El jefe de Inteligencia de la Fuerza Terrestre ecuatoriana, Mario Pazmiño, habría ordenado la destrucción de varias pruebas que demostraban que el Gobierno de
Estados Unidos estuvo enterado de la incursión del ejército
colombiano el pasado 1º de marzo en Angostura, territorio ecuatoriano.
Así lo dio a conocer hoy el informe preliminar de la Comisión Especial que investiga la supuesta infiltración de la Agencia de Inteligencia de Estados Unidos (CIA) en su par ecuatoriana y que reveló que militares ecuatorianos también habrían destruído los documentos que permitían identificar al ecuatoriano Franklin Aisalla como una de las víctimas del bombardeo colombiano contra un campamento de
la guerrilla de las FARC en territorio ecuatoriano.
En el ataque murieron otras 23 personas, entre ellas el jefe guerrillero Luis Edgar Devia, alias "Raúl Reyes".
Según el informe preliminar, militares ecuatorianos habrían guardado cuatro fusiles M-16 que fueron encontrados en el campamento guerrillero en la bodega de la Brigada Napo. La embajadora
de Estados Unidos Heather Hodges no hizo ningún comentario acerca del contenido de este informe. (AL)