El delantero de Boca Juniors recibió este sobrenombre de su ex DT carlos Bianchi
Buenos Aires. Martín Palermo, "el optimista del gol", rótulo que hace algunos años le impuso el entrenador Carlos Bianchi, es el máximo anotador boquense en los últimos 78 años.
El domingo pasado marcó el tanto 195 con la camiseta "auriazul" ante Huracán (3-1), y superó a Francisco Varallo, que con 194 tenía el récord del club desde que el fútbol argentino se profesionalizó en 1931.
"La frase de Bianchi, que se ha hecho famosa, es acertada. Soy un optimista nato. En cualquier circunstancia, creo que voy a meter un gol", afirmó el delantero.
Palermo llega a los 195 con Boca un año después de haber sido declarado por la FIFA como Mejor Cabeceador del Planeta, tras una encuesta efectuada por su página web entre aficionados de habla hispana.
Y su optimismo lo lleva a soñar con más goles en las 15 jornadas que le quedan al torneo Clausura 2009 argentino y en los partidos de la Copa Libertadores.
Palermo ha superado numerosas etapas de desaciertos y de críticas, como aquella que terminó tempranamente su ciclo en la selección Argentina cuando falló en la ciudad paraguaya de Luque tres penaltis frente a Colombia en la Copa América de 1999.
También sufrió tres lesiones importantes en su carrera. La primera en noviembre de 1999, cuando se rompió los ligamentos cruzados de la rodilla derecha y estuvo siete meses inactivo. La segunda, mientras jugaba en el Villarreal, en noviembre de 2001, cuando después de marcar un gol contra el Levante se le cayó encima un muro de cemento y se fracturó el tobillo derecho.
La última, hace poco más de seis meses, cuando volvió a romperse los ligamentos de la rodilla derecha. Antes de ello, en 2006, tuvo un duro bajón anímico cuando falleció su hijo Stefano, seis horas después de nacer. (EFE)
Buenos Aires. Martín Palermo, "el optimista del gol", rótulo que hace algunos años le impuso el entrenador Carlos Bianchi, es el máximo anotador boquense en los últimos 78 años.
El domingo pasado marcó el tanto 195 con la camiseta "auriazul" ante Huracán (3-1), y superó a Francisco Varallo, que con 194 tenía el récord del club desde que el fútbol argentino se profesionalizó en 1931.
"La frase de Bianchi, que se ha hecho famosa, es acertada. Soy un optimista nato. En cualquier circunstancia, creo que voy a meter un gol", afirmó el delantero.
Palermo llega a los 195 con Boca un año después de haber sido declarado por la FIFA como Mejor Cabeceador del Planeta, tras una encuesta efectuada por su página web entre aficionados de habla hispana.
Y su optimismo lo lleva a soñar con más goles en las 15 jornadas que le quedan al torneo Clausura 2009 argentino y en los partidos de la Copa Libertadores.
Palermo ha superado numerosas etapas de desaciertos y de críticas, como aquella que terminó tempranamente su ciclo en la selección Argentina cuando falló en la ciudad paraguaya de Luque tres penaltis frente a Colombia en la Copa América de 1999.
También sufrió tres lesiones importantes en su carrera. La primera en noviembre de 1999, cuando se rompió los ligamentos cruzados de la rodilla derecha y estuvo siete meses inactivo. La segunda, mientras jugaba en el Villarreal, en noviembre de 2001, cuando después de marcar un gol contra el Levante se le cayó encima un muro de cemento y se fracturó el tobillo derecho.
La última, hace poco más de seis meses, cuando volvió a romperse los ligamentos de la rodilla derecha. Antes de ello, en 2006, tuvo un duro bajón anímico cuando falleció su hijo Stefano, seis horas después de nacer. (EFE)
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