El reparto masivo de preservativos en el paÃs, propuesto por el Ministerio de Salud, genera criterios divididos.
Las consideraciones pasan por la oposición de los padres, la necesidad de educar desde el colegio, el compromiso de orientar y de prevenir. Asà como una reflexión frente a la sexualidad y la vida en pareja.
La campaña de prevención del VIH-sida según el ministro, Francisco Andino, se concentrará en educar a los jóvenes.
En el Ecuador se registraron 4 700 casos, de los cuales el 75 por ciento corresponde a Guayas y 18 por ciento a Pichincha.
La ministra de Educación, Rosa MarÃa Torres, sostiene que se definirán lÃneas de trabajo con la Cartera de Salud. Y la adolescentóloga Mónica Esteves propone hacer una encuesta a jóvenes para conocer la aceptación y la demanda.
Los involucrados . Los puntos de vista son polémicos, pero coinciden en la necesidad de educar
Lilly Márquez
Especialista en VIH/Sida
La educación hace la diferencia
Dependiendo de la calidad, el margen de seguridad va del 60 al 95 por ciento. Pero, solo si se usa correctamente puede servir, de lo contrario no se garantiza su efectividad.
En este caso la educación hace la diferencia. El procedimiento de la campaña debe asociar a los dos ministerios (Educación y Salud) con énfasis en prevención, educación y uso adecuado y oportuno.
Esta acción debe implementarse en todos los niveles de la sociedad. Por ejemplo, en la industria hay muchos trabajadores que se están infectando y eso hay que controlarlo.
Si los jóvenes no tienen un entorno favorable para informarse será más difÃcil.
Pablo
Portador de VIH/sida (26 años)
La solución es tener una pareja
El procedimiento es perfecto, pero antes del preservativo está la educación.
Este método hay que saberlo usar para prevenir, sin embargo la mejor solución está en tener una pareja definida para evitar el contagio y la propagación de la enfermedad. Desde hace cuatro años vivo con sida y es una prueba muy difÃcil. Ahora estoy bien porque a más del apoyo de mi familia tengo los medicamentos. Cuando no los tengo los dolores de cabeza y los mareos son terribles y me afectan mucho.
Creo que para nadie serÃa bueno vivir dependiendo de dos medicamentos -Convivir y Estocrin-. Estas pastillas cuestan 62 y 80 dólares al mes.
Federico Sanfeliu
Director Pastoral U. Católica
La medida es una improvisación
Creo que es un decreto impuesto sin preparar el ambiente ni a la población. Las autoridades han tomado conciencia de una realidad que hay que reconocer (los embarazos adolescentes y el sida), pero esto deberÃa considerarse en un contexto pedagógico para educar sobre sexualidad.
Se trata de una medida improvisada de atacar un mal sin medir las consecuencias. Lo oportuno serÃa hacer un debate nacional sobre cuáles son las áreas de educación sexual que se deberÃan reforzar.
Esta distribución masiva es solo una parte de un tema muy amplio. Estamos mal educando, en lugar de impulsar el amor responsable en pareja.
Xavier Arboleda
FED. Est. U. Católica Guayaquil
La prevención se inicia en el colegio
Desde la perspectiva de la prevención para la salud de los universitarios, la disposición es positiva. De manera paralela es indispensable impulsar una campaña de información desde los colegios. La prevención no debe darse solo en la universidad, debe comenzar en los colegios con charlas de orientación sobre la sexualidad y la paternidad responsable y luego reforzar los conocimientos a nivel superior. Asà se pueden evitar los embarazos y las enfermedades venéreas. La disposición de poner dispensadores en la universidad no causará mayor extrañeza a los alumnos, aunque quizás curiosidad. Por eso hay que prepararlos.
Germán Navarrete
Padre de Familia (50 años)
El uso del condón sà es un problema
No está bien una distribución masiva de preservativos, sea en forma gratuita o con reducción de precios. Los estudiantes van a las universidades a educarse no para otras cosas, como practicar sexo.
En el medio en que vivimos no importa si el hombre tuvo una o más relaciones antes de llegar al matrimonio, pero en el caso de la mujer no es asÃ.
Además, habrá problemas entre las parejas porque, por ejemplo, si el preservativo no funciona y una chica se queda embarazada su novio puede decir que no es hijo de él porque se protegió. También creo que entre los estudiantes no hay problemas de sida. Y si los hay estos son muy pocos.
Christian Ulloa
Padre de Familia (28 años)
La idea es buena pero falta educar
La campaña está bien, pero es incompleta. La idea no es coger y regalar o pagar menos por un condón. Hay que explicar para qué sirven y cómo se usan. Hay que conocer bien. Me gustarÃa que los jóvenes tengan la misma facilidad de enterarse como cuando se trata de acceder a un libro. La oposición tiene que ver con un tema tabú y con prejuicios. En ello se refleja lo que nuestros padres aprendieron y ellos pretenden que esto no cambie.
Debe existir un concepto más amplio sobre la sexualidad que me gustarÃa transmitir a mis hijos cuando crezcan. Y hacerlo sin temores y con el convencimiento de que lo que hago está bien pues es parte de la vida.
Tanya MartÃnez
Estudiante de Colegio (17 años)
Falta apertura en el tema sexual
Cómo pueden entregar preservativos si la mayorÃa de personas no sabe cómo usarlos. Yo estoy de acuerdo en la campaña de distribución masiva siempre que haya una información clara de lo que los jóvenes queremos saber.
Hay cosas que están por demás, siempre nos dicen lo mismo y tenemos inquietudes que se siguen quedando sueltas.
También creo que a las clases de sexualidad en los colegios del paÃs les falta más apertura y transparencia para preguntar. Los profesores tal vez saben mucho, pero los alumnos nos cohibimos porque creemos que la inquietud está muy fuerte o porque tal vez los demás se van a burlar.
Fernanda Montenegro
Estudiante universitaria
La medida busca la prevención
La campaña es oportuna si consideramos que se trata de un factor de prevención. No porque se masifique la venta de preservativos se van a fomentar las relaciones sexuales entre los jóvenes.
Si alguien considera que no lo debe hacer su convicción no cambiará porque tenga un condón al alcance de la mano. Igual ahora aunque muchos sienten vergüenza de comprarlos en las farmacias, la necesidad los obliga y lo hacen.
A esta acción preventiva se la debe acompañar de charlas explicativas que fomenten la conciencia individual de los jóvenes sobre su sexualidad. También considero importante transparentar el tema.