de las dos zonas en donde ocurrieron dichos deslaves,
existen otras en situación de riesgo?
-Hay varios tipos de riesgo: riesgos morfodinámicos,
vulcanológicos (referidos al volcán Pichincha) y vinculados
con los cruces de las quebradas.
-¿Con qué criterios son establecidas las zonas de riesgo?
-Los criterios utilizados dependen de cada estudio. En el caso
del volcán Pichincha se estableció que hay áreas de riesgo que
deberÃan ser tomadas en cuenta. Porque si se produjera una
erupción, por un lado habrÃa un incremento de actividad
sÃsmica y por otro, luego de una erupción se producen lluvias.
El material volcánico que se asienta sobre las laderas es
soltado y si se suman la lluvia y los movimientos sÃsmicos se
convierte en una colada que busca bajar por los cauces
naturales.
La ciudad se desarrolló en las zonas de riesgo sin que
existiera conocimiento de ese peligro. Hasta hace un año nadie
sabÃa y ninguna planificación consideraba el factor riesgo.
Es exactamente igual que el sida: usted no podÃa tomar ninguna
precaución si no sabÃa que existÃa el sida.
-¿Tiene el Municipio la intención de difundir las
informaciones sobre estos riesgos?
- El objetivo del Municipio no es la difusión de los riesgos
sino su prevención. La prevención estarÃa fundamentalmente
orientada a disminuir los posibles impactos que se pudieran
producir o atenuarlos. SerÃa ilógico no tomar medidas que
disminuyeran el impacto de una eventual erupción, que en lugar
de que matara a un millón de personas, matara a unas 500 mil:
¿Esto es un éxito, no?
No podemos sacar las 300 hectáreas concernidas y decir que
allá no viva nadie. Hay gente que ha invertido y tiene su
casa. SerÃa una locura. Pero sà se puede decir: no crezcan
tanto. Ninguna instalación de salud, de seguridad, de
tránsito deberÃa estar ubicada en esas áreas. El Municipio va
a prohibir eso porque lo puede hacer. Me parece que toda esta
información no debe ser ocultada a las personas pero debe ser
dada a conocer cuando el caso lo amerite. Lo que puedo decir
es que se están tomando en cuenta las recomendaciones que
proveen los estudios técnicos y que seguramente en las nuevas
reglamentaciones se van a traducir.
-¿Qué ha hecho el Municipio hasta ahora en lo que se refiere a
estos riesgos?
- Lo que estamos haciendo nosotros es lo que está en nuestro
ámbito de actuación. Estamos planificando la ciudad en varios
campos, uno de ellos es la reglamentación de usos de la
ciudad. Van a haber, pienso yo, afectaciones que tiendan
fundamentalmente a disminuir los posibles o probables impactos
que pudieran producirse sobre esas zonas, tanto en términos
de personas como de edificaciones.
-¿Qué le parecen las medidas propuestas en el estudio
"quebradas del Pichincha" por Krochin y Carcelén?
- No conozco ese informe. Esta cuestión la está administrando
directamente, me parece, Alcantarillado y la Dirección de
Higiene. Es un estudio introductorio, una serie de
recomendaciones. Este estudio lo contrató el propio Municipio
para tener una visión de los problemas que existen en las
laderas del Pichincha.
*Estudiante francesa de ciencias polÃticas que realiza una
pasantÃa en el diario HOY. (C-8)