Quito. 25 mar 99. Las empresas que prestan servicios a la
petrolera no pueden trabajar. El Ministro de Gobierno anunció
el desalojo de las instalaciones de la firma estatal.
Los problemas financieros y polÃticos en Petroecuador cobraron
fuerza. Ayer, desde las 08:00 se cerraron las puertas en los
edificios de Petroecuador y Petrocomercial, en la Av. 6 de
Diciembre y Alpallana, al norte de Quito.
La medida de hecho trajo por sorpresa a los mismos empleados
que de pronto se encontraron con la noticia de que los
dirigentes sindicales habÃan cerrado las instalaciones. Unos
apoyaban la medida lanzando gritos de protesta contra la
privatización de la petrolera estatal, mientras otros se
resignaban a cruzarse de brazos, debido a que se habÃa
desactivado la energÃa eléctrica y no podÃan trabajar
normalmente.
En las paredes y puertas de vidrio, a la entrada de los
edificios, se habÃan colocado varios carteles rechazando la
privatización de la empresa y las intenciones de "rifar a
Petroecuador".
Asimismo, en las puertas de entrada se colocaron cadenas con
candados para asegurar que nadie entre ni salga de los
edificios. Varias personas que querÃan hacer diligencias en
Petroecuador tuvieron que regresarse porque era imposible el
paso.
A las 11:30, el coronel Elicio Moscoso, comandante provincial
de PolicÃa de Pichincha No. 1, hizo su arribo. Previamente, un
piquiete de unos 30 policÃas se encontraba en el sitio a la
espera de órdenes superiores. Moscoso pidió primero hablar con
algún dirigente, pero la plana mayor de la dirigencia se habÃa
desplazado al Palacio de Gobierno, para reunirse con los
ministros de Gobierno y EnergÃa, a las 11:00.
Uno de los dirigentes intentó explicar a Moscoso el porqué de
la medida, pero inmediatamente el comandante le cortó,
señalando que seguramente tenÃan la razón, pero su trabajo
allà no era dar la razón a nadie sino cumplir órdenes. La
primera tarea era dialogar con los responsables del cierre del
edificio y si no se llegaba a un acuerdo obedecer las órdenes.
Enseguida, un trabajador le explicó que un dirigente se
encontraba dentro del edificio para conversar. Se trataba de
Fernando Villavicencio, quien mantenÃa contacto permanente con
los otros dirigentes en el Palacio de Gobierno.
Moscoso recibió dos llamadas, una de Carondelet y otra de un
general de la PolicÃa, confirmando que efectivamente habÃa una
reunión y que una vez concluida, se le comunicarÃa las
acciones a tomar.
La reunión en Carondelet, obedecÃa, según los trabajadores,
para demandar del Gobierno que se nombren autoridades en
Petroecuador, además de hacer un diagnóstico de la situación
de la empresa y presentar alternativas de solución. En la
tarde, se dio a conocer que el ministro de EnergÃa, René Ortiz
posesionó a VÃctor Eastman Pérez como subsecretario de
Hidrocarburos y a Fausto Corral Guevara, como subsecretario de
Protección Ambiental.
Hasta el cierre de esta edición (18:20) se conoció que no hubo
acuerdo entre el Gobierno y los trabajadores y el edificio
seguÃa en las mismas condiciones. El ministro de Gobierno,
Vladimiro Alvarez dijo que si la situación no cambiaba hasta
las 19:00, la Fuerza Pública desalojarÃa el inmueble.
En carta al presidente Mahuad, los trabajadores hablan de que
pese a la importancia de la actividad hidrocarburÃfera que
lleva a cabo la estatal, por la falta de asignaciones
económicas, a raÃz de la aprobación de la Ley de Presupuesto
del Sector Público en 1993, se soporta "una asfixia económica
injustificada".
Sostienen que el Gobierno ha dicho que no tiene recursos, pero
se entrega dinero a los bancos.
Plantean un plan emergente para recuperar la producción y
mantener en condiciones estables a la industria, para lo cual
se requiere unos USD 70 millones. Estos recursos le
representarÃan al Gobierno una recuperación de producción de
crudo de 75 mil barriles diarios, equivalentes a USD 270
millones anuales. La producción petrolera de Petroproducción
ha caÃdo de un promedio diario de 278 mil barriles en 1998, a
niveles de 215 mil barriles en la actualidad.
Esta reducción obedece a tres factores. El más importante es
la paralización de actividades de las empresas que prestan
servicios a Petroecuador, y que suman USD 70 millones, según
el presidente de la Asociación de Empresas de Servicios
Petroleros (Asemser). Estas empresa dejaron de laborar desde
el miércoles de la semana pasada.
Sin embargo, la producción habÃa caÃdo desde hace cuatro
semanas antes, debido a que se dejó de transportar 45 mil
barriles de crudo liviano a través del Oleoducto Transandino
(OTA) de Colombia. Esto, debido a un atentado guerrillero que
ocasionó la ruptura de la tuberÃa, que hasta la fecha no se
repara.
La situación ocasionó que el crudo que se transportaba por el
OTA, y que abastecÃa a la RefinerÃa La Libertad para la
elaboración de gasolinas, ahora tenga que hacerse por el
sistema de "batcheo", a través del Sistema de Oleoducto
Transecuatoriano (SOTE). Esto limitó aún más la capacidad de
transporte. A eso se suma la falta de quÃmicos, repuestos...
Todos estos factores obligaron a la Diección Nacional de
Hidrocarburos a fijar cuotas de producción para el transporte
por el SOTE. A Petroproducción se le asignó una cuota de 215
mil barriles, que es lo que se produce actualmente.
Mientras tanto, la situación en la RefinerÃa Esmeraldas seguÃa
igual que el lunes pasado. En Petroecuador se informó que los
trabajadores seguÃan con la medida de hecho de no despachar
combustible. El abastecimiento para Quito se hace desde el
terminal de Pascuales, Guayaquil. Se informó que los tanques
de almacenamiento podrÃan tener reservas hasta este fin de
semana. Si la medida de hecho persiste, la planta tendrÃa que
parar.
RefinerÃa: la paralización causa desabastecimiento
El desabastecimiento de combustibles se generaliza en
Esmeraldas. La medida de hecho de los trabajadores y
empleados, cerca de 200, que permanecen en los patios y cerca
a las llenaderas, impiden el despacho de gasolinas, extra,
super, diesel y gas licuado.
La falta de comercialización es notoria en la ciudad. Los
propietarios de algunas unidades de la cooperativas "Las
Palmas" prefirieron guardar los carros o trabajar en las horas
de mayor afluencia de público para ahorrar combustible. La
circulación de taxis y de vehÃculos particulares también
disminuyó por la falta de expendió de combustibles.
Ayer, en algunas bombas solo se vendió gasolina super y más
cara aduciendo los costos de transporte desde Santo Domingo.
Pero el expendio también se limitó, se vendÃa un máximo de
cien mil sucres, el comercio ambulante desapareció.
El superintendente de la RefinerÃa, Frankie Sierra, explicó
que el paro no complica la operación de la planta, pero,
advirtió que la falta de mantenimiento causarÃa problemas en
el procesamiento de crudo. Asimismo dijo que el
desabastecimiento solo se registra en Esmeraldas porque vÃa
poliducto se entrega al resto terminales.
Freddy Reascos, dirigente de los trabajadores, anunció que la
suspensión o la radicalización de la medida depende del
resultado del diálogo entre los dirigentes y los ministros de
Gobierno y EnergÃa. Además, advirtió que de darse una
militarización de la planta dejarán de operar. Redacción
Esmeraldas
Una subasta por USD 20 millones para este viernes
La falta de recursos en Petroecuador, para atender sus
obligaciones inmediatas, podrÃa tener un leve alivio este
viernes. El martes pasado, el Ministerio de Finanzas hizo la
convocatoria para la subasta de USD 20 millones en bonos del
Estado, que se realizará mañana (viernes) a través de las
bolsas de valores de Quito y Guayaquil. Esta subasta forma
parte de una asignación de USD 90 millones para la petrolera
estatal, hace aproximadamente un mes.
Sin embargo, la iliquidez del mercado no ha permitido que
estos bonos puedan ser colocados en el mercado y ahora, con la
mayor iliquidez, producto del congelamiento de depósitos, es
más difÃcil.
Las deudas con las contratistas de Petroecuador ascienden a
unos USD 70 millones, por lo que, de tener éxito en la
subasta, solamente se cancelarÃa una parte. El presidente de
la Asociación de Empresas de Servicios Petroleros (Asemser),
Jalil Del Castillo, dijo que varios obreros están impagos
desde octubre de 1998 y la mayorÃa desde diciembre del mismo
año. Según Jalil, hay personas que han sido desalojados de sus
viviendas por no haber pagado los alquileres y otros no pueden
cancelar las matrÃculas de sus hijos en las escuelas. (Texto
tomado de El Comercio)