En tiempo récord, entre el 31 de marzo que fueron públicas las providencias a favor de Abdalá Bucaram y el 2 de abril día de su arribo, los dirigentes roldosistas organizaron la bienvenida. El PRE tiró la casa por la ventana en la "fiesta". Un gasto que entre movilización de unos 100 mil militantes, publicidad, seguridad y tarimas pudo ascender a $200 000. Para algunos analistas, el efecto del mito del gran ausente estuvo en juego.

Ostentoso paseo por el bulevar

El pasado 1.o de abril, el Partido Roldosista organizó la fiesta de bienvenida del ex presidente Abdalá Bucaram. Pese a la opulencia, dirigentes dicen que el gasto fue mínimo. Hubo cuatro tarimas, artistas, miles de flores y pancartas, caballos...

El retorno no pudo ser más luminoso: luces de neón que se cruzaban con destellos de luz del caer de la tarde. Todos miraban el cielo pintado de gris en espera del protagonista del show. Un ruido entrecortado en el horizonte daba la voz de alerta y la muchedumbre empezaba a rugir. "¿Es un pájaro o es un avión?". En los monitores de televisión, la imagen de una diminuta nave que crecía con el pasar de segundos confirmaba el aviso. "Es él", fue el murmullo.
Las pantallas mostraban una figura familiar -padre e hijo- descendiendo de la nave, en una imponente torre de 30 pisos, al filo del Malecón. De pronto, la arteria principal, convertida en un paseo de luces y sonido, era un solo bramido. Empujones, tumultos, una camioneta verde y una corte de caballos mostraban el inicio de la próxima estación: el recorrido por la Nueve de Octubre hasta el Parque Centenario. Cientos de carteles y miles de flores y espontáneos que se abalanzaban al automotor daban la bienvenida.
Y el clímax llegó en un aparatoso ingreso a la tarima. Luego, el discurso, con repertorio añejo y música de Perales; serpentinas, y, para cerrar, petardos y luces artificiales.
La televisión mostró varios pasajes del recibimiento roldosista, el pasado 1º de abril, a su líder, el ex presidente Abdalá Bucaram, quien se autoexilió en Panamá tras su derrocamiento en 1997 y las órdenes de prisión dictadas en su contra, por presunto peculado en el uso de gastos reservados y el programa Mochila Escolar.
Y, aunque fue un acto ostentoso, empresarios, amigos y familiares de Bucaram dicen que el costo fue mínimo: "todos pusieron un granito de arena". Un "acolite" que, sin embargo, fue importante.
Por ejemplo, en el montaje de la tarima se armaron seis estructuras metálicas, de las cuales dos principales (de 8 x 3 metros) se ubicaron en la calle Lorenzo de Garaicoa y Nueve de Octubre y el malecón Simón Bolívar, junto a La Rotonda.
La empresa que se encargó de instalarlas fue Casa Musical Gallardo, contratada por Hugo Quevedo, miembro del movimiento Juventudes roldosistas, quien se negó a dar montos. Aunque en el mercado, el costo por cada una es de $1 700.
La tarima ubicada en Lorenzo de Garaicoa y Nueve de Octubre fue decorada con luces, globos y carteles publicitarios, que en el mercado cuestan $400 y $800. Allí cantaron: el grupo Coctel, Las Amazonas, Los Iracundos, Falconí Júnior, Silvana Ibarra, entre otros artistas "amigos" del PRE, cuyo show tiene un costo promedio de $600 en tiempo mínimo.
Adolfo Bucaram, Nubia Naveda, Jimmy Jairala y Nicolas Issa armaron la fiesta en tiempo récord. Ellos se reunieron 48 horas antes del 31 de marzo, es decir, desde el día que fueron públicas las provindencias en favor de Bucaram, para definir la movilización de buses de transporte urbano y provincial. La planificación se efectuó en la Central Política del PRE ubicada en Primero de Mayo y Tulcán, en Guayaquil.
Adolfo Bucaram dispuso que 400 buses trasladaran a simpatizantes de varios sectores de Guayaquil, mientras otros 500 transportaron de los cantones del Guayas. Y hubo alrededor de 80 buses del resto de las provincias de la Costa. Pero también llegaron de la Sierra.
Pedro Samaniego, dirigente del PRE en Riobamba, quien viajó desde esa provincia con su familia, se adelantó en dos buses que transportaron a 90 personas, que recibieron un sánduche y una gaseosa. Estos transportes fueron alquilados por simpatizantes del PRE de esa ciudad, y solo tenían que cancelar una "mínima cantidad al conductor". Según Samaniego, hubo donaciones (desde $5) que sirvieron para los gastos. Los buses partieron antes del mediodía para llegar a Guayaquil antes de las 18:00. Terminado el acto, regresaron.
Lenin Arroyo, de Esmeraldas, salió de esa ciudad a las 00:10 del 2 de abril. Una dirigente de su barrio le dijo que 15 buses de la cooperativa Las Palmas viajarían al puerto. A su juicio, 600 personas viajaron y recibieron $15 de refrigerio. La cooperativa cobró $7 500.
En tanto, Marina Bravo, dirigente de la parroquia Febres Cordero de Guayaquil, pidió un bus para 30 personas. "No se les pagó", aseguró. (CHM-JBM-LB)

Dos aterrizajes de "primera"

El helicóptero que llevó a Bucaram hasta el edificio La Previsora fue contratado por los viejos amigos del ex presidente Eduardo Azar y Alfredo Adoum. Eso, a casi 16 horas de su llegada en vuelo privado desde Panamá

El autocalificado "líder de los pobres" retornó a Guayaquil de su exilio desde Panamá en la comodidad de un vuelo privado. Su arribo fue a las 01:15 del 2 de abril.
"Abajo los aniñados", "Viva el loco", gritaron decenas de simpatizantes que se mezclaron entre periodistas que fueron burlados por dirigentes del Partido Roldosista Ecuatoriano (PRE).
Y es que, entre las 00:45 y 01:00, dos vehículos salieron en precipitada carrera al lujoso domicilio de Bucaram, ubicado en la ciudadela Kennedy Norte. Allí, dos patrullas de la Policía custodiaron a los presentes.
En uno de los dos automotores se anunció que iba el "exiliado", pero se constató que se transportaba a su cónyuge, Rosa Pulley, que evitó a la prensa y rápidamente ingresó a su domicilio. Sus hijos Michelle y Abdalá le abrazon sin cesar.
Bucaram fue a descansar en la vivienda de su amigo Eduardo Azar, quien, con otras amistades y empresarios guayaquileños, le habría preparado un banquete en su honor. El primero en el Ecuador después de ocho años de ausencia.
Dieciséis horas más tarde, Bucaram se mostró a los medios de comunicación vestido de ropa deportiva. Y al poco rato, con guayabera, "tolón" negro y atiborrado de joyas, en la terraza del edificio del extinto banco La Previsora, en el Malecón 2000, en la zona regenerada.
Junto a él estaba su hijo Jacobo, descendiendo del helicópetro contratado para el efecto por sus amigos Alfredo Adum y Eduardo Azar, quienes se encargaron de contratar la aeronave.
Otro detalle importante para la bienvenida fue el cordón de seguridad. La responsabilidad estuvo a cargo del ex diputado Fernando Rosero, quien contrató a 68 agentes de Policía (que estuvieron de civil) para evitar actos vandálicos.
También convenció a su amigo Pedro Salazar para que manejara una camioneta Chevrolet verde, de placas GIV-121, en la cual se transportó a paso lento el "exiliado" y a su primogénito.
A Estéfano Adum y Jacobo Buracam Pulley les encargaron convocar a más de 1 000 jóvenes, que se dividieron en dos grupos y usaron camisetas rojas y blancas estampados con el número 10.
Todo eso tuvo sus costos. En el mercado textil, según la empresa guayaquileña Sharprint S.A., el costo de 200 camisetas estampadas (tipo jersey) es de $250, mientras que Wendy Banchón, ejecutiva de la compañía Arica, indicó a BLANCO Y NEGRO que el alquiler de un helicóptero Robinson R-44 cuesta $450 (más impuestos) la hora. La capacidad de la nave es para tres personas.
Y el Gobierno puso su parte. En las cuatro horas del show, más de 120 gendarmes se ubicaron estratégicamente a lo largo de la calle Lorenzo de Garaicoa y Nueve de Octubre, en donde se concentraron miles de simpatizantes del PRE.
Para la marcha roldosista, el gobernador del Guayas, Efrén Roca, dispuso que se movilizaran tres ambulancias de la Cruz Roja, 25 miembros de la Comisión de Tránsito del Guayas (CTG) y 50 elementos de la Cruz Roja y del Cuerpo de Bomberos. (CHM-JBM)

Publicidad en las calles

Hugo Quevedo Jr., director de Juventudes Roldosistas, pagó con cheque certificado la publicidad en 10 vallas gigantes que promocionaron el retorno del ex presidente Bucaram.
El pago lo confirmó el gerente de la empresa Zazapec, Enrique Martínez. El costo del servicio quedó en reserva. Empresas especializadas tienen costos promedios de $3 000 por cada valla por tres meses, como tiempo mínimo. Martínez solo dijo que fue una suma alta.

Show tuvo un interés mediático

El mito del "gran ausente" es una táctica que se intuye en el retorno

Para el analista político Douglas Rangel, el líder roldosista Abdalá Bucaram, junto a Gustavo Noboa y Alberto Dahik, se ha beneficiado de polémicas resoluciones. Por eso, recomienda que en el país hay que acabar con el mito del "gran ausente", instaurado por el ex mandatario José María Velasco Ibarra. Y hoy, al parecer, reeditado por el PRE.
A su criterio, los ciudadanos tienen la impresión de que la política se parece a una "gran ramera", con sus torcidas resoluciones que benefician y perjudican. "Guayaquil puede ser víctima de la nueva etapa política. Hay que pedirle a Bucaram que no se enfrente a Nebot, porque la ciudadanía no lo va a permitir".
Afirma que la urbe porteña atraviesa un cambio radical y que para embellecer su entorno se han utilizado millones de millones de dólares.
No obstante, para el consejero alterno del PRE en Guayaquil, Ronald Rugel, el ex mandatario Bucaram vino a recuperar su partido, mediante un proceso político de largo plazo. "No negamos el trabajo que ha desarrollado Nebot Saadi. Nosotros buscamos acuerdos y diálogo", expresa, mientras que el catedrático universitario José Guerra Castillo indica que el PRE atraviesa una crisis política, pese al crecimiento del electorado: "Bucaram sabe lo que quiere la gente. Su retorno no es un juego, vino a quedarse y a definir estrategias claras. Hay que tener cuidado".
Adolfo Bucaram, director nacional del PRE, afirma que, con la llegada de su líder, el partido volverá a ser la primera fuerza del país. El primer paso fue el retorno y el acto de recibimiento. Una de las estrategias para atraer al electorado será recorrer las regiones del país para poder convocar a jóvenes con ideas nuevas. Comenta que se encuentran reorganizando las centrales políticas para establecer estrategias que atraigan simpatizantes.
Reconoce que, en Guayaquil, la primera fuerza es el PSC, pero el PRE se encasilla en el segundo lugar porque Jimmy Jairala obtuvo el 30% en la elección pasada. (CHM-JBM)

PUNTO DE VISTA

Persiste el show de la impunidad

La democracia no es un membrete o un adjetivo. Para llegar a constituirse, en cualquier nación o época, debe ser un proceso cotidiano en construcción. En ese proceso, los líderes y cada uno de los actores sociales tienen que asumir su rol pensando en el país, respetando y edificando sus instituciones, promoviendo cualquier obra en función del interés público y, fundamentalmente, respetando al otro.
En el Ecuador parecería que la revancha es la conducta habitual de la lucha política: los que antes fueron líderes ahora son víctimas y viceversa. En ese juego se cambian leyes, se reforma la Constitución, se modifican los procesos judiciales y, para colmo, se ponen y quitan presidentes de la República.
El regreso de Abdalá Bucaram, con todo el show y costo, que en este informe se exhibe, solo reafirma que la construcción de la democracia, como un estado de convivencia complejo y de respeto a los demás, es imposible con este tipo de prácticas.
Y también revela algo más: los procesos judiciales se arman y desarman de tal manera que la norma por excelencia es la impunidad. Con ello no se construye democracia ni pedagogías para imaginarla.
Abdalá Bucaram, según los documentos, se llevó alrededor de $49 millones desde agosto de 1996 a febrero de 1997. Y solo en un día se llevó $3 millones. Con el retorno, la Corte Suprema de Justicia hizo lo que no pudo el Congreso, en ocho años, darle una amnistía judicial. (OP)(Blanco y Negro)
EXPLORED
en Ciudad Quito

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