QUEBRADAS Y BASURA RODEAN CARAPUNGO
Quito. 21.01.91. Tres quebradas importantes existen en
Carapungo, barrio ubicado al nororiente de Quito "un poquito
antes de Calderón y para adentro".
La una está siendo rellenada para la construcción de canchas
deportivas y las otras dos siguen siendo botaderos de basura
que despiden un olor fétido y son fuente de accidentes y
enfermedades. Estas últimas bordean dos distintos programas de
vivienda, con el constante peligro de desmoronamiento, pues no
tienen soporte ni muros de contención. "Las casas están
quedando al borde de la quebrada", atestiguó un morador, en
diálogo con HOY.
Carapungo es una urbanización de 6 mil viviendas, dividida en
seis etapas (A, B, C, D, E, F). Fue creada en junio de 1986,
mediante ordenanza municipal número 2488, suscrita entre el
Municipio y la JNV, durante la administración del alcalde
Gustavo HerdoÃza.
Contribuye al problema de la basura, según los pobladores, la
ausencia de atención de saneamiento ambiental. Los
recolectores de basura sólo ingresan a la primera etapa,
pasando un dÃa, dijeron.
Los propietarios del resto de etapas, añadieron, deben subir a
la primera acarreando la basura. Pero no todos lo hacen: las
esquinas, calles y quebradas se han convertido en improvisados
basureros.
La empresa de transportes Calderón donó algunos tarros de
basura, pero se llenaban y los recolectores no pasaban, anotó
Froilán Ledesma, presidente de la Asociación Amigos de
Carapungo, una de las por lo menos cuatro organizaciones
barriales: el Comité Central, la Asociación Amigos de
Carapungo, el Frente Femenino de Carapungo y la Asociación los
Arupos.
Faltan espacios deportivos y recreacionales
Otro problema que afecta a Carapungo es la falta de espacios
recreacionales y deportivos que no fueron construidos por la
Junta Nacional de la Vivienda, JNV.
La Asociación Amigos de Carapungo edificó un estadio de
fútbol, que lleva el nombre de la asociación, en una quebrada
que se rellenó con la ayuda gratuita de una compañÃa privada.
Y en su afán por contar con una cancha de fútbol los
pobladores también invadieron un terreno del IESS y
construyeron la cancha de fútbol. El IESS va a enjuiciar a la
JNV por la utilización de esta área.
La necesidad de espacios recreacionales y de eliminar la
quebrada, motivó a los moradores a esta acción, afirmó
Ledesma. Los moradores, informó, seguirán construyendo en el
resto de la quebrada canchas de vóley y básquet, a pesar de
que este lugar estaba destinado por la JNV a otro propósito.
Una vecina de Carapungo aseveró que el espacio destinado para
canchas deportivas se utilizó en construir la cuarta etapa del
programa.
Otras carencias
Lo enunciado no es lo único que hace falta en Carapungo. En
este barrio no existe centro de salud, ni dispensario médico,
a pesar de la presencia de innumerables casos de enfermedad,
originados por las condiciones de vida de los pobladores.
El mercado provisional se instala en el arenal que rodea al
edificio de la iglesia y no hay centros fijos para
abastecimiento de alimentos. Tampoco hay atención policial.
La presidenta del Comité Central Pro Mejoras de Carapungo,
Nancy Vargas, narró a HOY que "una vez capturamos a un ladrón
al que le encontramos robando en una de las viviendas, no
hallamos ni un policÃa y tuvimos que soltarlo".
Una jovencita menor de edad se quejó de que "de noche no se
puede caminar tranquila por la calle, porque hay muchos
borrachos y nadie puede decir nada".
Cuatro teléfonos para 20 mil personas
Cuatro teléfonos públicos abastecen todo Carapungo para 6 mil
viviendas, más de 20 mil personas. "Vino el doctor Borja el 24
de mayo de 1989 e inauguró seis furgones chatarras de
teléfonos -módulos que contienen cientos o miles de circuitos
telefónicos-.
Teóricamente tenemos tres módulos con capacidad para unas 6
mil lÃneas telefónicas, de estas estarán habilitadas unas cien
ó 200 lÃneas", informó Froilán Ledesma.
Entre la población de Carapungo otras de las quejas es sobre
la forma como fueron otorgadas las lÃneas. Un morador denunció
"que la entrega de lÃneas se hizo según el partido al que
pertenecen algunos vecinos".
Accesos pésimos y falta de buses
Un arenal con irregulares baches, donde crecen matorrales y
vegetación son las vÃas de acceso a Carapungo, según lo
constató HOY. Su estado no permite el libre acceso de los
vehÃculos.
Según la presidenta del comité hay un acta firmada entre el
Ministerio de Obras Públicas, MOP, y el Banco de la Vivienda,
BEV, que compromete al MOP a colocar la capa asfáltica, a
cambio de la posesión de la misma. "Pero esto no ha pasado del
escritorio", dijo.
Al momento, sólo la empresa de transporte Calderón, admitió
ingresar con sus unidades al interior de Carapungo.
Comprometió 30 unidades para servir esta zona pero solo
atiende con 13, que transportan desde las 5h00 a las 18h00.
El Municipio intentó probar con los buses articulados, pero no
pudieron traspasar la vÃa de acceso. "La tarifa del trasporte
hasta Carapungo es de 85 sucres. "Para pagar impuestos
prediales somos zona urbana y para pagar transporte somos zona
rural; para tener servicios básicos somos zona marginal. No
sabemos qué mismo somos", protestó Vargas.
El transporte, según todos los vecinos, es caótico, los buses
abusan de los niños, no los quieren llevar. Este problema ha
ocasionado disputas entre los vecinos por la desesperación de
trasladarse, precisó la presidenta. "Ya va a ser un año de lo
que vino Borja. Ofreció maravillas para las vÃas de acceso,
incluso un dÃa antes de que él viniera, trajo
motoniveladoras, volquetas y se hizo la propagandita.
"Nosotros agradecemos lo que ofreció, pero en este momento
solo podemos decir ¿qué pasó?"
Al siguiente dÃa se fueron todas las volquetas detrás de él,
nosotros estábamos contentos de que las vÃas de acceso ya
comenzaban (a construirse), y ahora qué" se quejaron los
moradores. (C-8)
Quito. 21.01.91. Tres quebradas importantes existen en
Carapungo, barrio ubicado al nororiente de Quito "un poquito
antes de Calderón y para adentro".
La una está siendo rellenada para la construcción de canchas
deportivas y las otras dos siguen siendo botaderos de basura
que despiden un olor fétido y son fuente de accidentes y
enfermedades. Estas últimas bordean dos distintos programas de
vivienda, con el constante peligro de desmoronamiento, pues no
tienen soporte ni muros de contención. "Las casas están
quedando al borde de la quebrada", atestiguó un morador, en
diálogo con HOY.
Carapungo es una urbanización de 6 mil viviendas, dividida en
seis etapas (A, B, C, D, E, F). Fue creada en junio de 1986,
mediante ordenanza municipal número 2488, suscrita entre el
Municipio y la JNV, durante la administración del alcalde
Gustavo HerdoÃza.
Contribuye al problema de la basura, según los pobladores, la
ausencia de atención de saneamiento ambiental. Los
recolectores de basura sólo ingresan a la primera etapa,
pasando un dÃa, dijeron.
Los propietarios del resto de etapas, añadieron, deben subir a
la primera acarreando la basura. Pero no todos lo hacen: las
esquinas, calles y quebradas se han convertido en improvisados
basureros.
La empresa de transportes Calderón donó algunos tarros de
basura, pero se llenaban y los recolectores no pasaban, anotó
Froilán Ledesma, presidente de la Asociación Amigos de
Carapungo, una de las por lo menos cuatro organizaciones
barriales: el Comité Central, la Asociación Amigos de
Carapungo, el Frente Femenino de Carapungo y la Asociación los
Arupos.
Faltan espacios deportivos y recreacionales
Otro problema que afecta a Carapungo es la falta de espacios
recreacionales y deportivos que no fueron construidos por la
Junta Nacional de la Vivienda, JNV.
La Asociación Amigos de Carapungo edificó un estadio de
fútbol, que lleva el nombre de la asociación, en una quebrada
que se rellenó con la ayuda gratuita de una compañÃa privada.
Y en su afán por contar con una cancha de fútbol los
pobladores también invadieron un terreno del IESS y
construyeron la cancha de fútbol. El IESS va a enjuiciar a la
JNV por la utilización de esta área.
La necesidad de espacios recreacionales y de eliminar la
quebrada, motivó a los moradores a esta acción, afirmó
Ledesma. Los moradores, informó, seguirán construyendo en el
resto de la quebrada canchas de vóley y básquet, a pesar de
que este lugar estaba destinado por la JNV a otro propósito.
Una vecina de Carapungo aseveró que el espacio destinado para
canchas deportivas se utilizó en construir la cuarta etapa del
programa.
Otras carencias
Lo enunciado no es lo único que hace falta en Carapungo. En
este barrio no existe centro de salud, ni dispensario médico,
a pesar de la presencia de innumerables casos de enfermedad,
originados por las condiciones de vida de los pobladores.
El mercado provisional se instala en el arenal que rodea al
edificio de la iglesia y no hay centros fijos para
abastecimiento de alimentos. Tampoco hay atención policial.
La presidenta del Comité Central Pro Mejoras de Carapungo,
Nancy Vargas, narró a HOY que "una vez capturamos a un ladrón
al que le encontramos robando en una de las viviendas, no
hallamos ni un policÃa y tuvimos que soltarlo".
Una jovencita menor de edad se quejó de que "de noche no se
puede caminar tranquila por la calle, porque hay muchos
borrachos y nadie puede decir nada".
Cuatro teléfonos para 20 mil personas
Cuatro teléfonos públicos abastecen todo Carapungo para 6 mil
viviendas, más de 20 mil personas. "Vino el doctor Borja el 24
de mayo de 1989 e inauguró seis furgones chatarras de
teléfonos -módulos que contienen cientos o miles de circuitos
telefónicos-.
Teóricamente tenemos tres módulos con capacidad para unas 6
mil lÃneas telefónicas, de estas estarán habilitadas unas cien
ó 200 lÃneas", informó Froilán Ledesma.
Entre la población de Carapungo otras de las quejas es sobre
la forma como fueron otorgadas las lÃneas. Un morador denunció
"que la entrega de lÃneas se hizo según el partido al que
pertenecen algunos vecinos".
Accesos pésimos y falta de buses
Un arenal con irregulares baches, donde crecen matorrales y
vegetación son las vÃas de acceso a Carapungo, según lo
constató HOY. Su estado no permite el libre acceso de los
vehÃculos.
Según la presidenta del comité hay un acta firmada entre el
Ministerio de Obras Públicas, MOP, y el Banco de la Vivienda,
BEV, que compromete al MOP a colocar la capa asfáltica, a
cambio de la posesión de la misma. "Pero esto no ha pasado del
escritorio", dijo.
Al momento, sólo la empresa de transporte Calderón, admitió
ingresar con sus unidades al interior de Carapungo.
Comprometió 30 unidades para servir esta zona pero solo
atiende con 13, que transportan desde las 5h00 a las 18h00.
El Municipio intentó probar con los buses articulados, pero no
pudieron traspasar la vÃa de acceso. "La tarifa del trasporte
hasta Carapungo es de 85 sucres. "Para pagar impuestos
prediales somos zona urbana y para pagar transporte somos zona
rural; para tener servicios básicos somos zona marginal. No
sabemos qué mismo somos", protestó Vargas.
El transporte, según todos los vecinos, es caótico, los buses
abusan de los niños, no los quieren llevar. Este problema ha
ocasionado disputas entre los vecinos por la desesperación de
trasladarse, precisó la presidenta. "Ya va a ser un año de lo
que vino Borja. Ofreció maravillas para las vÃas de acceso,
incluso un dÃa antes de que él viniera, trajo
motoniveladoras, volquetas y se hizo la propagandita.
"Nosotros agradecemos lo que ofreció, pero en este momento
solo podemos decir ¿qué pasó?"
Al siguiente dÃa se fueron todas las volquetas detrás de él,
nosotros estábamos contentos de que las vÃas de acceso ya
comenzaban (a construirse), y ahora qué" se quejaron los
moradores. (C-8)
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