Quito. 6 sep 99. Su nombramiento se produjo luego del
Diálogo entre Mahuad y Durán Ballén.

- Mi nombramiento no tiene relación con eso, porque yo no tengo
ninguna vinculación política con el ex presidente Durán Ballén;
en lo personal mantengo una relación de amistad por haber sido
su colaborador.

¿Cómo fue la propuesta?

- Yo estaba en Francia; el presidente me llamó por teléfono y me
dijo que quería hablar conmigo, pero no entró en más detalles.
¿Qué pasó luego?

- Cuando regresé me propuso la Secretaría de Desarrollo Humano
y la vocería del Gobierno. Acepté dos días después.

¿Se afilió a la DP o es miembro del partido Conservador?

- Siempre he sido independiente y pienso mantenerme así, pues yo
solamente respondo a ciertas ideas, principios y convicciones,
pero no pertenezco a ninguna agrupación política o partidista.

Javier Ponce, de HOY, lo califica de "todo terreno" debido a su
paso por el Gobierno, la asociación de bancos, el periodismo...

- Prefiero ser "todo terreno" a ser un todólogo que critica y
opina sobre todo pero que no ha hecho nada específico en ningún
terreno. Creo que no he fallado en ninguno de los cargos que he
desempeñado, porque me he preparado a lo largo de mi vida para
servir en la función pública.

¿Qué sabe usted de políticas sociales?

- Me especialicé en políticas sociales cuando hice un doctorado
en la Universidad de Ginebra, Suiza; he realizado algunas
consultorías (en el país y en el exterior), trabajé para el Conam
en una restructuración de las instancias gubernamentales en las
áreas social y administrativa, de modo que me siento preparado
para el cargo y me parecen inadecuados esos juicios anticipados
antes de que yo pueda demostrar mi capacidad.

¿En la práctica social, cuál es su experiencia?

- En 1982 dirigí los consultorios jurídicos gratuitos de la
Universidad Católica (Quito). Luego, cuando estudiaba en EEUU,
trabajé en albergues para personas pobres, organizando comidas,
encuentros. Esas son las experiencias directas que he tenido.

¿Solo hacía falta un buen administrador para encaminar lo
social?

- Este es un problema estructural porque todos los Gobiernos han
descuidado el sector, de ahí que los servicios se provean de
manera ineficiente; hay duplicación de funciones y un gran
desperdicio de los pocos recursos existentes. Yo planteo una
reforma estructural para cambiar ese modelo de gestión y atender
directamente al ciudadano.

¿Cómo?

- Queremos focalizar toda la gestión para que llegue a los más
necesitados; implantar un sistema de cogestión sin que el Estado
renuncie a su obligación y derecho de atender lo social; vamos
a modernizar y racionalizar la forma de gestionar los servicios;
también pondremos énfasis en un programa de emergencia en el que
se incluyen la alimentación escolar y el bono educativo, entre
otros planes.

Infiero que habrá más subsidios.

- Tanto en Salud como en Educación, la idea es dar cobertura a
un mayor número de beneficiarios, mediante la entrega de
incentivos directos. Una tarea inmediata será el bono educativo,
cuyos detalles son afinados por la ministra de Educación,
Rosángela Adoum.

¿Y el sector rural?

- Mediante el Siise (Sistema Integrado de Indicadores Sociales
del Ecuador), identificaremos las necesidades más elementales de
las parroquias y las comunidades, para atender a las zonas
rurales.

¿Y el crédito externo?

- Quiero centralizar en esta Secretaría todo el manejo del
crédito externo para dar prioridad a proyectos y encargar el
manejo a los diferentes ministros, con el fin de llevar adelante
la gestión de una manera organizada.

¿Las ONG entran en su esquema?

- Serán instancias claves en el nuevo esquema que diseñemos, para
una serie de servicios sociales.
Algunas ONG no tienen buena fama.

- Como en todo, algunas ONG son absolutamente serias y
responsables, pero otras no cumplen con estos requisitos.

¿Hará un estudio sobre ellas?

- Yo creo que el Estado, si quiere participar en un programa
conjunto, debe calificar rigurosamente a estas organizaciones.
Quizá algunas son serias, pero con filtros de evaluación pueden
ser eliminadas. Eso sí, la ONG es un instrumento muy valioso para
aplicar la política social.

¿Ha discutido sus proyectos con los ministros del área social?
- He dialogado con todos y en los próximos días tendremos una
reunión formal para definir una agenda social conjunta.

¿Cuándo sabremos el contenido de esa agenda?
- Lo más pronto posible, en el transcurso de las próximas
semanas.

Usted también es el vocero del Gobierno, ¿será transmisor de
mensajes o negociador?

- La vocería implica transmitir la filosofía del Gobierno, o sea,
comunicar en las vías activa y receptiva lo que hace el régimen.
No me corresponde a mí el campo de la negociación.

¿No cabildeará ni por las leyes de su área?

- Dentro de mi área, claro que entraré en negociaciones; hay que
conversar, dialogar, encontrar acuerdos: por ejemplo, en el
sector indígena creo que es importante activar y profundizar los
diálogos.

Pero eso lo convierte también en negociador.

- No, porque yo no voy a negociar con fuerzas políticas, eso no
me corresponde a mí. Mi contacto será básicamente con los medios
de comunicación; voy a transmitir los mensajes. Quiero dejar en
claro que quienes negocian son los ministros de Gobierno, de
Finanzas, el secretario de Economía.

¿Cómo será su función de vocero?

- La desempeñaré en estrecha coordinación con el presidente de
la República y con los otros ministros, que también actuarán como
portavoces.
Entonces habrá más de una docena de voceros: todos los ministros.

- Es que ellos tienen que entrar en los detalles de sus propias
carteras, al menos ese es el caso de los otros secretarios de
Estado, pues hay temas temas específicos que solo ellos
manejan... Yo trataré, simplemente, de articular, de manera
integral, la filosofía del Gobierno, la estrategia que se
persigue para transmitirla al país.

¿Cómo transmitirá esa filosofía?

- Creo que la mejor forma es mediante un contacto permanente con
la prensa; tendré absoluta apertura para absolver consultas,
guiar en los análisis, para proveer la información. Yo creo que
en el Gobierno hay mucha información y, sin embargo, por esta
falta de conductos, ha habido déficit, entonces, pienso que con
un contacto estrecho con los medios de comunicación, se puede
lograr eso.

El Estado tiene formas de manipular información.

- A estas alturas creo que es muy difícil ocultar información y
a nadie le conviene hacerlo. La mejor política es la absoluta
apertura y transparencia, de esa manera se evitan problemas.
(DIARIO HOY) (P. 3-A)
EXPLORED
en Autor: Ana Angulo - [email protected] Ciudad Quito

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