El contrabando de mercadería y el pago de coimas es práctica frecuente en Huaquillas
Una vez dictadas las reglas de juego para la importación de 627 subpartidas, la incertidumbre ronda en referencia al incremento del contrabando y sobre las coimas en los distritos aduaneros, especialmente en las fronteras con el Perú y Colombia.
Huaquillas, cantón fronterizo con el Perú en la provincia del El Oro, es uno de los pasos terrestres más vulnerables. Según datos de la Corporación Aduanera Ecuatoriana (CAE), por esta zona ingresaron en 2008 $28 millones. Esta cifra, sin embargo, es menor a la registrada por el paso fronterizo con Colombia en el Carchi, que el año pasado ascendió a $158 millones.
Félix Salazar, presidente de la Cámara de Comercio de Huaquillas, reconoce que el contrabando es un mal permanente que se agudizará con la aplicación de las nuevas normas de importación. "Lo prohibido es lo que más se busca. El pago de coimas también se incrementará. Además, vamos a perder competencia, pues los productos peruanos son más baratos desde que se cambió la moneda", dijo Salazar.
Las anomalías se dan en el momento en que los comerciantes ingresan la mercadería y deben valorarla. "De acuerdo con la ley, toda mercadería que ingresa debe pagar al Estado el 35% del valor total y, para evadir ese pago, muchos comerciantes reportan un monto menor y sobornan a los agentes aduaneros", indicó.
Asimismo, los ecuatorianos deciden nacionalizar la mercadería en el Perú o utilizar los caminos clandestinos repartidos a lo largo del canal que divide los territorios ecuatoriano y peruano.
Esto se da a plena luz del día y a vista de los mismo policías. La mercadería sale y entra en carretillas, empujadas por hombres que en su mayoría son de origen peruano. Pasan desde hilos de costura, canecas de combustible y frutas, hasta grandes bultos de ropa.
William Espín, jefe del Servicio de Vigilancia Aduanero (SVA), dice que se trata de gente peligrosa. El problema se agrava debido a que el Distrito Aduanero solo cuenta con 45 hombres, la mayoría con edades que están sobre los 37 y los 40 años. Ellos tienen a su cargo Arenillas y Huaquillas.
Sin embargo, Espín negó hechos de corrupción en su personal, y como prueba indicó que han logrado que la Declaración Aduanera Simplificada (DAS) aumente de $1,6 millones, en 2007, a $3,8 millones, en 2008.
"Gracias a los controles, hemos logrado incautar gran cantidad de mercadería que está en las bodegas del Distrito", indicó.
A pocos metros de ahí, Alejandro Rivera, emigrante ecuatoriano radicado en Chile, confirmó que las coimas se dan a diario. Él pagó $50 para evitar el pago de la declaración aduanera. "Estoy consciente que hice mal, pero no estaba dispuesto a perder en el paso del puente internacional de Huaquillas todos los obsequios que traía para mi familia en Guayaquil", manifestó.
Rivera salió del país por turismo. Visitó Chile y el Perú. "No es posible que en mi país me quieran quitar la mercadería aduciendo que busco comercializarla. Son obsequios para mis seres queridos y no para comercializarlos", argumentó.
Asimismo, Carlos Tenesaca, comerciante ecuatoriano de Huaquillas, indicó que con la restricción lo único que se logrará es aumentar la corrupción. (NMCH)
Santiago León, gerente general de la CAE, aseguró que la entidad está trabajando en planes de control en las fronteras de Tulcán y Huaquillas.
Indicó que se han entregado 100 equipamientos para los 400 vigilantes de servicio aduanero que existen en los 10 distritos del país.
Además, se firmó un convenio de cooperación con las Fuerzas Armadas.
- Unos 45 efectivos controlan el Distrito Aduanero
Una vez dictadas las reglas de juego para la importación de 627 subpartidas, la incertidumbre ronda en referencia al incremento del contrabando y sobre las coimas en los distritos aduaneros, especialmente en las fronteras con el Perú y Colombia.Huaquillas, cantón fronterizo con el Perú en la provincia del El Oro, es uno de los pasos terrestres más vulnerables. Según datos de la Corporación Aduanera Ecuatoriana (CAE), por esta zona ingresaron en 2008 $28 millones. Esta cifra, sin embargo, es menor a la registrada por el paso fronterizo con Colombia en el Carchi, que el año pasado ascendió a $158 millones.
Félix Salazar, presidente de la Cámara de Comercio de Huaquillas, reconoce que el contrabando es un mal permanente que se agudizará con la aplicación de las nuevas normas de importación. "Lo prohibido es lo que más se busca. El pago de coimas también se incrementará. Además, vamos a perder competencia, pues los productos peruanos son más baratos desde que se cambió la moneda", dijo Salazar.
Las anomalías se dan en el momento en que los comerciantes ingresan la mercadería y deben valorarla. "De acuerdo con la ley, toda mercadería que ingresa debe pagar al Estado el 35% del valor total y, para evadir ese pago, muchos comerciantes reportan un monto menor y sobornan a los agentes aduaneros", indicó.
Asimismo, los ecuatorianos deciden nacionalizar la mercadería en el Perú o utilizar los caminos clandestinos repartidos a lo largo del canal que divide los territorios ecuatoriano y peruano.
Esto se da a plena luz del día y a vista de los mismo policías. La mercadería sale y entra en carretillas, empujadas por hombres que en su mayoría son de origen peruano. Pasan desde hilos de costura, canecas de combustible y frutas, hasta grandes bultos de ropa.
William Espín, jefe del Servicio de Vigilancia Aduanero (SVA), dice que se trata de gente peligrosa. El problema se agrava debido a que el Distrito Aduanero solo cuenta con 45 hombres, la mayoría con edades que están sobre los 37 y los 40 años. Ellos tienen a su cargo Arenillas y Huaquillas.
Sin embargo, Espín negó hechos de corrupción en su personal, y como prueba indicó que han logrado que la Declaración Aduanera Simplificada (DAS) aumente de $1,6 millones, en 2007, a $3,8 millones, en 2008.
"Gracias a los controles, hemos logrado incautar gran cantidad de mercadería que está en las bodegas del Distrito", indicó.
A pocos metros de ahí, Alejandro Rivera, emigrante ecuatoriano radicado en Chile, confirmó que las coimas se dan a diario. Él pagó $50 para evitar el pago de la declaración aduanera. "Estoy consciente que hice mal, pero no estaba dispuesto a perder en el paso del puente internacional de Huaquillas todos los obsequios que traía para mi familia en Guayaquil", manifestó.
Rivera salió del país por turismo. Visitó Chile y el Perú. "No es posible que en mi país me quieran quitar la mercadería aduciendo que busco comercializarla. Son obsequios para mis seres queridos y no para comercializarlos", argumentó.
Asimismo, Carlos Tenesaca, comerciante ecuatoriano de Huaquillas, indicó que con la restricción lo único que se logrará es aumentar la corrupción. (NMCH)
Plan de control y equipamiento
Santiago León, gerente general de la CAE, aseguró que la entidad está trabajando en planes de control en las fronteras de Tulcán y Huaquillas.
Indicó que se han entregado 100 equipamientos para los 400 vigilantes de servicio aduanero que existen en los 10 distritos del país.
Además, se firmó un convenio de cooperación con las Fuerzas Armadas.
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