Guayaquil. 18 sep 2000. El ausentismo que superó el 40 por ciento fue la
caracterÃstica de la jornada cÃvica de ayer en El Oro y ManabÃ, donde sus
ciudadanos fueron convocados para escoger el sistema de autonomÃa
provincial. Muchos de los votantes que acudieron a las urnas no conocÃan
el contenido de las preguntas y admitieron que solo les interesaba
obtener el certificado de votación.
Manabà amaneció ayer con el cielo nublado, sin embargo el clima fresco no
fue suficiente para que los 828 000 ciudadanos habilitados para votar
salgan hacia las 2 786 juntas receptoras distribuidas en los 22 cantones.
Teresa Luchas, de 37 años, de la parroquia Los Esteros del cantón Manta
se salvó de ser escogida, de entre ocho ciudadanos que hacÃan fila en el
recinto electoral del Colegio San José, para conformar una junta
receptora. "No lo podÃa creer, dicen que al que madruga dios le ayuda,
pero en este caso el refrán casi me sale en contra".
Y es que durante las tres primeras horas de iniciada la consulta, el
problema común en todos los cantones manabitas fue la ausencia de los
delegados a las juntas quienes no llegaron a tiempo y los miembros del
Tribunal Electoral y el Comité Pro autonomÃa con el apoyo de militares se
vieron forzados a conformar las juntas con los sufragantes que habÃan
llegado a pocos minutos de empezada la consulta.
En Portoviejo, por ejemplo, en las juntas 44 y 45 de la parroquia Andrés
de Vera, frente al Terminal Terrestre, no habÃa ningún vocal a las 07:00.
Según, Luis Mendoza, consejero provincial, eso sucede en cada proceso
electoral. Ãl mantenÃa la esperanza que todo mejore con el pasar de las
horas. Sin embargo ello sucedió a medias, pues los que llegaban a
pronunciarse por la autonomÃa tan solo sabÃan que tenÃan que hacer seis
rayas sobre la palabra sÃ, en las preguntas que estaban en la papeleta
cuyos colores eran verde, turquesa y morado. "No sé por qué he venido,
pero lo hago porque necesitó el certificado de votación, solo tengo
información que queremos ser autónomos", dijo Francisco Arias, quien votó
en la parroquia 12 de Marzo de la capital manabita.
Para Maritza Zambrano, del sitio San Plácido en Portoviejo, faltó
información sobre el contenido de las preguntas "Debieron pegar afiches
detallando su contenido fuera de los recintos".
En las calles y avenidas el comentario era que el ausentismo podrÃa ser
alto, especialmente en las zonas rurales donde los ciudadanos en esta
ocasión no tenÃan quién los saque hacia los centros poblados como sucede
en elecciones de dignidades. En Chone, los campesinos que salieron a la
feria dominical en la cabecera cantonal, desde Convento, Boyacá, San
Antonio y Eloy Alfaro, pocos se acercaron a los recintos en los colegios
Magali Masón, Eugenio Espejo y Solórzano Hoyos. "Muchos han votado aquÃ
por el no, pues los objetivos de una buena parte de chonenses apuntan
hacia la conformación de la provincia del norte", decÃa Fernando Andrade,
de Radio Libertad de ese cantón. "Aquà los pocos que votaron tenÃan
opiniones divididas".
En BahÃa de Caráquez, el Colegio Eloy Alfaro recibió a los votantes que
llegaron en buen número desde Leonidas Plaza y las zonas aledañas a la
ciudad. Las calles se llenaron de gente en un hecho no usual los
domingos. "Al parecer aquà el sà arrasará" manifestó Julio Rivadeneira,
profesor universitario.
Los impulsadores de la autonomÃa, Medardo Mora y Humberto Guillén,
pasadas las 10:00 salieron en un recorrido hacia la zona norte de la
provincia: Calceta, JunÃn, BolÃvar, Chone y Rocafuerte . Ambos se
mostraron optimistas de los resultados."Ganará el sà y luego daremos seis
meses de plazo para que el Congreso y Gobierno se pronuncien".
En El Oro la tónica fue similar que en ManabÃ. A las 07:45, la junta
número 94, en el Colegio Nueve de Octubre, de Machala, seguÃa vacÃa.
Mientras los militares y los coordinadores del Tribunal Electoral se
movÃan desesperados de un sitio a otro en busca de electores voluntarios
para instalar la mesa. En casi todas las 60 juntas de ese recinto ocurrÃa
lo mismo. Solo habÃa entre uno y dos miembros, cuando lo mÃnimo son tres.
Pero 30 minutos más tarde los militares y el Tribunal decidieron iniciar
el proceso con dos vocales y obligar a los electores a conformar las
mesas con la amenaza de llevarlos presos.
La lluvia con la que amaneció Machala también contribuyó a que los
electores no acudan a las urnas y habÃa el temor de que el ausentismo,
que en las elecciones del 21 de mayo fue de 40 por ciento, ahora supere
ese nivel. Pero no solo el mal tiempo fue un problema sino también la
desinformación, en especial de los electores del área urbano marginal y
rural que no conocÃan lo que iban a elegir o decidir. Además no
recibieron explicaciones de la importancia de cada una de las ocho
preguntas. Solo una campaña publicitaria de que votaran por la letra A
que significaba más desarrollo y obras para El Oro.
Ismael Capa un campesino, de 58 años, creÃa que iba a elegir otra vez
Alcalde y solo le interesaba el certificado de votación. Para ello se
demoró más de 30 minutos en encontrar su mesa en el Colegio Nueve de
Octubre. "En las elecciones de mayo me tocó en la mesa 58 pero ahora ya
no estoy".
En los patios de la Feria Mundial del Banano, donde se instalaron 39
mesas, hasta las 08:00, solo existÃan 10 urnas hábiles. La mayorÃa de los
vocales eran estudiantes universitarios que no superaban los 22 años y
además no tenÃan entrenamiento. Alejandra Vega, uno de los coordinadores
del Tribunal Electoral explicó que fue una medida extrema iniciar con dos
personas por el ausentismo de los vocales y de los electores. "Esto es la
primera vez que sucede, nunca ha existido tanto ausentismo. Si las cosas
siguen asà podrÃa llegar a un 80 por ciento".
El prefecto Montgómery Sánchez atribuyó el ausentismo a la confusión que
generó una publicación.
El diario El Correo en su editorial dijo que no se encontraban "abocados
a ser copartÃcipes de una consulta popular que a la luz del Derecho tiene
serios errores", porque no fue publicada en el Registro Oficial como
manda la Constitución, pero Sánchez aseguró que fue publicada en el
número 164 del 15 septiembre del 2000. "La autonomÃa tenÃa validez y
sustento legal, se trata de malos orenses que no quieren la consulta
popular ni el desarrollo provincial".
Con la autonomÃa se pretende retener el 70 por ciento de toda la riqueza
generada en El Oro, asà como lograr una autonomÃa administrativa,
polÃtica, jurÃdica y social. Los sectores productivos de la provincia
apuestan al sistema autonómico como una alternativa para reactivar la
economÃa y la salud de los habitantes de la zona fronteriza. (Texto
tomado de El Comercio)