Quito. 23 jul 2000. Entre el ruido de taladros, soldadoras,
martillazos y el constante movimiento de rodillos de pintura,
trabajadores, arquitectos, coordinadores, acompañados por un
equipo de guardias de seguridad, dan los últimos toques a las 4,5
hectáreas de superficie sobre la cual se yergue Bahía Malecón, la
fase comercial de Malecón 2000.
Tanto en la galería como en la terraza del lugar, 255 locales
están casi concluidos para su inauguración este 25 de julio.
La demanda rebasó las expectativas, señala Pedro Gómez Centurión,
gerente de la Fundación Malecón 2000. Casi el 65% está dado en
concesión, y el 20% restante en fase de negociación.
Suman 238 los locales comerciales y 17 los puestos de comida. Los
precios de las concesiones van de 400 a 8 000 dólares.
La previsión de Gómez Centurión es que, en un lapso de 30 a 45
días, todos los establecimientos atiendan al público y en octubre
el 100% esté ocupado.
El proyecto busca ser una alternativa a lo que ha sido la oferta
tradicional de zonas comerciales informales como la Bahía.
Cuando se decidió construir el centro comercial, se efectuó un
estudio de mercado; este evidenció que el 70% de las compras que
hace la ciudadanía se efectúa en el centro de la ciudad, zona que
no contaba con un lugar comercial que aglutine todas las
necesidades de ese target.
En el ámbito de influencia del centro citadino viven
aproximadamente 40 000 personas, más casi 600 000 que ingresan a
Guayaquil durante el día: de ellos, unos 300 000 entran a sus
sitios de trabajo y el resto realiza compras y trámites.
Parte del segundo grupo, se prevé, serán los potenciales
compradores de Bahía Malecón. Actualmente, durante el fin de
semana, Malecón 2000 recibe entre 80 000 y 100 000 personas, y de
lunes a viernes, entre 6 000 y 8 000, un flujo que se
incrementaría con el funcionamiento del centro comercial.
Tales cálculos hacen prever que, poco a poco, Bahía Malecón se
convertirá en una alternativa de consumo de productos y servicios
diversos. Gómez Centurión piensa que ello sucederá entre octubre y
noviembre de este año, pues en los meses anteriores será la
novedad, el atractivo arquitectónico y el deseo de exploración lo
que marcará la visita de los ciudadanos.
Gómez Centurión reconoce que la cercanía de Bahía Malecón a la
Bahía informal ayudará a la legalización de los comerciantes de
esta última zona.
El ejecutivo señala que a pesar de las alícuotas que deben cubrir
los concesionarios de Bahía Malecón, el negocio sí es competitivo.
Luego del camino abierto por la inauguración de la plaza Cívica,
se espera que Bahía Malecón "revitalice totalmente el centro de
Guayaquil, y determine un cambio en los hábitos de los
transeúntes, que solo se desplazaban a lo largo de la calle Nueve
de octubre". (KES)
"ES UNA OBRA MASIVA"
Con cuatro locales de comidas, situados en la galería y la
terraza de Bahía Malecón, la Corporación Persa, dueña de la cadena
integrada por El Yogurt Persa, El Rey del Pescado Frito y La
Carretilla, cifra sus perspectivas de posicionar sus servicios
dentro de este centro comercial. Patricio Kohn, directivo del
grupo, define a Malecón 2000 como una obra macrourbana y, en esa
línea, "no está dirigida a un target específico". El proyecto
busca ser masivo, sostiene, a diferencia de centros comerciales
como Policentro, dirigidos a clase alta, o Albán Borja, enfocado a
clase media alta.
Kohn destaca que, una vez abiertos los locales del Grupo Persa, se
reforzará la estrategia publicitaria y de promoción, con novedades
constantes en el servicio y el producto. (KES)
DIRIGIDO A CLASE MEDIA
Luego de tres semanas de adecuaciones en su local, Paola de
Jairala, concesionaria de Coctelitos, un café bar que se
inaugurará el 25 de julio, coordina los últimos toques de su
establecimiento. La propietaria aspira a que las proyecciones
sobre los potenciales clientes sean certeras. Confía en el éxito
que tendrán los locales de comidas.
Su establecimiento está dirigido a la clase media y a la baja.
Diseñó sus características basándose en el tipo de gente que
visita el Malecón durante los fines de semana, a quienes ella
describe como personas que buscan un lugar para disiparse y tomar
algo. Paola cree que el centro comercial da esa opción.
Su expectativa es repetir y, si es posible, acrecentar los buenos
resultados que yan han tenido sus locales en Guayaquil, Quito y
Cuenca. (KES)
OTRO CENTRO COMERCIAL
El proyecto original preveía la construcción de dos centros
comerciales. El segundo no se concretará ni tampoco el hotel, pues
se considera que hay demasiada oferta y la situación no es la
mejor para una inversión adicional.
Se ha decidido que sea un inversionista privado el que ejecute
esta fase, bajo su riesgo. La Fundación Malecón 2000 solo se
encargará de la construcción del Malecón hacia el río, de manera
que ese segmento no quede excluido de una renovación
arquitectónica.
Al participante privado se le dará el espacio acuático por un
tiempo de concesión más largo que el de los locales comerciales.
(KES)
PUBLICIDAD
Fundación Malecón 2000 inició una estrategia de promoción del
proyecto hace dos meses para presentar su primera fase.
Con el fin de reforzar las concesiones de los locales de Bahía
Malecón se elaboraron campañas cortas, con spots publicitarios en
televisión y espacios de prensa, durante 15 días.
Del presupuesto del proyecto se destinó cerca de 260 000 dólares
para la segunda fase de la campaña. Una vez que funcionen los
locales, se financiará otra con las alícuotas de los
concesionarios. El objetivo será incentivar a la gente a que
visite el centro comercial.
La inversión para el centro comercial supera los 12 millones de
dólares; 9,6 millones fueron financiados por la Corporación
Financiera Nacional (CFN), a diez años plazo.
El costo del crédito es una tasa anual reajustable de 14%, con un
período de gracia de dos años para el capital.
Los ingresos provenientes de los derechos de llave y de las
mensualidades de los concesionarios servirán para honrar el
crédito de la CFN.
Dos cadenas grandes de comida han firmado un precompromiso para
acceder a las concesiones. Se negocia el acuerdo final. (KES)
(DIARIO HOY) (P. 7-A)
martillazos y el constante movimiento de rodillos de pintura,
trabajadores, arquitectos, coordinadores, acompañados por un
equipo de guardias de seguridad, dan los últimos toques a las 4,5
hectáreas de superficie sobre la cual se yergue Bahía Malecón, la
fase comercial de Malecón 2000.
Tanto en la galería como en la terraza del lugar, 255 locales
están casi concluidos para su inauguración este 25 de julio.
La demanda rebasó las expectativas, señala Pedro Gómez Centurión,
gerente de la Fundación Malecón 2000. Casi el 65% está dado en
concesión, y el 20% restante en fase de negociación.
Suman 238 los locales comerciales y 17 los puestos de comida. Los
precios de las concesiones van de 400 a 8 000 dólares.
La previsión de Gómez Centurión es que, en un lapso de 30 a 45
días, todos los establecimientos atiendan al público y en octubre
el 100% esté ocupado.
El proyecto busca ser una alternativa a lo que ha sido la oferta
tradicional de zonas comerciales informales como la Bahía.
Cuando se decidió construir el centro comercial, se efectuó un
estudio de mercado; este evidenció que el 70% de las compras que
hace la ciudadanía se efectúa en el centro de la ciudad, zona que
no contaba con un lugar comercial que aglutine todas las
necesidades de ese target.
En el ámbito de influencia del centro citadino viven
aproximadamente 40 000 personas, más casi 600 000 que ingresan a
Guayaquil durante el día: de ellos, unos 300 000 entran a sus
sitios de trabajo y el resto realiza compras y trámites.
Parte del segundo grupo, se prevé, serán los potenciales
compradores de Bahía Malecón. Actualmente, durante el fin de
semana, Malecón 2000 recibe entre 80 000 y 100 000 personas, y de
lunes a viernes, entre 6 000 y 8 000, un flujo que se
incrementaría con el funcionamiento del centro comercial.
Tales cálculos hacen prever que, poco a poco, Bahía Malecón se
convertirá en una alternativa de consumo de productos y servicios
diversos. Gómez Centurión piensa que ello sucederá entre octubre y
noviembre de este año, pues en los meses anteriores será la
novedad, el atractivo arquitectónico y el deseo de exploración lo
que marcará la visita de los ciudadanos.
Gómez Centurión reconoce que la cercanía de Bahía Malecón a la
Bahía informal ayudará a la legalización de los comerciantes de
esta última zona.
El ejecutivo señala que a pesar de las alícuotas que deben cubrir
los concesionarios de Bahía Malecón, el negocio sí es competitivo.
Luego del camino abierto por la inauguración de la plaza Cívica,
se espera que Bahía Malecón "revitalice totalmente el centro de
Guayaquil, y determine un cambio en los hábitos de los
transeúntes, que solo se desplazaban a lo largo de la calle Nueve
de octubre". (KES)
"ES UNA OBRA MASIVA"
Con cuatro locales de comidas, situados en la galería y la
terraza de Bahía Malecón, la Corporación Persa, dueña de la cadena
integrada por El Yogurt Persa, El Rey del Pescado Frito y La
Carretilla, cifra sus perspectivas de posicionar sus servicios
dentro de este centro comercial. Patricio Kohn, directivo del
grupo, define a Malecón 2000 como una obra macrourbana y, en esa
línea, "no está dirigida a un target específico". El proyecto
busca ser masivo, sostiene, a diferencia de centros comerciales
como Policentro, dirigidos a clase alta, o Albán Borja, enfocado a
clase media alta.
Kohn destaca que, una vez abiertos los locales del Grupo Persa, se
reforzará la estrategia publicitaria y de promoción, con novedades
constantes en el servicio y el producto. (KES)
DIRIGIDO A CLASE MEDIA
Luego de tres semanas de adecuaciones en su local, Paola de
Jairala, concesionaria de Coctelitos, un café bar que se
inaugurará el 25 de julio, coordina los últimos toques de su
establecimiento. La propietaria aspira a que las proyecciones
sobre los potenciales clientes sean certeras. Confía en el éxito
que tendrán los locales de comidas.
Su establecimiento está dirigido a la clase media y a la baja.
Diseñó sus características basándose en el tipo de gente que
visita el Malecón durante los fines de semana, a quienes ella
describe como personas que buscan un lugar para disiparse y tomar
algo. Paola cree que el centro comercial da esa opción.
Su expectativa es repetir y, si es posible, acrecentar los buenos
resultados que yan han tenido sus locales en Guayaquil, Quito y
Cuenca. (KES)
OTRO CENTRO COMERCIAL
El proyecto original preveía la construcción de dos centros
comerciales. El segundo no se concretará ni tampoco el hotel, pues
se considera que hay demasiada oferta y la situación no es la
mejor para una inversión adicional.
Se ha decidido que sea un inversionista privado el que ejecute
esta fase, bajo su riesgo. La Fundación Malecón 2000 solo se
encargará de la construcción del Malecón hacia el río, de manera
que ese segmento no quede excluido de una renovación
arquitectónica.
Al participante privado se le dará el espacio acuático por un
tiempo de concesión más largo que el de los locales comerciales.
(KES)
PUBLICIDAD
Fundación Malecón 2000 inició una estrategia de promoción del
proyecto hace dos meses para presentar su primera fase.
Con el fin de reforzar las concesiones de los locales de Bahía
Malecón se elaboraron campañas cortas, con spots publicitarios en
televisión y espacios de prensa, durante 15 días.
Del presupuesto del proyecto se destinó cerca de 260 000 dólares
para la segunda fase de la campaña. Una vez que funcionen los
locales, se financiará otra con las alícuotas de los
concesionarios. El objetivo será incentivar a la gente a que
visite el centro comercial.
La inversión para el centro comercial supera los 12 millones de
dólares; 9,6 millones fueron financiados por la Corporación
Financiera Nacional (CFN), a diez años plazo.
El costo del crédito es una tasa anual reajustable de 14%, con un
período de gracia de dos años para el capital.
Los ingresos provenientes de los derechos de llave y de las
mensualidades de los concesionarios servirán para honrar el
crédito de la CFN.
Dos cadenas grandes de comida han firmado un precompromiso para
acceder a las concesiones. Se negocia el acuerdo final. (KES)
(DIARIO HOY) (P. 7-A)
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