GINEBRA.- El Tratado contra la Prohibición de Minas, firmado en 1997, sigue dando sus frutos y el número de paÃses que emplean estas armas, asà como sus vÃctimas, sigue descendiendo, pero ya se están dando graves violaciones de la convención en cuanto a la obligación de limpieza y destrucción de minas.
Estas son algunas de las conclusiones del Monitor de Minas Terrestres 2008, presentado hoy en la
ONU por Campaña Internacional para la Prohibición de Minas Terrestres (ICBL,siglas en inglés) la más importante organización contra estas armas y galardonada con el Nobel de la Paz.
Sólo dos paÃses,
Rusia y Birmania, ambos no signatarios del Tratado, siguieron usándolas en 2007, asà como varios grupos armados no estatales en al menos nueve paÃses, entre los que destacan por el número de minas las
FARC colombianas.
"Otra buena noticia es que el pasado año no se produjo ningún uso, producción o transferencia de minas antipersonales por ningún estado parte", señaló Steve Goose, director ejecutivo de Human Rights Watch, integrado en ICBL.
Sin embargo, el informe 2008 refleja que tres estados parte -Grecia, Bielorrusia y TurquÃa- todos ellos con grandes existencias de minas antipersonales, no cumplieron con el plazo del 1 de marzo de 2008 para destruirlas.
Esta es "la mayor violación hasta ahora del Tratado de Prohibición de Minas", señaló Goose, al presentar en rueda de prensa el informe.
Grecia y TurquÃa almacenan entre ambos 4,2 millones de minas antipersonales, mientras a Bielorrusia le quedan por destruir 3,4 millones.
Otros 15 estados parte, que tienen de plazo hasta 2009 para la limpieza de minas, declararon no ser capaces de cumplirlo y solicitaron una extensión.
Entre ellos figuran Ecuador,
Venezuela, Perú, el Reino Unido y Bosnia.
Para los responsables del informe, los casos de Venezuela y el Reino Unido son especialmente graves, pues "tienen una contaminación de minas relativa, no excesiva, y no han limpiado ni una sola área minada en nueve años".
Si el Reino Unido tiene las minas en las islas Malvinas, como herencia de la guerra que mantuvo con Argentina, Venezuela las tiene en zonas fronterizas con
Colombia, "y no le interesa limpiarlas porque le sirven como medio de impedir la entrada de guerrilleros colombianos", señaló Goose.
"La obligación de limpieza de minas se refiere especialmente a las áreas donde se sabe positivamente que existen", aclaró el responsable. "No esperamos que paÃses como Camboya, fuertemente contaminados, puedan limpiar totalmente su territorio", agregó.
En 2007, el número de vÃctimas por minas y artefactos sin explotar de guerras siguió decreciendo, de 6 022 hasta 5 426, entre muertos y heridos.
Pero un año más, la mayorÃa de las vÃctimas fueron civiles, y la mitad de éstos niños, destacó Katleen Maes, de Handicap International, otra de las organizaciones no gubernamentales de ICBL.
Además, la reducción en el número de vÃctimas fue menos significativa que otros años, y se produjeron vÃctimas en paÃses donde nunca antes se habÃan registrado, como Mali o Gambia.
En 2007, los donantes proporcionaron $430 millones para financiar la acción contra las minas, encabezados por
EEUU, Noruega, Canadá y la
UE.
Los principales paÃses receptores fueron Afganistán, Irak y Camboya.
El Tratado de Prohibición de Minas ya cuenta con dos tercios de los paÃses del mundo (156 estados) entre sus signatarios, aunque el ritmo de adhesión ha decrecido y si sólo tres se sumaron en 2007 (Kuwait, Irak y Palaos), en lo que va de 2008 ninguno lo ha hecho.
Pero en sus años de existencia, los paÃses firmantes han destruido 42 millones de minas.
Más de 70 Estados y seis áreas no reconocidas internacionalmente siguen afectados por minas. (EFE)