El presidente Alfredo Palacio comenzó su tercer mes de Gobierno con unas precisiones en torno a las relaciones con los organismos internacionales de crédito y lo que será el eje de su accionar polÃtico para sus 18 meses de gestión.
Durante un almuerzo que mantuvo ayer con un grupo de articulistas y periodistas de HOY, en las nuevas instalaciones de este Diario, sostuvo que las relaciones del paÃs con los organismos internacionales de crédito (Fondo Monetario Internacional, Banco Mundial, Banco Interamericano de Desarrollo, entre otros) están normales y que una prueba de ello es que durante las reuniones que mantuvo, lo único que le solicitaron al paÃs es que se mantenga la disciplina fiscal.
También indicó que al ministro de EconomÃa, Rafael Correa, le pidió dos cosas antes de posesionarlo en el cargo: que no hable del tema de la dolarización y que ninguna acción que ejecute sea interpretada como posible campaña polÃtica para él o ningún miembro del Gobierno.
"El crecimiento del paÃs no era real", repitió en varias ocasiones para respaldar la decisión de impulsar la redistribución del Feirep, a fin de destinar una parte de esos recursos al desarrollo productivo. "Las cifras macroeconómicas son producto básicamente de las remesas y del alto precio del petróleo... Por eso tenemos que lograr que haya una real productividad". No obstante, dijo que al momento se analizaba si era necesario hacer alguna objeción a ese cuerpo legal.
En materia polÃtica su interés se centrará en la reforma polÃtica que tiene tres vertientes: el reforzamiento institucional, con la conformación de la Corte Suprema de Justicia (envió la reforma que creó el Comité Calificador y remitió los cambios en torno al fuero de Corte que aún no se tramitan); la consulta popular del 11 de diciembre que, según dijo, se sustentará en las propuestas ciudadanas que se están enviando desde la sociedad civil; y la reforma electoral, que buscará un nuevo sistema de escogitamiento de representantes, vÃa distritos o circunscripciones.
"Mi Gobierno empezó débil por una serie de circunstancias polÃticas", dijo, pero por ello considera que esto puede convertirse en su fortaleza, dado que los ecuatorianos no confÃan en los partidos. También afirmó que sabe que el rechazo a la anterior administración no reflejan las cifras de aceptación a su gestión que, afirmó, está comenzando y que se concentrará, además, en la propuesta que trabaja desde que fue vicepresidente: el aseguramiento universal, que busca dotar de atención primaria de salud a todos los ecuatorianos.
Su cálculo es que se cubra a un 40% de la población (sin contar la que tiene alguna forma de seguridad y que es de alrededor del 12%). Y agregó que una vez que se llegue al 60% será un punto sin retorno, con lo cual el programa deberá mantenerse. (SL)
Tenemos un jugador de póker para el TLC
Parece un presidente entusiasmado dispuesto a escuchar
Por Jaime Mantilla Anderson, Director de HOY
El presidente expuso sus ideas relievando la misión que se ha planteado: consolidar las instituciones sin desconocer el pedido del pueblo. Para ello, considera necesario ir a un verdadero estado âde derechosâ, en que se reconozcan tres categorÃas: los civiles y polÃticos; los sociales, económicos y culturales; y los del medio ambiente, desarrollo personal, y la ciencia y tecnologÃa.
Se le nota su fijación con la salud. Un presidente entusiasmado y con gran afán de escuchar. Parece tener las ideas claras, algo no muy común en los presidentes de América.
Considera primordial, racionalizar la explotación y exportación petrolera. âNo puede el Ecuador seguir viviendo de la exportación de crudo, sin darle un valor agregadoâ, dijo. âSe nota, añadió, que han faltado neuronas en la conducción de la polÃtica petroleraâ.
En cuanto al IESS, su propuesta es clara: no puede al mismo tiempo ser un prestador de servicios y un contratista de fondos propios y ajenos, medicinas, recursos.
Profundiza en tres campos: reforma polÃtica, aseguramiento universal de salud, para lo cual es necesaria la inversión en ciencia y tecnologÃa, y continuación de negociaciones con el TLC.
Según Palacio, el TLC hay que jugarlo, como una partida de poker: no debe enseñar las cartas, sino manejarlas adecuadamente, conociendo el momento oportuno para revelarlas.
¿La derecha le marca el tiempo a Palacio?
Asegura que él no participó en ninguna conspiración, en abril
Por Diego Cornejo Menacho, Subdirector de Información
El presidente aseguró que no participó en ninguna conspiración para derrocar al ex presidente Gutiérrez y se molestó visiblemente ante una pregunta que insinuaba que, entonces, pudo haber sido un âmuñecoâ de terceros, que habrÃan fraguado el derrocamiento del coronel, entre ellos su ministro de Gobierno, Mauricio Gándara.
En el dÃa en que se iniciaba el tercer mes de su mandato, estaba consciente de la debilidad de su Gobierno y, no obstante, transmitió optimismo en sus dos propósitos, para un periodo corto: la reforma polÃtica del paÃs y el aseguramiento de salud universal.
Causa la impresión de que está preparado para asumir las dificultades y desafÃos inherentes a la primera magistratura, pero se mueve mejor en los temas sociales que en los económicos, particularmente en los de salud. A ratos, tuve la impresión de que estaba frente a nosotros un superministro de Salud y no el presidente de la República.
Palacio se presentó como un hombre que antepone la ética en sus actos, busca acuerdos temáticos nacionales, y es opuesto a la âpactocraciaâ.
Usa el reloj en la muñeca derecha y su discurso tiene resonancias de un izquierdismo de los años setenta. Ha estado apenas 60 dÃas el poder. ¿Continuará igual hasta el fin de su mandato?
Ostenta menos poder que nunca
El presidente debe sentir que ha perdido hasta la libertad
Por Thalia Flores y Flores, Editora de Información
âTengo cosas más importantes que hacer que este cargoâ, sentenció el presidente Palacio, ayer. Confieso que la frasecita ya la habÃa escuchado, pero dicha vis a vis, me produjo escalofrÃo, viniendo de quien apenas dos meses atrás asumió el poder.
Y es que semejante afirmación bien podrÃa ser asumida como una suerte de menosprecio por el altÃsimo cargo; o, como parece ser, el resultado lógico de haber comprobado que el poder de un presidente del Tercer Mundo es relativo.
En efecto, como jefe del Ejecutivo, Palacio debe sentir que ha perdido hasta la libertad, esa de la que, paradójicamente, disfrutó cuando fue vicepresidente, y podÃa decir cualquier cosa âsin afectar a nadieâ. Y disfrutaba de un aparente poder, que hacÃa que cada una de sus declaraciones se convirtieran en titulares que lo âpromocionabanâ; ahora no.
Cada palabra suya resulta una sentencia que lo compromete. Qué decir de sus decisiones que hasta pueden hacer subir el riesgo paÃs, como en efecto ha sucedido tras la decisión de darle al Feirep un nuevo destino; decisión que podrÃa ser fruto de la conciencia de un paÃs desigual, pero que se topan con la realidad que imponen el FMI, los mercados, los poderosos. Es la paradoja de quien ubicado en lo más alto del poder, lo ostenta menos que nunca.
Palacio dispone de un tiempo limitado
El presidente se mueve como pez en el agua en el tema de la salud
Por Diego Araujo Sánchez, Subdirector Editorial
El doctor Alfredo Palacio luce distendido, con una corbata azul pastel, camisa celeste claro y terno plomo a rayas, y se mueve como pez en el agua en el tema de la salud, al que regresa a cada momento. Aquà toca el dedo en la llaga de una de las grandes lacras sociales del paÃs. Como respuesta, regresa al programa del aseguramiento universal de salud.
Aunque afirma que "sin polÃtica económica no se puede tener polÃtica social", deja sin responder preguntas sobre cómo se financiará el aseguramiento universal, cuando ya no cuente el paÃs con los excedentes petroleros.
Los énfasis del presidente, además de la salud, son: la reforma polÃtica, los cambios en el estatuto electoral para no reproducir en el inmediato futuro los mismos vicios de la representación del inmediato pasado; y consolidar las instituciones democráticas destruidas por el coronel Gutiérrez. Sin embargo, parece no tener presente las limitaciones del tiempo de su mandato, ni los cómos para sustentar sus propuestas.
Conoce muy bien la debilidad de un Gobierno que no cuenta con fuerza polÃtica alguna, aunque cree que esa debilidad puede tornarse en fortaleza, pero tampoco dice cómo. El tiempo puede jugar una mala pasada en las buenas intenciones que expresa Palacio para poner las bases de algunas transformaciones básicas del paÃs, si bien no se lo percibe preocupado por ello, ni en guerra contra el reloj.
LA CRONOLOGÃA DE LOS HECHOS MÃS IMPORTANTES DURANTE ESTOS 30 DÃAS DE LA ADMINISTRACIÃN DE ALFREDO PALACIO
2 de junio de 2005
El secretario de la Administración, Luis HerrerÃa, oficializó el pedido de renuncia a todos los funcionarios que mantengan deudas con la banca (calificada como E) y conformó una comisión evaluadora para que emita un informe.
10 de junio de 2005
El ministro de Defensa, Solón Espinosa, presentó al Comando Conjunto un proyecto de reforma para las Fuerzas Armadas a ejecutarse hasta 2006. Incluye siete temas, entre ellos, el de la transparencia en los gastos militares.
15 de junio DE 2005
El Congreso aprobó la redistribución del Feirep, planteada por el régimen: 5%, para vialidad; 5%, protección ambiental; 5%, ciencia; 35%, pago deuda externa; 30%, sector social; y el 20% para estabilización petrolera.
16 de junio DE 2005
Alfredo Palacio reajustó su Gabinete y posesionó a Iván RodrÃguez, Carlos Pareja y Andrés Seminario como ministro de EnergÃa, presidente de Petroecuador y secretario de comunicación de Carondelet, respectivamente.
18 de junio DE 2005
El jefe de Estado viaja a Asunción-Paraguay, en su primer desplazamiento al exterior en calidad de mandatario del Ecuador. En la cumbre mantiene varias reuniones con los presidentes de Colombia, Venezuela y Uruguay.
20 de junio de 2005
Palacio regresa de Asunción y ordena la creación de la SecretarÃa Técnica, con rango de ministerio, para desarrollar el sistema de aseguramiento de salud universal, con el que pretende brindar protección a todos los ecuatorianos.