El economista jefe del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Eduardo Lora
, alertó en entrevista del riesgo de inestabilidad polÃtica en América Latina por la crisis y recomendó más protección social en la región.
"No creo que haya una erupción social que genere una situación de inestabilidad muy fuerte", dijo Lora en el marco de la asamblea anual del BID que comienza hoy en MedellÃn (
Colombia).
El riesgo que ve Lora "es el de que la democracia se debilite, entendiendo porque la democracia se debilite el que se debilite el debate polÃtico, que se debiliten los partidos, que haya un mayor espacio para el caudillismo".
Mencionó que lo que conduce a la inestabilidad polÃtica "es la sensación de la gente de que está desprotegida, de que el sistema polÃtico no logra responder a sus demandas y que el sistema polÃtico no es creÃble", algo que, de ocurrir, dijo, serÃa "muy grave".
Apuntó que los indicadores del Latinobarómetro -un estudio de opinión pública anual en 18 paÃses de la región para el que se realizan unas 19 000 entrevistas- demuestran que el respeto por la democracia se debilita mucho en los años de bajo crecimiento.
"Por esa vÃa es por donde yo veo el problema", precisó.
Lamentó, en ese sentido, el que a pesar de que hay un grupo de paÃses con sistemas polÃticos consolidados, en otros existe una gran fragmentación partidista.
"Hay paÃses con estructuras partidistas muy fuertes, como
Chile, (...)
México (...) e incluso
Brasil, donde a pesar de que hay muchos partidos hay un sistema que funciona de forma bastante estable y bastante sólida", indicó Lora.
Pero en otros esas estructuras "se han debilitado mucho y no sabemos lo que pueda pasar".
Se refirió a Colombia, donde ha habido "un aumento de la fragmentación partidista y los partidos perdieron cohesión" y a
Ecuador "donde hay una tremenda fragmentación partidista, que explica en parte las reformas que se han hecho a la Constitución".
Mencionó también a
Perú, donde no hay una estructura partidista lo suficientemente consolidada pero "el sistema polÃtico ha funcionado bastante bien en los últimos años".
Para evitar que esa fragilidad derive en inestabilidad, Lora dijo que
Latinoamérica debe de concentrarse, en un momento de crisis como el actual, en garantizar la protección social "aunque no se logre en el corto plazo la mayor tasa de crecimiento posible".
Destacó que los programas públicos de transferencias condicionadas como Bolsa Familia en Brasil, Oportunidades en
México y Juntos en Perú resultan idóneos para la situación actual.
"Logran un impacto social muy grande con un coste relativamente reducido", explicó.
Reconoció, por lo demás, que el mayor desafÃo macroeconómico ahora mismo es el implementar polÃticas fiscales sostenibles.
El problema radica, dijo, en que hay una gran incertidumbre sobre la profundidad y la duración de la crisis.
Según Lora, si los problemas duran un año o un año y medio, la mayorÃa de paÃses podrÃa tener polÃticas fiscales expansivas, pero si la situación se prolonga tres o cuatro años podrÃan "clavarse el cuchillo a sà mismos" con un proceso fiscal insostenible.
Dijo entender el que para los paÃses desarrollados, que tienen un gran impacto en la economÃa mundial, el objetivo sea intentar potenciar al máximo el crecimiento y el
comercio.
Pero para Latinoamérica, cuyo impacto en el crecimiento mundial es modesto "ese no es el mensaje".
"El mensaje tiene que ser un mensaje de prudencia. Tratar de defender una posición fiscal y hacer una recomposición del gasto público hacia aquello que tenga un mayor impacto social", destacó.
Advirtió de que lo que está en juego son los logros de las dos últimas décadas, en las que Latinoamérica consiguió una estabilidad macroeconómica mucho mayor que la que tenÃa durante la crisis rusa de finales de los 90 y, "ni que decir tiene", subrayó Lora, que la de la década de los 80.
Aconsejó, para finalizar, que los paÃses huyan de recetas "muy peligrosas" como los grandes subsidios sectoriales o las polÃticas de control de las importaciones y aumentos de aranceles. (EFE)