El sector informal tuvo un fin de año poco satisfactorio en ventas por Navidad
Los 650 locales de venta del centro comercial La Barraca de la ciudad de Esmeraldas esperaban un incremento considerable en sus ventas durante el pasado diciembre. Sin embargo, los resultados no fueron tan satisfactorios.
En las vísperas de la Navidad, por ejemplo, las ventas generadas no convencieron al 70% de los comerciantes del tradicional centro esmeraldeño.
"Lo que más se vendió durante las fiestas de fin de año fue ropa y calzado nacional, porque los precios no se han incrementado con relación a lo que importábamos desde
China, Colombia, Panamá o el
Perú", manifestó Esmeralda Muñoz, comerciante.
Álvaro Mendoza, vendedor del centro comercial, aseguró que la mercadería que compró en Guayaquil tiene salida, porque el público busca algo barato y durable.
Esta situación es totalmente diferente a la realidad de años anteriores.
El negocio en La Barraca comenzaba con anticipación en épocas anteriores.
En esto, coincide Patricio Moreira, vendedor de la Asociación Dieciocho de Julio, quien afirmó que la gente antes compraba desde las primeras semanas de diciembre. "Ahora vienen, observan, consultan los
precios y se van", añadió.
Por otro lado, Anselmo Vargas, comerciante del sector, dijo que durante el año finalizado ya no importó pantalones desde Colombia, sino que los trajo directamente desde Pelileo.
Asimismo, los compradores de la provincia verde sienten también la diferencia con respecto a otras festividaes. Martha Carrasquilla, quien requería un vestido para la primera comunión de su hija, manifestó que los precios se han incrementado y, por ello, pensaba alquilarlo.
En tanto, el comercio informal y de productos navideños se tomaron las calles Bolívar, Malecón, Salinas y otras, pero bajo el control de la Policía Municipal para evitar aglomeraciones y dificultades. (LFA)