Guayaquil. 19 ago 99. Las facilidades de ingreso y los bajos
costos en la pensión son dos razones. La carrera de mayor demanda
es medicina. En la Estatal hay 787 alumnos.
Gran fiesta del 20 de julio por la independencia de Colombia.
Celébralo con una de aguardientico y unas cuantas arepas. Este
sábado 14 desde las 20:00". El letrero estaba pegado precisamente
en el sitio más colombianizado de la Facultad de Medicina de la
Universidad de Guayaquil, a uno de los costados de las paredes
externas del viejo pabellón.
"A los brasileños o peruanos no sé dónde los puedes encontrar,
pero a los colombianos sí. Ellos siempre se reúnen ahí", dice
Carlos González, estudiante guayaquileño del tercer año de
Medicina, mientras señala uno de los tantos espacios ocupados por
universitarios. Esta escena es referente de llegada de ciudadanos
extranjeros a estudiar en las universidades locales. Los motivos:
facilidades para ingresar y bajos costos económicos.
La Universidad de Guayaquil reconoce que el número de colombianos
inscritos en este centro supera los 500 cada año. Esto representa
casi el 75 por ciento del total de extranjeros que se matriculan
en este centro de enseñanza superior y casi el 90 por ciento de
los que estudian en los centros de este nivel en la ciudad, de
acuerdo con Emilia Cure, cónsul de Colombia en Guayaquil.
Solo en la Universidad Católica de Santiago de Guayaquil hay
matriculados 92 extranjeros. "La mayoría son de Colombia", dice
Frida Minurrieta, una uruguaya de 22 años, que también estudia
medicina y que está radicada con su familia desde hace 12 años
en Ecuador. Para Jorge Llerena, del departamento de Planificación
de la Universidad de Guayaquil, esto se explica por dos hechos:
lo difícil que es conseguir un cupo en cualquiera de las
universidades estatales en Colombia, así como las condiciones
económicas favorables que ofrecen las universidades ecuatorianas.
Y es que no solamente colombianos llegan a estudiar en Guayaquil.
Los índices son altos sobre los que arriban desde Perú, Venezuela
y Brasil. Desde este último país se observa un incremento en los
últimos dos años. Un censo ejecutado por la Asociación de
Estudiantes Extranjeros en Guayas, contabiliza 100 brasileños
estudiando, la mayoría, en la Universidad de Guayaquil.
Migrar por un título profesional no es una decisión que guste.
Es una determinación que se la toma como última instancia. Esto
ocurre casi siempre, dice Johana Osorio, que a los 18 años ya
tiene dos años estudiando odontología en Guayaquil.
"Me presenté a las pruebas del Instituto Colombiano de Formación
de Educación Superior (Icfes) y no completé el mínimo de puntos.
No me quedó más que irme de mi país", explica Osorio, quien
comparte con una compatriota suya los gastos de alquiler en un
departamento en La Garzota.
Lo mismo dice Valdemar Cavalcante, brasileño de 24 años, quien
desde hace 14 meses está en Guayaquil. "En mi país por cada cupo
en una universidad fiscal, hay 100 aspirantes. Yo intenté dos
veces y dije que ya no podía seguir insistiendo". El joven
estudia en la Facultad de Medicina.
Para Lina María Travecedo, otra colombiana de 26 años, con dos
semestres de estudios en la Fundación Universitaria San Martín
de Barranquilla, un nuevo comienzo en Odontología en Guayaquil,
no fue una decisión fácil. "Dejé a mi familia, pero no pude
evitarlo, la situación económica no me permitía mantener los
estudios". Por la matrícula de cada semestre debía pagar hasta
1 600 000 pesos. "Alguien me recomendó que venga a Ecuador, que
acá por el año pagaba el equivalente a 700 mil pesos. Y aquí
estoy desde hace año y medio".
Lo mismo le ocurrió a Cavalcante, quien después de estudiar en
una universidad estatal de Bolivia llegó a Ecuador. "A los ocho
meses nos venimos seis brasileños, no por una cuestión económica,
en Bolivia pagábamos menos cada matrícula como extranjeros, nos
movió la calidad educativa. Ecuador es más en el aspecto
académico".
Como todos los extranjeros están pensando en el regreso a sus
países con el título bajo el brazo, ellos no creen que un título
de médico conseguido en Ecuador, les reste posibilidades. La
enseñanza es igual, dice Carlos Montenegro, vicepresidente de la
Asociación de Estudiantes Extranjeros, "así como aquí uno se
encuentra con catedráticos buenos y otros mediocres, en Colombia
es igual".
"Si hay una diferencia puede ser en lo tecnológico. En Colombia
están mejor, pero eso se balancea con las prácticas a las que te
someten acá. Te mandan a lidiar con la profesión más temprano que
en mi país".
Los títulos se revalidan
Convenios como el Andrés Bello, entre Ecuador, Colombia, Perú y
Venezuela, permiten las posibilidades de un intercambio de
aspirantes a títulos profesionales entre las fronteras. Sin
embargo, este intercambio se mueve en una sola dirección: todos
hacia Ecuador. Las cifras de las Oficinas de Migración en Guayas,
reportan a 29 mil 446 extranjeros viviendo en esta provincia, 2
612 con visas de estudiantes.
El mayor número de estos están en la Universidad de Guayaquil,
donde en el periodo lectivo de 1998 a 1999 se matricularon 787
extranjeros. Las facultades en las que más ingresos se
registraron fueron en la de Medicina, que con 503, ocupa el
primer lugar. Le siguen Odontología, con 211. En Ciencias
Psicológicas hay 16. En otras facultades los números se mantienen
entre dos a ocho.
En la Universidad Agraria, también estatal, el pasado año lectivo
se matricularon siete. En otras universidades en Guayaquil, el
número de extranjeros baja considerablemente con respecto a la
Universidad de Guayaquil. Según Emilia Cure, cónsul de Colombia
en Guayaquil, esto se debe por lo costosas que resultan para un
extranjero. En la Universidad Católica existen 92 extranjeros
estudiando, residen por varios años en este país y con familias.
En cambio no hay un registro que marque una tendencia de
ecuatorianos que migren a estudiar a otras universidades de la
región. Más se observa a niveles de Postgrado que es aún más
difícil de cuantificar. (Texto tomado de El Comercio)
costos en la pensión son dos razones. La carrera de mayor demanda
es medicina. En la Estatal hay 787 alumnos.
Gran fiesta del 20 de julio por la independencia de Colombia.
Celébralo con una de aguardientico y unas cuantas arepas. Este
sábado 14 desde las 20:00". El letrero estaba pegado precisamente
en el sitio más colombianizado de la Facultad de Medicina de la
Universidad de Guayaquil, a uno de los costados de las paredes
externas del viejo pabellón.
"A los brasileños o peruanos no sé dónde los puedes encontrar,
pero a los colombianos sí. Ellos siempre se reúnen ahí", dice
Carlos González, estudiante guayaquileño del tercer año de
Medicina, mientras señala uno de los tantos espacios ocupados por
universitarios. Esta escena es referente de llegada de ciudadanos
extranjeros a estudiar en las universidades locales. Los motivos:
facilidades para ingresar y bajos costos económicos.
La Universidad de Guayaquil reconoce que el número de colombianos
inscritos en este centro supera los 500 cada año. Esto representa
casi el 75 por ciento del total de extranjeros que se matriculan
en este centro de enseñanza superior y casi el 90 por ciento de
los que estudian en los centros de este nivel en la ciudad, de
acuerdo con Emilia Cure, cónsul de Colombia en Guayaquil.
Solo en la Universidad Católica de Santiago de Guayaquil hay
matriculados 92 extranjeros. "La mayoría son de Colombia", dice
Frida Minurrieta, una uruguaya de 22 años, que también estudia
medicina y que está radicada con su familia desde hace 12 años
en Ecuador. Para Jorge Llerena, del departamento de Planificación
de la Universidad de Guayaquil, esto se explica por dos hechos:
lo difícil que es conseguir un cupo en cualquiera de las
universidades estatales en Colombia, así como las condiciones
económicas favorables que ofrecen las universidades ecuatorianas.
Y es que no solamente colombianos llegan a estudiar en Guayaquil.
Los índices son altos sobre los que arriban desde Perú, Venezuela
y Brasil. Desde este último país se observa un incremento en los
últimos dos años. Un censo ejecutado por la Asociación de
Estudiantes Extranjeros en Guayas, contabiliza 100 brasileños
estudiando, la mayoría, en la Universidad de Guayaquil.
Migrar por un título profesional no es una decisión que guste.
Es una determinación que se la toma como última instancia. Esto
ocurre casi siempre, dice Johana Osorio, que a los 18 años ya
tiene dos años estudiando odontología en Guayaquil.
"Me presenté a las pruebas del Instituto Colombiano de Formación
de Educación Superior (Icfes) y no completé el mínimo de puntos.
No me quedó más que irme de mi país", explica Osorio, quien
comparte con una compatriota suya los gastos de alquiler en un
departamento en La Garzota.
Lo mismo dice Valdemar Cavalcante, brasileño de 24 años, quien
desde hace 14 meses está en Guayaquil. "En mi país por cada cupo
en una universidad fiscal, hay 100 aspirantes. Yo intenté dos
veces y dije que ya no podía seguir insistiendo". El joven
estudia en la Facultad de Medicina.
Para Lina María Travecedo, otra colombiana de 26 años, con dos
semestres de estudios en la Fundación Universitaria San Martín
de Barranquilla, un nuevo comienzo en Odontología en Guayaquil,
no fue una decisión fácil. "Dejé a mi familia, pero no pude
evitarlo, la situación económica no me permitía mantener los
estudios". Por la matrícula de cada semestre debía pagar hasta
1 600 000 pesos. "Alguien me recomendó que venga a Ecuador, que
acá por el año pagaba el equivalente a 700 mil pesos. Y aquí
estoy desde hace año y medio".
Lo mismo le ocurrió a Cavalcante, quien después de estudiar en
una universidad estatal de Bolivia llegó a Ecuador. "A los ocho
meses nos venimos seis brasileños, no por una cuestión económica,
en Bolivia pagábamos menos cada matrícula como extranjeros, nos
movió la calidad educativa. Ecuador es más en el aspecto
académico".
Como todos los extranjeros están pensando en el regreso a sus
países con el título bajo el brazo, ellos no creen que un título
de médico conseguido en Ecuador, les reste posibilidades. La
enseñanza es igual, dice Carlos Montenegro, vicepresidente de la
Asociación de Estudiantes Extranjeros, "así como aquí uno se
encuentra con catedráticos buenos y otros mediocres, en Colombia
es igual".
"Si hay una diferencia puede ser en lo tecnológico. En Colombia
están mejor, pero eso se balancea con las prácticas a las que te
someten acá. Te mandan a lidiar con la profesión más temprano que
en mi país".
Los títulos se revalidan
Convenios como el Andrés Bello, entre Ecuador, Colombia, Perú y
Venezuela, permiten las posibilidades de un intercambio de
aspirantes a títulos profesionales entre las fronteras. Sin
embargo, este intercambio se mueve en una sola dirección: todos
hacia Ecuador. Las cifras de las Oficinas de Migración en Guayas,
reportan a 29 mil 446 extranjeros viviendo en esta provincia, 2
612 con visas de estudiantes.
El mayor número de estos están en la Universidad de Guayaquil,
donde en el periodo lectivo de 1998 a 1999 se matricularon 787
extranjeros. Las facultades en las que más ingresos se
registraron fueron en la de Medicina, que con 503, ocupa el
primer lugar. Le siguen Odontología, con 211. En Ciencias
Psicológicas hay 16. En otras facultades los números se mantienen
entre dos a ocho.
En la Universidad Agraria, también estatal, el pasado año lectivo
se matricularon siete. En otras universidades en Guayaquil, el
número de extranjeros baja considerablemente con respecto a la
Universidad de Guayaquil. Según Emilia Cure, cónsul de Colombia
en Guayaquil, esto se debe por lo costosas que resultan para un
extranjero. En la Universidad Católica existen 92 extranjeros
estudiando, residen por varios años en este país y con familias.
En cambio no hay un registro que marque una tendencia de
ecuatorianos que migren a estudiar a otras universidades de la
región. Más se observa a niveles de Postgrado que es aún más
difícil de cuantificar. (Texto tomado de El Comercio)
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