Quito. 14 jun 2001. Un 30 por ciento de la producción nacional se exporta
a los paÃses andinos. Las ventas en este año se proyectan entre 37 000 y
40 000 unidades.
Desde marzo pasado se observan más autos nuevos en Lago Agrio. Son
alrededor de 144 camionetas Chevrolet que adquirió Petroproducción para
renovar su parque automotor, que ya tenÃa cuatro años de uso. En camino
están otras 60 unidades de la empresa General Motors.
Esta es apenas una parte de las ventas de esta compañÃa, que vendió 9 597
unidades entre enero y mayo del 2001. La semana pasada hubo una
celebración por las ventas "históricas" de mayo, dijo un funcionaria de
la firma.
Los festejos deben repetirse en los distribuidores de Toyota, que
vendieron 1 464 vehÃculos en los cinco meses. También se colocaron 1 291
autos Volkswagen, 1 177 Daewoo, 1002 Lada, 839 Hyundai, 832 Mazda...
Para las empresas, las ventas hasta mayo equivalen casi todo lo colocado
durante el 2000.
No hay que olvidar que el año pasado se colocaron 19 150 vehÃculos en el
paÃs, mientras que hasta mayo ya suman 18 691, entre nacionales e
importadados.
Los autos importados hasta abril ya superaron todas las adquisiciones del
año pasado.
Marcelo Ruiz, presidente de la Cámara de la Industria Automotriz
Ecuatoriana (Cinae), señaló que el sector se recuperó. Entre enero y
abril del presente año, las tres ensambladoras nacionales produjeron 8
927 vehÃculos, mientras que en igual perÃodo del año pasado fueron 2 309.
Según los datos de las ensambladoras, la producción del año pasado
equivale ahora a las exportaciones del Ecuador a los paÃses de la
Comunidad Andina.
Lo que no ha cambiado mucho es la repartición de mercado. Omnibus BB, que
es la productora de Chevrolet, registra el 83,3 por ciento de la
producción. Le sigue Aymesa con el 10,5 y en tercer lugar Maresa con el
6,2.
El año pasado, la producción de Aymesa fue mÃnima, ya que la empresa se
mantuvo en compás de espera hasta definir nuevas estrategias de negocio.
Y lo consiguió. A partir de diciembre del 2000 se reactivó la producción
en la planta con los vehÃculos doble tracción Niva. En cuatro meses de
este año se vendieron 933 unidades cuya quinta parte se destinó a la
exportación, principalmente a Venezuela.
Por su parte, Omnibus BB produjo 7 439 unidades y la tercera parte salió
del paÃs, principalmente los autos 4x4 Gran Vitara. Mientras tanto,
Maresa ensambló 555 vehÃculos destinados en su totalidad al mercado
local.
Esta reactivación del sector automotor ya hace prever que los pronósticos
de ventas para este año se superarán con tranquilidad. Ahora se estima
que se venderán entre 37 000 y 40 000 vehÃculos, dijo Gil Malo,
presidente de la Asociación Ecuatoriana Automotriz del Interior (Aeadi).
A fines del año pasado, las proyecciones para el 2001 señalaban que el
mercado podÃa absorber entre 27 000 y 30 000 vehÃculos.
Pero este "boom" cogió por sorpresa a las empresas nacionales, que
fallaron en sus proyecciones de ventas y no previeron que el mercado se
reactive tan rápido. Las plantas pueden trabajar a mayor capacidad pero
no lo hacen por falta de insumos. "Para ensamblar un vehÃculo se necesita
hacer las importaciones de CKD con una anticipación de seis meses", dijo
Ruiz, por lo que se prevé que en los meses siguientes haya más compras
para responder a la demanda.
Malo señala que la dolarización y la construcción del nuevo oleoducto
ofrecen tranquilidad a las personas para endeudarse a mediano plazo, por
lo cual que se prevé más demanda de autos.
Hace unos tres meses, la compañÃa Techint, constructora del OCP, pidió
cotizaciones para comprar 300 vehÃculos, entre livianos y jeeps 4x4. Una
vez que tiene autorización para empezar la obra se prevé que en esta
semana se decida la compra.
"Con esta obra no solo que se comprarán más autos, sino que los
existentes se gastarán más rápido y eso pondrá a trabajar a mecánicos,
almacenes de venta de repuestos, etc", dijo Malo.
Los empresarios esperan que las ventas de este año consigan los niveles
de 1998, cuando superaron las 40 000 unidades.
Las industrias nacionales están en apuros
La libre importación de chasises, buses y busetas pata transporte escolar
y de taxis tiene en vilo a las ensambladoras nacionales.
En febrero y abril pasados se publicaron los registros Oficiales Nos. 264
y 309, donde se contempla esta situación.
Con base en ellos, el Consejo De Comercio Exterior e Inversiones (Comexi)
expidió varias resoluciones para dejar con arancel cero a la
importaciones de estos bienes. La última resolución se emitió el 8 de
mayo pasado y estableció que el beneficio del arancel cero se aplicará a
6 800 unidades. Ahà están desglosados 1 000 unidades de chasises sin
cabina "para interprovincial", otras 1 000 "para urbano", 3 700
automóviles nuevos para taxis, 300 camionetas doble cabina para taxis en
la Amazonia, 200 buses y busetas para transporte escolar, 400 camionetas
de carga liviana y 200 tracto camiones y camionetas con cabina para carga
pesada. La Cámara de la Industria Automotriz Ecuatoriana (Cinae) señaló
que esa resolución, asà como los decretos emitidos por el Ejecutivo
contradicen normas de la Comunidad Andina, por lo que este organismo ya
tiene conocimiento de esto y se espera una sanción para Ecuador, como
sucedió en 1999.
Por su parte, los importadores ven con buenos ojos esas resoluciones, ya
que creen que se abaratará el precio de los vehÃculos y eso puede mejorar
las ventas.
Según los documentos oficiales, los beneficiados serán únicamente "las
organizaciones para el transporte terrestre afiliadas a las asociaciones
o federaciones nacionales y registradas en el respectivo organismo
estatal, siempre que exista un distribuidor autorizado en el Ecuador y se
demuestre que habrá una provisión oportuna y suficiente de repuestos".
Para evitar el paro de transportistas, el Gobierno favoreció a este
sector con la importación de autos y partes con cero arancel. Sin
embargo, el resto de los ciudadanos deben pagar todos los tributos para
adquirir un vehÃculo, sea nacional o importado. (Texto tomado de El Expreso)