Los Ritmos Biologicos En El NiÑo Y El Cambio De Hora

Quito.23.12.92. Los ritmos biológicos en los seres humanos y
en los seres vivos en general, ¿tienen relación con la hora
del reloj o con los ciclos del sol?

Los niños tendrán que adaptarse a los decretos del gobierno y
sus ritmos biológicos que están regulados por el ritmo
circadiano que mantiene una estricta sincronización con los
cambios de luz solar, con la alternancia del día y la noche,
tenrán que variar por que así lo desean nuestros gobernantes.

Estos ritmos biológicos no tienen solo que ver con las fases
de vigilia o sueño que a la final pueden terminar adaptándose
después de semanas, sino que además tienen que ver con una
serie de funciones metabólicas y neuro-endocrinas bien
complejas y muy suceptibles a pequeños cambios.

Durante las 24 horas el días existen curvas de producción de
hormonas y de neurotransmisores que están sincronizadas
finamente con la alternancia de día y de la noche e incluso
que sufren variaciones de acuerdo a la estación climática y
hasta con las fases de la luna según ciertos autores y que
además de tener una repercusión biológica tiene también por
supuesto una repercusión psicosocial. Daré de manera simple
unos pocos ejemplos: existen investigaciones médicas que
determinan que el índice de suicidios es mayor en países de
cuatro estaciones durante los meses de invierno. Los episodios
de exitación nerviosa en pacientes neuro-psiquiátricos
presentan cierta relación con las fases de la luna.

Respecto a las horas de sueño; la hormona somatotropa u
hormona del crecimiento tiene en el niño una curva de
producción cuyo pico se presenta durante la noche luego de 5
horas de sueño y luego va disminuyendo, siendo importante que
el sueño sea tranquilo y de más o menos diez horas en un niño
de 6 años, éste sueño no puede ser a cualquier hora, ni
interrumpido, cualquier alteración podría causar un déficit de
producción de esta hormona provocando una disminución de su
capacidad de crecimiento. Se ha comprobado también que una
siesta de 30 minutos a medio día puede ser muy importante y
que da posibilidades de establecer una mejor perfomance en el
trabajo de la tarde. Es decir que el tener un sueño adecuado
permite al niño no solo crecer y desarrollarse saludablemente
sino que le da mejores posibilidades de rendimiento
estudiantil.

La inducción al sueño y a la vigilia tiene relación directa
con los cambios de la luz solar, por supuesto que algo se le
puede engañar al organismo de los niños colocando cortinas
bien densas que no permitan el paso de a luz solar y asi
facilitar el sueño durante horas en las que todavía no existe
obscuridad, táctica bastante utilizada en los países de cuatro
estaciones e innecesario en el nuestro, pero el amanecer sin
luz solar va a crear en los niños una sensación
psico-biológica de interrupción del sueño normal que el
escolar va a intentar reatrapar durante las horas de clase sin
nunca lograrlo, produciéndose un disturbio psico-biológico que
influirá directamente en el rendimiento estudiantil y que lo
afectará más mientras más pequeño es el niño y que manifestará
con trastornos del humor, será un niño inquieto malgenio, sin
ganas de aprender.

Además el sol no solamente produce luz, sino que también
produce calor y la cantidad de calor a las 6 a.m. no es la
misma que a las 5 a.m. sobre todo en las ciudades andinas.

Estos hechos sin lugar a dudas va a provocar la presencia de
mayor número de enfermedades en la población escolar.

Besacon en Francia en l982 demostro con estudios científicos
la relación existente en la producción de corticoesteroides y
neurotransmisores en relación con el ritmo circadiano,
substancias que tienen que ver con el funcionamiento nervioso
y endocrino y con los mecanismos de defensa del organismo.

Según Huber Montanger l983 en su libro "Les Rythmes de
L,enfant et de l,adolescent", refiere una investigación hecha
en Francia en la cual se comprobó que no existía ninguna
economía significativa de energía con el cambio de hora en un
país donde existen cuatro estaciones y que por el contrario si
se ha observado disturbios en los niños por esta variación
arbitraria del horario, disturbios que van desde simples
trastornos del humor hasta mayor sensibilidad para contagiar
enfermedades, por disminución de la producción de
corticoesteroides.

No solo los científicos son conscientes de esta situación sino
que también los educadores, los padres de familia han
observado en la vida cotidiana y no solo ahora sino desde
generaciones pasadas las influencias de las variaciones
solares en el ritmo de producción de energía en sus hijos o
estudiantes y es así como se han programado las actividades
tratando de lograr una sincronización entre los ritmos
psicobiológicos y los ambientales tales como las variaciones
de luz, de temperatura, de estaciones climáticas, etc.

Ahora con la crisis energética y el sentido obsesivamente
economicista de ciertos tecnócratas se intenta barrer con
todas estas sutilezas importantes de la actividad humana
creyendo que lo único que cuenta en este tiempo es hacer
dinero sin que importe el costo social, el biológico, ni
psicológico. Un craso error, porque se distorsiona totalmente
el sentido de la vida, que es el de buscar sobre todo un
bienestar que solo puede ser integral.

Si el gobierno o las autoridades estudiantiles tienen un
interés en respetar la salud de sus escolares y quieren
economizar dinero solo tendrían que retrasar una hora e
incluso solo 30 minutos en la entrada de los estudiante
durante la mañana.