Unas bien cuidadas jardineras "suavizan" la atmósfera del vestÃbulo del edificio del Departamento de Estado, en Washington, que parece un fortÃn, con barricadas de concreto afuera y controles electrónicos adentro. En el cuarto piso hay que atravesar un larguÃsimo corredor para llegar a una sala donde el subsecretario de Estado para Asuntos del Hemisferio Occidental, Otto Reich, se presenta con una carpeta, la cual no necesita abrir durante toda la entrevista. Responde con precisión a todas los preguntas, pero no recuerda el monto de la ayuda financiera de Estados Unidos a Ecuador
Muchos sectores consideran que el Plan Colombia regionalizará el conflicto...
La posible solución a los problemas es tratar de terminar la guerra dentro de Colombia. Si estos grupos terroristas ocuparan más territorios en Colombia, se expandirÃan a los paÃses limÃtrofes. La guerrilla ha cruzado las fronteras de Panamá, Venezuela, Brasil y Ecuador, por lo cual tenemos el Programa Regional Andino que significa $763 millones, si no me equivoco, para los cuatro paÃses de la región andina, además de la ayuda bilateral.
¿Hay otros mecanismos que no sean la fuerza para combatir a los grupos armados de Colombia?
Atacando las causas de las cuales se aprovechan los terroristas, como es la pobreza. Suministrando mucha ayuda económica, no militar, lo que llamamos el desarrollo alternativo, para tratar de dar empleo a personas que no lo tienen. La democracia no puede progresar donde hay hambre, porque cualquier persona que no pueda dar de comer a sus hijos va a ser un blanco efectivo para un demagogo o un terrorista que haga promesas.
Su Gobierno no ha cumplido lo que ofreció al programa Udenor, que busca propiciar fuentes de ingresos a la gente, contradictorio con su filosofÃa...
Yo no estoy de acuerdo, porque hemos aumentado la ayuda que se le ha dado a Ecuador, que era casi nada hace varios años.
No existÃa el proyecto...
Claro, pero se ha aumentado. Lo que pasa es que la ayuda que habÃa propuesto el Departamento de Estado fue recortada por el Presupuesto de EEUU. Sin embargo, fue aumentada y se está ayudando a Ecuador.
¿Puede darnos cifras?
SÃ, sÃ. No las tengo conmigo, pero se las puedo dar (las cifras son enviadas vÃa correo electrónico, pero se refieren a la ayuda global: $50,61 millones, aprobados por el Congreso. La Embajada señala una ayuda total de $66 millones).
Hablemos de la extradición. Usted ha declarado que no van a permitir que los funcionarios que roben en Sudamérica vengan a curarse o a residir en Estados Unidos y que sus esposas compren en la Quinta Avenida. ¿Qué pasos han dado para que los prófugos puedan ser extraditados?
La polÃtica del presidente Bush es muy clara: nosotros estamos en contra de la corrupción, ya sea pública o privada. Sabemos que la corrupción es algo que ha estado con nosotros desde los tiempos bÃblicos, y, tal vez, va a ser tan difÃcil atacarla como a la pobreza, pero no vamos a rendirnos. La corrupción daña nuestros esfuerzos y el de los paÃses democráticos de mejorar el nivel de vida de la gente. Los corruptos, ya sean públicos o privados, no solo se roban el dinero de los Gobiernos o los bancos, sino que le roban a los pueblos la esperanza de una vida mejor, ya que los pueblos pierden confianza en las instituciones públicas o privadas, y, sin confianza en las instituciones, no puede haber desarrollo económico. EEUU acaba pagando mucho de estos costos porque tenemos que aumentar nuestra ayuda a paÃses que están siendo atacados, ya sea por terroristas o por populistas que dan un mensaje falso de esperanza a los pueblos. Estamos pagando la corrupción no solo por las donaciones de asistencia, sino porque vienen a nuestro paÃs personas que deberÃan contribuir al desarrollo de sus paÃses.
También dañan su imagen porque en Sudamérica se comenta que en los discursos dicen combatir la corrupción, pero acogen a los corruptos.
No, no. Hemos revocado cientos de visas, pero nuestra ley es un poco extraña, y no podemos dar a conocer el nombre de las personas; solo podemos confirmar o negar, si nos preguntan.
A partir del 11 de septiembre, el Congreso ha dado al Ejecutivo más autoridad (Patriot Act) para atacar el lavado de dinero. Las personas que roban también tienen que esconder el dinero. Esas leyes que nos permiten atacar las redes de los grupos terroristas nos han ayudado a desenmascarar a funcionarios de Gobierno, y a hombres y mujeres de negocios. El mensaje de mi Gobierno es que nadie que esté robando dinero, ya sea público o privado, duerma tranquilo. Queremos que se queden en sus paÃses y que sean encausados por sus pueblos.
¿Qué pasa con nuestros paÃses?
No hay razón alguna por la cual este Hemisferio no pueda tener los mismos niveles de desarrollo económico en el sur como en el norte. ¿Qué existe en el norte que no exista en el sur? Recursos naturales, no. Todo existe en el sur: petróleo, oro; se puede decir que América del Sur tiene más recursos naturales que América del Norte. ¿Recursos humanos? No. El tamaño del cerebro es el mismo en los habitantes de todos los paÃses. La diferencia es que aquà se expulsa a un miembro de la Cámara de Representantes y el FBI arresta a un ejecutivo de una empresa que abusa de sus funciones, y es llevado a la cárcel, y es visto como normal; aquà se aplican las leyes.
(Concluye la entrevista porque Otto Reich tiene una reunión de dos horas con el Departamento de Justicia y otros sectores del Gobierno para hablar de las extradiciones).
LA FICHA
Otto Reich (57 años) nació en Cuba. Tiene una licenciatura en Asuntos Internacionales y una maestrÃa en Estudios Latinoamericanos en la Universidad de Georgetown. Entre 1986 y 1989 fue embajador de EEUU en Venezuela. Fue teniente del Ejército estadounidense.