El colombiano Jorge Franco ganó el XVII Premio Alfaguara con una novela sobre el amor y la muerte. Dialogó con HOY por teléfono.
La voz al otro lado del teléfono sonaba tranquila. Y, ante una pregunta obvia, la respuesta fue igual: ”Me siento inmensamente feliz. Me llena de confianza y me impulsa a seguir escribiendo”. Era la voz, con acento reconocible, del escritor colombiano Jorge Franco, ganador del XVII Premio Alfaguara de novela 2014.
Franco envió uno de los 872 manuscristos que participaron en esta edición. El autor de Rosario Tijeras mandó su texto con el título Aquel monstruo indomable y con el pseudónimo Antonio Benjamín. El título definitivo de la obra ganadora, que se publicará en un mes, es El mundo de afuera.
Como premio, Franco recibirá $175 mil y una escultura de Martín Chirino. Además hará una gira por Sudamérica para presentar la obra. Según la reseña, esta es una “historia sobre el amor y la muerte, poética y detallista, con un sobresaliente manejo de la tensión”.
El mundo de afuera transcurre en Medellín y cuenta la historia de un secuestro que conmocionó a Medellín en 1971 y que supuso el comienzo de la violencia que luego invadiaría la ciudad. “Me siento honrado de representar con este premio a las letras latinoamericanas. Siento que están más vivas que nunca”, dijo Franco en una conferencia telefónica con las principales sedes de Alfaguara en América Latina.
Contrario a lo que pueda pensarse, el autor explicó que esta novela no trata sobre el tráfico, aunque lo menciona brevemente. “Es una etapa previa al narcotráfico”. Dijo que, en realidad, es una obra en clave de fantasía. "Me he tomado muchas licencias para crear la historia que narro. El secuestro fue real y acabó con la muerte del secuestrado, pero a mi imaginación pertenece la relación entre los personajes y la atmósfera que he creado en el libro”.
Franco detalló que primero creó los personajes y después la trama. Las personas en las que se basó para armarlos fueron sus vecinos durante su niñez en Medellín. “Esa ciudad ha estado siempre presente en mis obras aunque desde hace 20 años vivo en Bogotá. Me siento como un caracol que carga todo el tiempo su casa en la espalda”.
Diego Echevarría, la persona en la que se basó la creación del protagonista, era pariente de la familia política del escritor, y, gracias a ello, pudo obtener mucha información para narrar.
Al preguntarle si la novela es autobiográfica, Franco respondió que sí en la medida en que trata de un sucedo de su infancia, pero que él como personaje no forma parte del texto. “Como persona soy mucho más aburrido que como personaje”.
Una vez más, Franco reconoció que empleó mucho del lenguaje cinematográfico en su narración. “Eso se evidencia en los diálogos y en el uso de los flashbacks”. Incluso comentó que la obra comienza como un cuento de hadas y termina a lo Quentin Tarantino.
Además citó dos películas que influenciaron en su creación: El laberinto del fauno y La vida es bella; en ambas, los protagonistas son niños. “Me tomó cuatro años escribirla, pero está hecha con un estilo narrativo diferente al que he usado”.
Laura Restrepo, presidenta del jurado, dijo que el libro mezcla elementos de fábula, cuento de hadas y rasgos expresivos de un momento de violencia y crisis. “La genialidad es que es un relato con visos de hiperrealismo que deriva hacia el surrealismo”. (OMV-EFE)
Santillana vendió sus sellos literarios a Penguin
Editorial Santillana informó anteayer que ha vendido varios de sus sellos editoriales a Penguin Random House, para enfocarse en el área educativa. Según un comunicado oficial, la operación incluye Alfaguara, Taurus, Suma de Letras, Aguilar, Objetiva, Altea, Fontanar y Punto de Lectura. Queda excluido de la venta el segmento de obras y actividad que realizan Alfaguara Infantil y Juvenil, dirigidas al canal escolar, que seguirá en Santillana. Se anunció que el precio de la operación es de 72 millones de euros. Santillana se enfocará en el área educativa, que en 2013 supuso el 87% de sus ingresos.
El anuncio de la venta fue realizado por Miguel Ángel Cayuela, consejero delegado de Santillana, y Markus Dohle, director general de Penguin Random House.
A partir de ahora, dijeron, se abre un período de transición que se prolongará unos meses, durante los cuales deberán cumplimentarse temas jurídicos y administrativos. Hasta la formalización definitiva de la operación, los sellos de ediciones generales de Santillana y de Penguin Random House seguirán trabajando independientemente.
Santillana inició su andadura en los años sesenta. Divulgaba manuales, cartillas de alfabetización y de formación profesional y libros infantiles y juveniles.