Quito. 07.03.95. Jorge Hugo Reyes Torres, sindicado por el delito
de narcotráfico, tenencia ilegal de armas, y otras diez
acusaciones más, acusó ayer a la Policía de haber montado lo que
denominó "Operativo Ladrón", que dijo lo se lo preparó desde hace
diez años atrás.
Acusó a la institución de querer perjudicarlo ya que dijo en el
Penal García Moreno, "no me están custodiando por seguridad, ya
que yo no me voy a ir nunca, ya que voy a salir libre muy pronto.
Ellos están estrictamente para perjudicarme, hostigarme y en aso
de que yo salga sobreseído, tratar de asesinarme".
Denunció que durante su detención permaneció más de sesenta días
bajo presión y torturas. "Durmiendo y haciendo mis necesidades
biológicas en un furgón".
Ahora (ayer), justamente cuando se me comunicó que debía
concurrir a este juzgado los policías intentaron ponerme una
capucha y me esposaron las manos. Yo pensé que me iban a matar",
señaló Jorge Hugo Reyes Torres, que presentó como prueba un
inventario de sus joyas, que dijo fueron "robadas por la
Policía".
Reyes Torres se preguntó del "¿por qué tiene tanto temor la
Policía y por qué se me mantiene incomunicado?". Denunció que
permanece aislado en el tercer piso de la Serie "A" del Centro de
Rehabilitación Social N§1 de Quito.
Recordó que en 1988 fue secuestrado por un grupo guerrillero lo
que le obligó en lo posterior a adquirir armas para su custodia
personal y que todas ellas fueron registradas y cuentan con el
respectivo permiso otorgado por el Comando Conjunto de las
Fuerzas Armadas.
Indicó que el resto de armas, escopetas de fabricación nacional,
fueron requisadas a los guardianes privados que había contratado
para que custodien su domicilio.
Denunció que la Policía ha venido preparando desde hace 10 años
acusaciones en su contra las mismas que se concretaron en junio
de 1992 y que permitieron que se cumpla el Operativo Ciclón.
Dijo que el entonces ministro fiscal de Pichincha, Jorge Wilfrido
García, forjó dos juicios en su contra, el uno por intento de
asesinato y el otro por violación y robo.
En una parte de su intervención pidió explicar a los jueces "la
manera de trabajar y la forma en que llegó a tener sus
propiedades". El presidente del Tribunal Penal no lo permitió
hacerlo en forma verbal y le recomendó entregar todo su alegato
en forma escrita para que sea adjuntado al proceso.
Denunció que la Policía ha comenzado a hacer desaparecer algunas
pertenencias de sus propiedades, como ganado, por lo que dijo
este no fue el "Operativo Ciclón, sino el "Operativo Ladrón".
FUE UN LLAMAMIENTO A PLENARIO
En medio de estrictas medidas de seguridad compareció ayer a
declarar Jorge Hugo Reyes Torres, en el Tribunal Segundo de lo
Penal de Pichincha, en uno de los doce juicios que se le sigue a
raíz de su captura en junio de 1992, en el denominado "Operativo
Ciclón".
Reyes Torres compareció al "Llamamiento a Plenario" en el juicio
que se le instauró por tenencia ilegal de armas, acompañado de su
abogado defensor, Abdón Peña, quien durante sus largas
intervenciones defendió "la inocencia" de su defendido y acusó a
la Policía de haber montado "un sainete" para perjudicar a "un
hombre de bien".
El abogado Abdón Peña dijo que su defendido enfrenta doce juicios
por diferentes causas, pero que todos han sido impugnados por
ilegales.
Cuestionó el denominado "Operativo Ciclón" que realizó la Policía
el 19 de junio de 1992 en que según la institución uniformada se
desbarató a la mayor organización narcodelictiva que operaba en
el Ecuador y que tenía nexos en el exterior.
De todos los detenidos en aquella oportunidad han quedado 53
personas sindicadas por distintos delitos y guardan prisión en la
Serie "A" del viejo Penal Garcia Moreno, considerada de máxima
seguridad.
Tanto el abogado defensor como Reyes Torres coincidieron en
señalar que las armas que dijo haber encontrado la Policía en los
inmuebles allanados durante el Operativo Ciclón y de propiedad de
Jorge Hugo Reyes Torres, "no son otra cosa que tres escopetas
dañadas que servían para el trabajo de los guardianes".
Las otras armas, dijo, las más sofisticadas fueron compradas a
raíz de un secuestro que sufrió por parte de "un grupo
guerrillero". No obstante, dijo, todas esas armas cuentan con sus
respectivos permisos otorgados por el Comando Conjunto de las
Fuerzas Armadas.
En la misma audiencia compareció Laura Mireya Santacruz Delgado,
quien es considerada por la Policía como "el cerebro económico de
la organización narcodelictiva que dirigía Jorge Hugo Reyes
Torres".
Con lágrimas en los ojos defendió su inocencia y señaló que su
única vinculación a Jorge Hugo Reyes Torres fue su trabajo como
contadora de la empresa Agrícola Industrial y como tal no tenía
conocimiento de armas.
Mientras tanto, el tercer sindicado, Nelson Francisco Salgado,
quien también presentó a tres testigos, a uno de los cuales la
Policía le requisó una pistola marca Bereta, con el respectivo
permiso para portar armas, señaló que fue detenido por haber
portado una pistola Bereta y cuyo título de propiedad fue
presentado al Tribunal Penal.
CORTOS
- Más de una docena de policías pertenecientes al Grupo de
Operaciones Especiales (GOE), custodio las inmediaciones del
edificio en que funciona el Tribunal Penal Segundo de Pichincha,
en la avenida 10 de Agosto y Carrión.
- Una parte de los uniformados se ubicaron en el exterior del
edificio y el resto estuvo todo el tiempo en la sala en donde se
desarrolló la audiencia de "Llamamiento a Plenario" en el Juicio
que se le sigue a Jorge Hugo Reyes Torres, por tenencia ilegal de
armas.
- Durante la audiencia, que duró más de ocho horas, el sindicado
Jorge Hugo Reyes Torres presentó como sus testigos al conocido
animador de televisión, Cristían Jhonson y su esposa Jael Isabel
Vargas Anda.
- Los esposos Jhonsosn-Vargas, dijeron a su turno conocer al
sindicado Reyes Torres como una persona honorable.
- Cristían Jhonson dijo que conoce a Reyes Torres desde hace 16
años, desde cuanto trabajó como animador de un programa en canal
4 de televisión, Teleamazonas.
- Recordó que en una oportunidad Jorge Reyes llamó a su programa
en forma anónima para ofrecer un significativo donativo que
consistía en sillas de ruedas. "Desde entonces, dijo, entablamos
amistad y he visitado en múltiples oportunidades sus propiedades
entre las que se cuenta la hacienda San Antonio.
- Jael Isabel Vargas Anda, dijo conocer a Jorge Hugo Reyes
Torres, desde hace unos 12 años ya que estudio la secundaria en
el mismo colegio que lo hizo una de las hermanas de Reyes Torres.
- Jorge Hugo Reyes Torres compareció a la audiencia vistiendo un
terno color plomo ratón con rayas rojas y una corbata roja con
puntos negros.
- Familiares y amigos del sindicado concurrieron a la sala de
audiencias. Incluso, una de ellas en primera instancia trató de
impedir el trabajo de los dos únicos medios de comunicación que
llegaron al lugar. Ecuavisa, con Bernardo Abad y el Periódico
HOY.
- En una parte de su intervención, casi al concluir la audiencia,
el presidente del Tribunal, Bayron Maldonado, permitió hablar a
Jorge Hugo Reyes Torres, quien refiriéndose a Bernardo Abad, le
pidió "que esta vez si sea imparcial en sus apreciaciones".
- El presidente de la sala llamó la atención al sindicado
recordándole el respeto que se merece la Prensa y que además, "Yo
también soy periodista profesional".
- Un incesante sonido de teléfono celular se dejó escuchar en la
sala. Los familiares de Reyes Torres concurrieron con "todo"
incluso compraron una jaba de agua de güitig y repartieron en las
distintas mesas de la sala.
- Como parte de la prueba, que dijo tener, presentó una caja
fuerte que fue transportada por cuatro hombres que tenían
dificultad en llevarla en sus brazos a pesar de estar vacia.
- Dijo que eso era para demostrar, que en una caja similar, de
unos 70 centímetros de alto por 50 de ancho, no cabían armas ni
ametralladoras como aseguró la Policía.
- Los otros dos sindicados que acompañaron a Reyes Torres en la
Audiencia fueron, Laura Mireya Santacruz Delgado, sindicada por
la Policía "como el cerebro económico de la organización que
dirigía Jorge Hugo Reyes Torres y que fuera desarticulada en
junio de 1992 en el ya conocido "Operativo Ciclón". También
compareció Nelson Fernando Salgado Guerrero. (6A)
de narcotráfico, tenencia ilegal de armas, y otras diez
acusaciones más, acusó ayer a la Policía de haber montado lo que
denominó "Operativo Ladrón", que dijo lo se lo preparó desde hace
diez años atrás.
Acusó a la institución de querer perjudicarlo ya que dijo en el
Penal García Moreno, "no me están custodiando por seguridad, ya
que yo no me voy a ir nunca, ya que voy a salir libre muy pronto.
Ellos están estrictamente para perjudicarme, hostigarme y en aso
de que yo salga sobreseído, tratar de asesinarme".
Denunció que durante su detención permaneció más de sesenta días
bajo presión y torturas. "Durmiendo y haciendo mis necesidades
biológicas en un furgón".
Ahora (ayer), justamente cuando se me comunicó que debía
concurrir a este juzgado los policías intentaron ponerme una
capucha y me esposaron las manos. Yo pensé que me iban a matar",
señaló Jorge Hugo Reyes Torres, que presentó como prueba un
inventario de sus joyas, que dijo fueron "robadas por la
Policía".
Reyes Torres se preguntó del "¿por qué tiene tanto temor la
Policía y por qué se me mantiene incomunicado?". Denunció que
permanece aislado en el tercer piso de la Serie "A" del Centro de
Rehabilitación Social N§1 de Quito.
Recordó que en 1988 fue secuestrado por un grupo guerrillero lo
que le obligó en lo posterior a adquirir armas para su custodia
personal y que todas ellas fueron registradas y cuentan con el
respectivo permiso otorgado por el Comando Conjunto de las
Fuerzas Armadas.
Indicó que el resto de armas, escopetas de fabricación nacional,
fueron requisadas a los guardianes privados que había contratado
para que custodien su domicilio.
Denunció que la Policía ha venido preparando desde hace 10 años
acusaciones en su contra las mismas que se concretaron en junio
de 1992 y que permitieron que se cumpla el Operativo Ciclón.
Dijo que el entonces ministro fiscal de Pichincha, Jorge Wilfrido
García, forjó dos juicios en su contra, el uno por intento de
asesinato y el otro por violación y robo.
En una parte de su intervención pidió explicar a los jueces "la
manera de trabajar y la forma en que llegó a tener sus
propiedades". El presidente del Tribunal Penal no lo permitió
hacerlo en forma verbal y le recomendó entregar todo su alegato
en forma escrita para que sea adjuntado al proceso.
Denunció que la Policía ha comenzado a hacer desaparecer algunas
pertenencias de sus propiedades, como ganado, por lo que dijo
este no fue el "Operativo Ciclón, sino el "Operativo Ladrón".
FUE UN LLAMAMIENTO A PLENARIO
En medio de estrictas medidas de seguridad compareció ayer a
declarar Jorge Hugo Reyes Torres, en el Tribunal Segundo de lo
Penal de Pichincha, en uno de los doce juicios que se le sigue a
raíz de su captura en junio de 1992, en el denominado "Operativo
Ciclón".
Reyes Torres compareció al "Llamamiento a Plenario" en el juicio
que se le instauró por tenencia ilegal de armas, acompañado de su
abogado defensor, Abdón Peña, quien durante sus largas
intervenciones defendió "la inocencia" de su defendido y acusó a
la Policía de haber montado "un sainete" para perjudicar a "un
hombre de bien".
El abogado Abdón Peña dijo que su defendido enfrenta doce juicios
por diferentes causas, pero que todos han sido impugnados por
ilegales.
Cuestionó el denominado "Operativo Ciclón" que realizó la Policía
el 19 de junio de 1992 en que según la institución uniformada se
desbarató a la mayor organización narcodelictiva que operaba en
el Ecuador y que tenía nexos en el exterior.
De todos los detenidos en aquella oportunidad han quedado 53
personas sindicadas por distintos delitos y guardan prisión en la
Serie "A" del viejo Penal Garcia Moreno, considerada de máxima
seguridad.
Tanto el abogado defensor como Reyes Torres coincidieron en
señalar que las armas que dijo haber encontrado la Policía en los
inmuebles allanados durante el Operativo Ciclón y de propiedad de
Jorge Hugo Reyes Torres, "no son otra cosa que tres escopetas
dañadas que servían para el trabajo de los guardianes".
Las otras armas, dijo, las más sofisticadas fueron compradas a
raíz de un secuestro que sufrió por parte de "un grupo
guerrillero". No obstante, dijo, todas esas armas cuentan con sus
respectivos permisos otorgados por el Comando Conjunto de las
Fuerzas Armadas.
En la misma audiencia compareció Laura Mireya Santacruz Delgado,
quien es considerada por la Policía como "el cerebro económico de
la organización narcodelictiva que dirigía Jorge Hugo Reyes
Torres".
Con lágrimas en los ojos defendió su inocencia y señaló que su
única vinculación a Jorge Hugo Reyes Torres fue su trabajo como
contadora de la empresa Agrícola Industrial y como tal no tenía
conocimiento de armas.
Mientras tanto, el tercer sindicado, Nelson Francisco Salgado,
quien también presentó a tres testigos, a uno de los cuales la
Policía le requisó una pistola marca Bereta, con el respectivo
permiso para portar armas, señaló que fue detenido por haber
portado una pistola Bereta y cuyo título de propiedad fue
presentado al Tribunal Penal.
CORTOS
- Más de una docena de policías pertenecientes al Grupo de
Operaciones Especiales (GOE), custodio las inmediaciones del
edificio en que funciona el Tribunal Penal Segundo de Pichincha,
en la avenida 10 de Agosto y Carrión.
- Una parte de los uniformados se ubicaron en el exterior del
edificio y el resto estuvo todo el tiempo en la sala en donde se
desarrolló la audiencia de "Llamamiento a Plenario" en el Juicio
que se le sigue a Jorge Hugo Reyes Torres, por tenencia ilegal de
armas.
- Durante la audiencia, que duró más de ocho horas, el sindicado
Jorge Hugo Reyes Torres presentó como sus testigos al conocido
animador de televisión, Cristían Jhonson y su esposa Jael Isabel
Vargas Anda.
- Los esposos Jhonsosn-Vargas, dijeron a su turno conocer al
sindicado Reyes Torres como una persona honorable.
- Cristían Jhonson dijo que conoce a Reyes Torres desde hace 16
años, desde cuanto trabajó como animador de un programa en canal
4 de televisión, Teleamazonas.
- Recordó que en una oportunidad Jorge Reyes llamó a su programa
en forma anónima para ofrecer un significativo donativo que
consistía en sillas de ruedas. "Desde entonces, dijo, entablamos
amistad y he visitado en múltiples oportunidades sus propiedades
entre las que se cuenta la hacienda San Antonio.
- Jael Isabel Vargas Anda, dijo conocer a Jorge Hugo Reyes
Torres, desde hace unos 12 años ya que estudio la secundaria en
el mismo colegio que lo hizo una de las hermanas de Reyes Torres.
- Jorge Hugo Reyes Torres compareció a la audiencia vistiendo un
terno color plomo ratón con rayas rojas y una corbata roja con
puntos negros.
- Familiares y amigos del sindicado concurrieron a la sala de
audiencias. Incluso, una de ellas en primera instancia trató de
impedir el trabajo de los dos únicos medios de comunicación que
llegaron al lugar. Ecuavisa, con Bernardo Abad y el Periódico
HOY.
- En una parte de su intervención, casi al concluir la audiencia,
el presidente del Tribunal, Bayron Maldonado, permitió hablar a
Jorge Hugo Reyes Torres, quien refiriéndose a Bernardo Abad, le
pidió "que esta vez si sea imparcial en sus apreciaciones".
- El presidente de la sala llamó la atención al sindicado
recordándole el respeto que se merece la Prensa y que además, "Yo
también soy periodista profesional".
- Un incesante sonido de teléfono celular se dejó escuchar en la
sala. Los familiares de Reyes Torres concurrieron con "todo"
incluso compraron una jaba de agua de güitig y repartieron en las
distintas mesas de la sala.
- Como parte de la prueba, que dijo tener, presentó una caja
fuerte que fue transportada por cuatro hombres que tenían
dificultad en llevarla en sus brazos a pesar de estar vacia.
- Dijo que eso era para demostrar, que en una caja similar, de
unos 70 centímetros de alto por 50 de ancho, no cabían armas ni
ametralladoras como aseguró la Policía.
- Los otros dos sindicados que acompañaron a Reyes Torres en la
Audiencia fueron, Laura Mireya Santacruz Delgado, sindicada por
la Policía "como el cerebro económico de la organización que
dirigía Jorge Hugo Reyes Torres y que fuera desarticulada en
junio de 1992 en el ya conocido "Operativo Ciclón". También
compareció Nelson Fernando Salgado Guerrero. (6A)
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