Quito. 17 sep 2001. El despacho de la AlcaldÃa de Lago Agrio se convirtió en el hogar temporal de Máximo Abad. Desde hace 10 dÃas, durante las 24 horas, el Alcalde, a quien una mayorÃa de concejales destituyó, permanece en el lugar junto a otras siete personas.
Desde su cautiverio, Abad (milita en el MPD) presentó, el martes anterior, la apelación a la resolución ante el Consejo Provincial de SucumbÃos. Su argumento es que "hay evidentes violaciones en el proceso de resolución". Estas se dieron, explicó, desde el inicio de su tratamiento cuando se tramitó el pedido, pese a no constar en el orden del dÃa y como asuntos varios.
Tampoco, agregó, tuvo opción de defenderse de la acusación de desacato. La mayorÃa afirmó que el Alcalde no respeto la decisión del Concejo de autorizar la construcción de la estación Amazonas del Oleoducto de Crudos Pesados (OCP). "Lo que he dicho es que no comparto esa decisión pero la respeto", señaló.
Abad anticipó que por el cierre forzado del Municipio, desde hoy comenzarán a restringirse los servicios básicos: recolección de basura, tratamiento de la basura, dotación de agua.
De otra parte, el director del MPD y del Departamento de Cultura del Municipio, Luis Mayanqueles, fue detenido por la PolicÃa que vigila el Cabildo, el viernes, cuando trató de ingresar.
La Entrevista
Un Alcalde que busca el control total. El burgomaestre plantea que los temas de seguridad, control de la delincuencia, tránsito y los permisos de funcionamiento deben descentralizarse, pero siempre que se concentren en el Municipio.
"Debemos dejar prejuicios odiosos"
Paco Moncayo está convencido que dirigir al Municipio "como un cuartel" es un mérito y una forma moderna de administración. Contradictoriamente, habla de una democracia participativa en la integración de la gente a las decisiones de la AlcaldÃa. Vista asÃ, su labor puede parecer un juego de espejos: un alcalde que busca el control del comportamiento ciudadano a punta de regulaciones, mientras cree firmemente en que los habitantes de la ciudad pueden adherirse a sus propuestas, porque "la gente no necesita mano dura cuando las razones son duras".
El Alcalde tuvo un diálogo con este Diario sobre varios de estos temas.
¿Usted, cree que puede haber milagros con la Ley Zanahoria?
Yo intento demostrar que no se necesita mano dura para lograr las cosas. Yo creo que la gente no necesita de mano dura cuando las razones son duras. Ya tengo datos de este mes de cómo se han reducido los niveles de alcoholismo y accidentes.
¿Usted tiene datos que lo demuestren?
No los tengo aquà pero efectivamente han disminuido los accidentes. Esta no es una medida dramática. No hay que generalizar que todos los chicos estén en las discotecas. Cómo pensar que las fiestas empiecen a las 11 de la noche para acabar a las tres de la mañana.
Pero, eso pasa. No se puede iniciar las fiestas a las tres de la tarde.
Hemos ido modificado hábitos. No hay porqué pensar que son mejores que los del pasado. Yo me acuerdo de que a mi hija la retiraba de las fiestas a la medianoche.
La ciudad ha ido cambiando Pero para mal.
No se puede adaptar los hábitos de una ciudad a un decreto.
Eso ya lo hemos analizado. Cuando usted, tiene un hijo que a las cuatro de la mañana no llega y tiene el coche, es un sufrimiento enorme. Nuestra juventud no es diferente a la de Bogotá y ahà la medida ha dado buen resultado. Allá la fiesta empieza a las 9 de la noche y no a las 11. Miren cómo han cambiado las cosas. Ahora se vende licor en las tiendas de abastos, cosa que no sucede en ninguna otra parte. En las salas de billar se toma de dÃa. Se toma licor en las calles, en los parterres.
Pero, ahora la gente bebe licor en la calle. Además, hay un cÃrculo corrupto porque se cierran los bares y en diez minutos, luego que se van los policÃas, se vuelven a abrir algunos lugares.
Nosotros sabemos que la corrupción puede afectar a estos sistemas de control. Por eso mismo, nosotros tenemos equipos insobornables de 16 personas. Lo máximo que podrÃamos flexibilizar, discutiendo con la Cámara de Turismo, con los involucrados, es una hora del horario. No voy a cambiar el control del alcohol para los menores. Tenemos que hacernos respetar.
¿Hay coordinación entre el Municipio y las autoridades policiales para hacer que los objetivos se cumplan?
Las ciudades deben ser gobernadas desde las autoridades municipales. No es posible que al Alcalde se le responsabilice de la seguridad cuando no tiene los medios para mantenerla. Creo que la PolicÃa debe desconcentrar. Una policÃa desconcentrada que le rinda cuentas al Alcalde.
Pero ahora usted, quiere todo el mando.
Naturalmente, cuando la gente reclama seguridad ni se acuerda de la PolicÃa o del Ministro de Gobierno, reclaman al Alcalde.
¿Hay un camino concreto?
SÃ, que la PolicÃa trabaje más estrechamente con los alcaldes. Hemos pasado una etapa en la vida militar y conozco perfectamente el sistema. Vamos a hacer la conscripción bomberil, con el suficiente número de personas, con gente joven y bien preparada. Estoy haciendo preparar una propuesta de reforma a la Ley de Servicio Militar para que los jóvenes se movilicen en estas causas ciudadanas.
¿Qué se está haciendo para controlar el tema de las zonas rojas en Quito?
Es difÃcil querer adaptar la realidad a la ley. SerÃamos hipócritas si dijéramos que no deben existir estos lugares en la ciudad. La solución real es definir áreas donde históricamente se han desarrollado estas actividades. Para que se cumplan en términos de seguridad, higiene, control, sin explotación y abusos, eso está analizándose porque la otra solución no dio resultado.
El problema también está en que los permisos los emite la Intendencia, el Ministerio de Turismo; pero al Municipio lo único que le queda por decir es que el local está en un área residencial.
Por eso estamos avanzando mucho en esta descentralización hacia la AlcaldÃa para que haya una sola autoridad que diga esta zona es residencial.
Vida para Quito es una posibilidad única para que la ciudadanÃa se involucre. ¿Por qué no se la ha publicitado? Ni los funcionarios municipales saben sobre este proyecto ambiental?
El sistema que nosotros optamos fue una corporación. Hubo un problema que nos descuadró el proceso. El Ministerio nos dijo que necesitamos cinco instituciones, personas jurÃdicas o naturales, para conformar la corporación y ahà se demoró. Lo que tenÃa que pasar es que hubiera la corporación junto con el inicio de la campaña, para que haya un organismo responsable, como fue en Guayaquil con Malecón 2000. Las cosas buenas hay que aprenderlas. La corporación tendrá que nacer la próxima semana. Francamente el énfasis ahora va hacia los grandes contribuyentes.
Hay un desfase en la publicidad con los diferentes sectores porque los industriales pedÃan que primero se descontamine el rÃo Machángara.
El sistema de drenaje de Quito está totalmente contaminado. Los rÃos Manchángara, Monjas, San Pedro e incluso el Guayllabamba están sucios.
Estas aguas contaminadas riegan huertos y sembradÃos. La prioridad es recuperar el Machángara. El sistema radica en construir interceptores porque el sistema es mixto: agua dulce de las lluvias y aguas negras del drenaje. Estas van a los rÃos que son los receptores finales. Un sistema, como debiéramos tenerlo, tiene interceptores, estos hacen que las aguas negras vayan a piscinas de tratamiento para que luego que son tratadas regresen a los receptores finales. Pero su costo es alto. Se habla de 150 a 300 millones de dólares. Esto incluso supera el presupuesto municipal.
Los problemas de Quito son la inseguridad y el medio ambiente.
Hay conflictos en el Municipio ¿Lo dirige usted como si fuera un cuartel?
Administrar como un cuartel es administrar modernamente, porque los cuarteles se administran como empresas. Conociendo al Ejército por dentro, ese viejo cliché del militar que levanta la mano y las cosas se hacen con un carajo ya no existe.
Debemos dejar a un lado los prejuicios odiosos del civil y el militar, todos somos ecuatorianos. Yo he estado en altos cargos de administración pública. En Cuenca manejaba tres provincias, vaya y pregunte en cualquiera de los directorios en los que yo he participado. Yo soy una persona que jamás uso palabras soeces. La gente que trabaja conmigo sabe que puedo morirme de iras pero no sale una palabra soez
Claro que me muero de iras cuando las cosas no salen bien. Entonces administrar es administrar. Ahora hay una tendencia en los administradores en los sistemas de enseñanza de conducir hacia el lado militar la administración. Se debe administrar con fe. Hoy que estoy rindiendo cuentas les estoy demostrando que todo lo que está en el Plan Siglo XXI, lo estoy llevando a la práctica. Creo que hemos hecho cosas muy lindas, creo que hemos dejado de hacer muchas cosas, el primer año de cualquier administración es difÃcil. Comienza con juntar a la gente maravillosa que me rodea. La conformación de un equipo es un proceso.
¿La honestidad es su impronta?
Yo hice bandera en mi campaña electoral de la lucha contra la corrupción. Yo le tengo mucha fe a esta ciudad.
¿La ciudad todavÃa le tiene confianza a Paco Moncayo?
No soy ningún tonto para no ver las encuestas. Se que mi sistema de información ha sido débil, porque desde el inicio yo dije que no se gaste la plata en la imagen de Paco Moncayo. Di metas. Primero vender la ciudad porque esta ciudad ha sido maltratada y en las afueras de la ciudad se cree que Quito es la cuna de todos los males.
La segunda es educar en ciudadanÃa, generar autoestima. Eso es "Quito mi corazón". Si no nos identificamos con la ciudad es malo. Recibimos con afecto a la gente de todas partes, pero también necesitamos que la gente se comprometa con la ciudad.
¿Cree usted entonces que las personas son injustas con usted?
Todos los dÃas dicen que no hago nada, que soy un ocioso, que mando como en el cuartel. Eso va calando en la gente, pero en mi conciencia está que voy a hacer la mejor alcaldÃa para Quito. Quizás el juzgamiento más sereno y tranquilo no va a ser ahora ni mañana, pero las cosas irán decantándose. Y no importa si no es asÃ. Usted cuando vive para servir no tiene que esperar halagos, porque vivirÃa frustrado toda la vida. (Texto tomado de El Comercio)
Desde su cautiverio, Abad (milita en el MPD) presentó, el martes anterior, la apelación a la resolución ante el Consejo Provincial de SucumbÃos. Su argumento es que "hay evidentes violaciones en el proceso de resolución". Estas se dieron, explicó, desde el inicio de su tratamiento cuando se tramitó el pedido, pese a no constar en el orden del dÃa y como asuntos varios.
Tampoco, agregó, tuvo opción de defenderse de la acusación de desacato. La mayorÃa afirmó que el Alcalde no respeto la decisión del Concejo de autorizar la construcción de la estación Amazonas del Oleoducto de Crudos Pesados (OCP). "Lo que he dicho es que no comparto esa decisión pero la respeto", señaló.
Abad anticipó que por el cierre forzado del Municipio, desde hoy comenzarán a restringirse los servicios básicos: recolección de basura, tratamiento de la basura, dotación de agua.
De otra parte, el director del MPD y del Departamento de Cultura del Municipio, Luis Mayanqueles, fue detenido por la PolicÃa que vigila el Cabildo, el viernes, cuando trató de ingresar.
La Entrevista
Un Alcalde que busca el control total. El burgomaestre plantea que los temas de seguridad, control de la delincuencia, tránsito y los permisos de funcionamiento deben descentralizarse, pero siempre que se concentren en el Municipio.
"Debemos dejar prejuicios odiosos"
Paco Moncayo está convencido que dirigir al Municipio "como un cuartel" es un mérito y una forma moderna de administración. Contradictoriamente, habla de una democracia participativa en la integración de la gente a las decisiones de la AlcaldÃa. Vista asÃ, su labor puede parecer un juego de espejos: un alcalde que busca el control del comportamiento ciudadano a punta de regulaciones, mientras cree firmemente en que los habitantes de la ciudad pueden adherirse a sus propuestas, porque "la gente no necesita mano dura cuando las razones son duras".
El Alcalde tuvo un diálogo con este Diario sobre varios de estos temas.
¿Usted, cree que puede haber milagros con la Ley Zanahoria?
Yo intento demostrar que no se necesita mano dura para lograr las cosas. Yo creo que la gente no necesita de mano dura cuando las razones son duras. Ya tengo datos de este mes de cómo se han reducido los niveles de alcoholismo y accidentes.
¿Usted tiene datos que lo demuestren?
No los tengo aquà pero efectivamente han disminuido los accidentes. Esta no es una medida dramática. No hay que generalizar que todos los chicos estén en las discotecas. Cómo pensar que las fiestas empiecen a las 11 de la noche para acabar a las tres de la mañana.
Pero, eso pasa. No se puede iniciar las fiestas a las tres de la tarde.
Hemos ido modificado hábitos. No hay porqué pensar que son mejores que los del pasado. Yo me acuerdo de que a mi hija la retiraba de las fiestas a la medianoche.
La ciudad ha ido cambiando Pero para mal.
No se puede adaptar los hábitos de una ciudad a un decreto.
Eso ya lo hemos analizado. Cuando usted, tiene un hijo que a las cuatro de la mañana no llega y tiene el coche, es un sufrimiento enorme. Nuestra juventud no es diferente a la de Bogotá y ahà la medida ha dado buen resultado. Allá la fiesta empieza a las 9 de la noche y no a las 11. Miren cómo han cambiado las cosas. Ahora se vende licor en las tiendas de abastos, cosa que no sucede en ninguna otra parte. En las salas de billar se toma de dÃa. Se toma licor en las calles, en los parterres.
Pero, ahora la gente bebe licor en la calle. Además, hay un cÃrculo corrupto porque se cierran los bares y en diez minutos, luego que se van los policÃas, se vuelven a abrir algunos lugares.
Nosotros sabemos que la corrupción puede afectar a estos sistemas de control. Por eso mismo, nosotros tenemos equipos insobornables de 16 personas. Lo máximo que podrÃamos flexibilizar, discutiendo con la Cámara de Turismo, con los involucrados, es una hora del horario. No voy a cambiar el control del alcohol para los menores. Tenemos que hacernos respetar.
¿Hay coordinación entre el Municipio y las autoridades policiales para hacer que los objetivos se cumplan?
Las ciudades deben ser gobernadas desde las autoridades municipales. No es posible que al Alcalde se le responsabilice de la seguridad cuando no tiene los medios para mantenerla. Creo que la PolicÃa debe desconcentrar. Una policÃa desconcentrada que le rinda cuentas al Alcalde.
Pero ahora usted, quiere todo el mando.
Naturalmente, cuando la gente reclama seguridad ni se acuerda de la PolicÃa o del Ministro de Gobierno, reclaman al Alcalde.
¿Hay un camino concreto?
SÃ, que la PolicÃa trabaje más estrechamente con los alcaldes. Hemos pasado una etapa en la vida militar y conozco perfectamente el sistema. Vamos a hacer la conscripción bomberil, con el suficiente número de personas, con gente joven y bien preparada. Estoy haciendo preparar una propuesta de reforma a la Ley de Servicio Militar para que los jóvenes se movilicen en estas causas ciudadanas.
¿Qué se está haciendo para controlar el tema de las zonas rojas en Quito?
Es difÃcil querer adaptar la realidad a la ley. SerÃamos hipócritas si dijéramos que no deben existir estos lugares en la ciudad. La solución real es definir áreas donde históricamente se han desarrollado estas actividades. Para que se cumplan en términos de seguridad, higiene, control, sin explotación y abusos, eso está analizándose porque la otra solución no dio resultado.
El problema también está en que los permisos los emite la Intendencia, el Ministerio de Turismo; pero al Municipio lo único que le queda por decir es que el local está en un área residencial.
Por eso estamos avanzando mucho en esta descentralización hacia la AlcaldÃa para que haya una sola autoridad que diga esta zona es residencial.
Vida para Quito es una posibilidad única para que la ciudadanÃa se involucre. ¿Por qué no se la ha publicitado? Ni los funcionarios municipales saben sobre este proyecto ambiental?
El sistema que nosotros optamos fue una corporación. Hubo un problema que nos descuadró el proceso. El Ministerio nos dijo que necesitamos cinco instituciones, personas jurÃdicas o naturales, para conformar la corporación y ahà se demoró. Lo que tenÃa que pasar es que hubiera la corporación junto con el inicio de la campaña, para que haya un organismo responsable, como fue en Guayaquil con Malecón 2000. Las cosas buenas hay que aprenderlas. La corporación tendrá que nacer la próxima semana. Francamente el énfasis ahora va hacia los grandes contribuyentes.
Hay un desfase en la publicidad con los diferentes sectores porque los industriales pedÃan que primero se descontamine el rÃo Machángara.
El sistema de drenaje de Quito está totalmente contaminado. Los rÃos Manchángara, Monjas, San Pedro e incluso el Guayllabamba están sucios.
Estas aguas contaminadas riegan huertos y sembradÃos. La prioridad es recuperar el Machángara. El sistema radica en construir interceptores porque el sistema es mixto: agua dulce de las lluvias y aguas negras del drenaje. Estas van a los rÃos que son los receptores finales. Un sistema, como debiéramos tenerlo, tiene interceptores, estos hacen que las aguas negras vayan a piscinas de tratamiento para que luego que son tratadas regresen a los receptores finales. Pero su costo es alto. Se habla de 150 a 300 millones de dólares. Esto incluso supera el presupuesto municipal.
Los problemas de Quito son la inseguridad y el medio ambiente.
Hay conflictos en el Municipio ¿Lo dirige usted como si fuera un cuartel?
Administrar como un cuartel es administrar modernamente, porque los cuarteles se administran como empresas. Conociendo al Ejército por dentro, ese viejo cliché del militar que levanta la mano y las cosas se hacen con un carajo ya no existe.
Debemos dejar a un lado los prejuicios odiosos del civil y el militar, todos somos ecuatorianos. Yo he estado en altos cargos de administración pública. En Cuenca manejaba tres provincias, vaya y pregunte en cualquiera de los directorios en los que yo he participado. Yo soy una persona que jamás uso palabras soeces. La gente que trabaja conmigo sabe que puedo morirme de iras pero no sale una palabra soez
Claro que me muero de iras cuando las cosas no salen bien. Entonces administrar es administrar. Ahora hay una tendencia en los administradores en los sistemas de enseñanza de conducir hacia el lado militar la administración. Se debe administrar con fe. Hoy que estoy rindiendo cuentas les estoy demostrando que todo lo que está en el Plan Siglo XXI, lo estoy llevando a la práctica. Creo que hemos hecho cosas muy lindas, creo que hemos dejado de hacer muchas cosas, el primer año de cualquier administración es difÃcil. Comienza con juntar a la gente maravillosa que me rodea. La conformación de un equipo es un proceso.
¿La honestidad es su impronta?
Yo hice bandera en mi campaña electoral de la lucha contra la corrupción. Yo le tengo mucha fe a esta ciudad.
¿La ciudad todavÃa le tiene confianza a Paco Moncayo?
No soy ningún tonto para no ver las encuestas. Se que mi sistema de información ha sido débil, porque desde el inicio yo dije que no se gaste la plata en la imagen de Paco Moncayo. Di metas. Primero vender la ciudad porque esta ciudad ha sido maltratada y en las afueras de la ciudad se cree que Quito es la cuna de todos los males.
La segunda es educar en ciudadanÃa, generar autoestima. Eso es "Quito mi corazón". Si no nos identificamos con la ciudad es malo. Recibimos con afecto a la gente de todas partes, pero también necesitamos que la gente se comprometa con la ciudad.
¿Cree usted entonces que las personas son injustas con usted?
Todos los dÃas dicen que no hago nada, que soy un ocioso, que mando como en el cuartel. Eso va calando en la gente, pero en mi conciencia está que voy a hacer la mejor alcaldÃa para Quito. Quizás el juzgamiento más sereno y tranquilo no va a ser ahora ni mañana, pero las cosas irán decantándose. Y no importa si no es asÃ. Usted cuando vive para servir no tiene que esperar halagos, porque vivirÃa frustrado toda la vida. (Texto tomado de El Comercio)
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