Quito. 18.07.93. "Con verdadera satisfacción puedo asegurar que
la Junta Monetaria que me honré en presidir desempeñó un papel de
absoluta preponderancia dentro de la polÃtica de modernización
que se fijó desde un principio su gobierno" sostiene Roberto
Baquerizo en una carta que dirige al presidente Sixto Durán
ratificando su renuncia.
Baquerizo agrega que se ha "logrado transformar el marco
macroeconómico y financiero del Estado, mediante la
transformación del sistema cambiario y del sistema de tasas de
interés, la creación del mercado de Futuros, la expedición de la
Ley de Mercado de Valores, la creación de las mesas de dinero que
tanto en sucres como en dólares operan con transparencia
actualmente en el Banco Central del Ecuador, a través de las
cuales se han realizado, en moneda extranjera desde su
instalación, transacciones de compra por 212 millones de dólares
y de venta por 202 millones, significando una posición neta de
apenas 10 millones de dólares.
Aspectos éstos que, para el ex-presidente de la Junta Monetaria
han creado un transparente mercado financiero, confianza en el
sector empresarial y han colocado al Ecuador por fin en la lÃnea
de pensamiento económico vigente en el mundo entero.
"Las polÃticas resueltas por la Junta Monetaria trajeron como
consecuencia el incremento vertiginoso de la Reserva Monetaria
Internacional a niveles jamás alcanzados en la historia, niveles
que hoy llegan a los 1.021 millones de dólares. Asimismo, se
obtuvo como resultante la estabilidad cambiaria durante
prácticamente un año, con una cotización promedio desde el 30 de
septiembre a la fecha de 1.900 sucres por dólar; la reducción
drástica de las tasas de interés, del 80 por ciento, a promedios
en igual perÃodo del 39 por ciento; y, la caÃda de la tasa de
interés interbancaria a promedios del 25 por ciento. Cabe anotar
que la emisión monetaria, proyectada originalmente en un 45 por
ciento anual, reporta al 30 de junio un incremento efectivo de
tan solo el 40 por ciento.
Estimo que una gran parte del camino para llegar a la
modernización plena del Estado se han recorrido dentro del área
económica. No obstante los grandes logros, resulta fundamental
para el futuro del PaÃs que se complete la reforma al sistema
cambiario; se concrete la expedición de la Ley de Instituciones
Financieras; y, se resuelva la reforma a la Ley de Régimen
Monetario incluyendo la capitalización del Banco Central del
Ecuador a fin de evitar una posible dilapidación irresponsable de
los depósitos que mantiene el sector público en el Instituto
Emisor, con su grave efecto inflacionario, depósitos que con
inmenso esfuerzo y verdadero sacrificio nacional han logrado
ubicarse en los niveles actuales.
Estos planes confÃo se sigan llevando adelante dentro del
propósito positivo y real de restructurar el Estado. Insisto en
la ineludible necesidad de que se tomen urgentes decisiones que
permitan alcanzar la eficiencia y redefinición del papel del
Estado en la economÃa del PaÃs, para que de esta forma podamos
lograr un verdadero desarrollo que signifique el anhelado y
necesario mejoramiento del nivel de vida de todos los
ecuatorianos.
Es mi deseo hacer una especial mención a los demás miembros del
Gabinete que de manera permanente, soportando patrióticamente
angustiosas limitaciones, mantuvieron su confianza en las
polÃticas económicas adoptadas. Agradezco igualmente el
gravitante apoyo recibido del cuerpo técnico y administrativo del
Banco Central del Ecuador, asà como del asignado a la Junta
Monetaria, que con dedicación y decencia colaboró en nuestras
difÃciles tareas. A usted, señor Presidente de la República,
hago llegar mis sentimientos de gratitud por la oportunidad de
servicio a la comunidad brindada durante más de once meses de
labores.
Al interior del Gobierno, señor Presidente, conoce usted que
existieron, como es lógico y natural, obvias discrepancias que
muchas veces empantanaron la consecución de metas y la toma de
decisiones. Mi posición expresada en múltiples ocasiones a usted
fue siempre en busca de lo que decididamente pienso era mejor
para el PaÃs, sin defender consideraciones personales ni
intereses particulares, procurando respaldar lo que, con respeto
a los planes trazados, resultara menos traumático para los
estratos más empobrecidos y otorgará mayor estabilidad y
confianza al régimen.
Hago públicos mi profundo respeto e incondicional agradecimiento
a los señores vocales de la Junta Monetaria, ingeniero Gonzalo
Sevilla Naranjo y economista Rodolfo Baquerizo Alvarado,
representantes del señor Presidente de la República; ingeniero
Diego gándara Pérez, por las Cámaras de la Producción de la costa
y Galápagos; economista Raúl Guerrero Andrade, por los Bancos
Privados Nacionales; y, doctor Ricardo Muñoz Chávez,
Superintendente de Bancos, sin cuya valiosÃsima colaboración,
profundos conocimientos, sabias recomendaciones y honestidad
incuestionada hubiera resultado imposible llevar a cabo la
transformación que confÃo se ha alcanzado.
Desempeñé mis funciones con el exclusivo ánimo de colaborar en el
cambio que el Ecuador necesita. A través de más de 40
Regulaciones y 20 Resoluciones expedidas durante mi perÃodo
aspiro se ha conformado el marco apropiado de transformación y
desarrollo económicos, habiendo procurado constantemente el
diálogo franco, la exposición clara de la verdad y el trabajo
conjunto en la implementación de soluciones.
Atentamente,
Roberto Baquerizo Valenzuela
en
Explored
Ciudad N/D
Publicado el 18/Julio/1993 | 00:00