Quito. 08.05.91. La caÃda del muro de BerlÃn y la posterior apertura
económica y polÃtica de Europa Oriental, ha traido
repercusiones significativas a América Latina. Tal vez el
efecto más importante ha sido el renovado interés de esta
región por reinsertarse en la dinamia de la economÃa mundial,
después de varias décadas de experimentar con estrategias de
crecimiento basadas exclusivamente en el crecimiento hacia
adentro. Este interés ha dado lugar a que los paÃses de la
región adopten medidas tendientes a integrarse a mayor
velocidad a la economÃa mundial, y asà evitar quedarse atrás
de las regiones del sudeste asiático y la propia Europa
Oriental. Adicionalmente, estos acontecimientos han
conllevado replanteamientos a la integración regional y
subregional, a los que está dando nueva vida en formas menos
ambiciosas como zonas de libre comercio.
Esta tendencia regional hacia la apertura económica se suma al
cambio silencioso que se ha venido dando en las polÃticas
económicas de los paÃses de la región para lograr equilibrar
sus economÃas luego de la crisis de la deuda externa. En
conjunto, estos dos hechos, a más de la legislación sobre
propiedad claramente capitalista, le aseguran a América Latina
una ventaja comparativa en relación a Europa Oriental en la
captación de inversión, tanto extranjera como nacional. Por lo
tanto, estas circunstancias podrÃan significar, si son
complementadas eficazmente, que la década de los años 90
traigan un renovado papel para América Latina en el contexto
económico y polÃtico mundial.
Ecuador no se ha quedado atrás de estos acontecimientos
regionales. En enero de este año el gobierno reformó el
arancel de importaciones, a través del Decreto Ejecutivo No.
2124 del 25 de enero de 1991. Este es el segundo cuerpo legal
dentro del marco de la reforma arancelaria del gobierno
actual.
En esta ocasión, el gobierno redujo aún más la tarifa mayor
para las importaciones, del 60% al 35%. (La única excepción es
la importación de automóviles, cuya tarifa bajo del 80% al
50%. Sin embargo, la importación de vehÃculos continúa
prohibida). La tarifa menor se mantiene en el 5%. Se espera
que futuras disminuciones arancelarias reduzcan la dispersión
entre la tarifa inferior y superior a 15 puntos, es decir, un
piso de 5% y un techo de 20%.
Se deben destacar varios puntos importantes de esta nueva
legislación.
A. El gobierno dejará de percibir aproximadamente 40 mil
millones de sucres por la rebaja arancelaria, por lo que fue
indispensable el aumento simultáneo de los precios internos de
los combustibles en un 15%. El gobierno está reconociendo
implÃcitamente que un arancel de importación equivale en sus
efectos a un impuesto a las exportaciones, que era preferible
obtener estas rentas por otro medio que no cree distorsiones
en los precios relativos de las importaciones y exportaciones.
B. Mediante la devaluación oficial del 6% que acompañó a la
legislación arancelaria, las autoridades gubernamentales
reconocen, si bien un poco tardiamente, la importancia de
mantener la competitividad internacional de los productos de
exportación.
C. Al elimiar los recargos arancelarios creados en 1983, y que
tenÃan un rango de entre el 5,58% y el 15%, el gobierno está
dando señales de que ha iniciado la tarea de descartar el uso
de las restricciones para-arancelarias que entorpecen el
comercio exterior, crean rentas monopólicas e incentivan el
contrabando y la corrupción administrativa. Las barreras
para-arancelarias que deben re-examinarse a futuro son las
restricciones cuantitativas, las prohibiciones de importar y
exportar, las licencias previas y la concesión de cupos.
D. El paquete arancelario reconoce que no puede haber un
adelanto en la calidad de los productos ecuatorianos, cuya
producción se fomentó en el paÃs bajo la protección
arancelaria del mercardo, si no hay competencia de productos
similares del exterior. Además, de esta menera se le prepara
al productor nacional para exportar.
E. La reducción en el techo arancelario permitirá reducir los
costos de importación de varios bienes de consumo, Por lo
tanto, estas medidas arancelarias coadyuvarán a detener el
espiral inflacionario del paÃs.
En resumen, esta segunda reforma arancelaria es un paso
importante para adecuar el comercio exterior del Ecuador hacia
una apertura a la competencia internacional. Además, la
legislación reciente que reduce los costos laborales para
inversiones nuevas, también incentivará la entrada de
capitales nacionales y extranjeros. Con esta reforma, el
Ecuador ha demostrado que está dispuesto a tomar decisiones
difÃciles, y que seguramente adoptará las medidas necesarias
para continuar en el Grupo Andino, pero negociando una
posición que asegure el acceso de los productos ecuatorianos
competitivos a los otros paÃses andinos. En un mundo cada vez
más fraccionado en bloques comerciales, es importante que el
Ecuador se integre al mundo, pero sin desintegrarse de los
paÃses andinos.
FUENTE: INFORMATIVO ECONOMICO. BANCO DEL PACIFICO.
Enero - Febrero 1991
Publicación bimestral - Número 70 (Pág - 1).
en
Explored
Ciudad N/D
Publicado el 08/Mayo/1991 | 00:00