Quito. 30 ago 97. Argentina asistió ayer, entre amargura e
impotencia, a la caÃda de su Ãdolo, Diego Armando Maradona,
con un tercer positivo de dóping que, inevitablemente si la
contraprueba lo confirma, pondrá en forma definitiva fin a su
carrera deportiva.
Las multitudes en México-86, en Italia, en España o en
Argentina), podrÃa ser sancionado como mÃnimo con un año de
suspensión por reincidente.
La afición estuvo frustrada, ante la perspectiva de no volver
a ver jugar jamás a Maradona. Se hizo trizas el sueño de verlo
en Francia-98.
OTRA VEZ LA PESADILLA
Una mezcla de rabia, decepción y lástima se apoderó, ayer, en
la Argentina de dirigentes de fútbol, simpatizantes y
allegados a Diego Maradona, luego de que un análisis
antidoping diera positivo.
Mientras Maradona sigue gritando gol en los puestos de
periódicos desde la portada de una revista de fútbol, sus
simpatizantes caminan cabizbajos por Buenos Aires tras conocer
el primer resultado de la prueba tomada el domingo.
El tÃtulo de la revista promociona el deseo del astro de jugar
el mundial de Francia en 1998, una expectativa que hoy parece
sepultada. El domingo habÃa comenzado en Argentina el primer
torneo oficial y en menos de una semana se apagó la ilusión.
Su representante, Guillermo Cóppola, el presidente del club
Boca Juniors, Mauricio Macri, su médico personal, Alfredo Cae,
y amigos como el futbolista Claudio Caniggia, mostraron
cautela en espera de la contraprueba, aunque manifestaron ya
profunda pena.
Marcelo Zelaya, un simpatizante de Boca Juniors, el más
popular equipo de fútbol argentino en el que juega Maradona,
se declaró "angustiado, con ganas de llorar".
Esta es la tercera vez que el astro arrastra a sus seguidores
a una angustia semejante.
La primera vez fue en 1991, cuando en la cúspide de su carrera
jugaba en el Nápoli de Italia la prueba detectó que habÃa
consumido cocaÃna. La segunda vez fue en 1994, durante el
campeonato mundial de Estados Unidos. Allà se encontraron
restos de efedrina en su orina.
Ahora, la herida se revuelve con el nuevo resultado; pero el
dolor es más profundo porque, como admitió Macri, la
suspensión por reincidencia podrÃa ser definitiva, de uno o
más años. Pero todas las alternativas huelen a final para un
jugador que cumple 37 años en octubre.
Muchos, como Zelaya, se declaran incondicionales de Maradona.
Pero hay quienes realmente habÃan creÃdo que esta vez no
volverÃa a caer porque se jugaba su retiro definitivo y no lo
perdonan.
"Estoy indignada", protestó una oyente de Radio Mitre.
"Consideraba que no habÃa que darle otra oportunidad, porque
con todas las que le dimos nos hizo quedar mal en Boca, y nos
hizo perder un mundial".
FUE UN DIA DE LUTO
Una mujer lloró largamente y advirtió: "Pido un gran respeto
por ese muchacho, por su familia, que no lo persigan porque se
va a matar".
Zelaya creÃa que Boca "podÃa ofrecerle a Maradona un lugar
donde terminar su carrera, aunque no jugara como antes".
"Nosotros lo hicimos un dios, y el dios se drogó, ahora no nos
sirve", afirmó Zelaya.
La contraprueba será solicitada por el club y su resultado se
conocerá recién entre el lunes y el miércoles próximos. Pero
ninguna de las personas cercanas al futbolista niega que allÃ
se confirmará que ingirió alguna sustancia prohibida.
Sus allegados parecÃan este viernes aludir a una persona
muerta.
"Se lo veÃa tan bien. Nunca lo vi con tanta energÃ. Estaba muy
tranquilo porque sus chequeos médicos daban normalidad
absoluta", decÃa sorprendido su médico.
Un simpatizante dijo sentirse igual que en 1951, cuando murió
Eva Perón, la esposa del entonces presidente argentino.
"Aunque parezca exagerado, hoy siento que es un dÃa de luto,
un dÃa de congoja en todo el paÃs".
El jugador se llamó a silencio. Cóppola, su representante y
vocero, declaró que "él no dice nada. Tiene la esperanza de
que se produzca un milagro". (IPS-AFP) (DIARIO HOY) (P. 2-A)
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Publicado el 30/Agosto/1997 | 00:00