El bloque Social Cristiano discutió ayer los mecanismos que aplicará frente a la nueva mayoría, la convocatoria a una consulta popular y la reconformación de los tribunales de control. Pero aún no toma una resolución definitiva.

“Actuaremos dentro de la Constitución y la ley y recurriremos a todas las instancias nacionales e internacionales para defender la institucionalidad de la República que, lamentablemente, vive una dictadura entre el Presidente de la República y una mayoría del Congreso que el pueblo sabe cómo ha sido concebida”.

León Febres Cordero no profundizó la postura de su bloque frente al llamado a una consulta popular que acorte los períodos del Ejecutivo y Legislativo.

Solo dijo que es posible y que está en estudio. Pero alertó que debe ser tramitada por el Tribunal Supremo Electoral (TSE) que está en manos de los partidos unidos al Gobierno. Al respecto, considera que el organismo es intocable porque no ha terminado el proceso de elecciones iniciado el 17 de octubre.

También cuestiona la reconformación del Tribunal Constitucional, “porque se lo tiraron abajo por la vía de una resolución”. Además, rechaza la designación del vocal Víctor Hugo Sicouret (ex diputado del PRE) porque, según los documentos entregados ayer por la central de riesgo, tiene una deuda vencida de 4’285.000 dólares. “Y para él no, no hay coactiva, no hay embargos; premian esta sinvergüencería nombrándolo miembro del Tribunal Constitucional y ahora se dice que va a ser el presidente del Tribunal.”

El líder socialcristiano asegura que esos cambios pretenden facilitar al PRE y a Gutiérrez el retorno del líder roldosista Abdalá Bucaram.

“En un país como este no hay Constitución, no hay nada, y el único que en realidad puede y debe reaccionar es el pueblo ecuatoriano, porque así como hoy día persiguen a ciertos ciudadanos mañana pueden perseguir a quienes les dé la gana.... No hay mal que dure cien años ni cuerpo que lo resista. En algún momento reaccionará el pueblo”.

Además, cuestiona al primer mandatario porque a través de una entrevista con el Diario El Comercio pretende ofenderlo, mentir, calumniarlo e injuriarlo. “Denigra el puesto y lo que menos puede tener es ética, educación y compostura; pero a mí me va a ver derrotado solo por la muerte... a mí no me amilana nadie, solo Dios. Este es un régimen de facto, vergonzoso, insolente, ignorante, inético”.

El ex mandatario rechaza la intención de crear una comisión que lo investigue. “¿A título de qué? Es que habla tonterías porque ni siquiera se informa”.

Además, desestima la acusación del jefe de Estado. Según él, diputados socialcristianos le contaron que su líder los amenazó con ponerles droga en los vehículos si no apoyaban el juicio político. “Solo una mente perruna puede pensar así, la droga él la conoce porque de alguna forma hay vinculaciones con traficantes internacionales que financiaron su campaña”.

Pero no insistirán en el juicio político, porque al momento no hay las condiciones. “Tiene una mayoría comprada de 55 ó 56 legisladores”.

En ese sentido, respalda a la ID como la segunda fuerza política dentro del Congreso a la que le corresponderá la presidencia del segundo período.

Finalmente resta importancia a las críticas del líder del Prian Álvaro Noboa. “No me quita 30 segundos de sueño... me da la impresión de que come cuento y el político que come cuento no anda por buen camino”.

Gutiérrez revisó la situación en palacio

El Presidente de la República se reunió ayer en la tarde con sus ministros, en el Salón del Gabinete de palacio. El portavoz de Gobierno, Iván Oña, confirmó que el presidente Lucio Gutiérrez partirá este 6 de diciembre a Cuzco, Perú, a la cumbre de presidentes de la CAN y el Mercosur, en donde se oficializará la Unión Sudamericana. El Gobierno prepara un decreto ejecutivo para conformar una “comisión de la verdad” que investigue las presuntas violaciones a los derechos humanos cometidas durante el régimen de León Febres Cordero. Oña dijo que el objetivo de la comisión será investigar las denuncias que, por violaciones de derechos humanos y crímenes de lesa humanidad, haya en contra del ex presidente. Según Oña, la intención del Gobierno es promover una investigación seria e imparcial sobre las denuncias en contra del ex presidente. Para ello, se nombrará gente de reconocido prestigio, de forma que no pueda hablarse de una “persecución política”. Oña precisó que el Gobierno no tiene la intención de perseguir a Febres Cordero, sino de esclarecer sucesos que podrían ser violaciones a derechos humanos cometidos en su periodo presidencial, entre 1984 y 1988.

Análisis

Febres Cordero, el motor de Gutiérrez

El presidente Gutiérrez siente que el viento sopla a su favor. Por eso continúa su ofensiva contra el ex presidente Febres Cordero. Dos elementos son claros en su estrategia. El primero: aislar al ex mandatario. Así quiere neutralizarlo, disuadir a sus posibles aliados y dejarlo sin iniciativa política. El segundo: convertirlo en su único interlocutor político. En esta movida Lucio Gutiérrez se inspira en las viejas (y probadas) prácticas políticas del país. Una de ellas es recordar que si se hace campaña se requiere un contrincante. Y el Presidente está en campaña. La consulta popular que anunció el ministro Jaime Damerval corría dos peligros: caer en tierra poco fecunda y volverse un referéndum contra el Gobierno. Carondelet necesitaba, entonces, no solo revertir la dinámica política (que le era desfavorable) sino encontrarse un motor para popularizar la consulta.

Ese es el papel que, según los hechos, el Presidente piensa hacerle jugar al líder del PSC. Quiere unir a todos aquellos que, por el motivo que sea, creen tener cuentas que saldar con él. Los resultados son impredecibles pero la mera expectativa afecta el margen de maniobra de los partidos políticos. En ese sentido, Lucio Gutiérrez parece tan seguro que, como dice el adagio popular, está vendiendo la piel del tigre antes de haberlo cazado...

En política nacional ese es un error. Por dos motivos: el presidente Gutiérrez no mide los tiempos (Febres Cordero sí) y olvida que en política, como en el campo de batalla, soldado advertido no muere en guerra...

La ID dividida sobre la propuesta

Los diputados del bloque de la Izquierda Democrática (ID) saben que la mejor estrategia para los dos próximos años es mantener la línea de oposición. Sin embargo, no radicalizarla al punto de plantear una consulta popular para adelantar las elecciones. Sobre esta propuesta aún hay discrepancias entre los diputados.

Por un lado, la mayoría de legisladores está de acuerdo con dar paso a una consulta popular planteada por el Ejecutivo para impulsar su reforma política, siempre que esta siga los pasos establecidos en la Constitución.

Como lo mencionó Carlos González, la ID estará de acuerdo en tramitarla, con la condición de que en ella se incluyan preguntas sobre otros temas, por ejemplo: si el país está de acuerdo con ratificar el Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos.

Por otro lado, hay divergencias en relación a la consulta popular en la que se plantearía el adelanto de las elecciones presidenciales y la revocatoria de los mandatos de diputados.

Al respecto, Wilfrido Lucero, fue claro. Aseguró que su bloque no asumirá una posición favorable sobre cualquier tema que suene a “revanchismo”, en este caso del PSC. Asimismo, Andrés Páez, cree que la consulta debería acomodarse a otros intereses nacionales.

El bloque socialdemócrata tomará hoy una posición sobre estos temas. Diego Monsalve adelantó que la ID podría proponer un proyecto integral de reformas constitucionales que contenga las propuestas del régimen, además de las de la oposición encabezada por el PSC.

El Prian piensa en las elecciones

La candidatura a la Presidencia de la República de Álvaro Noboa es el principal tema que se analiza entre los diputados del Prian al evaluar los efectos de un posible llamado a consulta popular.

Pero tampoco es algo que les quita el sueño, según Carlos Vallejo, presidente de la comisión de Asuntos Internacionales, quien asegura que si se anticipan las elecciones Noboa simplemente lanzará su candidatura.

“La reacción depende del pueblo y si es para adelantar los comicios a lo mejor nos conviene a nosotros para gobernar. Pero el problema es cómo hacer para que en este momento el país supere los problemas y se desarrolle en forma sostenida”.

Vallejo señala, además, que en torno a los llamados a consulta popular es evidente la confrontación entre el Gobierno y socialcristianos. “No creo que se concreten porque guerra avisada no mata gente... son escaramuzas para tratar de desprestigiar”.

Según Sandra Sandoval, el respaldo a una convocatoria a consulta popular ni siquiera se ha discutido con los grupos que han armado una mayoría afín al régimen.

“No hemos dicho que porque ahora votamos de esta manera vamos a seguir votando así; más bien se votará conforme convenga al país... la reforma tiene que ser democrática, mas no para manipular la Constitución”.

Kenneth Carrera prefiere desestimar el tema y descarta un apoyo a la tesis del PSC.

“A nosotros no nos beneficia ni perjudica en nada la propuesta socialcristiana; tampoco la del Gobierno. Nada se conseguirá por la vía de la consulta popular”.

EL PRE apoya la reforma política

Son necesarias. Los diputados Marco Proaño Maya y Silvana Ibarra, con estas palabras expresan su aceptación a la propuesta de realizar una reforma a la Constitución Política del Estado. Ambos creen que beneficiará al país.

En lo que difieren es en cuanto a la forma para conseguirla. Proaño Maya aún no ve una propuesta definitiva por parte del Gobierno, pero cree que no puede hacérsela mediante una consulta popular, sino a través del Congreso. “Todos sabemos que las consultas no tienen validez si no las aprueba el Parlamento Nacional”.

A Ibarra le parece bien la idea de la Consulta Popular, pero “primero hay que preparar muy bien las preguntas”.

Ambos concuerdan en que la reforma debe ir en el sentido de cambiar las reglas para integrar el Tribunal Constitucional y la Corte Suprema de Justicia.

“Es necesaria una nueva configuración que no tenga sospecha y que enaltezca estos altos organismos del Estado”, dice Proaño.

“Hay que sacar a los grupos de poder que han dominado el país en los últimos años”, añade Ibarra.

Los dos diputados están en contra de la propuesta socialcristiana de hacer una consulta popular para acortar el período presidencial.

Segun Proaño, “hay temas fundamentales que no pueden ser objeto de debates y uno de estos es que se respeten los canales democráticos”. Silvana Ibarra, por su parte, dice que “es hora de que se respete a las instituciones democráticas”.

Según ellos, el PRE no está con el Gobierno ni contra él, pero defenderá la institucionalidad democrática.

PK en acuerdo parcial con el PSC

El movimiento Pachakutik (PK) concuerda con el Partido Social Cristiano (PSC) en una consulta popular para acortar el periodo del presidente Lucio Gutiérrez y llamar a elecciones, mas no entrarían a discutir ningún cambio en el poder legislativo. Según el diputado Julio González, en este planteamiento respaldan parcialmente al PSC como a otros partidos de oposición al Régimen, entre ellos: Izquierda Democrática, Movimiento Popular Democrático (MPD) y socialistas. González considera viable que en el Congreso se produzcan “alianzas puntuales” en varios temas como la eliminación del candado constitucional con las dos terceras partes del voto legislativo.

El pacto con los socialcristianos no contradice lo expresado por el Consejo Político de Pachakutik, organismo que proclamó, el fin de semana pasado, la necesidad de programar alianzas únicamente con partidos ubicados del centro a la izquierda.

“Una cosa es lo político y otra lo orgánico”. La alianza con el PSC y el Prian se rompería en temas como las privatizaciones en el sector energético y el cobro de deudas a grupos económicos como: Febres Cordero y la Corporación Noboa.

En estos temas, Pachakutik espera contar con el apoyo de los socialistas así como del MPD, partidos con los cuales se alinearía también en la oposición al TLC, en los términos propuestos actualmente por el Gobierno.

Rodrigo García concuerda con González, pero agrega que para “hablar de una reforma integral del Estado sería necesario incluir a las Cortes y a los tribunales”.

El MPD está a favor del pedido

El Movimiento Popular Democrático partidario de que exista una consulta popular.

No les importa que la iniciativa se origine en el Partido Social Cristiano (PSC). Sin embargo, pone una condición: que en la consulta se incluya una pregunta sobre si el pueblo acepta o no el Tratado de Libre Comercio (TLC).

Luis Villacís, jefe del bloque de tres diputados, considera que el anticipo de elecciones no causará problemas a su partido. Afirma que el proyecto político inmediato es mantener la oposición al presidente Lucio Gutiérrez. Respecto a la posibilidad de alinearse a la propuesta del Gobierno, esto es negado de plano.

Otro de los puntos que interesa al MPD son los cambios en la Corte. En ese sentido el apoyo a la consulta popular sería únicamente hasta que se produzca la consulta. A pesar de que sigue nombrando a Febres Cordero como el objetivo político a destruir no se cree en la estrategia de Gutiérrez para hacerlo.

Los socialistas dan su apoyo

El bloque socialista compuesto por tres diputados respaldaría la propuesta de adelantar las elecciones para acortar el periodo presidencial, vía consulta popular.

Segundo Serrano, jefe de bancada, respalda esa idea, a pesar de que el Partido Social Cristiano (PSC) sea quien impulse esta iniciativa.

Este sería el único vínculo que el líder de los socialistas visualiza con los socialcristianos a futuro, pues su interés actualmente es incluir a este partido en una tercera vía. “Mi objetivo es restaurar el bloque de centroizquierda junto a partidos como la Izquierda Democrática, Pachakutik, Democracia Popular y el Movimiento Popular Democrático (MPD)”.

De su parte, Víctor Granda considera que el bloque podría analizar cualquier propuesta si “en esta se incluye la modificación de la actual conformación de las cortes de justicia”. El diputado Enrique Ayala, concuerda con los criterios expuestos por sus coidearios y recalca que los votos socialistas resultarán vitales en este tema.

La DP no cree en las consultas

La Democracia Popular prefiere mantenerse al margen de alinearse tanto con la posible consulta revocatoria que plantea la oposición cuanto con la reforma política propuesta por el Gobierno.

En el partido de la flecha verde se perciben ambas posturas como “globos de ensayo” de propuestas con pocas posibilidades de realizarse. En esa medida, no hay mayor preocupación sobre definir una postura clara. Por otro lado, se admite que la dinámica política es tan variable en el país que prefieren tomar distancia de cualquier pronunciamiento. Ni el apoyo al Gobierno ni a la oposición parecen tener justificación, por el momento, para este partido.

Según ellos, la postura de la oposición está viciada de contenido, ya que no creen que responda más que a odios personales. La reforma política del Gobierno, entre tanto, les suena a trasnochada y poco práctica, ya que consideran que hay debates que están superados.
EXPLORED
en Ciudad Quito

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