Simón José Antonio de la SantÃsima Trinidad BolÃvar y Palacios nació en Caracas, Venezuela, el 24 de julio de 1783. Gracias a su ascendencia social y económica, pudo estudiar en Europa, formándose en el pensamiento ilustrado. Basado en aquella filosofÃa, BolÃvar desarrolló su conciencia sobre la identidad de la América española y se comprometió con su libertad.
En la lucha emancipadora BolÃvar se erigió como Libertador. Realizó la âCampaña Admirableâ (mil millas en siete semanas) que liberó Caracas y fundó la incipiente República de Venezuela. Temporalmente emigrado, desde Jamaica lanzó su âCartaâ (06.09.1815) en la que analizó el porvenir de la región. Reiniciadas las campañas, estableció un nuevo gobierno en Angostura, reunió el célebre Congreso que expidió la Constitución (15.02.1819) y creó la Gran Colombia. Después de los llanos de Apure, el paso de los Andes y la victoria de Boyacá, quedó liberada Colombia, cuyo Congreso le nombró presidente. La emancipación prosiguió en Carabobo y luego al sur con las batallas de Bomboná, Pichincha (24.05.1822), que liberó a la Audiencia de Quito, y después JunÃn y Ayacucho, que independizaron al Perú y Bolivia, dando término al dominio español. Durante veinte años como revolucionario, militar y conductor polÃtico, BolÃvar desarrolló un complejo pensamiento. En su primera fase (1810-1819) reflejó la conciencia sobre América y los americanos. En la segunda (1819-1828), desarrolla el pensamiento institucional, preocupándose por la organización de las nuevas repúblicas y proponiendo un régimen constitucional con Ejecutivo fuerte y centralista, pues cuestiona las libertades y la democracia meramente abstractas y débiles. Además, edifica la Gran Colombia y se esfuerza por concretar la unión. Durante la tercera fase (1828-1830), BolÃvar desarrolla la conciencia del desengaño. Llegó a sostener: âLa situación de la América es tan singular y tan horrible, que no es posible que ningún hombre se lisonjee conservar el orden largo tiempo ni en siquiera una ciudad. La posteridad no vio jamás un cuadro tan espantoso como el que ofrece la América, más para lo futuro que para lo presente, porque ¿dónde se ha imaginado nadie que un mundo entero cayera en frenesà y devorase su propia raza como antropófagos? Esto es único en los anales de los crÃmenes y, lo que es peor, irremediable.â
BolÃvar fue consciente de que la libertad no se alcanzarÃa con simples instituciones republicanas y que ella no era posible sin liberar, a la vez, a las clases más oprimidas. Propuso liquidar definitivamente la esclavitud y también la servidumbre indÃgena. Previó el reparto de tierras a los indios y la supresión de todas las cargas y pesos con los cuales se los explotaba. Al mismo tiempo, fue consciente de la identidad criolla. Claramente expresó: âNo somos europeos, no somos indios, sino una especie media entre los aborÃgenes y los españoles. Americanos por nacimiento y europeos por derechos, nos hallamos en el conflicto de disputar a los naturales los tÃtulos de posesión y de mantenernos en el paÃs que nos vio nacer, contra la oposición de los invasores; asà nuestro caso es el más extraordinario y complicadoâ. (Discurso de Angostura).
Resaltó siempre el pensamiento de la unidad. El Libertador sostuvo: âYo deseo... ver formar en América la más grande nación del mundoâ. (Carta de Jamaica). Pero se refirió exclusivamente a la América antes española, pues excluyó a la Norteamérica inglesa, que resultaba extraña. Advirtió incluso los afanes expansionistas estadounidenses, llegando a decir: âLos Estados Unidos parecen destinados por la Providencia para plagar la América de miserias a nombre de la libertadâ. (Carta al general Patrick Campbell, 1829).
Al final de su vida, BolÃvar persistió en la idea de unidad. Retirado en la hacienda de San Pedro Alejandrino, clamó: âAl desaparecer de en medio de vosotros, mi cariño me dice que debo hacer la manifestación de mis últimos deseos. No aspiro a otra gloria que a la consolidación de Colombia. Todos debéis trabajar por el bien inestimable de la Uniónâ. (Ultima proclama. 10.12.1830). AdvertÃa ya las nefastas polÃticas de los nuevos caudillos y de los criollos dominantes en las nuevas repúblicas latinoamericanas. Enfermo y desengañado, BolÃvar murió el 17 de diciembre de 1830.
El Libertador muestra otra faceta en el cine
BolÃvar soy yo, de Jorge Alà Triana, ha sido premiada en varios festivales. En 2002 ganó el Ombú de oro en Mar del Plata, Argentina
La Fiesta de BolÃvar, una semana que celebra los 220 años del nacimiento del Libertador, también tendrá su expresión en los cines de Quito y Guayaquil.
Hoy, en el Puerto, y mañana en la capital, se estrena el filme BolÃvar Soy Yo, del colombiano Jorge Alà Triana, que ha recibido varios premios, entre ellos el Ombú de Oro en el Festival de Mar del Plata, en 2002.
Esta es una fresca y excepcional comedia en la que Santiago Miranda es un actor que interpreta a Simón BolÃvar en la telenovela Los amores del libertador, que hace uso de las leyendas románticas del personaje histórico para construir un tÃpico melodrama televisivo. Pero, Santiago no está de acuerdo con el rumbo que los guionistas le están dando a su personaje, por lo que decide abandonar la filmación cuando tiene que representar su muerte, que nada tiene que ver con lo que sucedió en realidad.
AsÃ, el intérprete, como si apelara al método de actuación stanislavskiano para componer su papel, a través del cual se insiste en la fuerte identificación sicológica con el personaje, él se convence de ser el Libertador.
Pero Santiago no es el único responsable de todo esto, ya que, además de creerse el libertador, la gente lo trata como si realmente fuera la reencarnación de BolÃvar. El verdadero problema comienza cuando el actor, enajenado en su personaje, quiere conseguir aquellos sueños libertarios que el prócer no pudo realizar (como el proyecto de La Gran Colombia), lo que lo lleva a secuestrar al presidente colombiano. (LAM)
La pelÃcula
TÃtulo: BolÃvar soy yo
Dirección: Jorge Alà Triana.
PaÃs: Colombia / México Año: 2001.
Intérpretes: Robinson DÃaz, Amparo Grisales.
Guión: Jorge Alà Triana, Alberto Quiroga, Manuel Arias.
Producción: Gustavo Angel, Andrés Tagliavini.
Duración: 93 minutos
FotografÃa:R. Lalinde.
Hoy actúa la Orquesta Juvenil de las Américas
La presentación es en homenaje al Libertador
La Orquesta Juvenil de las Américas (OJA), integrada por 110 músicos, debuta hoy a las 19:30, en el Teatro Nacional de la CCE, en homenaje al natalicio de Simón BolÃvar.
Los jóvenes músicos provenientes de 20 paÃses americanos compartirán su talento frente al público, con un repertorio que incluye a grandes compositores clásicos y contemporáneos.
El concierto es organizado por la Sociedad Filarmónica de Quito, mientras que la gira de la OJA cuenta con el patrocinio del Deutsche Bank.
La orquesta se presentará bajo la batuta de Christopher Wilkins, y como solista participará la pianista canadiense Benerika Zakrzewski. (JZ)
Leopoldo Zea, profesor honorario de la U. Andina
El acto académico se realizará a partir de las 11:00
Dentro de los festejos en homenaje a BolÃvar, a las 11:00 de hoy la Universidad Andina designará profesor honorario al filósofo Leopoldo Zea.
Nacido en México (1912), Zea ha escrito más de 40 libros y ha colaborado en decenas de obras y ensayos sobre historia, cultura e identidad de América Latina. El eje de su obra es la convicción de una comunidad latinoamericana solidaria y justa, cuyas semejanzas se basen precisamente en sus diferencias. (BG)