Las autoridades de Ecuador y Colombia manejan versiones contradictorias respecto de la captura del jefe guerrillero de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), Juvenal Ovidio Ricardo Palmera, alias Simón Trinidad, la noche del viernes pasado, en un sector céntrico de Quito.

El general Jorge Poveda, comandante de la Policía Nacional, dijo antes de la deportación el sábado pasado que la detención se dio durante un operativo normal de control migratorio emprendido por la Policía con motivo del feriado. “Se procedió a la captura de Simón Trinidad por estar indocumentado. Luego se procedió a la revisión de los listados de la Interpol y se encontró que este ciudadano es buscado con 155 órdenes de requerimiento de la Policía colombiana. Por esa razón se procedió a la audiencia con el Intendente de Policía de Pichincha, quien decidió su deportación”, explicó Poveda respecto de la detención.

Mientras tanto, el diario El Tiempo, de Bogotá, publicó ayer versiones diferentes provenientes de un policía y un militar colombianos relacionados al caso. Según el rotativo, el guerrillero fue detenido por agentes de la Policía de Ecuador y ocho militares colombianos que lo seguían hace seis meses. Los agentes encubiertos del Ejército actuaban con autorización del Gobierno ecuatoriano y tenían localizado a Trinidad desde el 29 de diciembre pasado, según fuentes citadas por el diario.

Poveda negó que en el operativo participaran policías o militares del país vecino. “La Policía colombiana no puede intervenir por asuntos de soberanía”, aseguró Poveda e indicó que la Policía de Ecuador respondió a requerimientos de la Interpol, que emitió un listado de ciudadanos colombianos buscados por la justicia. El ministro de Gobierno, Raúl Baca Carbo, descartó ayer la posibilidad de que la captura de Trinidad fuera producto de un operativo conjunto entre la Policía de Ecuador y Colombia. Aseguró que la Policía colombiana no cumplió ningún papel en la detención del guerrillero y agregó que entre las dos instituciones no existen sino “las vinculaciones que siempre funcionan alrededor de temas de seguridad entre dos países”.

Jorge Alberto Uribe, ministro de Defensa de Colombia, aseveró que la detención fue producto de un operativo conjunto entre Ecuador y Colombia, con información entregada por Estados Unidos. Entre tanto, una alta fuente militar de Bogotá dijo ayer a la agencia de noticias AFP que la captura se logró con el “apoyo fundamental” de la Central de Inteligencia de EE.UU. (CIA). Según AFP, el Ejército colombiano presentó ayer a los periodistas varios videos en los que se muestra que Trinidad fue seguido desde su ingreso a Quito, al parecer el pasado 17 de diciembre. Baca sugirió a medios colombianos una posible violación a la soberanía del Ecuador por la grabación de ese video.

EE.UU. TERRORISMO

El gobierno de los Estados Unidos, a través de su representación diplomática en el Ecuador, calificó ayer a la captura del líder guerrillero Juvenal Ovidio Ricardo Palmera, alias Simón Trinidad, como “un golpe contra el terrorismo regional”.

COOPERACIÓN

La directora de Asuntos Públicos de la Embajada de los EE.UU. en el Ecuador, Marty Estell, sostuvo –ayer en la tarde– que el operativo que permitió la deportación de Trinidad es “un ejemplo de cooperación entre la policía de Ecuador y de Colombia, una operación conjunta que resultó perfectamente”.

ÉXITO

Estell dijo que su gobierno felicita al general Jorge Poveda, comandante de la Policía de Ecuador, y a su equipo por “su éxito en esta operación que consideramos es un éxito en la campaña contra el terrorismo regional y un ejemplo de lo que los países pueden hacer para promover la estabilidad regional”.

Uribe consigue un ‘trofeo de lucha’

Bogotá | REUTERS. Con el compromiso de luchar hasta el “desmantelamiento total del terrorismo”, el presidente de Colombia, Álvaro Uribe, invitó el sábado a la guerrilla a entregar las armas, tras la captura el viernes en Ecuador y deportación del jefe de finanzas de las FARC. Uribe, en una breve alocución una vez llegó a territorio colombiano el jefe guerrillero Juvenal Ovidio Ricardo Palmera, alias Simón Trinidad, dijo que con su captura se “demuestra que el terrorismo nunca será campeón”.

El presidente Uribe consiguió su trofeo más importante en la lucha contra la guerrilla izquierdista con la captura de Trinidad, en un golpe que reclamaba la opinión pública y que revitaliza su gobierno, próximo a cumplir 17 meses. Aunque no es el fin del conflicto ni de la guerrilla, la detención de Trinidad, antiguo negociador de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia en los fallidos diálogos de paz con el ex presidente Andrés Pastrana, es un golpe más psicológico que militar.

El líder guerrillero, miembro de una acaudalada familia del norte de Colombia y quien se vinculó a las FARC en 1987, afronta en Colombia unos 59 procesos criminales por rebelión, terrorismo y secuestro que le podrían dar hasta 60 años de cárcel, de acuerdo con la Fiscalía General, donde ayer acudió a declarar el detenido.

La captura complicaría un eventual acuerdo con el que las FARC buscan que el gobierno excarcele a miles de sus combatientes capturados por las Fuerzas Armadas a cambio de la liberación de la ex candidata Ingrid Betancourt, tres estadounidenses, políticos y militares. Las autoridades redoblaron las seguridades en varias ciudades ante el temor de una represalia rebelde.

Frontera norte no está vigilada, según analistas

Al menos en dos criterios coincidieron ayer varios analistas cuando opinaron sobre la captura de uno de los líderes de la guerrilla colombiana, Simón Trinidad, el viernes pasado en Quito. Primero, su detención en territorio ecuatoriano demuestra que el país es un lugar de apoyo logístico para los insurgentes; segundo, desde el punto de vista político, Ecuador gana un voto a su favor que limará las asperezas que provocó en octubre pasado la denuncia del Mandatario colombiano sobre la supuesta presencia de cohetes ecuatorianos en la guerrilla.

Según el ex canciller José Antonio Lucio Paredes, la presencia de Trinidad es una prueba de que la frontera con Colombia no está vigilada. Punto de vista con el que coincide Diego Paredes, también ex canciller. Es evidente, dijo, que los insurgentes tienen entrada libre al país y pueden permanecer en él para abastecerse e incluso recibir atención médica. El coronel Luis Hernández, experto en estrategia militar, dijo que está demostrado que las FARC estiman que Ecuador es un lugar donde pueden escapar fácilmente a los órganos de control de Colombia.

Los dos ex cancilleres sostienen que la captura del líder guerrillero no supone un involucramiento ecuatoriano en la ejecución del Plan Colombia. Se trata, explicó Lucio Paredes, de mantener la seguridad fronteras adentro. Vicente Burneo, miembro de la Comisión de Transparencia que auditó el manejo del armamento de las FF.AA., también descartó que la actuación ecuatoriana suponga un mayor compromiso con el Plan para combatir a la guerrilla.
“Ecuador tiene pleno derecho de efectuar controles internos y colaborar con Colombia y EE.UU. dentro de sus fronteras. Fuera de ellas, en ningún caso”.

Trinidad fue profesor y gerente de un banco

Xavier Sánchez | Editor de Revista Morotes. En febrero del 2000, el entusiasmo por conocer cómo se aplicaría la dolarización en Ecuador fue el principal interés que demostró Simón Trinidad (el ahora detenido líder guerrillero de las FARC) cuando se enteró que un equipo de EL UNIVERSO se hallaba en la cobertura de los diálogos de paz entre esta guerrilla y el gobierno de Colombia, en San Vicente del Caguán, Colombia.

Trinidad se retiró de la mesa de sesiones para preguntar pormenores del sistema monetario que había comenzado tres semanas antes en Ecuador. Al rato, en una entrevista a este Diario, acompañado de Lucero, su pareja en las FARC (una guapa guerrillera con la mitad de su edad, 25 años), detalló que él es un economista que proviene “de una familia con una posición social alta que me vinculé a la lucha revolucionaria (en 1987), opté por la lucha armada e ingresé a las FARC”.

Extrovertido, predispuesto al diálogo, con más cabello y una imagen que recordaba al actor Andrés García, dijo que “su real vocación” fue la de profesor universitario de economía e historia de la economía colombiana. “Añoro –la cátedra– pero en las FARC tengo posibilidades de enseñar en lo político, ideológico y hasta militar”, opinó.

Respecto a su etapa anterior a la guerrilla, en la que se casó, tuvo hijos y fue gerente regional de un banco de Colombia, mencionó que su vida como guerrillero “es dura, difícil pero uno se adapta y la prueba es que nosotros (algunos guerrilleros) que venimos de la ciudad no vemos extraña esta actividad”.

¿Su meta en las FARC? “Ver construida una nueva Colombia donde los niños y todos podamos vivir dignamente. Si esta lucha me permite ver ya construida una revolución, sería mi mayor felicidad”, comentó.
EXPLORED
en Ciudad Quito

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