La polÃtica de "mano dura" con los grupos insurgentes de Colombia que aplicarÃa el Gobierno del presidente electo, Alvaro Uribe, ha renovado las discusiones en Ecuador sobre cuál deberÃa ser su posición en torno de todos los escenarios posibles.
La preocupación creció aún más, cuando, pocos dÃas después de haber resultado electo, Uribe dijo que los paÃses vecinos deberÃan "sellar" sus fronteras. Las posibilidades de que nuestro paÃs se vea afectado por la presencia de Uribe al frente del Gobierno están latentes.
Más de un motivo para creer en la guerra
Quebrar la voluntad de la lucha de los guerrilleros de izquierda mediante la autoridad del Estado, llevar al doble los 50 000 efectivos del Ejército y los 100 000 de la PolicÃa, asà como reclutar un millón de civiles como auxiliares en la guerra contra los insurgentes, y un pedido de más asistencia bélica a EEUU, son motivos suficientes para que muchos crean que la llegada de Alvaro Uribe a la Presidencia de Colombia puede desatar la "guerra total" con los grupos insurgentes del paÃs.
Uribe ha dicho que retomará la interdicción aérea, lo que considera el más eficaz instrumento para combatir el narcotráfico que alimenta a los grupos irregulares.
Pero varios analistas consultados por este diario coincidieron en que existe gran incertidumbre sobre cómo financiar esta guerra. "Los planes de Uribe podrÃan costar al paÃs miles de millones de dólares, que la estancada economÃa colombiana no podrá afrontar", dijo Yadira Ferrer, periodista colombiana de la agencia IPS.
Uribe ha dicho que incrementará en $1 000 millones el presupuesto de Defensa, lo cual, según él, serÃa compensado con la reducción de gastos gubernamentales suprimiendo embajadas, consulados, contralorÃas y otras oficinas públicas; y con una reformulación de los créditos de los organismos financieros internacionales. Pero esta explicación no parece convincente en Colombia; de ahà que la ayuda de EEUU para el paÃs andino aparezca como fundamental.
Aunque varios analistas colombianos anticipan que el incremento de apoyo en materia militar de la Casa Blanca será un hecho, aún no hay un acuerdo acerca del nivel de involucramiento de Washington con el gobierno de Uribe. Hasta el momento, lo único que se ha anticipado es el anuncio que hizo la semana pasada el secretario de Estado para Asuntos del Hemisferio Occidental de EEUU, Otto Reich, quien coincidió con Uribe en que Colombia deberÃa hacer un sacrificio e incrementar su presupuesto de defensa.
En EEUU las crÃticas arreciaron cuando Uribe ganó las elecciones el pasado 26 de mayo. "Colombia eligió a su Ariel Sharon", editorializó el diario Dallas Morning News; "George W. Uribe", lo llamó el Wall Street Journal. Y es que la forma como califican y estigmatizan al mandatario electo da cuenta de que en el mundo, y en particular en EEUU, existen dudas sobre Colombia, su conflicto armado y su nuevo presidente, "quien deberá aclarar estos temas para definir su imagen en el exterior", dijo el columnista de la revista Cambio, Mauricio Vargas.
"Ese es su gran reto, pues está ante el desafÃo interno de cumplirle al electorado, que lo eligió más por su "mano firme" que por su "corazón grande". Y debe hacerlo despejando en el exterior las inquietudes que flotan sobre sus nexos con los paramilitares, pese a que nunca se han probado", ha dicho por su parte, un editorial del diario El Tiempo de Bogotá. (PBM)
En principio, un no a la zanahoria y al garrote
Pese a haber manejado durante toda su campaña un discurso bélico, el primer anuncio como presidente electo de Alvaro Uribe no dejó de sorprender: propuso una mediación internacional liderada por la ONU para iniciar diálogos de paz con los grupos armados, algo que en ningún momento habÃa planteado en su campaña.
Para el embajador de Colombia en Quito, Eliseo Restrepo, Uribe abrió la puerta y convocó a la comunidad internacional a negociar. "Esto es muy importante porque se ha dicho que el doctor Uribe no quiere negociaciar que tiene una posición guerrerista (...), lo que pasa es que el presidente electo sujeta o condiciona la negociación a que se cumplan dos condiciones: que no haya más actos de terrorismo y que haya un cese de hostilidades, que fue precisamente lo que llevó a que no tuviera éxito la negociación de Andrés Pastrana".
Roberto Pomba, columnista de la revista Cambio, explica asà la propuesta de Uribe: "Por primera vez un presidente no plantea el asunto en términos de zanahoria y garrote. Tradicionalmente, la ecuación ha consistido en amenazar con la guerra e intentar seducir a la guerrilla con una serie de concesiones en cuanto a las condiciones mismas de la negociación". Añadió que los guerrilleros jamás han caÃdo en ese juego y, por el contrario, "siempre se han comido la zanahoria y han esquivado el garrotazo, como se vio en el último proceso de paz".
Otros analistas coinciden en que lo de Uribe fue astuto en la manera de plantearlo el dÃa de su triunfo, pues puso como condición lo primero, pero no lo segundo: que se abandone el terrorismo y se facilite un cese de hostilidades. (PBM)
Los rebeldes
l Uribe dijo que los "paras" deberÃan cumplir, al igual que las organizaciones guerrilleras, con requisitos para abrir un diálogo.
l Las paramilitares celebraron el 26 de mayo pasado el triunfo de Uribe, a quien calificaron como un "presidente digno" para Colombia.
l Las FARC exigieron como condición para abrir un nuevo diálogo la desmilitarización de 29 municipios del sur del paÃs.
l Tras fracasar sus negociaciones con el Gobierno de Pastrana, el ELN se dijo dispuesto a negociar con Uribe.
Nuevo concepto estratégico con los vecinos
El plan de seguridad de Uribe tratará de involucrar a los paÃses fronterizos: Ecuador, Perú, Venezuela y Brasil, principalmente, según los análisis académicos de un grupo de panelistas que concluyeron este miércoles un seminario en la Universidad del Rosario, en Bogotá.
Las relaciones de Colombia con sus paÃses vecinos tendrán un viraje en cuanto a materia de seguridad nacional se refiere y, como lo ha señalado Uribe Vélez, hará sentir el peso de la autoridad y de la ley para contrarrestar el accionar de los grupos guerrilleros y evitar, de esta manera, que el conflicto armado colombiano desborde sus fronteras.
El presidente electo ha anunciado que profundizará los alcances del Plan Colombia y por eso, a mediados de este mes, viajará a Washington para definir la nueva estrategia en la lucha antidrogas y antisubversiva.
En primer término, Uribe adoptará mecanismos como la Convención contra el Terrorismo con el propósito de endurecer la lucha antiguerrillera y, simultáneamente, tener la posibilidad de exigir a los paÃses vecinos acciones militares contundentes para resguardar sus fronteras.
Los panelistas coincidieron en que Uribe Vélez tratará de presionar diplomáticamente a los Gobiernos vecinos para que adopten medidas militares más audaces en cuanto a impedir que la guerrilla o los grupos paramilitares pasen al otro lado de la frontera a buscar refugio o aprovisionarse, como está ocurriendo en la actualidad.
Lo que intentarÃa Uribe, entonces, es liderar un nuevo concepto estratégico y versátil de seguridad de Colombia con sus paÃses vecinos, teniendo como apoyo internacional a EEUU, la ONU y la OEA para contrarrestar los efectos del conflicto colombiano en el área andina. Lo que se preguntan los analistas es qué tan efectivo será este nuevo esquema que perfila Uribe y cuáles las acciones militares que estarán previendo los insurgentes para enfrentar la estrategia del nuevo Gobierno colombiano. (FAO-PBM).
La presencia de las FFAA en la frontera es cada vez mayor
Nuevos destacamentos y el incremento de efectivos son la tónica de los últimos meses
"No es posible un control total en la frontera norte", ha señalado el ministro de Defensa, Hugo Unda, al reiterar que, a pesar de la insuficiencia de recursos y de las difÃciles condiciones geográficas del cordón fronterizo ecuatoriano-colombiano, "las FFAA están listas para repeler cualquier incursión de grupos irregulares colombianos".
Y es que en el último año, la seguridad en Esmeraldas, Carchi y SucumbÃos se ha fortalecido con la instalación de nuevos destacamentos militares como el Lauro Guerrero, el Maldonado y el Tobar Donoso. Además del acondicionamiento de otros como Chical, Tufiño y Limones.
En ese sector se ha destacado un importante número de efectivos militares (se calcula en al menos 2 000 durante el último año) que realizan labores de vigilancia y patrullaje. Esto ha traÃdo como resultado, entre otras cosas, la captura, en los primeros seis meses de 2002, de cargamentos de municiones, uniformes y armas, asà como la destrucción de por lo menos dos plantaciones de marihuana y laboratorios de procesamiento de drogas. (PACH).
En 2002, 1 600 pedidos de refugio han sido tramitados
Durante 2002, en Ecuador se ha registrado un alza en la presentación de solicitudes de refugio para ciudadanos colombianos.
Mientras en 2001 la cifra de solicitudes bordeaba los 300 por mes, en este año los pedidos llegan a 400, según Fabián Valdivieso, director de Derechos Humanos de la CancillerÃa.
El funcionario explica que, de acuerdo con el testimonio de gran parte de quienes solicitan refugio, "son los problemas de seguridad en Colombia (guerrilla, paramilitares y delincuencia) los que los obligan a huir de su paÃs".
Según datos de la CancillerÃa, hasta el 31 de mayo se tramitaron 1 600 solicitudes de refugio; de ellas, 719 fueron calificadas, y 738, rechazadas. En tanto, unas 2 300 (presentadas en 2001 y 2002) están en proceso de trámite.
Valdivieso señala que según información proporcionada por la Dirección de Migración, durante los primeros cuatro meses de 2002, ingresaron al paÃs por diversas razones casi 40 000 colombianos y solo salieron unos 22 000. (PACH)
"No a la regionalización del conflicto armado"
El ex canciller Alfonso Barrera Valverde cree que la propuesta formulada por el presidente electo de Colombia, Alvaro Uribe, "es digna de ser discutida con las autoridades de nuestro paÃs, en la medida en que se habla de colaborar para proteger la frontera común. Sin embargo, ello implica que el Ecuador debe dejar clara su posición de no intervención en el conflicto interno de Colombia".
Barrera señala que, una vez que Uribe asuma el poder, nuestro paÃs "debe cuidar que en cualquier conversación sobre el control en la frontera norte y el uso de la Base Aérea de Manta, no se impongan fórmulas que signifiquen ampliar o regionalizar el conflicto armado".
Este criterio lo comparte el ex comandante de la Fuerza Terrestre, René Vargas, quien afirma que "bajo ninguna circunstancia se puede pensar en que la Base de Manta pueda ser utilizada para otros fines que no sean los de luchar contra el narcotráfico". (PACH)
ENTREVISTA
"Al más grande siempre se le culpa"
Por Paúl Mena
Editor de Actualidad
El embajador (e) de EEUU afirma que con el conflicto colombiano, el riesgo para Ecuador siempre ha existido y existirá. "Un Ecuador estable es del interés de EEUU", asegura.
Existe la visión de que Ecuador, en el marco del Plan Colombia, está asumiendo muchos riesgos...
El riesgo de Ecuador existe, ha existido y existirá, con la ayuda de EEUU o no. Quizás ese riesgo puede ser peor si no hacemos nada en desarrollo alternativo en la frontera norte. Mi Gobierno está comprometido a trabajar con Ecuador. Para EEUU es claro que seguridad y desarrollo van de la mano. Tenemos un proyecto para aumentar la cooperación económica de Usaid (Agencia de EEUU para el Desarrollo Internacional) en este año, y otro para incrementar los fondos de ayuda en logÃstica militar.
En el paÃs se sostiene que no existe la cooperación suficiente de EEUU...
Nunca es suficiente. Después de los eventos del 11 de septiembre pasado, nuestros recursos están en muchas partes del mundo. Estamos pidiendo más apoyo para Ecuador, pero es una lucha.
Sin embargo, el Departamento de Estado emitió un informe en el que dice que Ecuador no está haciendo lo suficiente en el control en sus fronteras. Hacemos lo que podemos con recursos limitados, han dicho las autoridades ecuatorianas
Hay que tomar medidas para mejorar el control de la emigración ilegal, y eso fue el punto central del informe. En cuanto a la guerrilla, ella no ha cometido actos de terrorismo en Ecuador, pero eso no quiere decir que no sea terrorista por sus acciones en Colombia. Ecuador tiene su propia visión, pero yo, como representante del presidente de EEUU, digo que esos grupos son, para nosotros, terroristas.
¿EEUU es favorable a una mayor presencia militar en la frontera, de acuerdo con el plan del presidente electo de Colombia, Alvaro Uribe?
Usualmente cuando existen más militares hay un nivel más alto de seguridad. Una frontera segura está en el interés de Ecuador, y un Ecuador estable está en el interés de EEUU.
Uribe ha resaltado la importancia de la interdicción aérea del narcotráfico que se pueda efectuar desde la Base de Manta. Frente a ello, se mantiene la preocupación de que dicha Base se pueda usar para otros fines dentro del Plan Colombia...
Siempre ha estado bien claro que el uso de la Base es solo para monitorear el narcotráfico. No hemos hablado de una revisión en el convenio, y hasta ahora EEUU no tiene ningún plan de plantear ello. Hemos gastado mucho dinero en esa pista, que ahora es una de las mejores del continente. Allà puede aterrizar un avión 747. En cuanto al conflicto con la guerrilla, ello debe ser resuelto por los colombianos.
Tras la preocupaciones en nuestro paÃs por el uso de la Base de Manta, por el informe del Departamento de Estado, por la insuficiente ayuda norteamericana, ¿las relaciones entre Ecuador y EEUU están debilitadas?
Las relaciones entre los dos paÃses son buenas, hay diferencias en algunos sentidos, pero no tenemos problemas. Cuando yo era niño, siempre fui el más grande de mis amigos. Entonces, si habÃa un problema, siempre se le echaba la culpa al más alto. EEUU es un blanco muy grande. Si llueve, es EEUU, si no, también es EEUU. Estamos acostumbrados a eso, pero lo que no se ve es que hacemos buen trabajo en cambiar las vidas de personas que se benefician mucho de nuestros programas.
LA FICHA
Larry Palmer nació en Augusta, Georgia, EEUU. En 1978 obtuvo un doctorado en Educación e Historia Africana en Indiana University Bloomington.
Llegó a Ecuador en 1999, y desde julio de 2001 es el encargado de negocios, a.i. de la Embajada de EEUU.
ANALISIS
¿La presión militar es la salida?
"Se vendrÃa la presión militar", responde el embajador de Colombia, Eliseo Restrepo, cuando se cuestiona cuál es la salida que tendrá el Gobierno de Alvaro Uribe ante la posibilidad de que los diálogos con la guerrilla fracasen.
Restrepo destaca que Uribe ha planteado un diálogo con condiciones, como el cese de hostilidades y el fin de los actos de terrorismo. Las FARC exigen que se les devuelva una zona de control en Colombia. Las posiciones tienden a extremarse, y Uribe lo sabe.
De allà que ofreció a sus electores mano dura, una polÃtica que ha comenzado a reflejarse aún antes de su posesión. Medios de prensa de EEUU lo han comparado incluso con Ariel Sharon, el primer ministro israelÃ. ¿Exageraciones?, ¿se ha estigmatizado la propuesta Uribe?, ¿es una desproporción afirmar que la escalada del conflicto armado en Colombia es inevitable?
Por lo pronto, Ecuador pone sus barbas en remojo. El incremento de la presencia militar en la frontera norte es evidente, asà como las limitaciones con las que dicha movilización se efectúa. El tema de la base de Manta, tras declaracio- nes de Uribe, en las que él resalta la importancia de la interdicción aérea contra el narcotráfico, tampoco dejen de preocupar al paÃs. Estados Unidos, esta vez por medio del embajador Larry Palmer, insiste en que no se cambiarán los términos en los que fue firmado el acuerdo para la presencia de militares estadounidenses en dicha base. Sin embargo, estas aclaraciones son tan fuertes como las dudas en torno al tema. "El problema es de Colombia y deben resolverlo los colombianos", lo repiten EEUU y la misma Colombia. ¿Quiénes se harán cargo de los efectos? (PM).
(BLANCO Y NEGRO 08 DE JUNIO DE 2002)
La preocupación creció aún más, cuando, pocos dÃas después de haber resultado electo, Uribe dijo que los paÃses vecinos deberÃan "sellar" sus fronteras. Las posibilidades de que nuestro paÃs se vea afectado por la presencia de Uribe al frente del Gobierno están latentes.
Más de un motivo para creer en la guerra
Quebrar la voluntad de la lucha de los guerrilleros de izquierda mediante la autoridad del Estado, llevar al doble los 50 000 efectivos del Ejército y los 100 000 de la PolicÃa, asà como reclutar un millón de civiles como auxiliares en la guerra contra los insurgentes, y un pedido de más asistencia bélica a EEUU, son motivos suficientes para que muchos crean que la llegada de Alvaro Uribe a la Presidencia de Colombia puede desatar la "guerra total" con los grupos insurgentes del paÃs.
Uribe ha dicho que retomará la interdicción aérea, lo que considera el más eficaz instrumento para combatir el narcotráfico que alimenta a los grupos irregulares.
Pero varios analistas consultados por este diario coincidieron en que existe gran incertidumbre sobre cómo financiar esta guerra. "Los planes de Uribe podrÃan costar al paÃs miles de millones de dólares, que la estancada economÃa colombiana no podrá afrontar", dijo Yadira Ferrer, periodista colombiana de la agencia IPS.
Uribe ha dicho que incrementará en $1 000 millones el presupuesto de Defensa, lo cual, según él, serÃa compensado con la reducción de gastos gubernamentales suprimiendo embajadas, consulados, contralorÃas y otras oficinas públicas; y con una reformulación de los créditos de los organismos financieros internacionales. Pero esta explicación no parece convincente en Colombia; de ahà que la ayuda de EEUU para el paÃs andino aparezca como fundamental.
Aunque varios analistas colombianos anticipan que el incremento de apoyo en materia militar de la Casa Blanca será un hecho, aún no hay un acuerdo acerca del nivel de involucramiento de Washington con el gobierno de Uribe. Hasta el momento, lo único que se ha anticipado es el anuncio que hizo la semana pasada el secretario de Estado para Asuntos del Hemisferio Occidental de EEUU, Otto Reich, quien coincidió con Uribe en que Colombia deberÃa hacer un sacrificio e incrementar su presupuesto de defensa.
En EEUU las crÃticas arreciaron cuando Uribe ganó las elecciones el pasado 26 de mayo. "Colombia eligió a su Ariel Sharon", editorializó el diario Dallas Morning News; "George W. Uribe", lo llamó el Wall Street Journal. Y es que la forma como califican y estigmatizan al mandatario electo da cuenta de que en el mundo, y en particular en EEUU, existen dudas sobre Colombia, su conflicto armado y su nuevo presidente, "quien deberá aclarar estos temas para definir su imagen en el exterior", dijo el columnista de la revista Cambio, Mauricio Vargas.
"Ese es su gran reto, pues está ante el desafÃo interno de cumplirle al electorado, que lo eligió más por su "mano firme" que por su "corazón grande". Y debe hacerlo despejando en el exterior las inquietudes que flotan sobre sus nexos con los paramilitares, pese a que nunca se han probado", ha dicho por su parte, un editorial del diario El Tiempo de Bogotá. (PBM)
En principio, un no a la zanahoria y al garrote
Pese a haber manejado durante toda su campaña un discurso bélico, el primer anuncio como presidente electo de Alvaro Uribe no dejó de sorprender: propuso una mediación internacional liderada por la ONU para iniciar diálogos de paz con los grupos armados, algo que en ningún momento habÃa planteado en su campaña.
Para el embajador de Colombia en Quito, Eliseo Restrepo, Uribe abrió la puerta y convocó a la comunidad internacional a negociar. "Esto es muy importante porque se ha dicho que el doctor Uribe no quiere negociaciar que tiene una posición guerrerista (...), lo que pasa es que el presidente electo sujeta o condiciona la negociación a que se cumplan dos condiciones: que no haya más actos de terrorismo y que haya un cese de hostilidades, que fue precisamente lo que llevó a que no tuviera éxito la negociación de Andrés Pastrana".
Roberto Pomba, columnista de la revista Cambio, explica asà la propuesta de Uribe: "Por primera vez un presidente no plantea el asunto en términos de zanahoria y garrote. Tradicionalmente, la ecuación ha consistido en amenazar con la guerra e intentar seducir a la guerrilla con una serie de concesiones en cuanto a las condiciones mismas de la negociación". Añadió que los guerrilleros jamás han caÃdo en ese juego y, por el contrario, "siempre se han comido la zanahoria y han esquivado el garrotazo, como se vio en el último proceso de paz".
Otros analistas coinciden en que lo de Uribe fue astuto en la manera de plantearlo el dÃa de su triunfo, pues puso como condición lo primero, pero no lo segundo: que se abandone el terrorismo y se facilite un cese de hostilidades. (PBM)
Los rebeldes
l Uribe dijo que los "paras" deberÃan cumplir, al igual que las organizaciones guerrilleras, con requisitos para abrir un diálogo.
l Las paramilitares celebraron el 26 de mayo pasado el triunfo de Uribe, a quien calificaron como un "presidente digno" para Colombia.
l Las FARC exigieron como condición para abrir un nuevo diálogo la desmilitarización de 29 municipios del sur del paÃs.
l Tras fracasar sus negociaciones con el Gobierno de Pastrana, el ELN se dijo dispuesto a negociar con Uribe.
Nuevo concepto estratégico con los vecinos
El plan de seguridad de Uribe tratará de involucrar a los paÃses fronterizos: Ecuador, Perú, Venezuela y Brasil, principalmente, según los análisis académicos de un grupo de panelistas que concluyeron este miércoles un seminario en la Universidad del Rosario, en Bogotá.
Las relaciones de Colombia con sus paÃses vecinos tendrán un viraje en cuanto a materia de seguridad nacional se refiere y, como lo ha señalado Uribe Vélez, hará sentir el peso de la autoridad y de la ley para contrarrestar el accionar de los grupos guerrilleros y evitar, de esta manera, que el conflicto armado colombiano desborde sus fronteras.
El presidente electo ha anunciado que profundizará los alcances del Plan Colombia y por eso, a mediados de este mes, viajará a Washington para definir la nueva estrategia en la lucha antidrogas y antisubversiva.
En primer término, Uribe adoptará mecanismos como la Convención contra el Terrorismo con el propósito de endurecer la lucha antiguerrillera y, simultáneamente, tener la posibilidad de exigir a los paÃses vecinos acciones militares contundentes para resguardar sus fronteras.
Los panelistas coincidieron en que Uribe Vélez tratará de presionar diplomáticamente a los Gobiernos vecinos para que adopten medidas militares más audaces en cuanto a impedir que la guerrilla o los grupos paramilitares pasen al otro lado de la frontera a buscar refugio o aprovisionarse, como está ocurriendo en la actualidad.
Lo que intentarÃa Uribe, entonces, es liderar un nuevo concepto estratégico y versátil de seguridad de Colombia con sus paÃses vecinos, teniendo como apoyo internacional a EEUU, la ONU y la OEA para contrarrestar los efectos del conflicto colombiano en el área andina. Lo que se preguntan los analistas es qué tan efectivo será este nuevo esquema que perfila Uribe y cuáles las acciones militares que estarán previendo los insurgentes para enfrentar la estrategia del nuevo Gobierno colombiano. (FAO-PBM).
La presencia de las FFAA en la frontera es cada vez mayor
Nuevos destacamentos y el incremento de efectivos son la tónica de los últimos meses
"No es posible un control total en la frontera norte", ha señalado el ministro de Defensa, Hugo Unda, al reiterar que, a pesar de la insuficiencia de recursos y de las difÃciles condiciones geográficas del cordón fronterizo ecuatoriano-colombiano, "las FFAA están listas para repeler cualquier incursión de grupos irregulares colombianos".
Y es que en el último año, la seguridad en Esmeraldas, Carchi y SucumbÃos se ha fortalecido con la instalación de nuevos destacamentos militares como el Lauro Guerrero, el Maldonado y el Tobar Donoso. Además del acondicionamiento de otros como Chical, Tufiño y Limones.
En ese sector se ha destacado un importante número de efectivos militares (se calcula en al menos 2 000 durante el último año) que realizan labores de vigilancia y patrullaje. Esto ha traÃdo como resultado, entre otras cosas, la captura, en los primeros seis meses de 2002, de cargamentos de municiones, uniformes y armas, asà como la destrucción de por lo menos dos plantaciones de marihuana y laboratorios de procesamiento de drogas. (PACH).
En 2002, 1 600 pedidos de refugio han sido tramitados
Durante 2002, en Ecuador se ha registrado un alza en la presentación de solicitudes de refugio para ciudadanos colombianos.
Mientras en 2001 la cifra de solicitudes bordeaba los 300 por mes, en este año los pedidos llegan a 400, según Fabián Valdivieso, director de Derechos Humanos de la CancillerÃa.
El funcionario explica que, de acuerdo con el testimonio de gran parte de quienes solicitan refugio, "son los problemas de seguridad en Colombia (guerrilla, paramilitares y delincuencia) los que los obligan a huir de su paÃs".
Según datos de la CancillerÃa, hasta el 31 de mayo se tramitaron 1 600 solicitudes de refugio; de ellas, 719 fueron calificadas, y 738, rechazadas. En tanto, unas 2 300 (presentadas en 2001 y 2002) están en proceso de trámite.
Valdivieso señala que según información proporcionada por la Dirección de Migración, durante los primeros cuatro meses de 2002, ingresaron al paÃs por diversas razones casi 40 000 colombianos y solo salieron unos 22 000. (PACH)
"No a la regionalización del conflicto armado"
El ex canciller Alfonso Barrera Valverde cree que la propuesta formulada por el presidente electo de Colombia, Alvaro Uribe, "es digna de ser discutida con las autoridades de nuestro paÃs, en la medida en que se habla de colaborar para proteger la frontera común. Sin embargo, ello implica que el Ecuador debe dejar clara su posición de no intervención en el conflicto interno de Colombia".
Barrera señala que, una vez que Uribe asuma el poder, nuestro paÃs "debe cuidar que en cualquier conversación sobre el control en la frontera norte y el uso de la Base Aérea de Manta, no se impongan fórmulas que signifiquen ampliar o regionalizar el conflicto armado".
Este criterio lo comparte el ex comandante de la Fuerza Terrestre, René Vargas, quien afirma que "bajo ninguna circunstancia se puede pensar en que la Base de Manta pueda ser utilizada para otros fines que no sean los de luchar contra el narcotráfico". (PACH)
ENTREVISTA
"Al más grande siempre se le culpa"
Por Paúl Mena
Editor de Actualidad
El embajador (e) de EEUU afirma que con el conflicto colombiano, el riesgo para Ecuador siempre ha existido y existirá. "Un Ecuador estable es del interés de EEUU", asegura.
Existe la visión de que Ecuador, en el marco del Plan Colombia, está asumiendo muchos riesgos...
El riesgo de Ecuador existe, ha existido y existirá, con la ayuda de EEUU o no. Quizás ese riesgo puede ser peor si no hacemos nada en desarrollo alternativo en la frontera norte. Mi Gobierno está comprometido a trabajar con Ecuador. Para EEUU es claro que seguridad y desarrollo van de la mano. Tenemos un proyecto para aumentar la cooperación económica de Usaid (Agencia de EEUU para el Desarrollo Internacional) en este año, y otro para incrementar los fondos de ayuda en logÃstica militar.
En el paÃs se sostiene que no existe la cooperación suficiente de EEUU...
Nunca es suficiente. Después de los eventos del 11 de septiembre pasado, nuestros recursos están en muchas partes del mundo. Estamos pidiendo más apoyo para Ecuador, pero es una lucha.
Sin embargo, el Departamento de Estado emitió un informe en el que dice que Ecuador no está haciendo lo suficiente en el control en sus fronteras. Hacemos lo que podemos con recursos limitados, han dicho las autoridades ecuatorianas
Hay que tomar medidas para mejorar el control de la emigración ilegal, y eso fue el punto central del informe. En cuanto a la guerrilla, ella no ha cometido actos de terrorismo en Ecuador, pero eso no quiere decir que no sea terrorista por sus acciones en Colombia. Ecuador tiene su propia visión, pero yo, como representante del presidente de EEUU, digo que esos grupos son, para nosotros, terroristas.
¿EEUU es favorable a una mayor presencia militar en la frontera, de acuerdo con el plan del presidente electo de Colombia, Alvaro Uribe?
Usualmente cuando existen más militares hay un nivel más alto de seguridad. Una frontera segura está en el interés de Ecuador, y un Ecuador estable está en el interés de EEUU.
Uribe ha resaltado la importancia de la interdicción aérea del narcotráfico que se pueda efectuar desde la Base de Manta. Frente a ello, se mantiene la preocupación de que dicha Base se pueda usar para otros fines dentro del Plan Colombia...
Siempre ha estado bien claro que el uso de la Base es solo para monitorear el narcotráfico. No hemos hablado de una revisión en el convenio, y hasta ahora EEUU no tiene ningún plan de plantear ello. Hemos gastado mucho dinero en esa pista, que ahora es una de las mejores del continente. Allà puede aterrizar un avión 747. En cuanto al conflicto con la guerrilla, ello debe ser resuelto por los colombianos.
Tras la preocupaciones en nuestro paÃs por el uso de la Base de Manta, por el informe del Departamento de Estado, por la insuficiente ayuda norteamericana, ¿las relaciones entre Ecuador y EEUU están debilitadas?
Las relaciones entre los dos paÃses son buenas, hay diferencias en algunos sentidos, pero no tenemos problemas. Cuando yo era niño, siempre fui el más grande de mis amigos. Entonces, si habÃa un problema, siempre se le echaba la culpa al más alto. EEUU es un blanco muy grande. Si llueve, es EEUU, si no, también es EEUU. Estamos acostumbrados a eso, pero lo que no se ve es que hacemos buen trabajo en cambiar las vidas de personas que se benefician mucho de nuestros programas.
LA FICHA
Larry Palmer nació en Augusta, Georgia, EEUU. En 1978 obtuvo un doctorado en Educación e Historia Africana en Indiana University Bloomington.
Llegó a Ecuador en 1999, y desde julio de 2001 es el encargado de negocios, a.i. de la Embajada de EEUU.
ANALISIS
¿La presión militar es la salida?
"Se vendrÃa la presión militar", responde el embajador de Colombia, Eliseo Restrepo, cuando se cuestiona cuál es la salida que tendrá el Gobierno de Alvaro Uribe ante la posibilidad de que los diálogos con la guerrilla fracasen.
Restrepo destaca que Uribe ha planteado un diálogo con condiciones, como el cese de hostilidades y el fin de los actos de terrorismo. Las FARC exigen que se les devuelva una zona de control en Colombia. Las posiciones tienden a extremarse, y Uribe lo sabe.
De allà que ofreció a sus electores mano dura, una polÃtica que ha comenzado a reflejarse aún antes de su posesión. Medios de prensa de EEUU lo han comparado incluso con Ariel Sharon, el primer ministro israelÃ. ¿Exageraciones?, ¿se ha estigmatizado la propuesta Uribe?, ¿es una desproporción afirmar que la escalada del conflicto armado en Colombia es inevitable?
Por lo pronto, Ecuador pone sus barbas en remojo. El incremento de la presencia militar en la frontera norte es evidente, asà como las limitaciones con las que dicha movilización se efectúa. El tema de la base de Manta, tras declaracio- nes de Uribe, en las que él resalta la importancia de la interdicción aérea contra el narcotráfico, tampoco dejen de preocupar al paÃs. Estados Unidos, esta vez por medio del embajador Larry Palmer, insiste en que no se cambiarán los términos en los que fue firmado el acuerdo para la presencia de militares estadounidenses en dicha base. Sin embargo, estas aclaraciones son tan fuertes como las dudas en torno al tema. "El problema es de Colombia y deben resolverlo los colombianos", lo repiten EEUU y la misma Colombia. ¿Quiénes se harán cargo de los efectos? (PM).
(BLANCO Y NEGRO 08 DE JUNIO DE 2002)
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