La gente del éxito
El escritor español Antonio Gala expresaba con lucidez: â¿Quién decide lo que es en realidad el éxito?. ¿Quizá una sociedad que con muchas dudas podrÃamos decir que se halla en sus cabales? Conseguir un buen puesto de trabajo, gozar de una alta reputación, ganar dinero o ser famoso ¿es trasmutarse en persona de éxito? Yo no lo creo asÃ.
En estos dÃas, con un despliegue que ya lo quisieran otros gestos de valor, se ha presentado un seminario de gente âexitosaâ ¿Se puede decir que los panelistas son personas que puedan ser un verdadero referente para la sociedad, y la gente joven, especialmente? Lo pongo en duda. Un par de escritores de dudosa fama, un personaje polÃtico, que solo la historia lo podrÃa juzgar, unos empresarios a los que habrÃa que preguntarles qué dicen sus subalternos, un entrenador de fútbol, que él mismo reconoce que es casi un padre fracasado. Más que hombres exitosos, se podrÃa decir que son hombres âconocidosâ, porque los medios de comunicación les han puesto sus luminarias y los han hecho visibles. Caso contrario, pasarÃan desapercibidos. Cuánto nos hubiera gustado escuchar a aquellos a quienes VÃctor Hugo tildaba como héroes, los pobres (que sà han triunfado a pesar de las adversidades) a quienes âninguna mirada ve, que ninguna fama paga, que ninguna fanfarria saluda...â.
Edgar Freire Rubio
âAgarren al ladrónâ
La novelesca versión de Andrés Vallejo en su artÃculo del 1º de julio, âAgarren al ladrónâ, merece estar en la antologÃa de los absurdos. La prefabricación âdenunciaâ del presidente de la Corte Suprema de Justicia, sobre supuestas âamenazasâ, ha sido desbaratada por él mismo. Toda su proterva insinuación quedó en el piso cuando dijo que recibió âamenazasâ hechas por un amigo, que llegaron al extremo de sentir en riesgo su vida y la de su familia, para luego decir, a través de Diario HOY, que solo lo despedazarÃa en una rueda de prensa. Ahora Andrés Vallejo inventa en dicho artÃculo la especie de que âserÃa destrozado con una denuncia relacionada con la adquisición de edificio para la Corte Supremaâ.
La deliberada confusión del articulista pretende hacer verosÃmil la imprecisión de la denuncia del doctor Armando Bermeo, al sostener Vallejo que si dizque no hacÃa Bermeo lo que se le pedÃa, se procederÃa del modo fantasioso que el columnista insinúa. Fiel a mi costumbre, la semana anterior a la declaración de prensa que leyó el doctor Bermeo, yo precisé, con documentos oficiales, la compra irregular del edificio Filanbanco, pagado con partidas extrapresupuestarias ilegalmente concedidas, y para colmo, con el producto de la venta de bonos globales, distraÃdos dolosamente también del exclusivo objeto para el que se emitieron dichos bonos.
La Corte Suprema de Justicia está integrada por magistrados que fueron escogidos a través de un concurso público en el que participaron alrededor de 500 profesionales del Derecho. Jamás he manipulado a la Función Judicial. Al contrario, he sido vÃctima, en el pasado, de manipulaciones, esas sà comprobadas, que el paÃs conoció en detalle, cuando fui infamemente involucrado en el juicio de los $150 mil.
La âindignaciónâ de Andrés Vallejo nace porque he descubierto el doloso proceder de su coideario doctor Armando Bermeo Castillo. Yo he cumplido con mi deber, y por eso el Ministerio Fiscal y la Comisión de Fiscalización del Congreso están actuando en el ámbito de acción que especÃficamente los corresponde.
âCada ladrón juzga por su condiciónâ es el viejo refrán que le cae como anillo al dedo al articulista de marras.
No me cansaré de seguir evidenciando a tanto facineroso con récords conocidos, que, con pujos de honorable, pretende estigmatizar mi acción fiscalizadora.
León Febres Cordero Ribadeneyra
Ascensos militares
âVeinte coroneles son examinados con lupaâ, dice el titular de HOY del 24 de junio, al mismo tiempo que se da a conocer que el Consejo de Generales del Ejército tomará en cuenta varios parámetros a la hora de calificar a los aspirantes a generales de Brigada y que comprenden: el registro histórico profesional, las cualidades morales, etc. En los dÃas de la Independencia, ascenso efectuaba el libertador Simón BolÃvar, en el campo de batalla, sin lupa; tomando en cuenta el heroÃsmo, la bravura, la intrepidez y sobre todo el número de horas del soldado en la lÃnea de fuego, donde silban las balas. Y el ascenso lo recibÃa el ungido todavÃa con olor a pólvora en toda su humanidad.
Raúl Córdoba A.
Puestos polÃticos y preparación
Ante la lamentable situación que se ha presentado por la pugna de intereses entre los diversos grupos polÃticos que conforman el Gobierno por ocupar un puesto burocrático, resulta urgente promover una ley que obligue a los mandatarios de turno a que los puestos que ahora son botÃn polÃtico sean asignados a personas preparadas profesionalmente , cumpliendo estrictamente parámetros que se establezcan para la ejecución de esa gestión (perfil de preparación profesional, objetivos y metas que se deben alcanzar, carácter obligatorio de rendición de cuentas...); y de esta manera evitar caer en la improvisación y que individuos sin ninguna preparación hagan de las suyas con los consabidos resultados que todos conocemos.
Dr. Héctor Ayora Castellanos
Opiniones y reclamos a la DefensorÃa del Lector por carta al Diario HOY al buzón electrónico: [email protected] o
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