El trabajo periodístico se complicó en el país centroamericano desde el golpe de Estado del año pasado. Los secuestros y la intimidación aumentan, mientras impera la impunidad.

Una delegación de alto nivel de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), concluyó ayer una visita iniciada este domingo a Honduras, como un seguimiento al informe, publicado en enero, sobre la situación de los derechos humanos, tras el golpe de Estado de mediados del año pasado.

La delegación la integraron, entre otros, Felipe González, presidente de la CIDH; y la Relatora Especial para la Libertad de Expresión, Catalina Botero. Ellos se reunieron con autoridades, organizaciones no gubernamentales y representantes de la sociedad civil, defensores de derechos humanos, comunicadores sociales y miembros de la Comisión de la Verdad.

La visita se realiza luego de que el 22 de abril, La Relatoría Especial para la Libertad de Expresión, de la CIDH, condenara el asesinato del periodista Jorge Alberto (Georgino) Orellana, ocurrido dos días antes en la ciudad de San Pedro Sula.

El crimen de Georgino alarmó a la Relatoría, porque es el sexto de un periodista en ese país, en lo que va de este año. "Con él se pone de presente, nuevamente, la grave situación de indefensión y vulnerabilidad de la prensa en Honduras", dijo la Relatoría en un comunicado reciente.

Ante la situación, la Relatoría Especial hizo una exhortación urgente al Estado hondureño, para que adopte las medidas necesarias para prevenir esos crímenes, proteger a los periodistas en riesgo y avanzar de manera pronta y decidida en las investigaciones correspondientes.

Según detalla la Relatoría, en base a información recibida, Orellana recibió dos balazos, la noche del 20 de abril pasado, luego de abandonar las oficinas del canal Televisión de Honduras en el cual dirigía un programa de opinión sobre temas de actualidad. El 1 de marzo fue asesinado Joseph

Hernández Ochoa, periodista del canal 51 de Tegucigalpa. Diez días más tarde ocurrió lo mismo con David

Meza Montesinos, del Canal 10 y de las Radios América y El Patio de la ciudad de La Ceiba.

El 14 del mismo mes, en la ciudad de Tocoa, Nahún Palacios, director de noticias de la Televisora Canal 5 del Aguán, corrió con igual suerte. Bayardo Mairena y Manuel Juárez, fueron asesinados el 26 de marzo. Ellos trabajaban en el Canal 4 R.Z. Televisión y Radio Excélsior, respectivamente. La Relatoría Especial reiteró su preocupación ante la "gravísima situación que viven los periodistas hondureños". (MEVO)

Comunicación, AP con plan B para ley


La asambleísta Cinthya Viteri (MDG) denunció ayer que Alianza País (AP) planearía crear, en el proyecto de Ley de Comunicación, una Secretaría jerárquicamente superior al Consejo de Comunicación, la que tendría la facultad de sancionar a los medios. A ello la atribuye Viteri que la Comisión, presidida por Betty Carrillo (AP), no haya avanzado en la construcción del informe para segundo debate, cuyo plazo vence el 7 de junio. Viteri considera que éste proyecto también debe ir a una Consulta Prelegislativa. Viteri, Fausto Cobo (PSP) y Lourdes Tibán (PK), miembros de la comisión, coinciden en que no se ha avanzado casi nada en el tratamiento de los siete puntos del acuerdo legislativo para consensuar dicha ley. (GM)

"Impunidad en región es tan preocupante como los crímenes a comunicadores"


Entrevista

Paúl Mena Erazo, periodista, profesor universitario de  Leyes y  Ética de la Comunicación; autor de varios artículos y textos sobre comunicación y periodismo; corresponsal de Prensa Extranjera.

¿Cómo está el respeto a la libertad de expresión en América Latina?
Como lo ha señalado, en varios informes, la Relatoría para la Libertad de Expresión de la CIDH, la libertad de expresión en la región está en contante riesgo y deterioro. Hay países en los que esta libertad está seriamente amenazada, como en México, en donde, según indican varios colegas, hay zonas de silencio.

¿Qué significa eso?

Que hay sectores donde la presencia de las mafias del narcotráfico, en donde ni la autoridad dice lo que pasa. Y, aquellos periodistas que lo hacen han sido asesinados o agredidos. Otro problema representa Honduras, por asesinatos a varios periodistas.

Ahora mismo, una misión de la CIDH está Honduras intentando hacer algo al respecto.

En efecto pero, tan grave como los asesinatos, es la impunidad, ya que el Estado y la sociedad no trabajan para el esclarecimiento de esos hechos.

¿Qué pasa en otros países?
También preocupa la situación de la prensa ante la guerrilla y los paramilitares en Colombia; en Venezuela y Cuba por las amenazas más bien de orden político; en Brasil, por la delincuencia en ciertos sectores.

¿Es decir que hay varios enemigos de la libertad de expresión?
Sí, los que he mencionado son los focos de preocupación. En el resto de países hay diversos de tensión con el sector político.

¿Ese es el caso del Ecuador?
Claro, aquí vemos desde el Gobierno un afán por crear un ambiente de ataque a la prensa y un Proyecto de Ley de Comunicación, que es más bien de medios, que busca ejercer control. En otros países, en cambio, más bien hay sectores de interés que buscan manejar la agenda y la línea editorial de los medios.

¿Es necesaria una ley, para regular a los medios?
Ya que tenemos que hacerla, porque lo establece la Constitución, se debería regular también la publicidad oficial, el monopolio estatal de medios y la despenalización de la opinión, entre otros aspectos. (MEVO)
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