BOULDER, EEU. 29.5.913. (Vía telefónica).- Cuando decidió su
retiro en el kilómetro cinco, abandonó la ruta, se aflojó los
cordones de sus zapatos y se alejó en silencio por una
desierta calle trasversal.
No sabía a ciencia cierta que hacer. Si ir a su casa o al
sitio de llegada. Caminó despacio maldiciendo su malestar
respiratorio que le obligó a desertar.
Contestó a las preguntas frontalmente.. No existieron
aquellas largas pausas cuando parecía meditar mucho para
contestar los requerimientos periodísticos.
"No estoy acabado ni aburguesado, simplemente me retiré porque
mi organismo no funcionó adecuadamente, cumplo un proceso para
correr la maratón y por ello estoy con ritmo lento y en
desventaja ante quienes están dedicados exclusivamente a
carreras cortas. No soy una máquina para ganar y espero que la
gente comprenda que estoy dentro de una planificación que
tiene como meta las Olimpiadas de Barcelona 92" dijo al
comenzar un diálogo saturado por cuestionamientos encaminados
a conocer qué pasó tras un retiro muy controvertido.
La noche después de la carrera no durmió normalmente. Le
atormentó la idea de un retiro obligado. Hasta el momento ha
corrido 76 competencias y el lunes fue su primera
deserción.
"Luego de correr la maratón me sentí un poco lento.
Paulatinamente me recuperé y llegué con optimismo a la
Bolder-Boulder, una competencia muy rápida (10.2 kilómetros)
en un terreno completamente plano y con gente que está
dedicada exclusivamente a carreras cortas.
El lunes por la mañana hizo mucho calor y comencé mi proceso
de hidratación tomando pequeños vasos de agua. Repetí algo que
lo realicé sin ninguna novedad durante la semana previa a la
carrera. Partí y hasta el kilómetro cinco no sentí ninguna
molestia. Iba en el puesto 11 siguiendo de cerca a los
punteros, el ritmo era rápido pero seguirlos no constituyó un
esfuerzo sobrehumano.
Cuando comenzó el sexto kilómetro mi cronómetro registraba 15
minutos de carrera. Sentí una anormal sequedad en mi garganta.
Una especie de flema me impedía respirar. Traté de expulsarla
pero esto complicó las cosas, inmediatamente quise vomitar.
Paré cerca de 40 segundos para tomar agua y tratar de
recuperarme. En esos momentos me alcanzó un pelotón de unos 18
atletas y cuando traté de alcanzarlos era demasiado tarde.
Continuaron las molestias y decidí retirarme. Fue terrible
tomar una decisión de este tipo, no por la opinión de la gente
sino por lo que para mi significa perder una carrera, acá yo
no soy un desconocido y la gente me aprecia". Con respecto al
silencio absoluto luego de la carrera, Vera explicó con
fastidio que "jamás suelo esconderme porque no he cometido
ningún delito. Siempre doy la cara para explicar los triunfos
y las derrotas. Esta actuación es parte del proceso y todas
estas experiencias están encaminadas a correr la maratón
olímpica.
Mis relaciones con la prensa son excelentes
Durante la entrevista se toparon temas delicados que hasta hoy
no fueron aclarados por Rolando Vera. Luego de su matrimonio
circularon muchos rumores, entre ellos un cambio de actitud
ante la prensa ecuatoriana por una posible animadversión de la
esposa del atleta para con todo lo relacionado con el
periodismo.
También se mencionó que su matrimonio se encontraba en una
etapa crítica y que los resultados negativos eran producto de
una enorme inestabilidad emocional por parte de atleta.
Vinieron las preguntas y aquí las respuestas.
-Su esposa siempre mostró una resistencia injustificada para
con el periodismo en general, ¿es por esta razón que usted
resolvió no proporcionar su numéro telefónico en Boulder,
alejándose de esta manera de mucha gente que le acompañó en
los momentos buenos y malos de su carrera?
-Nunca he negado una entrevista. Mis relaciones con la prensa
ecuatoriana son excelentes y justamente ahora dialogo con
ustedes. Mi esposa no detesta a los periodistas, lo que sucede
es que ella piensa que las entrevistas son para mí y ella se
ocupa de la casa y aquella situación es muy privada.
-Quien genera las noticias es usted y por ello el periodista
busca a Rolando Vera, no a su esposa...
-Ella es algo muy especial. Yo siempre estaré dispuesto a
conversar con el periodismo.
-Rich Castro dijo que tenía prohibición suya de proporcionar
el número telefónico....
-El no suele meterse en la vida privada de los atletas que
dirige y entendió que no debía dar el número sin haber hablado
previamente con nosotros.
-Pero ¿hubo o no la prohibición?
-Jamás
-¿Es verdad que existen diferencias enormes entre usted y su
esposa, que ella no le ayuda en su preparación y que esto ha
repercutido en los resultados logrados últimamente?
-Voy hablar claro y por última vez, pues anhelo que se respete
mi vida privada. Mi matrimonio marcha muy bien, no tengo
ningún problema y me siento feliz. Acá el asunto es duro, solo
o acompañado, es un medio nuevo para nosotros. Sandra es una
gran compañera y su presencia me ha ayudó muchísimo.
De hecho, nada puedo hacer ante conjeturas de gente que
únicamente busca hacer daño a Rolando Vera.
-¿Por qué se escondió después de la carrera?
-Al retirarme sentí que el mundo se hundía, pese a no estar
para festejos, acepté la invitación de Luis Bravo, ecuatoriano
residente en Denver. Nadé bastante para quitarme de encima
tanta preocupación. Llegué tarde a casa esto es todo y no soy
un delincuente para esconderme.
-¿No será que Rolando Vera está aburguesado, al tener una
buena posición económica, fama y según usted una excelente
relación familiar?
-Sigo siendo el mismo de siempre. Ahora como padre de familia
tengo más responsabilidades. Mis objetivos están intactos,
quiero cumplir una gran actuación en la maratón olímpica en
Barcelona 92 y voy a seguir firme en este proceso, cueste lo
que cueste.
-Luego de estas actuaciones la gente comienza a dudar si es
que Vera inició su decadencia.
-No soy una máquina de triunfos y soy honesto. Si quieren
verme ganar semanalmente es fácil correr competencias de medio
pelo y punto. Pero yo debo superar grandes rivales si quiero
llegar entre los primeros en Barcelona.
Reitero estas carreras son parte de un proceso evaluatorio, la
meta es mucho más importante y no deben sorprenderse. Lo que
pasa con Rolando Vera es que no puede perder porque la gente
se acostumbró a verlo ganar siempre y por Dios espero me
comprendan. No estoy acabado, comienzo un proceso y tengo 26
años de edad.
-¿Por qué amigos que estuvieron antes junto a usted se han
alejado luego de su matrimonio?
-Habrá que preguntarlos a ellos. Yo no he cambiado, sigo junto
a Juanito Araujo, a Marathon Sports y a todos quienes me han
acompañado. Lo que sucede es que hemos estado bastante tiempo
fuera del país.
-¿Cuándo viene a Quito?
-Este fin de semana, quiero estar con la debida antelación y
ojalá me vaya bien en la competencia capitalina.
Síntesis
-No estoy acabado. Mi retiro se originó en problemas de mi
organismo
-Cumplo un proceso para la maratón y en tal sentido no estoy
preparado para competencias rápidas (inferiores a 15
kilómetros).
-Mi matrimonio marcha bien y los rumores propalados en el
sentido que existen desaveniencias con mi esposa son
totalmente falsos.
-Acepté correr la Bolder Boulder como una prueba para medir el
proceso recuperativo después de una maratón.
-Es la primera vez que me retiro después de competir en 76
pruebas.
-Mi objetivo máximo es la maratón de las Olimpiadas del 92 en
Barcelona y no me importa las dificultades que surjan por
cumplir una planificación exigente.
-Jamás me escondí tras un resultado adverso. Deben comprender
que estaba afectado anímicamente así que decidí nadar para
quitarme de encima un peso sicológico.
-No estoy conforme con lo alcanzado hasta el momento. Tengo
metas más altas.
-Quiero ir a Ecuador este fin de semana para correr junto a
mi gente en la Quito-Ultimas Noticias. (1B).
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