A PROPOSITO DEL DIA DE LA MADRE. Por Tania Laurini
Quito. 02.05.92. La cacé en una pequeña guarderÃa de "La Lucha de
los Pobres". Regalaba chupetes, chocolates, dejó las nuevas
frazadas encima de cada cunita y la cocineta que llenó el vacÃo
de la anterior robada. Carmen se quedó encantada con "Lucho", un
carita sucia con ojos saltones y gorra caÃda a un costado, que
pedÃa una nueva golosina.
"Me da mucha pena dejar esto dice", Le tortura que el perÃodo de
su esposo, el presidente Borja, se acaba. Es una forma también de
ser madre....."
Carmen Calisto es una madre prematura. A los 18 años reemplazó a
su madre muerta, en la formación de sus siete hermanos menores.
Lo recuerda mientras trata de controlar sus lágrimas ante la
grabadora.
- ¿Ese episodio no provocó resistencia contra ser madre?
- No, nunca, siempre me encantaron los niños y cuando me casé (a
los 25 años) a los 10 meses ya tuve mi primera hija, Gabriela,
que ya está casada (23 años). Y en seis años tuve mis cuatro
hijos.
Ser madre es la experiencia más maravillosa que puede tener una
mujer. Para mÃ, mis cuatro hijos son lo más maravillosos que Dios
pudo darme. Les hemos inculcado mucho respeto a los demás, simpre
con la religión católica.
- Es más fácil que los hijos lo narren, pero ¿quién es Carmen
Calisto como madre?
- He tratado de ser una madre -como muchas o como todas las
madres- he dado mucho amor a mis hijos; para mà ellos serán
siempre lo primero, a pesar de la vida agitada que llevamos con
Rodrigo en la polÃtica desde que nos casamos.
- ¿Madre drástica... condescendiente?
- No, a veces les he exigido en muchas cosas pero también he
condescendido. Me parece que soy un término medio. Tal vez dirÃa
un poco condescendiente. (Y sonrÃe).
- ¿Sus mayores aciertos como madre?
- Qué difÃcil decir las virtudes de uno.
- Después van los errores, asà que prepárese.
- (Risas)
- Bueno, tal vez sea esto de que para mà ellos son los primeros,
aunque no creo que eso sea una virtud sino algo innato de toda
madre. No sé.
- Ahora sà los errores.
- Ay. Pueden ser muchos. Talvez a veces uno cree que exige poco
de los hijos, pero ojalá el futuro me de la razón en que he sido
un término medio. A veces una se pone demasiado brava con cosas
insignificantes, pero son reacciones naturales, te hacen perder
la cabeza.
- Bueno, eso como madre de sus hijos directos. Pero siendo su
esposo presidente hay otro rol. Un presidente es como el padre de
su paÃs, es quien dispone, el que dice esto no, esto sÃ. Usted al
ser su esposa, cree cumplir el rol de madre del paÃs?
- Al ser esposa del presidente hay tres roles que desempeñar.
Primero debo ser madre, luego ser la esposa del presidente, y
tercero ser presidenta del INNFA, con esto último soy madre de
muchÃsimos niños ecuatorianos. Este último es el papel que más me
ha gustado. Ha sido una experiencia realmente maravillosa,
agradezco a Dios por darme esta oportunidad, pocas tenemos el
chance. (Ojos de llanto)
- Es la tercera vez en esta conversación en que usted está a
punto de llorar.
- Soy una mujer muy sensible.
- Es algo que la gente no conoce mucho.
- Bueno, solo tratando a una persona se puede saber.
- Sigamos. Ahora, como "madre del paÃs", "madre de tantos niños",
¿qué se siente ser madre de un hijo en crisis, problemático,
mÃsero, que tiene hambre, frÃo?
- Bueno hay partes del trabajo muy lindas y partes muy duras, la
parte en que se puede atender a los niños es una parte hermosa;
pero todos los dÃas van al INNFA madres con sus hijos enfermos y
no tienen ni para un medicamento, es triste, es penoso saber que
hay tanta gente que no tiene dinero para acceder a curaciones de
enfermedades simples.
- ¿Es similar que tener un hijo enfermo?
- Me duele como si fuese un hijo mÃo. Hay casos irreversibles en
los que no se puede hacer nada.
- Después de una actividad de dirigencia nacional, las personas
quedan como envejecidas, agotadas. ¿Pasa esto en usted?
- Todo lo contrario, me siento renovada, esta experiencia no la
tiene todo el mundo. Igual mi marido, no ha envejecido, podrÃa
seguir trabajando. Después de que uno se involucra en esto no
puede quedarse al margen. Seguiré trabajando en fundaciones de
ayuda social.
- Cuénteme la experiencia que más le ha impactado.
- Un dÃa llegaron un padre y una madre con una criatura, que
tendrÃa 4 años, estaba prácticamente como un vegetal no podÃa
hablar, ni pararse, se retorcÃa. Mis secretarias tratan de que no
vea directamente estas cosas, pero justo salà y vi la escena. Fue
horrible, me puse a llorar. Lo envÃe a un doctor. Lo que habÃa
pasado es que el niño se operó de algo sencillo, como del
apéndice, y salió descerebrado del hospital. A los pocos meses
volvió el niño caminando y hablando, hasta ahora me acuerdo. (Me
hace llorar usted haciéndome acordar de estas cosas. He estado
más sensible que lo normal)
- Le cogà en mal dÃa. Bueno, entonces vamos por la madre
ecuatoriana. ¿Qué deberÃa cambiar en la madre ecuatoriana?
- El maltrato del niño en el hogar. Se debe educar a los padres
el amor a los niños, que se den cuenta que son criaturas que
tienen que hacer travesuras. Ahà actúa la "Red de Maltrato del
Niño".
- ¿"Madres malvadas" o problemas sociales?
- No sabrÃa como explicar, tal vez la mucha tensión de la madre
que tiene que atender adentro trabajar afuera, son jefes de
hogar, la presión del tiempo, de no tener el suficiente dinero
para alimentarlos.
- Y la virtud de la madre ecuatoriana?
- Hay madres maravillosas, se ve mucho cariño en las madres por
más pobres que sean, tal vez es esa la cualidad más grande.
- Debe ser un shock tener uno alimento para sus hijos y ver que
tanta gente no lo tiene.
- Es duro, siemrpe he tratado de ayudar de acuerdo a mis
posibilidades yluego a travpes del partido, el núcleo de mujeres,
hacÃamos mucha actividad social, y luego a través del INNFA.
- No creo que sea un sentimiento de culpabilidad, son idstintas
situaciones de lavida que nohan piuesto en mejor educación, mejor
posibilidad de porfesión, recuross económicos pero eso no es
culpabilidad, AL menos en mi caso, hay gente que itene más que
uno y no les importa la vida de los demás.
- Cuál es el agradecimiento que más le llega.
- Lo que más alegrÃa me da es ver la alegrÃa de los niños.
en
Explored
Ciudad N/D
Publicado el 02/Mayo/1992 | 00:00