Quito. 23 abr 2001. Los márgenes de utilidad en los precios de productos
nacionales e importados llegan hasta el 250%. El Ecuador se convierte en
el paÃs más caro de la región andina.
UNIDAD DE ANÃLISIS
La mayorÃa de las empresas del paÃs recargan a sus clientes hasta un 250%
en los precios de venta. Esto resulta excesivo al tomar en cuenta los
costos incurridos en su importación y comercialización.
Esto confirma los comentarios que presenta una publicación del Banco
Interamericano de Desarrollo, donde se dan a conocer las falencias que
mantiene el entorno empresarial latinoamericano.
El documento manifiesta que las compañÃas de la región, en general,
presentan deficiencias de carácter interno que entorpecen su desarrollo y
limitan su actividad. Entre estas se mencionan las infraestructuras,
sistemas de costos y los mecanismos de fijación de precios.
Ecuador no escapa a esta realidad, pues en el paÃs no se aplica una
fórmula precisa para establecer precios justos ni de acuerdo a la
realidad del mercado. Además se mantienen márgenes de utilidad que no son
los apropiados para un sistema monetario dolarizado.
Márgenes elevados
Los negocios grandes y pequeños aplican tasas de utilidad que superan
largamente el costo total de poner un producto a la venta. Un caso tÃpico
es el sector de los automotores, donde los márgenes llegan muchas veces
hasta el 80%.
Por ejemplo, el precio en el mercado local de un auto Chrysler Neón 2001,
ensamblado en Venezuela, es de USD 23,500 incluyendo el Impuesto al Valor
Agregado (IVA)
El costo del mismo carro en los Estados Unidos es de USD 11,000 para la
exportación. Incluso, si la persona interesada decidiese importarlo
directamente, solo tendrá que pagar USD 16,800 incluyendo flete, seguro y
arancel.
Los electrodomésticos son también productos de recargos excesivos. Una
pantalla gigante de 51 pulgadas, se la vende localmente en USD 3,800,
mientras que en los Estados Unidos su valor es de tan solo USD 899, de la
misma marca y modelo.
Un almacén que forma parte de una cadena internacional, mantiene márgenes
que en ciertos casos llegan al 110%, considerando ya los costos e
incluyendo aranceles, fletes y seguro.
Los artÃculos de belleza y perfumes también mantienen diferenciales de
100 al 120% con respecto a los precios de venta en el mercado
norteamericano.
Y, en los inicios de esta época escolar, los padres de familia y
estudiantes se muestran sorprendidos por las elevaciones en precios de
crayones, lápices de colores y libros en general.
Para muestra basta un botón: en el mercado norteamericano y canadiense,
la caja de 16 crayones marca Crayola se cotiza entre USD 0.99 y 1.69,
mientras que una tienda muy conocida en Guayaquil la vende en USD 5.16.
Las diferencias más impresionantes se dan en los bienes raÃces.
Actualmente departamentos de lujo en Salinas se venden en un rango que va
de los USD 120,000 a 350,000, mientras que en Brickell y Key Biscayne,
las zonas más exclusivas de Miami, se cotizan en USD 120,000, en
edificios con mejores caracterÃsticas.
La especulación con los precios y la falta de métodos eficientes para
racionalizar los gastos, ya sean estos operativos o administrativos, se
han convertido en el aliado número uno de la inflación.
Productos nacionales son caros
Resultan inexplicables los precios tan elevados que tienen los productos
hechos localmente.
Cuando se consideran los valores de mano de obra y otros gastos de
fabricación, el precio final de venta deberÃa de ser más bajo que en
Colombia, Venezuela, Chile y México. Sin embargo, los nacionales superan
largamente a los de esos paÃses.
Es por esto que los productos colombianos están invadiendo ampliamente el
mercado ecuatoriano, principalmente con útiles escolares y materiales de
oficina.
Similarmente, los automóviles ensamblados en Venezuela son un 40% más
baratos que aquellos trabajados en el Ecuador.
Otro es el caso de las bebidas gaseosas, que en los Estados Unidos
cuestan USD 0.80 la botella de dos litros, mientras que la elaborada
localmente llega a los USD 0.90.
Ante los precios altos, las preferencias de los consumidores se han
volcado a realizar compras directamente desde el exterior o vÃa Internet.
La importación directa desde los Estados Unidos, por ejemplo, les permite
ahorrar hasta un 100%, ya pagando los aranceles e impuestos respectivos.
Más baratos por internet
Los consumidores han encontrado excelentes oportunidades en las agencias
de couriers.
Por lo general, el cliente compra a través del Internet y procede a
solicitar que se le envÃe la mercaderÃa a la oficina del courier en
Miami, Nueva York o Los Angeles.
En un 90%, estas son adquisiciones de electrodomésticos hasta mediano
tamaño como: equipos de sonido, hornos de microondas, vÃdeo, televisores
y videograbadoras.
También hay compras de artÃculos pequeños entre los cuales están cámaras
digitales y filmadoras.
Por estas dos vÃas (Internet y agencias de carga) se puede adquirir todo
lo que se desee. La legislación aduanera ecuatoriana indica que los
paquetes personales, que no excedan los 2 kilos de peso y los USD 200 de
valor se podrán retirar de aduana sin complicaciones y sin pago de
impuestos (con excepción del IVA).
Legislación aduanera
Si el valor de la mercancÃa importada es de USD 4,000 o más, se requiere
de una inspección por parte de las verificadoras.
Cuando el valor CIF (costo, seguro y flete) de las mercaderÃas importadas
sea superior a USD 2,000, será obligatoria la intervención de un agente
de aduana.
Los efectos personales del viajero o el equipaje acompañado, están
exentos de tributos aduaneros. Estos comprenden prendas de vestir, joyas,
bisuterÃa, juguetes, artÃculos para deporte, productos farmacéuticos,
perfumerÃa, alimentos para niños, silla de ruedas y aparatos ortopédicos
y médicos de uso exclusivo de quien viaja.
También se incluyen como efectos personales: cámara fotográfica,
filmadora, aparato de vÃdeo, máquina de escribir, computadora personal,
radio, radio casetera, compacdisk siempre y cuando el monto total de
estos no supere los USD 1,250. (Texto tomado de El Expreso)