Quito. 24 mar 96. "Esta propuesta es creíble y se la puede
realizar. La riqueza natural y humana del Ecuador lo
garantiza" enfatizó Jaime Nebot, candidato presidencial, al
exponer ante la prensa nacional e internacional y
editorialistas del país, el esquema de su propuesta de
gobierno. El acto efectuado el miércoles 20 de marzo, en el
salón, "Las Juntas" del Hotel Colón, se desarrolló dentro de
un marco de sobriedad. La exposición de Nebot fue clara y
precisa, resumida en tres puntos: qué hacer, cómo hacerlo y
para quién. "Sólo es necesario un gobierno que con decisión,
honestidad, capacidad y solidaridad permita a nuestra gente
formarse, trabajar e invertir con libertad para poder vivir
con dignidad", recalcó Nebot, quien luego de una amplia
explicación, contestó las preguntas de los periodistas sin
eludir ninguna. Dijo que para cumplir con un programa se
requiere conocer a fondo la realidad del país, saber cuáles
son los problemas de la gente, tener la decisión política de
afrontarlos y resolverlos y adoptar los mecanismos para
obtener los recursos necesarios para su ejecución.

Para ello se toman como base cuatro variables: 1.- El nuevo
rol del Estado, esto es, un Estado pequeño y fuerte, que
gobierne más y administre menos.

2.- Estabilización de la economía, que permitirá un ambiente
productivo y competitivo, indispensable para la inversión
privada 3.- Producir más y mejor, para conseguir la producción
de más bienes y servicios, generando nuevos empleos y mejores
salarios. 4.- Invertir en la gente, que significa convertir
al presupuesto en un instrumento de desarrollo y de servicio
para los ecuatorianos.



¿QUE HACER?



El nuevo rol del Estado



"Se necesita un Estado pequeño y fuerte que gobierne más y
administre menos, señaló Nebot, un Estado responsable del
orden, la seguridad, la confianza y la inversión en la gente;
un Estado propulsor, facilitador, regulador y sancionador de
las actividades productivas. Un Estado austero, eficaz y
profesionalmente administrado"

Dentro de este esquema, Nebot plantea la desregularización,
deconcentración y descentralización del Estado. Así como una
justicia despolitizada e independiente, a través de privar al
Congreso nacional de la facultad de nombrar magistrados de la
Corte Suprema y entregársela a la sociedad civil, para que
mediante colegios electorales, se elija una primera Corte de
Justicia bajo el sistema de cooptación, cuyos jueces deberán
ser jurisconsultos que reúnan severos requisitos.

"Esta es la forma de garantizar el acceso de los ecuatorianos
a una justicia honesta, eficaz y oportuna", dijo.

Dentro de su propuesta para combatir la corrupción, Nebot
plantea la supresión de los gastos reservados, la eliminación
de los contratos secretos, la eliminación de la inmunidad
parlamentaria, la imprescriptibilidad de las penas en los
delitos contra los fondos públicos y la sustitución del actual
sistema de contratación pública por otro basado en los
contratos de adhesión.

En seguridad social, está de acuerdo con pagar la deuda del
Estado al IESS, y una política para dar servicio eficaz a los
beneficiarios del seguro, "no se privatizará, se mantendrá el
principio de la solidaridad y el seguro campesino, pero habrá
libre competencia", afirma.

En el sindicalismo público, se respetará el derecho de los
trabajadores a sindicalizarse y la celebración de contratos
colectivos dentro de un marco de equidad y no de privilegios,
no se permitirá la alteración del orden público ni la
paralización arbitraria de los servicios públicos. Al
referirse a la modernización, Nebot señaló que ésta debe
conciliar los intereses del Estado, la empresa privada, los
trabajadores públicos y la sociedad. Se refirió a la
transformación de empresas del Estado en sociedades anónimas,
asegurando su participación accionaria, incluso
mayoritariamente, preservando para el Estado los recursos
inalienables. El trabajador sin perjuicio de su estabilidad,
tiene derecho a ser accionista de las empresas, con lo que se
pone en marcha en el país un capitalismo obrero y popular.

En cuanto a la política internacional, considera que es
necesaria una diplomacia renovada para que pueda estar al
servicio del país. Las embajadas dejarán de ser el destino de
los amigos y enemigos, estarán capacitadas para negociar,
especialmente, en la cooperación técnica y económica
internacional. Ratifica la necesidad de una paz definitiva,
digna, altiva y soberana con el Perú, mediante un acuerdo que
debe ser adoptado por los países y por la mayoría de los
ecuatorianos a través de una consulta popular para preservar
la unidad nacional. "No queremos los extremos. Ni la guerra
ni la claudicación, existen procedimientos convencionales e
imaginativos", sostiene Nebot.



Estabilización de la economía



Propone que la calidad y el precio de los combustibles y de la
energía deben ser competitivos internacionalmente, eliminando
los mecanismos ilegítimos para incrementar su precio. Los
intereses tiene que guardar relación con la inflación y con el
costo internacional del dinero. La paridad cambiaria debe
responder a una realidad, sostiene el documento.



Producir más y mejor.



Dentro de este capítulo, el candidato social cristiano señala
que se debe llegar a una economía de abundancia, generadora de
bienes, servicios y empleos, mejorando salarios, basada en una
política de inversión nacional y extranjera en el campo
productivo y no en el especulativo. Generar confianza en base
a seguridad jurídica y reglas claras del juego para lograr una
importante inversión nacional y extranjera, son aspectos
sustanciales de su propuesta.

Al referirse al sector agropecuario, Nebot sostiene que éste
debe ser revitalizado, dando seguridad en la tenencia de la
tierra, creando la infraestructura necesaria y otorgando
créditos suficientes y oportunos con tasas de interés que
pueden ser pasadas por los prestatarios.

El Banco Nacional de Fomento deberá operar con eficacia con el
pequeño y mediano agricultor y ganadero. "Se regulará la
comercialización, propiciando precios reales al productor. El
intermediario debe ser un agente lícito del proceso, evitando
así, perjuicios al consumidor", subrayó. Respecto de la
reconversión industrial y desarrollo hacia afuera. Nebot
propone incentivar las actividades minera, forestal y de
turismo. Mención especial merece la capacitación al
microempresario.

Considera que el arancel es uno de los factores de
integración, pero son importantes también, las políticas
laboral, cambiaria y de precios administrados. En síntesis,
la existencia de un aparato básico productivo competitivo, que
evite la competencia desleal. "Las negociaciones no deben de
hacerse con un grupo determinado de países, pues la apertura e
integración no tienen carácter regional sino mundial", recalcó
el candidato Social Cristiano. Es contrario a los subsidios
generales y permanente, pero sí temporales y selectivos de
ayuda directa a los sectores pobres de la población y
considera indispensable la conservación del medio ambiente
para el desarrollo con el cual se debe armonizar.



INVERTIR EN LA GENTE



Ese fue un capítulo especial para el candidato Social
Cristiano, el objetivo mismo de toda su propuesta. Para ello
plantea un estado que gaste menos y mejor y que permita a la
empresa privada producir más, de esta forma se obtendrán los
recursos suficientes para convertir al presupuesto general del
estado, en el gran instrumento de promoción de desarrollo
humano. Su preocupación será luchar contra la carestía de la
vida; generar empleo por parte del estado y la empresa
privada; dar seguridad a través del combate a la delincuencia;
y, el respeto absoluto a los derechos humanos. En el campo de
la salud, se extenderá ka cobertura de atención a todos los
sectores de la población con programas de suplementos
alimenticios, medicina preventiva, ligada a la construcción y
habilitación de dispensarios , centros y subcentros de salud.
Propone además, abaratar el costo de los medicamentos mediante
la utilización de los genéricos. Su gobierno dará, asegura,
gran atención a la educación, cultura y deporte como una
educación integral orientada hacia el trabajo y fundamentada
en la realidad nacional y universal. "La educación será un
derecho fundamental garantizado por el estado", acotó Nebot.

En cuanto a la obra pública, dinamizará la actividad de la
construcción en general y de la vivienda de interés social,
basada en la reactivación del aparato productivo y en la
creación de empleo.



¿COMO HACERLO?



¿Cómo hacerlo? Nebot es enérgico en esto. Asegura que se
trata de un verdadero compromiso con los electores y no un
simple listado de enunciados que puedan tener un final
demagógico. La propuesta, con un gran conocimiento de la
realidad del país y los problemas de la gente, tiene mucho
cuidado en abordar la forma y los recursos a los que e
recurrirá para hacerla realidad.

?De dónde sale el dinero para ejecutar la propuesta? Gastando
menos y estableciendo prioridades del gasto. Invirtiendo más
en programas sociales,. La meta es convertir el presupuesto
del Estado en un instrumento de desarrollo e inversión e la
gente, suprimiendo gastos innecesarios y tratando a los
servidores y trabajadores del sector público de manera
equitativa pero no privilegiada. El manejo de las finanzas
públicas, sostiene, se hará en forma austera, profesional,
apolítica y responsable. Cobrando los impuestos: el esquema
dice "No a más impuestos", pero con fuerte orientación a
eliminar la evasión tributaria, aplicando prisión si es
necesario. Usando más y mejor los créditos de organismos
internacionales y destinando estos recursos exclusivamente a
la inversión social y al desarrollo productivo. De esta forma
crecerá la economía y el Estado dispondrá de nuevos recursos.

Al mismo tiempo, el candidato en su presentación hace especial
mención de su responsabilidad personal en el compromiso
adquirido con este documento. El será quien responda, tanto
por el contenido, como por su aplicación durante la gestión de
gobierno.



¿PARA QUIEN HACERLO?



"Para la gente, que somos todos" responde Nebot, "pero
fundamentalmente para quienes menos tienen y más necesitan...
mi compromiso es con los hombres, mujeres, niños y niñas de
mi país. Esta propuesta merece credibilidad y es
perfectamente ejecutable. Sólo es necesario un gobierno con
decisión, honestidad, capacidad y solidaridad..." agrega. "Yo
no hablo de esperanza , yo hablo de fe", concluyó. (EL
COMERCIO) (P. A-9)
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