MONTEVIDEO.- El gobierno de Uruguay decidió este martes paralizar por un dÃa la actividad financiera, mientras espera apoyo del Fondo Monetario Internacional (FMI) para detener la caÃda de las reservas del Banco Central.
El feriado bancario fue dispuesto, según el comunicado oficial, para suspender las operaciones de un banco privado que estaba intervenido por el Central. Fuentes del Banco Central dijeron a medios de prensa que se busca "ganar tiempo", mientras delegados del Gobierno solicitan en Washington al FMI un adelanto entre $600 millones y $700 millones sobre un préstamo de $1 500 millones aprobado en mayo por el organismo multilateral.
La crÃtica situación del sistema financiero de Uruguay se expresa en la rápida pérdida de reservas del Banco Central, que de un techo de $3 100 millones el 31 de diciembre cayeron este martes a $725 millones, $50 millones menos que el lunes. En julio se perdieron $746 millones.
No obstante, el gobierno no mencionó la situación de las reservas al disponer el feriado bancario. La razón de su decisión, según dijo, es suspender las actividades del Banco Montevideo-La Caja Obrera por "incumplimiento de las normativas vigentes".
La intervención del Banco Montevideo-La Caja Obrera, propiedad del Grupo Velox, fue dispuesta el 21 de junio para "procesar y facilitar una dotación de liquidez a la institución", explicó el entonces presidente del Banco Central, César RodrÃguez Batlle.
El Grupo Velox, de los banqueros uruguayos Juan y José Peirano, fue denunciado ante la justicia penal en Argentina y Paraguay por supuesto manejo fraudulento de fondos. La necesidad de dotar de liquidez al banco intervenido motivó una caÃda de las reservas del Banco Central de $815 millones desde el 1º de julio hasta el viernes 26 de julio.
El feriado bancario determinó una rápida subida del dólar en las casas de cambio de Montevideo. La divisa llegó este martes a los 35 pesos para la venta, frente a 27 pesos el lunes.
El Gobierno, obligado por la pérdida de reservas internacionales, acabó el mes pasado con la banda cambiaria que ponÃa lÃmites a la flotación del peso uruguayo frente al dólar.
Los temores de que en el sistema financiero uruguayo se repitiera el escenario argentino de inmovilización forzosa de depósitos bancarios aumentaron en los últimos meses, a pesar de que el Gobierno descartara públicamente una y otra vez ese recurso.
Pero no solo en Uruguay hubo crispación este martes. El mercado financiero de Brasil vivió una jornada crÃtica, mientras el gobierno de Fernando Henrique Cardoso anunciaba el inicio de nuevas negociaciones con el FMI.
El secretario ejecutivo del Ministerio de Hacienda de Brasil, Amaury Bier, y el director de PolÃtica Económica del Banco Central, Ilan Goldfajn, partieron este martes a Washington para negociar con el organismo multilateral una prórroga de un crédito que caduca en diciembre.
Pese a que el Banco Central intentó contenerlo, el dólar llegó a cotizarse este martes en Brasil a 3,30 reales a la venta, el nivel más alto desde la creación del real en 1994.
Mientras, el "riesgo paÃs" de Brasil aumentó 8,6% este martes para ubicarse en los 2 351 puntos básicos. (IPS)