Quito. 30 ene 99. Fueron más de 35 personas, entre empresarios,
economistas, polÃticos, autoridades del Gobierno y ex funcionarios
de varios paÃses, los que se reunieron por tercera ocasión en el
denominado "CusÃn III". Todo con el propósito de estudiar
alternativas que solucionen la crisis económica que vive el
Ecuador.
Los organizadores del evento, Mae Montaño, León Roldós y Mario
Ribadeneira coincidieron en que en la cita "se estudian todas las
alternativas que aporten para superar la difÃcil situación
económica, que no arrastren al Ecuador a la nada".
Roldós fue enfático en reconocer que "la cita es complicada, pues
existen intelectuales que tienen posiciones extremas en torno a las
fórmulas de desarrollo", sin embargo, lo importante es "llegar
encontrar salidas de solución, ni extremas ni dramáticas".
Cerca de las 10h00, todo se encontraba listo. El primero en exponer
fue el ex ministro de economÃa chileno, Alejandro Foxley, su
ponencia resumió León Roldós, trató de "los sacrificios versus la
inversión en el Ecuador". A continuación, hizo su arribo a la
HosterÃa San José, el presidente de la República, Jamil Mahuad, que
junto al vice ministro de Finanzas, José Carrra expuso "su agenda
para el desarrollo del Ecuador del siglo XXI.
Tras las dos intervenciones y el almuerzo, Carrera expuso las
"metas económicas que el Gobierno del presidente Mahuad se ha
propuesto en su gestión presidencial". Y luego, la ronda de
reuniones culminó con las exposiciones de JoaquÃn Morillo y Jorge
Gallardo, quienes analizaron "las polÃticas económicas que el
Ecuador deberÃa seguir para lograr una finanzas sanas".
Al terminar el primer dÃa, señala Mae Montaño, "CusÃn III" logró un
primer consenso: "todos estamos conscientes de que es necesario
analizar una propuesta que sirva de base para que el paÃs supere
sus problemas económicos".
Para hoy está previsto iniciar a las 08h30. Se conformarán grupos
de trabajo para revisar las propuestas de la noche anterior y
buscar consensos.
Distintas posiciones para salir adelante
En CusÃn las tesis sobre cómo lograr que el paÃs salga de la crisis
económica que lo agobia son variadas.
Para Abelardo Pachano, la propuesta presentada por el Gobierno
Nacional en donde se sugiere la aprobación de tres gravámenes es
valida, en tanto se cobren esos impuestos sin distinción alguna.
Gustavo Pinto piensa que el "paÃs solo saldrá de la crisis cuando
logre tranquilidad económica y polÃtica. ¿Cómo lograrlo? Pinto
responde: "organizando bien las finanzas".
Alejandro Foxley insiste en que el Ecuador debe hacer "sacrificios
iniciales para luego observar mejores dÃas".
Susana González opina que "el Gobierno debe sincerarse en sus
cuentas: estamos de acuerdo si los gastos que se vayan a efectuar
tengan lógica con los ingresos que tiene este paÃs. Pero no
concordamos en que se distribuya inequitativamente".
José Orrantia señala que "el paÃs no puede salir adelante con una
brecha fiscal tan grande, por ello, no solo que se debe acortar la
brecha sino cerrarla de una vez por todas".
Mientras que el presidente Jamil Mahuad insiste en que lo propuesto
en la proforma presupuestaria es su alternativa para el paÃs. "Sé
que en esta cita se llegará a un consenso, un gran acuerdo
nacional, que nos ayudará a todos".
Frases
"No está bien que se congelen los sueldos de los
maestros". León Roldós
"No está bien que cada uno vele por sus propios
intereses'. Paco Moncayo
"Es necesario aportar y ofrecer algo al paÃs'. Jamil Mahuad
"El Gobierno está abierto al diálogo para la búsqueda de
alternativas'. Ana LucÃa Armijos
"Todos debemos aportar algo que sea fructÃfero para el Ecuador"
Mae Montaño
¿De dónde vendrá el consenso?
Por Javier Ponce
En CusÃn, un grupo de lÃderes de la opinión y de la polÃtica
repiten, por tercera ocasión, un ejercicio para crear consensos.
"Se trata de un ejercicio", dijo siempre uno de los promotores de
estos encuentros. Pero, tal vez, los ecuatorianos no están para
ejercicios o la crisis necesita rituales "más en serio".
Lo cierto es que, al ejercicio que comenzó ayer, asistió el propio
presidente de la República, con lo que la cita se convirtió en un
esfuerzo más -quizá desesperado, quizá ególatra- por convencer a
los lÃderes de opinión de que tienen que pronunciarse sobre lo que
está ocurriendo en el paÃs, y que lo deben hacer a partir de la
agenda presidencial y en el marco de la metáfora del barco.
Los invitados al acuerdo se alejan, los unos de los otros.
Mientras grupos surgidos de los movimientos sociales protagonizan
en estos dÃas una escalada de acciones de protesta (que incluyen,
curiosamente, la recordación ya muerta de un aniversario más del
Protocolo de RÃo de Janeiro), los legisladores, que han de votar el
presupuesto, construyen sus estrategias y sus acuerdos encerrados
en los lÃmites parlamentarios, sin diálogo alguno con los
movimientos sociales. Ni los unos ni los otros han demostrado en
estos dÃas, la menor intención de sentarse a una mesa de
concertación.
Por otra parte, los llamados agentes económicos" critican
reiteradamente las propuestas del Gobierno para financiar el
presupuesto. Desmontan, una a una, todas las propuestas.
Los analistas no olvidan los 700 millones de dólares entregados al
Filanbanco y la reconstrucción de la Costa se debate en medio de
enjuagues polÃticos caudillistas.
Cada uno atendiendo a su propio juego.
En CusÃn, Mahuad no estuvo para hablar de la situación dramática
del barco. Estuvo para ratificar que la única manera de salir del
bloqueo en el paÃs, son los acuerdos.
Sin embargo además del paradójico silencio social y polÃtico que
reina, en medio del bullicio en el que todos hablan al mismo tiempo
¿piensa el régimen que los acuerdos deben pasar siempre por sus
propuestas? ¿No puede la sociedad buscar consensos por fuera? Son
interrogantes que crea la presencia de Mahuad en CusÃn.
Aunque se puede objetar que no es posible hablar de consensos sin
tener como referencia lo que está pensando y la forma en la que
está actuando el responsable del manejo central de la crisis, el
presidente.
¿Dónde está el origen de este desentendimiento? Si el Gobierno se
asume como el actor principal, y su presidente está a la cabeza de
la conducción polÃtica, le toca asumir las responsabilidades en ese
campo también. Por ejemplo, la opción de la simple mayorÃa
parlamentaria y no de la concertación. La ausencia de discusión con
sectores como la UNE, de una reforma educativa que las sepulta como
movimiento gremial. El manejo elitista de las propuestas para la
crisis. La ausencia de transparencia en ciertos actos estatales
como el auxilio al Filanbanco.
Hasta el bono de la pobreza, con todas sus bondades, fue fruto de
la sorpresa, mientras otras iniciativas sociales agonizan entre las
paredes del CONAM.
¿Fue sincero el diálogo de la Democracia Popular con la
centroizquierda, para buscar otra mayorÃa parlamentaria? ¿O
simplemente fue un acto simbólico para ratificar su apertura al
diálogo y a los acuerdos para enfrentar el desastre ?
La mojigaterÃa (que también existe en polÃtica) consagró un refrán:
a Dios rogando y con el mazo dando. (DIARIO HOY) (P. 6-A)