Miami. 12.12.94. Debido a los fuertes medicamentos y al
corticoide que le habían estado suministrando sus médicos, el
presidente del Ecuador, Sixto Durán Ballén, ha perdido unas 12
libras de peso, según lo reveló él mismo a esta periodista.
Estoy pesando apenas 166 libras, nunca he estado tan delgado
dijo, aunque está optimista de, en corto tiempo, recuperar su
peso habitual, de alrededor de 179 libras.
"Creo que recuperaré pronto, tengo un gran apetito y hasta
antojos", dijo un sonriente presidente, que contrastaba, con
aquel que habíamos visto el primer día de la Cumbre, cuando se
movilizaba con harta dificultad y lucía muy demacrado.
Haciendo gala de que se siente bien, el Presidente confió que se
dio tiempo en esta ciudad, para ir a comerse un "hot dog", que
dijo que era su bocado preferido. Aunque también en días pasados
se le ha ocurrido comer unas deliciosas costillas de cerdo.
El presidente Durán Ballén, que se encuentra desde la tarde de
ayer en Washington, fue sometido, apenas llegó al hospital Sibley
Memorial, a un nuevo chequeo médico, el primero después de su
última intervención quirúrgica, para evaluar el proceso de
recuperación, que ha sido regular, debido al sinnúmero de
actividades que ha debido desarrollar.
De acuerdo a la prescripción médica, el jefe de Estado debía
tener durante 8 semanas un estricto control de su recuperación,
pero no ha podido cumplirlo.
El mismo presidente admitió que la situación de ahora se ha
complicado porque a más de haber sido una operación un tanto más
delicada, porque fue en el mismo sitio donde se efectúo la
primera intervención, se ha complicado su restablecimiento, ya
que se le han retirado en total cinco vértebras y, como
consecuencia, la región lumbar se ha vuelto más sensible; aún así
ya no se le da más analgésicos, porque lo estaban afectando.
Más adelante, el jefe de Estado reiteró que no tiene ningun mal
incurable y que su corazón estaba bien. Todo son especulaciones,
ya una vez se dijo que había muerto, pero han sido solo falsos
comentarios, dijo, al tiempo de informar que su estancia en
Washington será de entre 24 y 48 horas.
Si estaría impedido lo anunciara al país
De otro lado, cuando HOY le consultó sobre las múltiples
ausencias del país y de la posibilidad de que pida una licencia,
dijo que solo por dos oportunidades ha debido abandonar el
Ecuador por motivos de salud, pues las otras veces han sido para
representar a la nación en diversos acontecimientos, y que en
caso de sentirse mal, o tener alguna limitación, que me impidiera
desempañar, "yo tendría gran responsabilidad conmigo mismo y le
diría al país".
Es un hecho que puede pasarle a cualquier persona y si ahora,
para darle más seguridad a la pierna estoy usando bastón, no
significa nada, dijo. Sixto sonriente comentó que por
casualidad, el Vicepresidente Gore tiene un bastón igual al suyo,
de la misma madera, y que la señora Chamorro, presidenta de
Nicaragua, también usa bastón.
Sobre la posibilidad cierta de solicitar al Congreso una licencia
hasta recuperarse totalmente, adelantó que no será necesario
porque en Washington lo que se va a hacer es una verificación de
que lo que ha estado haciendo es lo correcto y no tiene necesidad
de una operación adicional, sino aceptar con paciencia que tiene
72 años y que la recuperación puede ser lenta.
Finalmente al referirse al ambiente político del país dijo que se
debe colaborar entre todos los poderes del Estado porque es un
servicio al país, en el que todos deben estar de acuerdo. Sobre
las reformas que se tramitan en el Congreso, subrayó que lo
importante es que lo que se apruebe será en beneficio para los
futuros mandatarios y para el país. Sixto no quizo, comentar
sobre otros hechos por haber estado lejos del país varios días y
se negó a mencionar el nombre de quien reemplazará al ministro de
Gobierno, Marcelo Santos.
Sixto es un buen paciente, dice doctor Pavón
El médico personal del presidente del Ecuador, Raúl Pavón, quien
acompañó al mandatario durante su asistencia a la Cumbre de
Miami, dijo a HOY que el diagnóstico del Presidente es el de
siempre: su problema con las vértebras y que lo afecta
actualmente a Sixto Durán Ballén es el postopetario de una
estenosis de conducto vertebral.
Dijo que la operación última se le hizo en el mismo sitio que la
primera, en la parte alta y que los dolores que aquejan ahora al
Presidente son porque aún no termina su período de recuperación,
pues apenas han pasado cinco semanas, cuando se le había
prescripto ocho, para su recuperación.
El doctor Pavón reconoció que esta vez han habido más
complicaciones para que el Presidente se restablezca, pero
aseguró que no es nada extraño.
Dijo que en Washington se le hará una evaluación, pero que no es
porque se ha agravado sino para ver cómo está la recuperación.
Señaló que se ha aprovechado la cercanía de Miami a Washington,
para que concurra al mismo centro donde fue intervenido, porque
han habido algunas reacciones secundarias a los medicamentos.
Asimismo, dijo que se le estaba suministrando cortisona, para
aprovechar los efectos antiflamatorios que tiene la cortisona,
pues el mejor antiflamatorio que se conoce, pero que ya se le
había suspendido.
De otra parte, el médico personal del presidente dijo, que la
cojera que adolece el presidente se debe al dolor, pero no
representa nada grave. Finalmente señaló Sixto Durán Ballén es
un muy buen paciente, que se sujeta a las indicaciones, pero que
como tiene tantas actividades que atender, no tiene oportunidad
de hacer un buen reposo, como en la Cumbre de Miami que ha sido
muy fuerte.
Crónica de la Cumbre
Con una conferencia de prensa el presidente de los Estados
Unidos, Bill Clinton, culminó ayer la cumbre de las Américas, que
convirtió a Miami, en la ciudad más resguardada del mundo.
Efectivos del FBI, la CIA, policías ,montados y de tránsito, se
tomaron esta ciudad de dos millones de habitantes, pero estos
días fue invadida de funcionarios y periodistas del continente.
Ciudad latina
Un sabor a interrogación ha quedado de esta cita hemisférica, que
ha despertado grandes ilusiones en muchos países, y dudas en
pocos.
Bolivia tomó muy en serio la designación de ser la sede de la
próxima cita de países americanos, en 1997. Ayer el presidente
Sánchez de Lozada se reunió con la prensa internacional, para
hablar sobre la nueva reunión.
Para muchas personas la Cumbre de Miami ha sido una oportunidad
para ganar más. A la policía, por ejemplo, se le ha pagado 16
dólares la hora de trabajo, y están laborando las 24 horas al
día. "En tiempos de paz" ganan 10 dólares y hacen turnos.
Para la cena de gala que ofreció el señor y la señora Clinton,
las esposas de los jefes de Estado, se pusieron todos los brillos
posibles. Un derroche de elegancia, que llamó la atención de la
propia primera dama de EEUU.
La cena fue en una isla preciosa, la favorita de Clinton, aquí en
Florida. En la cena se sirvió verdaderas delicias del mar,
carnes y una gran gama infinita de luces, como postre.
Pero no todo fue fiesta para los invitados, como había bajado la
marea, a la madrugada, los barcos tuvieron problemas para
atracar, así es que debieron aguardar y hacer cola, para volver
al hotel.
Por eso ayer, ningún jefe de Estado estuvo puntual en la sesión
de clausura, muchos incluso fueron despertados por sus
asistentes, porque podían perderse uno de los actos centrales de
la reunión.
La delegación ecuatoriana fue la más sufrida, la lumusine que
transportaba a la primera dama y al canciller se recalentó y se
quedó a unas cuántas cuadras del hotel. Así es que algunos
debieron caminar.
Pocos han mencionado que en esta Cumbre hubo 34 presidentes del
hemisferio más un presidente electo, Henrique Cardoso de Brasil,
quien acompañó, oficialmente, al presidente Itamar Franco.
El discurso de Henrique Iglesias, del BID, en el acto de clausura
del encuentro, fue soberbio. Dijo que está muy bien la
integración, pero mencionó que hay distancias entre los de
arriba, al norte y los de abajo, al sur. Y que eso no puede
desconocer.
Iglesias, dijo también, que es otra latinoamérica, al de estos
momentos. Mientras lo escuchaba, el presidente Clinton, asentía
con la cabeza una y otra vez.
La primera dama de EEUU, Hillary Clinton, se ha destacado en
esta cita. Cumplió un apretado programa, que incluyó la Cumbre de
la Infancia, y estuvo visitando varios sitios de la ciudad,
reuniéndose con los niños y entidades sociales de Miami.
10 mil credenciales se extendieron para esta cita. Aquí nadie
circulaba si no portaba una, incluso los agentes debían presentar
su carnet.
Ayer comenzó a evacuarse la ciudad, no obstantes algunos
servicios continuarán hasta el martes. Las empresas de
teléfonos, fax, las rentadoras de carros, los hoteles, los
restaurantes, hicieron su agosto.
Entre los periodistas que cubrieron la cita hubo un consenso,
fue la reunión más dura para cubrir. Los presidentes estuvieron
fuertemente protegidos, el acceso a ellos fue casi imposible.
Dieron solo declaraciones al paso, los lugares de reunión estaban
distantes a varios, los unos de los otros.
Así y todo lo gente añorará a Miami que, por primera vez se
presentó como una urbe segura, en la que se podía caminar a
cualquier hora. (2A)