La entrega de un documento que explica la desaparición de 580 personas y su destino final en el Gobierno militar de Augusto Pinochet en Chile, no solo marcó el quiebre definitivo entre los dos generales, Manuel Contreras, ex cabeza de la DINA, y Augusto Pinochet, cuya relación fue sólida en los setenta, pero comenzó a fracturarse a comienzos de los noventa, cuando la ex policÃa consideró que el ex jefe castrense no le retribuyó su lealtad con la misma moneda, sino además despertó el enojo, malestar y esperanzas en muchos representantes del sector social y polÃtico de Chile y sobre todo entre los familiares de los desaparecidos.
Para algunos, el informe dado por Manuel "Mamo" Contreras está plagado de antecedentes trucados y falsos.
Dos de los periodistas del diario La Nación, Jorge Escalante y Luis Narváez, consideran que la principal conclusión del informe de Contreras es que "todo el mundo está errado y el único ser que tiene la razón es "El Mamo".
Estos periodistas señalan que nada nuevo hay en el informe y que solo ha causado en Chile: "otro profundo dolor y angustia a los familiares de sus vÃctimas, aportando una lista de 580 nombres llena de situaciones trucadas y alteradas, con errores evidentes y escandalosos" .
Para sacar estas conclusiones, los dos periodistas se basan en que la lista repite varios de los nombres que aparecieron en enero de 2001 en el informe de las Fuerzas Armadas sobre el destino final de 180 detenidos desaparecidos, 151 de los cuales fueron lanzados al mar.
Lo único más novedoso, según Escalante y Narváez, es que responsabiliza a Pinochet de dar órdenes directas para ejecutar y secuestrar a quienes estaban en su contra.
Por otra parte, la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos (AFDD) pidió que un juez que investigue el informe, pues han encontrado información errónea. Según la AFDD, un juez deberá dilucidar si los datos son para burlar a la justicia o desviar la atención de los tribunales.
La Corporación de Promoción y Defensa de los Derechos del Pueblo (Codepu) afirmó que el informe de Contreras forma parte de un montaje comunicacional. Agrega que su fin es "el ocultamiento del verdadero destino final de los desaparecidos y de los culpables".
También señala que hay 370 agentes represivos que deben enfrentar juicios por estos crÃmenes de "lesa humanidad". Esta asociación se suma a la petición de la AFDD para que la justicia investigue las contradicciones. (Agencias-MPI)
Contreras ha escrito por años "su verdad"
En el Penal el ex director de la DINA terminó su trabajo
La semana pasada, Manuel Contreras concluyó un trabajo de años donde da su propia versión, a través de investigaciones, entrevistas y consultas, de los hechos ocurridos con los desaparecidos chilenos en la dictadura de Pinochet .
Dicen cercanos al ex jefe policial que el trabajo no fue corto y tampoco fácil. Especialmente desde el 28 de enero pasado, cuando el controvertido operativo que terminó con su arresto en su propia casa lo alcanzó antes de terminar la tarea.
Encerrado en el penal, Contreras cumplió su primer mes de reclusión sin poder avanzar, hasta que finalmente su familia consiguió que GendarmerÃa aceptara el ingreso de su computadora.
En el entorno de Contreras reconocen que él tomó esta responsabilidad como su aporte a la verdad definitiva, luego de años de enfrentar lo que considera testimonios falsos y declaraciones sesgadas que no solo lo han afectado a él, sino también a decenas de oficiales y suboficiales activos y en retiro enredados en procesos judiciales por violaciones a los derechos humanos.
Revelar la verdad le exigió atacar directamente al general (r) Augusto Pinochet, a quien le imputó su directa responsabilidad en los asesinatos del ex canciller Orlando Letelier y del ex comandante en jefe del Ejército Carlos Prats y su esposa, SofÃa Cuthbert. (Agencias-MPI)
Una larga relación de lealtad y traiciones
Su amistad con Pinochet no admitÃa intermediarios
Tras el golpe de Estado de septiembre de 1973, Pinochet instauró un férreo y cruento régimen en Chile que se cobró la vida de miles de chilenos y provocó la huida de 1 millón de personas, que buscaron refugio en Europa, principalmente. El dictador, que sucumbió a su propia vanidad tras proponer un plebiscito que perdió, sobrevive a los intentos de la justicia de que pague por lo que hizo.
El poder e influencia de Contreras durante la primera parte del régimen militar fue enorme. Su relación con Pinochet no admitÃa intermediarios y existÃa una enorme confianza entre ambos. Sin embargo, el distanciamiento comenzó a fraguarse cuando el régimen militar aún no terminaba, pero se cristalizó con fuerza a comienzos de los noventa. Precisamente, en un recinto militar, durante la celebración del aniversario de la Academia de Guerra, Contreras se acercó a Pinochet, pues el entonces ministro del caso "Letelier", Adolfo Bañados, habÃa decretado su procesamiento y Contreras querÃa la ayuda de su superior, al no conseguirlo no volvieron a cruzar palabras. En adelante, los contactos se realizarÃan a través de terceros.
Pero la acumulación de desengaños comenzarÃa a cobrar su precio y después de 30 años Contreras delata a Pinochet como responsable de las represiones en su régimen. (Agencias- MPI)
La gloria y la caÃda de un general influyente
A partir de la década de los noventas comienzan las condenas
Una vida que comenzó con glorias y termina con decenas de acusaciones de asesinato, secuestro y desapariciones, asà se podrÃa resumir la vida del general retirado, Manuel Contreras.
Contreras ingresa a la Escuela Militar en 1944, donde se destaca por sus calificaciones.
Ocho años después es instructor de la Escuela Militar y conoce a Orlando Letelier, quien fue uno de sus cadetes.
En 1960 empieza a establecer una buena relación con Augusto Pinochet y para 1973 comienza la organización de la Dirección de Inteligencia Nacional, (DINA) donde posteriormente se instala.
Presionado por los EEUU, el 12 de agosto de 1977, Contreras deja el mando del organismo, y en su reemplazo se crea la Central Nacional de Inteligencia, CNI. Ese año es ascendido a general, pero en 1978 es llamado a retiro.
En septiembre de 1978, los EEUU pide su extradición por el asesinato de Letelier y permanece detenido 14 meses y en 1991 es procesado y condenado a siete años de cárcel por ser el autor intelectual de ese homicidio.
A partir de 1995 comienza una serie de procesos legales en su contra por secuestros y asesinatos. En 2003 lo juzgan por la desaparición de chilenos en tres paÃses de América, en la llamada Operación Cóndor y es condenado a 15 años de presidio por el secuestro del mirista Miguel Ãngel Sandoval.
El 4 de junio de 2004 sale en libertad provisional después de más de tres años de arresto domiciliario, pero en 2005 ingresa al Penal Cordillera pues es condenado a cumplir la pena de 12 años por la desaparición de Sandoval y no de 15 como se habÃa estipulado en 2003. (Agencias-MPI)
Contreras pide a la justicia que investiguen
El documento revela información inédita, según los tribunales
La lista de desaparecidos chilenos con información sobre detalles de su detención y destino fue entregada a la Corte Suprema de Justicia por el abogado de Contreras, Juan Carlos Manns, el viernes pasado.
Según Manns, con su decisión Contreras busca exculpar a oficiales y suboficiales subalternos, procesados o condenados por violaciones a los derechos humanos.
En el escrito, Contreras sostiene que el general Pinochet y la Junta Militar fueron quienes impartieron todas las órdenes para reprimir "a los grupos de izquierda que podrÃan generar una oposición al Gobierno" en los primeros años del régimen militar. Manns señala que "la responsabilidad jerárquica no viene de un teniente coronel sino de un superior" .
En el documento, de 11 páginas, también se hace referencia al "ominoso silencio" de Pinochet, a quien se le echa en cara el no haber tenido "el coraje necesario para asumir la responsabilidad que le corresponde".
Fuentes judiciales indicaron que la inédita información proporcionada por Contreras detalla el nombre del detenido desaparecido, el organismo por el cual fue arrestado, la fecha, el destino inicial y el destino final que tuvo. El listado comienza con el caso de Alberto Leiva Vargas, quien, según Contreras, fue detenido en Paine por una patrulla del Ejército el 14 de septiembre de 1973 y estuvo en el campamento Chena de la Escuela de InfanterÃa. Según el militar, fue lanzado al mar frente a la costa de Pichilemu.
Contreras pide a la justicia que designe a un juez especial para investigar a las desapariciones. (Agencias- MPI)
El Ejército chileno desconocÃa el documento
La institución castrense evita hablar sobre la veracidad del informe
La entrega del nuevo documento del general (r) Manuel Contreras fue recibida con sorpresa dentro del Ejército chileno, que desconocÃa la elaboración del informe de parte del ex director de la DINA.
De hecho, el comandante en jefe, Juan Emilio Cheyre, supo del informe a través de los medios de prensa mientras realizaba una visita a las unidades del Ejército de Temuco.
El documento fue rápidamente leÃdo por el alto oficial, según trascendió, con el fin de determinar si efectivamente Contreras habÃa entregado nuevos antecedentes o estaba repitiendo los anteriores "La Verdad Histórica II" "¿Desaparecidos? de septiembre de 2001".
La institución castrense evitó pronunciarse sobre su veracidad por considerar que dicha tarea les corresponde a los tribunales. Al margen de ello, dentro del Ejército el documento fue bien valorado, ya que está en plena concordancia con los múltiples llamados realizados por el comandante en jefe para que los oficiales y suboficiales en retiro colaboren con los tribunales de justicia.
Cheyre exhortó a ese personal a contribuir con la verdad para establecer el paradero o destino y la data de muerte de personas desaparecidas y acreditar qué pasó con ellos.
Además Cheyre señaló que eso liberarÃa la conciencia y pagarÃan los culpables. (Agencias)
Una raya más ...
Manuel Contreras, procesado en cientos de casos de violaciones a los DDHH, vinculado a la Operación Cóndor, la Caravana de la Muerte, el asesinato del general Carlos Prats y su esposa en 1974 y en la detención y desaparición de la cúpula del Partido Comunista Chileno (1975), sólo por nombrar las operaciones de exterminio más conocidas por su brutalidad y violencia. Más de 3 000 personas están desaparecidas por la violencia polÃtica vivida en Chile entre 1973 y 1990. (Agencias- MPI)