Quito. 02.10.94. Por qué un Ministro que creía en ellos ahora es
detractor de los seguros paralelos porque "quebrarían al IESS"?
¿Por qué tantos funcionarios que llegan despotricando en su
contra, terminan con "la camiseta" del Instituto?
Este es el caso del propio Edgar Ponce, representante de los
trabajadores ante el Consejo Superior, del ex director Italo
Colamarco y, aún más significativamente, del ministro de
Bienestar Social que de recién llegado en mayo tuvo una obligada
salida por la puerta trasera con protección policial por la tenaz
oposición de los sindicatos, Alberto Cárdenas.
En el proyecto de reformas a la Constitución del Gobierno, se
abre la posibilidad de que los trabajadores escojan entre el IESS
y los seguros privados. Y como el propio Cárdenas ha dicho, esto
podría ser el fin de esa institución. Así, sencillamente el fin.
Sin embargo, hay quienes piensan que el Instituto Ecuatoriano de
Seguridad Social no puede ser abandonado a su suerte porque no es
esa institución perversa que pintan los medios de difusión, sino
una víctima más de la demagogia política, en el pasado, y de
poderosos intereses económicos, en el presente.
Y entre los que piensan así, están los actuales miembros del
Consejo Superior que, en medio del naufragio anunciado por cuanto
"experto" en seguridad social ha pasado por nuestro país, ponen
en marcha planes de rehabilitación. Planes que, a decir de
voceros del mismo, han sido tomados con fundamento y pueden ser
perfectamente financiados por el dinero de los afiliados. Tienen
objetivos a corto, mediano y largo plazo y la meta es la
descongestión de los servicios médicos y administrativos.
Lo primero es un plan piloto de salud que incluye una autonomía
hospitalaria, un desarrollo de los dispensarios a cuasi
hospitales y contratos de prestación de servicios médicos
privados.
Las medidas administrativas proponen contratos de prestación de
servicios a la banca privada para atender servicios y
prestaciones.
Se están asignando responsables y plazos para cada cosa.
Salud: la demanda ordena
Los hospitales de Quito y Guayaquil, con el estatus de unidades
ejecutoras, tendrán autonomía administrativo financiera con el
actual presupuesto anual. Desde ahora ya no tendrán que tramitar
en la matriz la compra de equipos, repuestos, etc. El control del
manejo de recursos quedarán en manos de las oficinas propias de
auditoría interna y contabilidad.
Como complemento va la apertura de nuevas unidades de salud. De
acuerdo al cronograma aprobado, en las próximas semanas entrarían
a funcionar los hospitales de Latacunga, Ibarra, Portoviejo,
Riobamba y Manta. En una segunda etapa, los de Milagro, Cuenca y
Guaranda y en la tercera, el de Ambato.
Los dispensarios médicos serán equipados y adecuados, para dar
todos los servicios que antes solo se encontraba en los
hospitales excepto altas cirugías y larga hospitalización. Un
programa nacional de diálisis se adaptará a los dispensarios.
Entidades privadas serán convocadas a brindar servicios de salud
para lo cual ya está listo el tarifario institucional de cada una
de las enfermedades existentes.
La Dirección Médico Social tiene plazo hasta el 3 de octubre para
presentar el plan de prestación de servicios médicos privados
listo para ser aplicado.
Servicios sin maltrato
El organismo aprobó que la entrega de préstamos quirografarios,
el pago de pensiones jubilares y aportes sean entregados a la
banca privada mediante contratos de prestación de servicios.
Actualmente el IESS está despachando 20 mil millones de sucres
mensuales en préstamos quirografarios.
En cuanto a reducción de la burocracia, a los 1300 empleados que
ya salieron y representan un ahorro de unos 5 mil millones de
sucres anuales, se suman 800 vacantes eliminadas, 1000 empleados
de día a un año despedidos y se sumarán numerosas compras de
renuncias.
La computarización total del IESS, proyecto que cuenta con la
asistencia técnica de la Escuela Politécnica Nacional y la
Escuela Politécnica del Litoral, en poco tiempo, tendrá a punto
todo trámite de los afiliados.
Este es el compromiso de las autoridades del IESS, fundado en su
convicción de que, como lo afirma el experto en seguridad social
latinoamericana, Carmelo Mesa-Lago, los principios de solidaridad
y universalidad de la seguridad social, "están en conflicto con
un programa privado sustitutivo". Todo un reto.
El dinero de los afiliados
Los gobernantes han tratado al IESS como el peor marido podría
haber tratado a su mujer. El IESS ha sido como una madre violada,
prostituida, llenada de hijos y luego abandonada.
Violada. En dictadura y en democracia, con prestamos al Estado
usados por los gobiernos para evitar estallidos sociales
provocados por ellos mismos. Presidentes de gira por las
provincias entregaban el chequecito de fondos del IESS para tal
tramo de carretera, para tal mercado, estadio, etc.
Violada también por el proceso inflacionario que empezó con la
terminación del boom petrolero y se agravó con la crisis de la
deuda. Los insumos y equipos para los servicios médicos del
Instituto que tenían que importarse, subieron de un dólar
petrolizado a un dólar devaluado. Hace 15 años, hasta el algodón
estéril había que importar, ahora seguimos importando hasta
jeringuillas desechables.
Prostituida. Por la politización. Los gobiernos empezaron a
incrementar indiscriminadamante empleados para pagar deudas de
campaña y alianzas políticas. Devaluaciones más exceso de
empleados, derivan en el aumento desmedido de los llamados
"gastos corrientes".
Con simples decretos los gobiernos descubrieron los analgésicos
décimos sueldos, compensaciones y bonificaciones, que el IESS
debía agregar a las pensiones de jubilados y pensionistas y no
aumentaban aportes al Instituto. El IESS tiene que pagar ahora, a
sus 150.000 jubilados, algo más del doble de lo que estaría
financiado por los aportes. Mientras el básico sobre el que se
aporta es de 60.000 sucres, cada mes cada pensionista recibe
300.000 sucres por pensión básica y bonificación complementaria.
Así mismo para evitarse mayores problemas sociales, obligaron al
IESS a hacerse cargo de empresas quebradas, y tuvo que comprar el
IANCEM, los Cementos Guapán, el Hotel Quito, varias haciendas,
etc. En complemento crearon leyes que le impedían capitalizar sus
fondos como lo hace la banca privada. Resultado: inversiones no
rentables y pérdidas.
Le llenaron de hijos. La aseguradora fue creada para atender a
los trabajadores dependientes pero, sin un plazo para adecuar su
infraestructura creada en la década del 70, por decreto se le
encargó organizar la seguridad de 800 mil campesinos y se le
cargó las afiliaciones voluntarias, que actualmente son unas
150.000. Más hijos, más gastos e iguales ingresos.
Y en contraparte, un marido que empieza a incumplir sus pagos,
deja de traer dinero a la casa. Siendo el Estado el mayor
patrono, postergó el pago de sus deudas y las convirtió en las
famosas "consolidaciones" que no son sino papeles. Mientras la
campeona de la asistencia social tenía que seguir dando a sus
hijos la incipiente atención que podía. Tal como una heroína de
Macondo.
Y abandonada. Con los vientos privatizadores que soplan el sur,
mientras en el norte se refuerzan los sistemas estatales de
asistencia pública, la más completa institución de atención
social del país se ha quedado sin la más mínima ayuda del Estado.
Un Estado que debe a los afiliados entre 600 mil millones y un
billón 200 mil millones de sucres (depende de si calcula la deuda
capitalizando los intereses no pagados de cada año o no). Un
Estado pobre, cierto. Pero que no tiene otro organismo que vele
por el bienestar de los que le producen el sustento, los
trabajadores.
Así se ha forjado el desfinanciamiento del IESS. Abandonada,
ultrajada y, encima de todo, recriminada. La aseguradora estatal
esta afrontando una campaña publicitaria que a cualquier
institución financiera haría quebrar, entre otras cosas por la
total pérdida de confianza de sus clientes.
Hay sectores privatizantes que consideran el actual sistema de
seguridad social inviable por su déficit económico y porque menos
del 20% de la población se beneficia de sus servicios. Estos
sectores consideran que es "el esquema eminentemente monopólico y
estatizante el que ha generado grandes distorsiones", no dejan de
reconocer que cerca de 4000 millones de dólares ha perdido el
IESS por: las consolidaciones de la deuda con el Estado, el
aporte de los trabajadores no se calcula sobre la totalidad del
sueldo, las inversiones desastrosas y los gastos operativos
absolutamente desmedidos".
DISTRIBUCION POR EDADES DE
LOS AFILIADOS DEL IESS
AÑOS %
20-24 11
25-29 20
30-34 22
35-39 18
40-44 14
más de 44 15
EL IESS DISPONDRIA DE....
1.200* Si el aporte para pensiones se calculara
sobre todo lo que percibe el trabajador y
no sólo sobre el básico.
615* Si las inversiones hubieran generado un
rendimiento igual a la inflación cada año
970* Si los gastos corrientes hubieran sido
inferiores en 15% cada año
* en millones de dólares (2A)
detractor de los seguros paralelos porque "quebrarían al IESS"?
¿Por qué tantos funcionarios que llegan despotricando en su
contra, terminan con "la camiseta" del Instituto?
Este es el caso del propio Edgar Ponce, representante de los
trabajadores ante el Consejo Superior, del ex director Italo
Colamarco y, aún más significativamente, del ministro de
Bienestar Social que de recién llegado en mayo tuvo una obligada
salida por la puerta trasera con protección policial por la tenaz
oposición de los sindicatos, Alberto Cárdenas.
En el proyecto de reformas a la Constitución del Gobierno, se
abre la posibilidad de que los trabajadores escojan entre el IESS
y los seguros privados. Y como el propio Cárdenas ha dicho, esto
podría ser el fin de esa institución. Así, sencillamente el fin.
Sin embargo, hay quienes piensan que el Instituto Ecuatoriano de
Seguridad Social no puede ser abandonado a su suerte porque no es
esa institución perversa que pintan los medios de difusión, sino
una víctima más de la demagogia política, en el pasado, y de
poderosos intereses económicos, en el presente.
Y entre los que piensan así, están los actuales miembros del
Consejo Superior que, en medio del naufragio anunciado por cuanto
"experto" en seguridad social ha pasado por nuestro país, ponen
en marcha planes de rehabilitación. Planes que, a decir de
voceros del mismo, han sido tomados con fundamento y pueden ser
perfectamente financiados por el dinero de los afiliados. Tienen
objetivos a corto, mediano y largo plazo y la meta es la
descongestión de los servicios médicos y administrativos.
Lo primero es un plan piloto de salud que incluye una autonomía
hospitalaria, un desarrollo de los dispensarios a cuasi
hospitales y contratos de prestación de servicios médicos
privados.
Las medidas administrativas proponen contratos de prestación de
servicios a la banca privada para atender servicios y
prestaciones.
Se están asignando responsables y plazos para cada cosa.
Salud: la demanda ordena
Los hospitales de Quito y Guayaquil, con el estatus de unidades
ejecutoras, tendrán autonomía administrativo financiera con el
actual presupuesto anual. Desde ahora ya no tendrán que tramitar
en la matriz la compra de equipos, repuestos, etc. El control del
manejo de recursos quedarán en manos de las oficinas propias de
auditoría interna y contabilidad.
Como complemento va la apertura de nuevas unidades de salud. De
acuerdo al cronograma aprobado, en las próximas semanas entrarían
a funcionar los hospitales de Latacunga, Ibarra, Portoviejo,
Riobamba y Manta. En una segunda etapa, los de Milagro, Cuenca y
Guaranda y en la tercera, el de Ambato.
Los dispensarios médicos serán equipados y adecuados, para dar
todos los servicios que antes solo se encontraba en los
hospitales excepto altas cirugías y larga hospitalización. Un
programa nacional de diálisis se adaptará a los dispensarios.
Entidades privadas serán convocadas a brindar servicios de salud
para lo cual ya está listo el tarifario institucional de cada una
de las enfermedades existentes.
La Dirección Médico Social tiene plazo hasta el 3 de octubre para
presentar el plan de prestación de servicios médicos privados
listo para ser aplicado.
Servicios sin maltrato
El organismo aprobó que la entrega de préstamos quirografarios,
el pago de pensiones jubilares y aportes sean entregados a la
banca privada mediante contratos de prestación de servicios.
Actualmente el IESS está despachando 20 mil millones de sucres
mensuales en préstamos quirografarios.
En cuanto a reducción de la burocracia, a los 1300 empleados que
ya salieron y representan un ahorro de unos 5 mil millones de
sucres anuales, se suman 800 vacantes eliminadas, 1000 empleados
de día a un año despedidos y se sumarán numerosas compras de
renuncias.
La computarización total del IESS, proyecto que cuenta con la
asistencia técnica de la Escuela Politécnica Nacional y la
Escuela Politécnica del Litoral, en poco tiempo, tendrá a punto
todo trámite de los afiliados.
Este es el compromiso de las autoridades del IESS, fundado en su
convicción de que, como lo afirma el experto en seguridad social
latinoamericana, Carmelo Mesa-Lago, los principios de solidaridad
y universalidad de la seguridad social, "están en conflicto con
un programa privado sustitutivo". Todo un reto.
El dinero de los afiliados
Los gobernantes han tratado al IESS como el peor marido podría
haber tratado a su mujer. El IESS ha sido como una madre violada,
prostituida, llenada de hijos y luego abandonada.
Violada. En dictadura y en democracia, con prestamos al Estado
usados por los gobiernos para evitar estallidos sociales
provocados por ellos mismos. Presidentes de gira por las
provincias entregaban el chequecito de fondos del IESS para tal
tramo de carretera, para tal mercado, estadio, etc.
Violada también por el proceso inflacionario que empezó con la
terminación del boom petrolero y se agravó con la crisis de la
deuda. Los insumos y equipos para los servicios médicos del
Instituto que tenían que importarse, subieron de un dólar
petrolizado a un dólar devaluado. Hace 15 años, hasta el algodón
estéril había que importar, ahora seguimos importando hasta
jeringuillas desechables.
Prostituida. Por la politización. Los gobiernos empezaron a
incrementar indiscriminadamante empleados para pagar deudas de
campaña y alianzas políticas. Devaluaciones más exceso de
empleados, derivan en el aumento desmedido de los llamados
"gastos corrientes".
Con simples decretos los gobiernos descubrieron los analgésicos
décimos sueldos, compensaciones y bonificaciones, que el IESS
debía agregar a las pensiones de jubilados y pensionistas y no
aumentaban aportes al Instituto. El IESS tiene que pagar ahora, a
sus 150.000 jubilados, algo más del doble de lo que estaría
financiado por los aportes. Mientras el básico sobre el que se
aporta es de 60.000 sucres, cada mes cada pensionista recibe
300.000 sucres por pensión básica y bonificación complementaria.
Así mismo para evitarse mayores problemas sociales, obligaron al
IESS a hacerse cargo de empresas quebradas, y tuvo que comprar el
IANCEM, los Cementos Guapán, el Hotel Quito, varias haciendas,
etc. En complemento crearon leyes que le impedían capitalizar sus
fondos como lo hace la banca privada. Resultado: inversiones no
rentables y pérdidas.
Le llenaron de hijos. La aseguradora fue creada para atender a
los trabajadores dependientes pero, sin un plazo para adecuar su
infraestructura creada en la década del 70, por decreto se le
encargó organizar la seguridad de 800 mil campesinos y se le
cargó las afiliaciones voluntarias, que actualmente son unas
150.000. Más hijos, más gastos e iguales ingresos.
Y en contraparte, un marido que empieza a incumplir sus pagos,
deja de traer dinero a la casa. Siendo el Estado el mayor
patrono, postergó el pago de sus deudas y las convirtió en las
famosas "consolidaciones" que no son sino papeles. Mientras la
campeona de la asistencia social tenía que seguir dando a sus
hijos la incipiente atención que podía. Tal como una heroína de
Macondo.
Y abandonada. Con los vientos privatizadores que soplan el sur,
mientras en el norte se refuerzan los sistemas estatales de
asistencia pública, la más completa institución de atención
social del país se ha quedado sin la más mínima ayuda del Estado.
Un Estado que debe a los afiliados entre 600 mil millones y un
billón 200 mil millones de sucres (depende de si calcula la deuda
capitalizando los intereses no pagados de cada año o no). Un
Estado pobre, cierto. Pero que no tiene otro organismo que vele
por el bienestar de los que le producen el sustento, los
trabajadores.
Así se ha forjado el desfinanciamiento del IESS. Abandonada,
ultrajada y, encima de todo, recriminada. La aseguradora estatal
esta afrontando una campaña publicitaria que a cualquier
institución financiera haría quebrar, entre otras cosas por la
total pérdida de confianza de sus clientes.
Hay sectores privatizantes que consideran el actual sistema de
seguridad social inviable por su déficit económico y porque menos
del 20% de la población se beneficia de sus servicios. Estos
sectores consideran que es "el esquema eminentemente monopólico y
estatizante el que ha generado grandes distorsiones", no dejan de
reconocer que cerca de 4000 millones de dólares ha perdido el
IESS por: las consolidaciones de la deuda con el Estado, el
aporte de los trabajadores no se calcula sobre la totalidad del
sueldo, las inversiones desastrosas y los gastos operativos
absolutamente desmedidos".
DISTRIBUCION POR EDADES DE
LOS AFILIADOS DEL IESS
AÑOS %
20-24 11
25-29 20
30-34 22
35-39 18
40-44 14
más de 44 15
EL IESS DISPONDRIA DE....
1.200* Si el aporte para pensiones se calculara
sobre todo lo que percibe el trabajador y
no sólo sobre el básico.
615* Si las inversiones hubieran generado un
rendimiento igual a la inflación cada año
970* Si los gastos corrientes hubieran sido
inferiores en 15% cada año
* en millones de dólares (2A)
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