El mensaje de paz que traen ministros contrasta con política armamentista impulsada por jefes de Estado
Fomentar medidas de confianza y seguridad, intensificar el combate al tráfico de armas, drogas y al terrorismo, respetar la soberanía, la integridad y la inviolabilidad del territorio y no interferir en asuntos internos de los Estados, son los objetivos por los cuales se reúnen hoy en Quito ministros de Defensa y cancilleres de los 12 países que integran la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur).
Pero mientras los ministros traen ese discurso pacifista, los mandatarios sudamericanos destinan cada año más recursos para gasto militar.
En efecto, según el último reporte del Instituto Nacional de Estudios para la Paz de Estocolmo, el gasto militar mundial sumó $1,46 billones en 2008, un 4% más que el año previo, mientras en los 12 países de América del Sur, el rubro subió 25% hasta bordear los $50 000 millones.
"Se trata de un récord para los países de la región, que se inscriben en una tendencia mundial de crecimiento del gasto armamentista liderado por EEUU", destaca el estudio.
Del monto mundial, EEUU acaparó más de la mitad con $600 000 millones, seguido por China con $84 900 millones, Francia con $65 700 millones, Gran Bretaña, con $65 300 millones y Rusia con $58 600 millones. Paradójicamente, estos cinco países son miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU.
En Sudamérica, Brasil está a la cabeza en el gasto armamentista con $27 540 millones; le siguen Colombia con $6 746 millones; Chile con $5 395 y Venezuela con $3 321 millones.
Ecuador no es la excepción pues cifras oficiales registran que el gasto militar se triplicó desde $500 millones en 2006 hasta unos $1 300 millones este año.
Bajo este escenario, ayer unos 50 delegados de las 12 naciones , reunidos en el Hilton Colón de Quito, debatieron las propuestas de Ecuador, Brasil, Perú y Argentina para transparentar los convenios militares suscritos por todos los países de la región.
El embajador de Bolivia, Javier Zárate, destacó la vocación pacifista de las naciones que integran la Unasur, pero defendió el derecho de cada país a defenderse de cualquier agresión.
Javier Ponce, Ministro de Defensa de Ecuador, destacó la importancia de este encuentro y recordó que en la cita presidencial de Bariloche (Argentina), se estableció que el tema de la seguridad de la región va más allá de las bases militares estadounidenses en Colombia.
"Trataremos sobre adquisiciones militares, abriremos el debate para llegar a una confianza mutua en el tema de seguridad... Ecuador pide transparentar la información previa a las maniobras conjuntas", señaló el ministro.
Patricio Haro, coronel en servicio pasivo, destacó la necesidad de que la Unasur exija transparencia sobre las compras de armamento de Brasil a Francia y sobre el proyecto nuclear con Irán que impulsa el presidente de Venezuela, Hugo Chávez. "Esto provocará una crisis regional" enfatizó.
De igual modo, Fausto Lupera, presidente del Parlamento Andino, dijo en relación al arsenal de Venezuela: "Es preocupante, nadie compra armas para tenerlas de adorno".
Para Mauricio Gándara, ex embajador de Ecuador en Londres, la Unasur debe establecer una garantía colectiva: "Si un país es atacado, debe existir la solidaridad para que la respuesta sea dada en grupo, como lo propuso Brasil", señaló. (MING)
Perú reclama transparencia
El presidente peruano, Alan García, envió ayer una carta a los participantes en la cita de la Unasur.
En la misiva, el jefe de Estado menciona la necesidad de frenar el armamentismo. Para lograrlo, García describe como mecanismos la "transparencia y confianza y el compromiso de todos los miembros de un Pacto de No Agresión Militar".
Describe asimismo los enormes gastos de la región y menciona que con reducirlos un 15% se habría sacado de la pobreza a unos 30 millones de sudamericanos.
Además, pide la transparencia y homologación de gastos militares. (LAG)