Mujeres solitarias que deambulan sobre el asfalto de las ciudades. Mujeres tristes, con una enorme sensación de abandono y desolación. Mujeres que buscan paliar sus angustias en una constante búsqueda interna. Gabriela Fernández Argüello (Quito, 1971) las construye en La noche de Eva (Premio Aurelio Espinosa Pólit, 2004), una serie de 11 cuentos en los que también, aunque en menor escala, aborda personajes masculinos que habitan, de la misma forma, en los márgenes reales e imaginarios de la urbe. Con una escritura limpia, nítida, muy bien trabajada, esta escritora irrumpe con fuerza ahondando principalmente en la psicología femenina (si cabe el término), profundizando en los deseos, a menudo insatisfechos, de sus personajes. Fernández descascara a sus mujeres y hombres. Los pone en evidencia. Muestra su fuerza y su fragilidad. Narra historias sencillas y cotidianas que pueden ser vividas por cualquier hombre o mujer. Nostálgica: Tras cada texto o tras cada lectura que se realiza, un halo de nostalgia y misterio se deja sentir como una constante.
Melancolía, entornos principalmente grises y fríos, son descritos también con mucha sencillez traslandando al lector a esas locaciones. Son urbes (que no siempre tienen nombre) en las que esos habitantes trazan sus recorridos en esas búsquedas incesantes. Algunas se ubican en Europa y otras, según la descripción de algunos detalles (volcanes) remiten a Quito, que sí es nombrada en una de las narraciones.
Hastío y búsqueda constante de paz, tranquilidad y de esa felicidad que Hermann Hesse dijo, en algún momento, que el hombre la busca perentoriamente y que cuando la encuentra no la soporta por mucho tiempo, son las razones que empujan a los seres de esta escritora a salir a divagar en esas metropólis, como lo hace Eva, que bien puede resumir a casi todos los caracteres femeninos que Fernández describe.
El agua que corre por el cuerpo, relajando y acariciando la piel de sus mujeres, se convierte en una constante en su obra. En La noche de Eva, el lector puede dar rienda suelta a sus cinco sentidos y entregarse al solitario placer de descubrir el histrionismo de una serie de mujeres que bien pueden estar cerca de uno, a un costado. (PAS)



PALABRAS EN EL TIEMPO

Zapata: No hay naves para lesbos

Jorge Dávila Vázquez

Eskeletra acaba de entregar No hay naves para Lesbos, de Cristóbal Zapata (1968), el nombre más importante de la literatura cuencana de las últimas generaciones. 19 poemas y prosas líricas conforman este volumen. La última es de Onetti. No la incluye Zapata como suya, pero está perfectamente ensamblada con el conjunto, y se amolda a la temática y al desarrollo del poemario. Saber elegir el texto apropiado para hacerlo parte de los propios, es también mérito creativo de un escritor, aunque más de un lector pueda sentirse chocado.
Pieza muy lograda es el poema que da nombre al libro; más que un frustrado viaje a Lesbos, por parte de la protagonista, hermosa modelo, elevada a cumbre y condenada al abismo por una sociedad inhumana; más que una exploración en el mundo de la sexualidad otra, es un viaje al Hades, con su carga infernal y oscura, pero dentro de la particular estética del autor, de gran belleza. María Augusta Vintimilla señala la "admirable... precisa composición de cada poema...", y asimismo, que el texto está "enraizado en sus poemarios anteriores, algunas de cuyas líneas maestras continúa -como ese diálogo con un extenso registro de textos culturales pero también con aperturas que dejan vislumbrar nuevos comienzos..."
Sí, luego de Corona de Cuerpos (1992), Te perderá la carne (1998) y Baja Noche (2000), Zapata llega en No hay naves para Lesbos a un punto de alta calidad en la escritura; trabaja sobre motivos que estaban en sus otros títulos, en especial, la cultura y el eros, dos de sus más altas y hondas pasiones, y lo hace cada vez con mayor dominio del oficio, y más bien pocas falencias, lo que nos permite afirmar que este libro es el anuncio contundente de la madurez que ha alcanzado el autor, manteniendo una línea estética, una concepción del mundo, una forma de enfrentar la vida y el arte, contradictorias, dialécticas, transgresoras, pero profundamente personales.
No hay naves para Lesbos es la concreción de un hacer lírico, exigente, basado en el trabajo incansable sobre la palabra; es la negación absoluta de la improvisación, y es la celebración de los temas en una de las formas más acabadas de la poesía contemporánea no solo de Cuenca, sino del país.


LIBROS

Música oscura

"Cuidaré tus pájaros, pero me niego a hacer el amor en la jaula". Este pequeño verso abre un poema de la más reciente antología personal de la periodista y poeta Aleyda Quevedo Rojas. La obra ha sido editada en España. El pequeño cuadernillo lleva apenas 27 páginas. Pequeñas piezas poéticas como Música japonesa, Naturaleza, Aguijón, y Desgaste, forman parte del volumen. Quevedo ha publicado antes: Cambio en los climas del corazón, La actitud del fuego, Algunas rosas son verdes y Espacio vacío.

Aleyda Quevedo
Almería
27 pgs.

Al cielo por agua

El pintor, psicólogo, escritor y humanista ecuatoriano Mario Müller presentó esta semana su primera incursión literaria.
Müller se ha dedicado a contar historias que retratan el poder, el egoísmo y la hipocresía de la sociedad. Sus personajes son un político simpático y cínico, una mujer suiza que sufre en carne propia su acercamiento al tercer mundo, y un grupo de militares en operaciones. Al cielo por agua tiene como escenarios tres ciudades arquetípicas del mundo contemporáneo.

Mario Müller
Cueva Editor.

Por qué la gente odia Estados Unidos

¿Por qué la percepción de los norteamericanos se aparta tanto de la del resto del mundo? ¿Por qué intenta imponer su cultura como si fuera la única? ¿Por qué el pueblo norteamericano es tan extremadamente ingnorante sobre los asuntos internacionales? Estas preguntas sirvieron como punto de partida para que el escritor analizara las causas que han generado ese sentimiento de repulsión unánime contra el país del norte. Tal rencor se enfoca en su sistema cultural que impone en forma arbitraria sus valores.

Ziauddin Sardar
Ed. Jadisa
315 pgs.

Cuenca Santa Ana de las Aguas

Una bella edición que recoge los rincones secretos de la ciudad austral. Se trata de un trabajo preparado por la editorial Libri Mundi que recrea, a través de 26 fotografías recogidas entre destacados fotógrafos y archivos, la historia y el espíritu de la "morlaquía". Cristóbal Zapata, Ernesto Salazar, Diego Jaramillo, Juan Martínez, Ana Abad y Felipe Aguilar proporcionan las versiones escritas de la obra poblada en cada página por detalles de cúpulas, reproducciones de cuadros, mapas y edificios antiguos y modernos.

Varios Autores
Libri Mundi
327 pgs.


RECOMENDADO

Fernando Jurado (Ediciones Fonsal)

Calles casas y gente del centro histórico

Una versión ampliada del libro Calles, casas y gente del centro histórico de Quito es el texto que presenta Fernando Jurado Noboa, miembro de la Academia de Historia desde hace 25 años. Este texto proporciona al lector una visión detallada de la historia urbana de la capital y de la cotidianeidad de su gente en casi cinco siglos de desarrollo.
Jurado editó la primera versión de este libro hace 20 años con el apoyo del Banco Central del Ecuador; ahora lo realiza con el auspicio del Fonsal. El autor de Calles, casas y gente del centro histórico, en su texto, explica la historia de las calles Emeraldas, Chile, Oriente, El Vergel, Galápagos. Además, hace un breve relato sobre las personas que vivieron en algunas de las casas antiguas del centro de Quito como la del prócer Quiroga, la de los Luna Tobar, la de los André Suárez, entre otras.
El libro consta de 271 páginas con fotográfías a full color y con un índice de todas las calles.

REVISTAS

Ocho y medio

El boletín de la sala independiente trae una interesante reseña del ciclo de cine francés que se encuentra proyectando.

Grabado

La guía de la exposición que Luis Aguilar Monsalve ha preparado para este mes ofrece algunos de sus trabajos.

TV Guía y entretenimiento

La Publicación mensual trae amenos comentarios sobre las películas que se presentan este mes en la tv.


QUITO en Mr Books

1. Memorias de mis putas tristes, García Márquez.
2. El código Da Vinci, Dan Brown.
3. El pianista, Elfriede Jelinek.
4. Ensayo sobre la lucidez, José Saramago.
5. Delirio, Laura Restrepo.
6. Quien se robó al Ecuador, Christian Valencia.
7. Dolarización, un amor eterno, Pablo L. Paredes.
8. Quito, Patrimonio Cultural Trama.
9. Chagras, Peter Oxford.
10. Calendario 2005 Ecuador, Hyla. GUAYAQUIL en El Librero

1. Memorias de mis putas tristes, García Márquez.
2. Padre rico y padre pobre, Robert Kiyosaki.
3. Quien se robó al Ecuador, Cristhian Valencia.
4. La familia, Kitty Kelley.
5. Las veinte grandes conspiraciones, S. Caamacho.
6. La sombra del viento, Carlos Zafón.
7. Che, desde la memoria, Varios autores.
8. Niño rico, niño listo, Robert Kiyosaki.
9. Los secretos del código. Dan Burstein.
10. Todo lo que hay que leer, Cristiane Ischirnt.

CUENCA en Sodilibros

1. Chocolate caliente para el alma, Confield-Jack.
2. El testamento de John, John Grishan.
3. Memoria de mis putas tristes, García Márquez.
4. Juan Salvador Gaviota, Richard Bach.
5. El Principito, D´Saint-Exupery.
6. Melodias del alma II, Raúl Llusa.
7. El túnel, Ernesto Sábato.
8. La chaqueta del diablo, Rodrigo Astudillo.
9. Cuentos completos, Mario Benedetti.
10. El Dolor, Dalvia Rodolfo.
EXPLORED
en Ciudad Quito

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