Quito. 29 may 97. El dinero salió del Ministerio de Finanzas,
de la partida 'Comunicación', a disposición de la SENACOM.
La primera entrega fue de mil millones de sucres. La segunda
será de otros mil, estima Mariana Velasco, Secretaria Nacional
de Comunicación.

Los primeros mil millones sirvieron para cancelar a los
periódicos, radios y canales de televisión que exigían el pago
por anticipado. Los otros mil se entregarán a los medios luego
de un monitoreo que determine el cumplimiento de sus
contratos.

Con el lema "Dile Sí al Ecuador", impreso en grandes letras
rojas, la Senacom contrató una serie de anuncios en centenares
de radios, en la prensa escrita y en los canales de
televisión.

Todos esas propagandas hacían referencia a las preguntas de la
consulta. Unos a las que se orientaban al control del dinero
en la política, cambiar la justicia o castigar a los
corruptos.

En otros anuncios, en cambio, "Dile Sí y Vota Sí" se refería
de forma directa a la pregunta 1 y 2. Al pie de este
anuncio, aparecía la dirección electrónica de la Senacom. Sin
embargo, aquélla no reconoce como suyos estos anuncios.

"En la Senacom nunca se diseñó una campaña por el Sí. Se
diseñó una estrategia de comunicación para difundir la
consulta popular", dice Velasco.
La secretaria aclara que la ley faculta a este organismo a
promover la consulta y que por eso la partida se llama
'Comunicación'.

Insistió en que "Dile sí al Ecuador" no era una campaña por el
sí y negó que la Senacom haya contratado anuncios para
promover el voto en favor del sí, en la primera y la segunda
preguntas.

Reconoció que hubo apenas una cuña de radio en tal sentido...,
pese a toda evidencia.

¿Ecuatorianos por la paz?

"No sé quienes son esos señores del Comité de Ecuatorianos por
la Paz. Supongo que es uno de esos grupos de ciudadanos que se
organizan", dijo Mariana Velasco.

Los primeros anuncios de televisión que llamaban a votar por
el sí aparecieron tempranamente, incluso antes de la campaña
de la SENACOM. Dichos "spots" presentaban el rostro de
Bucaram, una niña con un papel que decía 'que se vaya' y
escenas de las grandes marchas de febrero. Los mensajes
llamaban a votar sí para evitar que Bucaram regrese al país.
Al final del "spot" aparecía una leyenda que decía "Comité de
Ecuatorianos por la Paz".

¿Quiénes son los miembros del Comité de Ecuatorianos por la
Paz? Nadie lo sabe, ni siquiera Mariana Velasco.

Los contratos para la transmisión de estos 'spots' no
registran el nombre de ninguno de sus representantes. Mariana
Velasco insistió en que la SENACOM no puede responsabilizarse
por éstos.

¿Quién contrató y pagó, entonces, los anuncios del Comité de
Ecuatorianos por la Paz? Sigue el misterio.

Las primeras propagandas en favor del sí fueron promovidas,
precisamente, por el Comité de Ecuatorianos por la Paz,
después se inició la campaña 'Dile sí' de la SENACOM. La
última en aparecer fue la del Tribunal Supremo Electoral que
promocionaba, exclusivamente la consulta.

Dice Velasco que la campaña de promoción hecha por la SENACOM
le resultó barata al Estado, si se considera que ésta comenzó
en la última semana de abril. "No como la del Tribunal que
empezó apenas en la semana anterior a la consulta. Mientras la
campaña del TSE costó 2.900 millones, la de la SENACOM costó
2.000 millones de sucres.

Tribunal no termina de hacer las cuentas

Patricio Vivanco, presidente del Tribunal Supremo Electoral
estima que la consulta del domingo pasado le costó al país,
aproximadamene, 23 mil millones de sucres.

Los pagos más significativos son los 11.500 millones de gastos
operativos de los Tribunales Provinciales y los 7.195 millones
que gastó el TSE. De estos 7.195 millones, 2.900 millones
fueron destinados a la campaña de promoción de la Consulta
hecha por el Tribunal Supremo Electoral. Se añaden los 3.677
millones del Convenio que firmaron el TSE y las Fuerzas
Armadas como pago por la movilización militar y el transporte
de papeletas. Estos 3.677 millones no pasaron por el TSE
puesto que se hizo una transferencia directa del Ministerio de
Finanzas al de Defensa.

Hay que sumar los 644 millones de la impresión del material
electoral en el Instituto Geográfico Militar y los 644 que
costó el resguardo policial.
Vivanco explicó, sin embargo, que el monto definitivo de los
gastos se conocerá una vez que los tribunales presenten sus
justificativos y se pueda cuadrar la contabilidad.

Un dato interesante, que se desprende del estudio de la
partida presupuestaria, es que el Tribunal del Guayas fue el
único que presupuestó gastos de difusión, por 800 millones de
sucres.

'En todo caso, que el dinero se haya presupuestado no quiere
decir que se haya gastado', dice Vivanco.


Obras al margen del déficit fiscal

En los días previos a la consulta popular, el presidente
Fabián Alarcón cayó en la tentación del llamado ciclo político
de la economía. En otras palabras, hizo una serie de
compromisos para obras públicas en distintas provincias del
país; ofertas que de llegar a cumplirse le significarían al
fisco el desembolso de 91.280 millones de sucres, según
estimativos.

Tal política la llevó a cabo en su gira por el país, a través
del ministro de Obras Públicas y de diversos organismo
estatales. Se realizó al margen de un déficit fiscal que,
según informes de la consultora Multiplica, ya tiene un punto
porcentual más que el estimado por el mismo Frente Económico:
ahora es del 7,6 por ciento en relación con el PIB; cuando
empezó el interinazgo era de 6,6 por ciento.

Aunque el presidente Alarcón ha planteado en diversas
ocasiones que su mayor preocupación ha sido resolver los
problemas fiscales del país (que de alguna manera implicaría
"ajustarse el cinturón"), los hechos demuestran lo contrario.

Aparte de los 91 mil millones en ofrecimientos, para el sector
de la vivienda se han realizado varios anuncios que elevarán
el gasto público: subsidio gubernamental de 51 mil millones
para completar el 'Un Solo Toque' de Abdalá Bucaram, mil
millones de sucres para el plan de vivienda del Consejo
Provincial de Pichincha, una línea de crédito de la
Corporación Financiera.

El camino que ha seguido el régimen también se ha enfocado a
incrementar la deuda externa e interna, mediante la emisión de
bonos que son comprados por agentes económicos. La
obligaciones adquiridas son de 155 millones de dólares más,
aproximadamente.

El Gobierno sacó a la venta en el mercado internacional 500
millones de dólares para cancelar pendientes con el Chase
Manhattan Bank. De este monto, 115 millones quedaron para
obras. Igualmente, acaba de completar una emisión de 250
millones de dólares en el mercado interno que, después de
cancelar otras deudas, dejarán 40 millones para proyectos.

Lo concreto es que Alarcón no ha logrado solucionar el déficit
fiscal. Con esa premisa, los analistas prevén dos escenarios
posibles para el mandatario:

El primero, que el régimen aplique medidas como subir el
precio del gas y de la gasolina o crear nuevos impuestos. La
fórmula permitiría a Alarcón ganar los aplausos de organismos
financieros y de cuerpos empresariales del país.

El segundo escenario consiste en seguir adquiriendo deuda para
no sacrificar el bolsillo de los ecuatorianos. Otra fuente de
financiamiento es la venta de activos del Estado: la
telefónica Emetel, por ejemplo.

Los efectos serían recibidos por el nuevo Gobierno: él deberá
pagar las cuentas con nuevas medidas económicas. (DIARIO HOY)
(P. 6-A)
EXPLORED
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