(1900-1964)
Quito. 7. sept. 97. Figura del movimiento popular del 28 de
mayo de 1944. amaba las letras y la jurisprudencia.
convencido del liberalismo. Hombre de pureza polÃtica y gran
condición humana.
Guayaquileño. Nació el 6 de febrero de 1900. Hijo del doctor
Manuel ArÃzaga Machuca -abogado, periodista, poeta, natural de
Cuenca- y de la guayaquileña Emilia Luque Márquez de la
Plata.
Cursó la educación primaria en el Asilo Santistevan de los
padres Salesianos y la secundaria en el colegio fiscal Vicente
Rocafuerte. Desde temprana edad se destacó como lÃder y
orador.
En 1918 ingresó a la Facultad de Jurisprudencia y Ciencias
Sociales, de la Universidad de Guayaquil. Escribió JoaquÃn
Gallegos Lara que el ideal universitario de ArÃzaga Luque era
el de Montalvo: "desdichado el paÃs donde los estudiantes no
hacen temblar el mundo".
Agrega Gallegos Lara que la frente de ArÃzaga Luque era de
poeta y sus hombros de estibador.
Fue presidente de la Asociación Escuela de Derecho, de la
federación de Estudiantes Universitarios del Ecuador y asistió
al III Congreso Internacional de estudiantes Grancolombianos.
Destacó en los cÃrculos literarios de Guayaquil y del resto
del paÃs. Con el "Nocturno trágico sentimental" obtuvo el
primer premio en los Juegos Florales Universitarios, en 1919.
Dominaba el inglés, el francés. TraducÃa a Walt Withman.
Escribió artÃculos periodÃsticos amenos y profundos, de
carácter sereno e intransigente con las defecciones de la
moral. En 1920 comenzó a laborar en "El Guante" y en 1922 en
"El Universal". Usaba el seudónimo de Max Smeir. era leÃdo
ávidamente.
El 22 de febrero de 1922 contrajo matrimonio con MarÃa Lola
Murillo Arzube. En 1924 se graduó de abogado. Era
especializado en sucesiones.
VestÃa todo de blanco, como acostumbraban los porteños de
posición de aquella época. Sus amigos lo llamaban "Pancho".
TenÃa su bufete en la calle 9 de Octubre, donde ahora se
encuentra el edificio matriz de Filanbanco.
Después de la revolución del 9 de julio de 1925, integró el
gobierno plural o junta de siete miembros: Luis Napoleón
Dillon, José Rafael Bustamante, Modesto Larrea Jijón,
Francisco ArÃzaga Luque, Pedro Pablo Garaicoa, Francisco
Boloña Rolando y el representante del Ejército, general
Francisco Gómez de la Torre. La secretarÃa general fue
asignada a Julio E. Moreno, escritor y polÃtico prominente.
Los miembros se alternaron en la presidencia de la Junta.
La Constitución de 1945, fue llamada Carta Ejemplar, ya que se
convirtió en modelo no sólo para los paÃses de América Latina,
pues se la consideró la más avanzada y de mayor visión social
de futuro. Por estos motivos, el Parlamento de Francia la
tradujo al idioma francés, siendo embajador en el paÃs galo, e
maestro e internacionalista, Dr. Antonio Parra Velasco. En la
Asamblea del 45 coincidieron a favor del paÃs las más robustas
mentalidades de todos los horizontes polÃticos.
Ministro de Educación
ArÃzaga Luque desempeñó el cargo de ministro de Educación
Pública. Fomentó la cultura popular, reformó los planes de
estudio, mejoró los presupuestos de las Universidades, creó el
Conservatorio de Música y la sección de Bellas Artes, de
Guayaquil. Trabajó por la alfabetización del campesinado,
aumentó los sueldos del magisterio, consiguió la autonomÃa
universitaria.
Estuvo durante poco tiempo encargado del Ministerio de
Relaciones Exteriores. Sus funciones cesaron el 1 de abril de
1926, cuando la Junta entregó el poder.
Diputado
En 1938 fue electo diputado del Guayas y presidente de la
Asamblea Nacional Constituyente. Entonces demostró ser
demócrata y progresista. Contribuyó a la aprobación de una
nueva Carta Fundamental.
La Asamblea nombró como Presidente Constitucional Interino a
Manuel MarÃa Borrero, desde el 10 de agosto hasta el 1 de
diciembre de 1938.
Cuando tenÃa que elegirse al titular, muchos pensaron en
ArÃzaga Luque, pero él se negó, ya que prefirió dirigir la
Asamblea. Luego, por un voto, ganó el médico Aurelio
Mosquera, quiteño, liberal, al jurisconsulto guayaquileño
Teodoro Alvarado Olea.
Mosquera Narváez no fue leal a la designación ni al partido.
Disolvió la Asamblea Nacional Constituyente que lo habÃa
designado (gobierno desde 2l 2 de diciembre de 1938 hasta e 17
de noviembre de 1939, dÃas de su fallecimiento).
En aquella ocasión, ArÃzaga Luque, al igual que otros
diputados, fue a parar al Panóptico, de Quito. Admitió la
libertad cuando la recobraron todos sus compañeros.
Tiempo después se convirtió en el más fogoso de los lÃderes de
oposición a Carlos Alberto Arroyo del RÃo, en cuyo gobierno se
firmó el Protocolo de RÃo de Janeiro, el 29 de enero de 1942.
Para acallar la protesta popular, Arroyo del RÃo se hizo dar
un Decreto de Facultades OmnÃmodas que le permitÃa ser un
dictador constitucional.
la dignidad nacional herida y la falta total de libertades
disgustaron al pueblo.
El 28 de Mayo
Todo el paÃs estaba contra el gobierno de Arroyo del RÃo. El
pueblo veÃa la candidatura del liberal Miguel Albornoz como
una continuación del arroyismo.
Los partidos polÃticos se unieron para formar la Alianza
Democrática Ecuatoriana, ADE. Los Sindicatos pactaron en
octubre de 1942 la integración de la Confederación Nacional.
Los estudiantes organizaron en diciembre de ese año la
federación de Estudiantes Universitarios del Ecuador, FEUE.
Los universitarios lanzaron la candidatura de José MarÃa
Velasco Ibarra que se encontraba exiliado en Chile. A esta
proclamación se sumó todo el movimiento nacional.
Cuando el gobierno de Arroyo impidió el regreso de Velasco
para que no participara en las elecciones, que debÃan
efectuarse el 5 de junio de 1944, el movimiento se alzó.
Francisco ArÃzaga era el lÃder de ADE. Oficiales, tropa y
conscriptos del Ejército Nacional; ADE, FEUE y el Comité
Nacional de Trabajadores fueron los artÃfices del movimiento
popular y militar del 28 de mayo de 1944 que derrocó al
gobierno de Arroyo del RÃo.
Se instauró un gobierno revolucionario, tanto en Guayaquil
como en Quito. En Guayaquil lo integraron Francisco ArÃzaga
Luque, Pedro Saad, Angel FelicÃsimo Rojas, Alonso Larrea, Alba
y EfraÃn Camacho Santos; en Quito, Julio Teodoro Salem,
Gustavo Becerro, Manuel AgustÃn Aguirre, Camilo Ponce
EnrÃquez, Mariano Suárez Veintimilla y el general Luis Larrea
Alba.
El poder fue transferido a Velasco Ibarra, quien como jefe
supremo de la nación convocó a una Asamblea Constituyente.
El liberal ArÃzaga Luque fue elegido presidente de esta
Asamblea; vicepresidente, el conservador Manuel AgustÃn
Aguirre. El 10 de agosto de 1944 eligieron presidente
constitucional a Velasco Ibarra. El 6 de marzo de 1945 se
promulgó la Carta Constitucional número 15. Fue cuna
Constitución progresista y protectora de los derechos del
trabajador.
Vinieron luego las discrepancias. Velasco manifestó su
desagrado por la nueva Constitución, que, según él, maniataba
sus esfuerzos de gobierno y limitaba sus poderes.
Dice el historiados Alfredo Pareja Diezcanseco, el 30 de marzo
de 1946, Velasco y su ministro de Gobierno Carlos Guevara
Moreno dieron el golpe de Estado. Padeció el paÃs dÃas de
agravio, una dictadura caótica, contradictoria cargada de
resentimientos y amargura.
Estudiantes y obreros fueron apaleados. Los talleres del
diario "La Tierra" destruidos. Se dio de latigazos a
periodistas.
ArÃzaga habÃa sido designado embajador ante varios paÃses
europeos con sede en Londres. Estaba en Panamá cuando se
enteró de golpe de Estado. Renunció a sus funciones y se
quedó en ese paÃs.
El 23 de agosto de 1947 el ministro de Defensa, coronel Carlos
Mancheno, expulsó de paÃs a Velasco. el 2 de septiembre se
hizo cargo del poder Mariano Suárez Veintimilla en condición
de presidente del Congreso.
Un Congreso Extraordinario designó presidente de la República
al honorable guayaquileño Carlos Julio Arosemena Tola.
El tribuno ArÃzaga Luque fue designado por Arosemena
embajador en Caracas. En un gran desempeño diplomático logró
la adhesión de Venezuela a la Carta de Quito. En 1949 fue
confirmado en sus funciones por el gobierno del presidente
Galo Plaza Lasso, pero no aceptó.
En 1959 el presidente Camilo Ponce lo designó embajador ante
las Naciones Unidas. Murió en Guayaquil el 22 de octubre de
1964. Era el Caballero de la esperanza ecuatoriana, quien se
propuso cosas grandes para la patria.
El escrito Pedro Jorge Vera ha expresado: "Cuando ArÃzaga
murió dije algo que ahora repito: no sé qué admiré más en él:
su pureza polÃtica o su condición humana".
La "gloriosa" según Pancho ArÃzaga
"El cruel impacto que sufrió el pueblo ecuatoriano con la
agresión peruana de 1941 y la desastrosa suscripción del
Ãrrito Protocolo de RÃo de Janeiro, además de la orgullosa
administración del Estado en aquella época, a tal punto que no
sólo se perseguÃa con saña a los adversarios del régimen, sino
que se anularon casi totalmente las libertades conferidas por
la Constitución vigente y se preparaba el gran fraude
electoral para imponer la candidatura presidencial del señor
Miguel Angel Albornoz, eminente ciudadano a quien se enredó en
la red de la oligarquÃa imperante".
"El plan trazado en Guayaquil, por ADE, fue doble: en el
campo cÃvico, exclusivamente, lanzar un candidato a la
Presidencia, para oponerlo al oficial, y, en caso de triunfar
por la fuerza de las armas, entregarle el Poder, como
presidente provisional, para convocar inmediatamente a una
Asamblea Nacional Constituyente, que dictarÃa la nueva
Constitución y organizarÃa jurÃdicamente el paÃs; y en el
campo práctico de la acción, para insurgir con el uso de la
rebelión armada, en caso de que se obstinare el gobierno el
gobierno en llevar adelante su proyectada imposición en favor
del señor Miguel Angel Albornoz. Para lo primero, y con
amplio margen de mayorÃa dentro de ADE, con los votos
negativos de los liberales independientes y, acaso, de alguien
más, cosa que no recuerdo bien y que designó al candidato
doctor José MarÃa Velasco Ibarra, residente entonces en Buenos
Aires".
"Buena parte de los jefes militares y de los dirigentes
polÃticos, en vista de que la revolución no fue esencialmente
velasquista, sino ADEISTA, me presionaron para que fuese yo
quien tomara el poder, a lo que me opuse, argumentando que la
Revolución no se habÃa hecho a favor de caudillo alguno, y que
serÃa traicionar a mi propia conciencia. Y el doctor Velasco,
favorecido por la mayorÃa de ADE, fue llamado entonces, para
que viniese desde Colombia, donde ya se encontraba, a
Guayaquil para entregarle el poder ante el pueblo y la
combatiente, previo juramento de lealtad al programa de ADE,
bandera y clave del triunfo alcanzado.
Mas el doctor Velasco, proclive siempre al poder absoluto,
hizo que sus amigos más allegados de la sierra, con don Julio
Teodoro Salem a la cabeza, le entregaron el Poder en una de
las ciudades norteñas para burlar asà a la organización que
habÃa hecho la Revolución y debÃa entregarle al Mando Supremo
previo juramento de su programa".
"Entonces fui recriminado seriamente por mi negativa a tomar
yo el poder la madrugada del 29 de mayo. Se supo que después
que esa precipitación tendÃa a evitar que, viniendo a
Guayaquil, fuera apresado y a que asumiera el mando...Este ceo
continuó después y explica los tantos atentados que los
velasquistas cometieron contra la Honorable Asamblea
Constituyente que tuvo el alto honor de presidir, ante el
temor injustificado de que me hiciera yo elegir como
Presidente de la República, derrotándolo en la elección que la
Asamblea debÃa efectuar".
BibliografÃas
Gallegos Lara JoaquÃn, "Páginas olvidadas", Universidad de
Guayaquil, 1987.
Pareja D. Alfredo, "Ecuador, la República de 1830 a nuestros
dÃas", Editorial Universitaria, Quito, 1979.
Vera Pedro Jorge, "Pancho ArÃzaga: Varón ejemplar", Vistazo,
junio 2 de 1988.
Opiniones
"Hombre abierto a las inquietudes del siglo, luchador desde su
juventud estudiantil, estadista con larga y fructÃfera
experiencia.
Valeroso, intrépido, inspiraba coraje a sus amigos y
partidarios. Fueron su porte y arrojo factores decisivos de
la insurrección"
Pedro Jorge Vera
"Su limpia acción pública y su patriotismo, unidos a su
inteligencia y honestidad, merecen el reconocimiento de sus
conciudadanos".
Enrique Boloña RodrÃguez (Texto tomado de El Expreso)
en
Explored
Publicado el 07/Septiembre/1997 | 00:00