La fiesta de los 100 días del régimen del presidente Lucio Gutiérrez nació hace dos meses en una noche de insomnio de Napoleón Villa, cuñado del primer mandatario y titular encargado del partido Sociedad Patriótica.
Villa narra que entre sus primeros pensamientos se le cruzó la idea de una misa campal en El Quinche, “tomando en cuenta que el primer mandatario es católico y muy devoto”. Esta alternativa fue desechada debido a que era difícil movilizar a tantas personas a esa parroquia.
Otra propuesta fue realizar una misa en la Basílica de Quito, pero al igual que en El Quinche, fue descartada debido a que en ese lugar solo alcanzarían alrededor de mil personas.


Y es que la idea de festejar “tantas cosas que el presidente ha hecho en sus 100 días”, según Villa, merecía un acto magistral.
“Con tanta gente novelera en las calles, dijimos este es el tiempo y el lugar, ya que con las representaciones culturales que traía cada provincia, todos querrán ver la marcha, en política hay que analizar estrategias y tiempo”, manifiesta.
En la organización del desfile participaron 20 personas, a cargo de 12 comisiones entre las que se cuentan la de Control y Seguridad, dirigida por el coronel Rodrigo Braganza; la de Logística, a cargo del coronel Jorge Naranjo; la coordinación general, bajo la tutela del coronel Mario Calderón, y Pedro Almeida, encargado de las Relaciones Públicas.
Almeida dice que estos grupos trabajaron durante una semana para lograr convocar a todos los sectores del país. “Con nueve carros y megáfonos en mano, no descansamos ni Sábado de Gloria, ni Domingo de Resurrección”.
En las provincias, los encargados fueron los gobernadores y los directores provinciales del país, "pero toda la coordinación a cargo de Napoleón Villa fue la clave, él nos inyecta la energía y la creatividad sin ser un estudiado en Harvard o en otras universidades del exterior", señala Almeida. (ICO)

LO QUE SE ESPERABA
El show, presente; los anuncios, ausentes

El organizador del evento, Napoleón Villa, motivaba a la gente para que vaya a la plaza de San Francisco, anunciando que el presidente Gutiérrez dará a conocer la lista de deudores a la banca cerrada. Pero eso no ocurrió. El jefe de Estado estuvo más interesado en conocer quiénes fueron a apoyarlo: ¿Están las chugchucaras de Cotopaxi?, ¿Está la marimba de Esmeraldas?¿Están los sombreros de paja toquilla de Manabí? decía, a todo pecho, en lugar de dar a conocer la lista anunciada.
Lo que sí se cumplió fue el control durante la concentración. Apenas algo extraño ocurría algún policia o militar, celular en mano, resolvía el problema "Solo la delegación del Guayas dio de qué hablar, protestaron por todo", dijo un oficial. (ICO)


LO QUE SE OYO
"San Pedro, de Sociedad Patriótica"

Esperaban a cerca de 50 mil personas, pero Napoleón Villa dice que fueron 200 mil, y Gutiérrez 400 mil. Eso debió emocionar a Janeth, la hermana mayor que "cuida" al presidente, según él reveló a HOY, pues no se cansaba de repetir que: "nos sentimos como en la campaña". En el balcón presidencial, ella recogía los obsequios que el primer mandatario recibía de las comparsas que desfilaban. La emoción era tal que Villa bromeó: "lo que no esperábamos y ocurrió fue que "San Pedro sea de Sociedad Patriótica". La lluvia que cayó solo poco minutos...
Pero no todos estaban hablando de política. Un grupo de estudiantes llegaron desde Ambato, solamente "porque queríamos venir a Quito y había bus y comida gratis". (TFF-ICO)

No existe una contabilidad de los aportes solidarios para la marcha

El financiamiento de la marcha de los 100 días es un misterio. Los organizadores del encuentro solo hablan de autogestión, pero prefieren no dar una cifra de a cuánto pudo llegar “la ayuda solidaria de varios sectores”.
El coordinador de la marcha, Napoleón Villa, dice que en varias provincias se hicieron festivales y rifas para recaudar fondos.
Una de las "colaboraciones" fue de la Coca Cola. Alrededor de 50 jabas de la gaseosa se repartieron a los asistentes a la marcha.
“Esa fue una muestra de gratitud de la empresa”, expresa Villa, ya que cuenta que en una ocasión el presidente de la República dijo que por falta de tiempo consumía Coca Cola con pan. “Fue una buena publicidad para esta empresa”, señala.
El aporte de los ministros de Estado financió en gran parte el encuentro del jueves. El ministro de Bienestar Social, Patricio Ortiz, indicó que cada secretario de Estado donó una parte de su sueldo para financiar el evento. “Yo doné la mitad de mi salario”, expresó, sin precisar cuál fue el monto.

El que sí precisó su aporte fue el ministro de Energía, Carlos Arboleda, quien entregó $2 000. Mario Calderón, uno de los principales organizadores de la marcha, comentó que él dio $250.
El encargado de las finanzas del evento fue Jorge Navarrete, economista, director financiero del Partido, quien dice que no se hizo una contabilidad de cuánto se recibió para efectos de la marcha. "El apoyo fue logístico, dice, por lo que algunos podían entregar su dinero contratando buses o comida para los asistentes, yo no recibí, por ejemplo, los $2 mil del ministro Arboleda, asegura.
"Lo recaudado en Pichincha de los aportes de varios militantes fue de alrededor de $6 000, que se recibieron en efectivo", señala. En lo que tiene que ver con los gastos de provincias, no se hizo ningún registro.
El caso del gobernador de Manabí, quien indicó que su provincia aportó con $ 40 mil, no está registrado en la Dirección Financiera del Partido.
Por otro lado, según la planificación inicial, se contrataron 254 buses para que trasladaran a las miles de personas que participaron en la concentración. Según varios choferes que llegaron desde las provincias, el costo del transporte fue de $180 y en algunos casos se les proporcionó algo más de dinero para gasolina. (ICO)

Manabí dio $40 mil para la fiesta

Los funcionarios de Manabí, designados por el Gobierno de Gutiérrez, gastaron más de $ 40 mil de los cuales: $10 mil se destinaron a la alimentación de los 2 000 militantes de Sociedad Patriótica y $ 19 600 en el alquiler de los 49 buses que llegaron de los 22 cantones de la provincia.
El alquiler de cada bus tiene un costo de $400 y se destinaron $5 a cada persona para el desayuno, almuerzo y merienda, ya que los 2 000 ciudadanos son de escasos recursos y no pueden financiarse el viaje. A esto se suma la contratación de chivas, bandas de pueblo, zanqueros y grupos de baile.
El organizador de la caravana fue el gobernador de la provincia, Roberth Chávez, quien explicó a HOY que se aplicó la autogestión “es decir, cada funcionario debía financiar como mínimo un bus y la alimentación de un número determinado de los viajeros". Recalcó que él cooperó con el pago de 22 buses. (MEC)

"Pichincha: más gente que plata"

Según uno de los organizadores de la marcha, solo en Quito se contrataron 90 buses para que trasladaran a los asistentes a la marcha. Esto tuvo un valor de $18 mil. Además, se hicieron cinco mil camisetas que tuvieron un costo unitario de $1 dólar, con lo cual por este rubro se habrían pagado $5 mil, cantidad igual a la pagada también por la confección de gorras.
Este integrante de PSP, que prefiere reservar su nombre, dice que a pesar de la inversión realizada, el aspecto más importante fue la presencia de la gente, "hubo más gente que plata", señala.
Otro dato sobre el evento fue el montaje de la tarima, que junto con el sonido estuvo a cargo de la empresa MaxiAudio Sonido, servicio que habría costado $1 500, según uno de los empleados de esta empresa. (ICO)

LOS ORGANIZADORES

Napoleón Villa (director general)

Cuñado del presidente Lucio Gutiérrez, ex presidente del Fondo de Solidaridad y actualmente el titular encargado del partido Sociedad Patriótica, fue el mentalizador del evento.
Durante una semana mantuvo reuniones con las 19 personas encargadas de armar el encuentro.

Mario Calderón (subdirector)

Ingeniero civil y coronel de las FFAA en servicio pasivo, se desempeña actualmente como consejero provincial de Pichincha por el Partido Sociedad Patriótica. Estuvo presente en la marcha organizando el desarrollo de la misma. Mantuvo contacto permanente con Villa durante el recorrido.

Rodrigo Braganza (Seguridad)

Coronel de la Policía en servicio pasivo. Es el secretario provincial de Pichincha de Sociedad Patriótica. Durante la marcha estuvo a cargo de la seguridad en general, contactó la presencia de los organismos de socorro como la Cruz Roja, Defensa Civil, Bomberos y Policía Nacional.

Jaime Coello (Coord. de comisiones)

Arquitecto, riobambeño, en ejercicio de la profesión, se desempeña como asesor del coronel Mario Calderón.
Durante la primera vuelta electoral participó como coordinador general de la parroquia Cotocollao para el control electoral. Ayer coordinó las acciones entre las comisiones.

Carlos Torres (Respons. parroquias)

Es el director técnico-administrativo del Registro Civil.
Es miembro de Sociedad Patriótica y para el encuentro de los 100 días del régimen estuvo a cargo de la coordinación de las parroquias de Quito. Durante la marcha caminó cerca del coronel Napoleón Villa.

Pedro Almeida (Relaciones Públicas)

Es licenciado en Comunicación Social. Se encargó de las Relaciones Públicas y de la coordinación de las parroquias de Quito. Desde la semana pasada recorrió las parroquias con carros que portaban altavoces, con los cuales se invitaba a participar en la marcha.

Carlos Zúñiga (concentración)

Es licenciado en Matemáticas graduado en la Universidad Central. Trabaja en el Banco del Estado, en el Departamento de Riesgo.
En el partido asesora al coronel Mario Calderón. Estuvo encargado de la planificación de la salida del desfile.

ANALISIS

La marcha de los coroneles

El Partido Sociedad Patriótica 21 de Enero (PSP), fundado por el presidente Lucio Gutiérrez para la competencia electoral del año anterior, está aplicando en el ejercicio del poder político del Estado las tácticas de guerra y propaganda estudiadas por los coroneles en las escuelas militares.
Esto puede afirmarse luego de conocer algunos de los detalles relacionados con la gran celebración de los 100 días de su Gobierno, organizada por los coroneles del PSP, y que constituyen este informe de BLANCO y NEGRO.
Hay entre ellos un talento, el de Napoleón Villa, que hace evocar a los "magos" de la propaganda política que acompañaron a algunas figuras de la historia política del siglo XX. Un hombre que piensa en imágenes y es capaz de articular recursos -él asegura que no son del Estado- para sorprender a la opinión pública con una marcha que pasó durante cuatro horas bajo el balcón de Carondelet, en donde estaba ubicado el presidente de la República. Tal característica, la de preferir la marcha a la concentración, ha sido propia de los regímenes militares; piénsese en el coronel Juan Domingo Perón, de Argentina, o en el generalísimo Francisco Franco, en España. Así, el jueves pasado asistimos a un acto propagandístico que, probablemente, va a marcar el estilo de comunicación del gutierrismo, en el futuro.
En este análisis también hay que señalar que el Movimiento Pachakutik y el movimiento indígena, así como el Movimiento Popular Democrático (MPD), prefirieron mantenerse al margen de la celebración. Esto fue destacado por el propio primer mandatario.
Esta realidad, a la que se puede sumar las ausencias del vicepresidente Alfredo Palacio, y de la esposa del presidente, Ximena Bohórquez, lleva a imaginar que habrá cambios en la correlación de fuerzas al interior del Gobierno. Sin lugar a dudas, los coroneles de Lucio Gutiérrez van a adquirir mayor protagonismo, mientras el Gobierno persevera en su error: que todo gire en torno a la figura del jefe de Estado, sin "pararrayos" que lo protejan. (DCM) (BLANCO Y NEGRO)
EXPLORED
en Ciudad Quito

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