Quito. 13.03.94. Que lo diga un sociólogo o un psicólogo pase.
Incluso un polÃtico radical o "postmoderno" ¿Pero que lo diga
una autoridad policial, un intendente de policÃa? parece
insólito... Un policÃa afirmando que la lucha contra la droga
fomenta a la mafia. Sin embargo, un "presidente de PolicÃa" de
Stuttgart, Alemania, lo viene sosteniendo desde hace algún
tiempo. Se llama Volker Haas y acaba de reiterar sus tesis a
comienzos de este año, en la revista "Der Spiegel". Erika
Hanekamp nos entrega aquà una versión de fragmentos de la
entrevista aparecida en la mencionada publicación.
Usted es uno de los primeros presidentes de PolicÃa que abogan
a favor de una legalización del consumo de drogas. ¿Le
parecerÃa bien que los ciudadanos alemanes compren cocaÃna en
las gasolineras, o se provean de marihuana en las máquinas de
venta de la calle?
No estoy hablando a favor de una legalización en el sentido de
una libre compra. Pero tenemos que considerar que la polÃtica
de lucha contra las drogas ha fracasado totalmente. Para
terminar con el consumo de la droga, uno tendrÃa que requisar
fÃsicamente y a diario, a toda la población. Esto no puede
hacer ninguna policÃa. En una sociedad abierta, en una Europa
sin fronteras, en una economÃa y comercio mundiales
primordialmente libres, nosotros podemos sustraer del mercado
un medio kilo o un kilo de droga, de vez en cuando. Esto no
influye mucho en su consumo.
Algunos de sus colegas solicitan, por tanto, una persecución
más severa, más policÃas, investigación encubierta.
ParecerÃa paradójico, pero, cada aumento de intervención
policial logra justamente lo contrario: cuando apresamos a los
vendedores ambulantes de pequeñas cantidades de droga, es
decir, cuando sustraemos la droga del mercado, los precios
suben. Consecuentemente, los drogadictos tienen que robar más,
el lucro del crimen organizado se amplÃa. La represión estatal
actúa de manera contraproducente. Asà estamos realmente
fomentando la mafia.
Entonces ¿lo mejor serÃa no hacer nada?
Tenemos que mirar el comercio de la droga también desde el
lado de la demanda... El adicto posee una determinada
necesidad/demanda y tiene que financiarla. Cada drogadicto
necesita por dÃa hasta 250 marcos (250 mil sucres). En
promedio roba, entonces, un valor aproximado de 100 marcos
(100 mil sucres) por dÃa. En el caso de Stuttgart, con mil 500
drogadictos, esto significa un perjuicio anual de más de 50
millones de marcos (50 mil millones de sucres).
Por tanto necesitamos otra polÃtica, hasta en interés de las
vÃctimas de los crÃmenes que tienen como causa la compra de la
droga. Esta versión particular del crimen destruye la
seguridad y la percepción de seguridad de los ciudadanos, y
fomenta las polÃticas derechistas. Si no solucionamos
problemas que sà tienen solución, el ciudadano se distanciará
más de la polÃtica, del Estado.
Cuando usted expresó sus ideas por primera vez, el ministro
del Interior de aquél entonces, el demócrata cristiano Dietmar
Schlee, le prohibió seguir hablando. A pesar de ello, usted
habla en público nuevamente. ¿Se registran algunos cambios en
el clima, a favor de una nueva polÃtica con respecto a las
drogas?
Algo está pasando. Al mirar los intentos de algunos
municipios, tales como los de Frankfurt y Hamburgo... Veo que,
de hecho, existe una mayorÃa que comparte nuestra opinión...
¿Marihuana para todos, entonces?
La realidad es que cualquiera puede comprar "drogas suaves" si
realmente quiere comprarlas. No es verdad que, quien usa
marihuana, avance forzosamente hacia la cocaÃna. La marihuana,
además, no produce adicción psÃquica. Para defender el interés
de la salud pública no es necesario que el Estado tome medidas
especiales.
¿El presidente de la PolicÃa de Stuttgart reivindica la
legalización de la marihuana, como en su tiempo lo hicieron
los hippies?
Yo veo una sola alternativa: penalización como ahora, o
legalización completa. No creo en una solución a medias como
la de Holanda: venta tolerada en determinados locales. En este
caso quedan en el negocio el crimen organizado y el tráfico
internacional, y la policÃa se abstiene de intervenir. Eso no
me parece sano. O lo uno, o lo otro. Es asà como lo veo, esa
es la realidad. Por otro lado, no soy capaz de apoyar una
legalización. No me brota de los labios.
¿Por qué no?
Porque no me brota de los labios... Todo en mà se resiste al
hecho de aceptar otra droga en nuestra sociedad. Me puede
acusar de contradictorio, y en verdad mi posición es
contradictoria. Son los polÃticos los que deben decidir esta
cuestión... Deben decidirla...
¿Y si algún dÃa se decidiera la venta libre de marihuana en
una tabaquerÃa, usted se irÃa y se fumarÃa por la noche un
"joint"? ¿O se quedarÃa con un vino Trollinger?
Prefiero quedarme con el vino, pero en honor a la verdad no
con un Trollinger, sino con un Bordeaux...
Cuál ha sido el énfasis de la estrategia andina antidrogas de
los Estados Unidos?
La detención del tráfico de cocaÃna fundamentalmente, y ahora
de los derivados de amapola, (opiáceos: heroÃna, morfina). Los
objetivos han privilegiado el combate a la producción en los
paÃses fuente. Aquellos en cuyo territorio existen cultivos y
refinerÃas. Las finalidades de esta estrategia se construyen
alrededor de la erradicación, el control y la interdicción.
Esto ha implicado una visión de "seguridad" de un problema que
más bien podrÃa pertenecer al ámbito de la salud pública. El
tema del narcotráfico ha sido el más importante en las
relaciones internacionales entre la comunidad andina y los
Estados Unidos, ha involucrado a la policÃa y a los ejércitos
de estos paÃses, asà como a las fuerzas de seguridad de los
Estados Unidos que tienen presencia fÃsica en el área y
cumplen tareas de asesoramiento, adiestramiento y
eventualmente de control directo como en el caso de Bolivia.
Qué resultados ha producido el enfoque de seguridad?
En lo que tiene que ver con la producción de drogas ilegales,
si bien se han gastado desde 1982 enormes sumas de dinero, que
se ha incrementado año a año, no hay evidencias serias que
confirmen una disminución dramática del comercio de
estupefacientes. Han aumentado las capturas, los presos por
delitos relacionados al tráfico, los laboratorios destruÃdos,
pero la industria no ha sido desmantelada ni mucho menos. En
el plano social, el combate al narcotráfico deja un saldo de
conflictos serios irresueltos en todos los paÃses andinos, en
muchos de los cuales, además, se ha incrementado la violencia,
se ha debilitado el Estado y se han quebrantado las
instalaciones básicas, como la administración de justicia y
las fuerzas del orden.
Cuál es la aproximación del gobierno de Clinton al problema
del narcotráfico?
Existen indicios claros de que la nueva administración
estadounidense se encuentra inconforme con los resultados
arrojados por la "guerra de las drogas". El gobierno de
Clinton, en lo que tiene que ver con seguridad, ha puesto al
tema en la periferie de sus urgencias internacionales,
mientras que las administraciones republicanas lo volvieron
central. De otro lado se nota una preocupación mayor por
destinar recursos a controlar la demanda, mediante campañas de
prevención y educación, y se otorga menos importancia a la
efectividad de la represión. Sin embargo, en 1994 los
presupuestos para interdicción y control en el área andina
siguieron aumentando. El problema de las drogas perdió
intensidad polÃtica, pero las polÃticas para el control en los
paÃses fuente mantienen continuidad.
Qué implicaciones tiene esto para los paÃses andinos?
Una disminución plausible de importancia en la agenda global
de los Estados Unidos, a pesar de lo cual el tema sigue siendo
la mayor preocupación de este paÃs hacia las naciones andinas.
Esta pérdida de relevancia polÃtica podrÃa abrir, sin embargo,
la posibilidad de que los paÃses atravesados por el
narcotráfico puedan establecer con más claridad posiciones
conjuntas y diferentes a las de Estados Unidos (muy difÃciles
de construir en los años republicanos), que permitan ampliar
su capacidad de negociación y establecer una visión propia del
problema.amapola el controla la estrategia andina antidrogas
industria serios la en la agenda el tema naciones polÃtica de
EEUU. (3C)
en
Explored
Ciudad N/D
Publicado el 13/Marzo/1994 | 00:00